Frases de fuerza interna. Encuentra docenas de frases de fuerza interna con fotos para copiar y compartir.
Jamás se penetra por la fuerza en un corazón.
La medida más segura de toda fuerza es la resistencia que vence.
Ningún ejército puede detener la fuerza de una idea cuando llega a tiempo.
La vida es un aprendizaje de renunciamiento progresivo, de continua limitación de nuestras pretensiones, de nuestras esperanzas, de nuestra fuerza, de nuestra libertad.
No hay razón donde hay fuerza.
La fuerza de las mujeres depende de que la psicología no puede explicarla. Los hombres pueden ser analizados; las mujeres solo pueden ser amadas.
La crítica es la fuerza del imponente.
A fuerza de construir bien, se llega a buen arquitecto.
El amor por la fuerza nada vale, la fuerza sin amor es energía gastada en vano.
Hay una gran fuerza escondida en una dulce orden.
Ningún ser humano tiene el derecho de iniciar el uso de la fuerza contra otro.
La paciencia tiene más poder que la fuerza.
La grandeza de un hombre está en relación directa a la evidencia de su fuerza moral.
Usa ropa interna audaz, bajo tu atuendo de oficina más solemne.
Los hombres solo pueden tratar entre sí de dos formas: Armas o Lógica. Fuerza o Persuasión. Aquellos que saben que no pueden ganar utilizando la lógica, siempre han acabado por recurrir a las arma...
Donde fuerza no hay, derecho se pierde.
Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor y la electricidad,la voluntad.
Si a una no se le permite expresar enfado, ni siquiera reconocerlo en el propio interior, una queda por simple extensión, privada tanto de la fuerza como del control.
La fe es la fuerza de la vida. Si el hombre vive, es porque cree en alguna cosa.
La única fuerza y la única verdad que hay en esta vida es el amor. El patriotismo no es más que amor, la amistad no es más que amor.
Fuerza sin maña, mucho rompe; y maña sin fuerza, poco tira.
Si tenéis la fuerza, nos queda el derecho.
La reina del mundo es la fuerza y no la opinión; pero es la opinión quien usa de la fuerza.
Carecemos de fuerza suficiente para seguir toda nuestra razón.
Se puede admitir la fuerza bruta, pero la razón bruta es insoportable.
La fuerza es confianza por naturaleza. No existe un signo más patente de debilidad que desconfiar instintivamente de todo y de todos.
La fuerza de la necesidad es irresistible.
El amor es la fuerza más sutil y penetrante.
Nuestra fuerza esta en nuestro ideal con nuestra pobreza, no en la riqueza sin ideales.
La paciencia y el tiempo hacen más que la fuerza y la violencia.
Entre dos hombres iguales en fuerza, el más fuerte es el que tiene la razón.
En el orden de las vicisitudes humanas no es siempre la mayoría de la masa física la que decide, sino que es la superioridad de la fuerza moral la que inclina hacia sí la balanza política.
Cuando el error se hace colectivo adquiere la fuerza de una verdad.
La fuerza no puede jamás persuadir a los hombres; solo logra hacerlos hipócritas.
Los bárbaros que todo lo confían a la fuerza y a la violencia, nada construyen, porque sus simientes son de odio.
Después de la fuerza no hay nada más grande que su dominio.
La verdad es una ortiga; el que la roza, apenas se pincha; al que la coge con fuerza y resolución no le hace nada.
Exagerar la propia fuerza significa descubrir la propia debilidad.
No se nos otorgará la libertad externa más que en la medida exacta en que hayamos sabido, en un momento determinado, desarrollar nuestra libertad interna.
Las alegrías de este mundo me recuerda siempre el estado de esos asmáticos, que no pueden reír con fuerza sin toser súbitamente.