Canta en la noche, canta en la mañana, ruiseñor, en el bosque tus amores; canta, que llorará cuando tú llores el alba perlas en la flor temprana.
José De Espronceda
No pidas un cañón para matar un gorrión.
Ninguna esperanza queda de virtud, cuando no solamente deleitan los vicios, sino que se aprueban.
La felicidad está en mil cofres. Pero todos tenemos alguna llave.
Una sola vez no es costumbre.