Si una sociedad libre no puede ayudar a sus muchos pobres, tampoco podrá salvar a sus pocos ricos.
John F. Kennedy
No quiere el enfermo médico elocuente, sino que le sane.
Es maravilloso escuchar el silencio del hombre.
Es un principio indiscutible que para saber mandar bien, es preciso saber obedecer.
El enamorado es el camarada del alma.