Perder una batalla. Encuentra docenas de perder una batalla con fotos para copiar y compartir.
El mando y señorÃo es de aquellos que vencieron la batalla.
Las grandes lides de nuestro tiempo no se resuelven en los campos de batalla, sino en los templos del ocio.
No hay amor sin temor de ofender o perder lo que se ama.
No me asusta tanto perder mi libertad como perder mi soledad.
A veces nos declaramos indignos de una alabanza, con la esperanza de provocar una discusión que nos encantarÃa perder.
Hay tres formas de perder dinero: el juego, las mujeres y los especialistas. El juego es el más rápido, las mujeres el más placentero y los especialistas el más seguro.
Muchas beses para aprender a ganar debemos aprender a perder.
El arte de vencer se aprende en las derrotas.
El hombre corriente, cuando emprende una cosa, la echa a perder por tener prisa en terminarla.
El único modo de estar seguro de coger un tren es perder el anterior.
Debemos aceptar la decepción finita, pero nunca debemos perder la esperanza infinita
Creo que un escritor debe transmitir un sentimiento de esperanza a todo el mundo, sea cual sea la situación. No quiero dejar de sonreÃr, bajo ninguna circunstancia, ni perder la libertad para pensar...
Hay que recordar que hubo una vez una disciplina llamada filosofÃa natural. Por desgracia, esta disciplina parece no existir en la actualidad. Se ha cambiado el nombre por el de ciencia, pero la cien...
Defecto por defecto, preferible es la arrogancia al apocamiento, la osadÃa mide sus fuerzas y vence o es vencida, pero la modestia excesiva huye de la batalla y se condena a vergonzosa inacción.
Lo bueno cuando arde Troya es que nada tienes que perder, pues nada esperas. Casi todo lo que cuento gira en torno a eso. Mis personajes siempre tienen una Troya ardiendo a sus espaldas.
En Vietnam, descubrà que los más grandes lÃderes no eran las personas duras que gritaban y chillaban o que eran fÃsicamente abusivos. En el calor de la batalla, encontré que los mejores lÃderes ...
Debes estimar como cosa torpÃsima el anteponer la vida al honor, y por salvar la vida perder la razón de vivir
La batalla por los derechos de las mujeres es de una larga data y ninguno de nosotros debe apoyar todo aquello que los socave.
No hay cosa que más avive el amor que el temor de perder al ser amado.
¿No se sintió nunca como uno de esos peones de ajedrez pasados, que se olvidan en un rincón del tablero y oyen apagarse a su espalda el rumor de la batalla mientras intentan mantenerse erguidos, pr...
A veces, por la pérdida de una batalla a encontrar una nueva manera de ganar la guerra.
El éxito es un pésimo maestro que seduce a la gente a pensar que no puede perder.
Toda persona honrada prefiere perder el honor antes que la conciencia.
A veces una batalla lo decide todo, y a veces la cosa más insignificante decide la suerte de una batalla.
Es una cosa divertida, menos personas tienen que vivir, menos nervios que tienen que arriesgarse a perder nada.
Trabajadores del mundo, unÃos, no tenéis nada que perder más que vuestras cadenas.
Quiero que la concentración y el romance, y los mundos todos pegados, fundido, brillante: no tienen tiempo para perder más en prosa.
El hombre ha nacido para luchar, y es como se le define mejor diciendo que es un guerrero nato y que su vida desde el principio al fin no es sino una batalla.
La esperanza ha contribuido a perder al género humano.
Una de las alegrÃas de ir al cine es que era de mala calidad, y nunca hay que perder eso.
Nunca pensé en perder, pero ahora que ha pasado, la única cosa es hacer las cosas bien. Esa es mi obligación para todas las personas que creen en mÃ. Todos tenemos que tener derrotas en la vida.
La lucha es un deporte muy emocionante y no quiero perder el tiempo en hacer teatro.
Yo no voy a la batalla preparado, sé que la voy a ganar.
El amor es como el agua, si algo no lo agita, se echa a perder.
¡SÃ, es una locura! Todos han de perder la razón, todos, y cuanto antes mejor.
Crecer sin que la altura me haga perder de vista lo importante. Y lo importante... Es la vida.
Nuestras dudas son traidores que muchas veces nos hacen perder el bien que podrÃamos ganar si no temiéramos buscarlo.
Realmente pensaba que podrÃa ganarle y eso es la mitad de la batalla.
Para no perder el tiempo, no leas más que los anales de un solo pueblo: todos los pueblos se parecen.
Para tener sabidurÃa es necesario tener fuerza interior. Sin un desarrollo interno, podemos perder la confianza en nosotros mismos y el valor. Lo imposible puede ser posible con fuerza de voluntad.
Que tiemblen las clases dominantes ante la Revolución Comunista. Los proletarios nada tienen que perder sino sus cadenas, y tienen un mundo a ganar. ¡Proletarios de todos los paÃses, unÃos!.