Cuanto más siniestros son los deseos de un político, más pomposa, en general, se vuelve la nobleza de su lenguaje.
Aldous Huxley
Un hombre que ríe nunca será peligroso.
Hay dos clases de peatones: los rápidos y los muertos.
Nada se seca más rápido que una lágrima.
El que se tiene por hombre, ande quiera hace pata ancha.