La resistencia de una mujer no es siempre prueba de su virtud, sino más frecuentemente de su experiencia.
El amor es una comedia en la cual los actos son muy cortos y los entreactos más largos: ¿ cómo llenar los intermedios sino mediante el ingenio?.
La galantería es una intriga amorosa en la que queremos que el adversario nos aventaje.
Se necesita más genialidad para hacer el amor que para liderar ejércitos.
La virtud femenina no es más que una conveniente invención masculina.
Los juramentos son la moneda falsa con la que se paga la mercancía del amor.
Quien ha dejado de agradar pierde el derecho de hacer reproches.
El amor es más bien el dios de las sensaciones que el dios de los sentimientos.
Un amor apasionado es una especie de comedia de dos personajes que tratan de convencer al público de su amor.
Cuantos más pecados confieses, más libros venderás.
El amor nunca se muere de hambre, generalmente lo hace por indigestión.
La amistad entre dos mujeres es siempre una conspiración contra una tercera.
Cuando nuestros sueños se han cumplido es cuando comprendemos la riqueza de nuestra imaginación y la pobreza de la realidad.
La belleza sin gracia es un anzuelo sin cebo.
Una mujer sensible debería ser guiada por su cabeza cuando busque un marido y por su corazón cuando busque un amante.
A un hombre se le da la opción de amar a las mujeres o comprenderlas.