No se descubre cada vez más profundo de su propia soledad.
Georges Bernanos
Transitamos sin alegría por los laberintos sin senderos de la sociedad hasta que damos con esa pista que nos conduce al paraíso a través de esa maraña.
Dios no requiere que usted siga sus leadings en la confianza ciega. He aquí la prueba de una inteligencia invisible que impregna todo, incluso su propia mente y cuerpo.
Oh melancolía, amante dichosa, siempre me arrebata tu placer
Todo pasa. Nadie tiene algo para siempre. Así es como tenemos que vivir.