Palabras de despedida de fin de clases
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Poema de La Despedida
Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiad...
Quizás te diga un día que dejé de quererte, aunque siga queriéndote más allá de la muerte; y acaso no comprendas en esa despedida, que, aunque el amor nos une, nos separa la vida.
Fin de Un Amor
No sé si es que cumplió ya su destino,
si alcanzó perfección o si acabado
este amor a su límite ha llegado
sin dar un paso más en su camino.
Aún le miro subir, de donde vino,
a...
No me resigno a dar la despedida a tal altivo y firme sentimiento que tanto impulso y luz diera a mi vida.
Acá hay tres clases de gente: la que se mata trabajando, las que deberían trabajar y las que tendrían que matarse.
Te digo adiós y acaso con esta despedida
Mi más hermoso sueño muere dentro de mí.
Pero te digo adiós para toda la vida,
Aunque toda la vida siga pensando en ti.
Lo que más nos aproxima a una persona es esa despedida, cuando acabamos separandonos, porque el sentimiento y el juicio no quieren ya marchar juntos; y aporreamos con violencia el muro que la natural...
No le temo a tu despedida: le temo a la desolación que inunda mi alma al saber q no he de perderme en tus ojos o fundirme en tu piel nunca mas.
Oficio que no sustenta tu vida, dale despedida.
Solo hay dos clases de personas coherentes: los que gozan de dios porque creen en él y los que sufren porque no le poseen.
Hay tres clases de mentiras: La mentira, la maldita mentira y las estadísticas.
La sociedad está dividida en dos grandes clases: la de los que tienen más comida que apetito y la de los que tienen más apetito que comida.
La división entre guapos y feos es otra lucha de clases.
Detras del llanto queda el silencio, detras del silencio queda el recuerdo y detras del recuerdo quedo el momento somos como aves y por naturaleza debemos emigrar asi como las piedras rodar, y cuando ...
Qué triste es la despedida, cando aun existe amor
no puede cerrar la herida, se desangra el corazón
no se sabe a dónde ir, y se pierde la razón,
se acaban las ilusiones. Ya no hay a quien darle...
No hay beso que no sea principio de despedida; incluso el de llegada.
No pocas veces ya he dicho adiós; conozco las horas desgarradoras de la despedida.
¿Dices que no se siente la despedida?, ¡Ay!, di al que te lo dijo que se despida.
EN EL SILENCIO DE MI DESPEDIDA
El día es diferente y el aliento aunque pareciera igual, se desvanece con el paso del tiempo… Las palabras fluyen y entre la razón y el sentido todo encuentra lug...
Una despedida
Tarde que socavó nuestro adiós.
Tarde acerada y deleitosa y monstruosa como un ángel oscuro.
Tarde cuando vivieron nuestros labios en la desnuda intimidad de los besos.
El t...
Ojos grises, cabeza gacha, pasos lentos, anuncio mi despedida...
Amarte fue tocar el cielo y ver lo hermoso de su espacio sin embargo con esta dura despedida no puedo ni tocarme el alma esta tan lastimada por tu partida q ni ve la hermosura que le ense~astes alguna...
En las revoluciones hay dos clases de personas; las que las hacen y las que se aprovechan de ellas.
Hay dos clases de hombres: quienes hacen la historia y quienes la padecen.
-D E S P E D I D A-
A llegado el día más difícil, despedir a los niños que terminan la etapa en este jardín materno infantil, si digo mi emoción, no sabría expr...
Hay dos clases de hombres: los que viven hablando de las virtudes y los que se limitan a tenerlas.
Existen tres clases de inteligencia: la inteligencia humana, la inteligencia animal y la inteligencia militar.
Tres clases hay de ignorancia: no saber lo que debiera saberse, saber mal lo que se sabe, y saber lo que no debiera saberse.
Donde hay educación no hay distinción de clases.
El motor de la historia es la lucha de clases.
El matrimonio es una de las formas de odiarse unos a otros en las personas de todas las clases sociales.
Los hombres pueden dividirse en tres clases: los que creen ser donjuanes, los que creen haberlo sido y los que creen haberlo podido ser, pero no quisieron.
Es preciso suponer que en todo lo que se combina hay muchas cosas de todas clases, y semillas de todas las cosas, que tienen formas diversas y colores y sabores diferentes.
Todos los libros pueden dividirse en dos clases: libros del momento y libros de todo momento.
La libertad, por lo que respecta a las clases sociales inferiores de cada país, es poco más que la elección entre trabajar o morirse de hambre.
Hay dos clases de políticos: Los que usan la lengua para disimular sus pensamientos, y los que la usan para ocultar su falta de pensamientos.
La sociedad está divida en dos clases: las que tienen dinero, y las que no pierden las esperanzas de conseguirlo.
Hay dos clases de peatones: los rápidos y los muertos.
Estos labios que saben a despedida, a vinagre en las heridas, a pañuelo de estación
¿Acaso el día de la despedida no es la traición de los enamorados?
