El amor tiene un duende que ríe, que enciende, que crea y recrea y aunque al diablo le pese, retoña y florece y al mal lo voltea.
Eladia Blazquez
Y todos los océanos, todas las montañas, los arcángeles, la gente, las flores, todo se refleja en tus ojos.
Está pasmada de pobreza esta mañana de otoño.
Hombre apasionado no quiere ser aconsejado.
Al son que me toquen, bailo.