El error es un arma que acaba siempre por dispararse contra el que la emplea.
Concepción Arenal
Una demostración de envidia es un insulto a uno mismo.
El hombre vive en un mundo en el que cada ocurrencia está cargada con ecos y reminiscencias de lo que ha ocurrido antes. Cada acontecimiento es un recordatorio.
Lo que hacemos no es nunca comprendido, y siempre es acogido solo por los elogios o por la crítica.
Mi padre siempre me decía: encuentra un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar un solo día de tu vida.