Poemas de sòren kierkegaard. Encuentra docenas de poemas de sòren kierkegaard con fotos para copiar y compartir.
¿Qué es un poeta? Una persona infeliz que oculta una profunda angustia en su corazón, pero cuyos labios están formados de esta manera que, como suspiros y gritos pasan sobre ellos suenan como mús...
Así como el animal en cautividad recorre a diario la jaula para desentumecer sus patas o mide la longitud de su cadena, así mido yo la longitud de la mía, remontándome hasta la muerte, para dese...
Dejemos con toda tranquilidad a la gente sabia el orgullo de no caer nunca en contradicción.
Dios crea de la nada. Maravilloso que usted dice. Sí, es cierto, pero sí lo es todavía más maravilloso: él hace santos de pecadores.
Un don Juan seduce a las muchachas y después las abandona; pero su placer no está en abandonarlas, sino en seducirlas. No puede, pues decirse que esto sea crueldad en absoluto.
Cada vez que el análisis quiere asir el arcano de amor, no percibe sino contradicciones.
Yo reino sobre las tempestades de las sensaciones. Como un lobo, las guardo encerradas en el monte de mi ser, y ora una, ora otra, dejo en libertad el impetú furioso.
La función de la oración no es influir en Dios, pero en lugar de cambiar la naturaleza de la persona que ora.
La verdad es una trampa: no se puede tener, sin ser capturados. No se puede tener la verdad de tal manera que se puede contraer, pero solo de tal manera que te atrapa.
Es menester un gran idealismo para arrepentirse de verdad, singularmente para arrepentirse pronto
¿Se puede desear alguna cosa en el momento que la poseemos? Si, cuando se recela perderla un momento después.
La mujer cree ser la conquistada; el hombre, el vencedor. Y con todo, el vencedor se inclina delante de la vencida.
Obtener lo bello es siempre difícil; es fácil alcanzar lo interesante. Pero siempre es bueno aproximarnos a las dos cosas cuanto nos sea posible.
Amar a una sola es muy poco; amar a todas es ser superficial; pero conocernos a nosotros mismos y amar a cuantas no sea posible, saber ocultar en nuestra propia alma las potencias del amor, de modo qu...
Es la resistencia habitual de los seres femeninos, porque es propio de la naturaleza de la mujer entregarse bajo la forma de resistencia.
Me dicen que estoy enamorado de mí mismo. Y es así realmente, porque estoy enamorado de ti; amándote, tengo que amar todo lo que te pertenece, y, por lo tanto, debo amarme a mi mismo.
Para que la puerta de la se abra hacia dentro, es necesario retirarse un poco para poder abrirla: si alguien la empuja, cada vez la cierra más.
... de muchachas muy habituadas al mundo no hay generalmente mucha cosa que llevarse.
El mandamiento es que amarás, pero cuando comprendes la vida y a ti mismo, entonces es como si no tuvieras que ser mandado, porque amar a los seres humanos sigue siendo lo único por lo que vale la p...
Matrimonio hace entrar en relación fatal con la costumbre y la tradición, y las tradiciones y costumbres son como el viento y el tiempo, en total incalculable.
Otro creería que la nave, al cortar con la proa la ola altanera, se va a precipitar en tan terrible viaje a los abismos. Pero allá dentro, invisible entre los mástiles, hay un marinero que sabe dir...
Si soy capaz de comprender a Dios objetivamente, no creo, pero precisamente porque no puedo hacer esto debo creer.
La mayor parte de los hombres se precipitan como locos en el camino del amor, se hacen novios y cometen otras liviandades semejantes, de modo que lo único que consiguen es estragarlo todo en un insta...
Pero es preciso tener una refinadísima habilidad para saber sacar partido de un aire atolondrado; y quien lo posee puede obtener muchísimo por ese medio. Yo me he servido de eso muchas veces para en...
Generalmente se quiere gozar de una muchacha como quien saborea una copa de champagne en el momento que espumea.
Hay quien dice que la honestidad no basta para vivir. Y yo sustento que la honestidad no basta cuando se quiere amar aciertas muchachas.
Y el amor solo es bello mientras duran el contraste y el deseo; después todo pasa a ser flaqueza y costumbre...
Hay besos estridentes, vibrantes, sonoros, crepitantes, chirriantes, sordos, ahogados, que crujen como seda, etcétera, etc.
El amor es sacrificio, éste solo es posible cuando se emerge de sí propio para vivir en el otro.
Cuando se cultiva con actividad la memoria, el alma se enriquece de ingentes particularidades que distraen el recuerdo.
La posesión, solo por sí, es algo vulgar, y los medios de que los apasionados se suelen servir la mayor parte de las veces para eso son bastante bajos; no tienen escrúpulo en emplear para sus fines...
Los más bellos matrimonios son aquellos que no han sido determinados por ningún porqué; cuanto menos porqués, tanta más sinceridad, tanto más amor.
Lo primero que debe hacerse es llevar a una muchacha al punto en que solo conozca un deber: el de abandonarse plenamente a su amado, tanto como si, llena de exaltada beatitud, mendigase ese favor. Sol...
No hay ningún estado social que no tenga sus costumbres y, por lo tanto, sus mentiras convencionales.
Saber hacer del amor algo absoluto, delante de lo cual todo lo demás pierda su valor, es absolutamente necesario.
Penetrar con el espíritu en el ser de una mujer es un arte; pero saber salir a tiempo es una obra maestra, a pesar de que este acto depende siempre del primero.
Quien no sabe tener bajo su poder de fascinación a una mujer hasta el punto de que ella no vea nada, a no ser aquello que queremos que ella vea; quien no sabe infiltrarse en su ser de modo que obteng...
Toda muchacha es una maestra innata, y aunque con ella no se pudiese aprender nada más, se aprendería por lo menos una cosa: el modo de engañarla. Nadie nos puede enseñar tal cosa como ella.
Yo creo que se podría vivir continuamente absorto en la contemplación de un ser femenino.
... creo que toda historia de amor debe durar medio año como máximo, y que cualquiera ligadura amorosa debe romperse eo ipso cuando ya no quede nada más que gozar.