Si algo es sagrado, ése es el cuerpo humano.
Walt Whitman
La muerte tiene las piernas frías.
Mi alma debe estar detrás de ti; Estoy matando mi carne sin ella.
Todos los hombres tienen sus horas de niños, y ¡hay del que no las tiene!.
Mi placer de crear era ilimitado. El talento productivo no me abandonó ni un instante durante algunos años; lo que se me ocurría durante el día y en estado de vela, se iba a menudo elaborando de n...