Empieza con elogio y aprecio sincero.
Dale Carnegie
Los que no son envidiados nunca son completamente felices.
Llegar a todo aquel nuevo mundo de literatura, con tiempo para leer en una ciudad como París, era como si a uno le regalaran un gran tesoro.
El mayor enemigo de las almas humanas es el espíritu de justicia propia que hace que los hombres se ven a sí mismos para la salvación.
Que vuestro amor a la vida sea un amor a vuestra más alta esperanza, y que vuestra más alta esperanza sea el amor a la vida.