Frases de hombres. Encuentra docenas de frases de hombres con fotos para copiar y compartir.
La mayor declaración de amor es la que no se hace; el hombre que siente mucho, habla poco.
En todo momento de mi vida hay una mujer que me lleva de la mano en las tinieblas de una realidad que las mujeres conocen mejor que los hombres y en las cuales se orientan mejor con menos luces.
Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los impres...
Las personas más insoportables son los hombres que se creen geniales y las mujeres que se creen irresistibles.
La educación consiste en enseñar a los hombres no lo que deben pensar sino a pensar.
Los defectos y faltas de los hombres dan a conocer su verdadera valía. Si examinamos con atención las faltas de un hombre, llegaremos a conocer si su bondad es sincera o fingida.
Entre un hombre y una mujer la amistad es tan solo una pasarela que conduce al amor.
Si los hombres se limitaran a hablar solamente de lo que entienden, apenas hablarían.
La libertad significa responsabilidad. Es por eso que la mayoría de los hombres la ignoran.
La confianza ha de darnos la paz. No basta la buena fe, es preciso mostrarla, porque los hombres siempre ven y pocas veces piensan.
Solo con una ardiente paciencia conquistaremos la espléndida ciudad que dará luz, justicia y dignidad a todos los hombres. Así la poesía no habrá cantado en vano.
El orgullo de los mediocres consiste en hablar siempre de sí mismos; el orgullo de los grandes hombres es de no hablar nunca de ellos.
Aquel que se confía a dios deja de temer a los hombres.
La libertad es el único objetivo digno del sacrificio de la vida de los hombres.
El orgullo divide los hombres, la humildad los une.
Los hombres auténticos viven como piensan. Los que quieren engañarse piensan como viven.
Hay quienes creen que el destino descansa en las rodillas de los dioses, pero la verdad es que trabaja, como un desafío candente, sobre las conciencias de los hombres.
Los hombres aman sus vicios y al mismo tiempo los odian.
El amor ahuyenta el miedo y, recíprocamente el miedo ahuyenta al amor. Y no solo al amor el miedo expulsa; también a la inteligencia, la bondad, todo pensamiento de belleza y verdad, y solo queda la...
Los hombres son como los vinos: la edad agria los malos y mejora los buenos.
Las mujeres con pasado y los hombres con futuro son las personas más interesantes.
La lectura no da al hombre sabiduría; le da conocimientos.
El honor y el premio son los resortes para que no se adormezca el espíritu del hombre.
Lo único que hace falta para que los hombres descubran el amor es tener demasiado cerca a una mujer; y lo único que hace falta para que este amor se disipe es seguir teniéndola demasiado cerca.
Después de cometer el error de sufrir un infortunio, el hombre talentoso siempre se recupera
Las mujeres prefieren a los hombres silenciosos. Piensan que las están escuchando.
Cuando empecé a tratar con los hombres, escuchaba sus palabras y confiaba en que sus acciones se ajustarían a las mismas. Ahora, al tratar con los hombres, escucho sus palabras y al propio tiempo ob...
El único instrumento que los hombres tenemos tanto para perfeccionarnos como para vivir dignamente es la educación
¿Que tienen en común los hombres y las escobas? Que si les quitas el palo ya no sirven para nada.
Dios está en todos los hombres, pero no todos los hombres están en Dios: Por eso sufren.
El hombre económico es el más rico de los hombres, pero el avaro es el más pobre.
Señor, las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombres; pero si los hombres las sienten demasiado, se vuelven bestias.
Las mujeres no necesitan estudiar a los hombres, porque los adivinan.
¿cómo es que, siendo tan inteligentes los niños, son tan estúpidos la mayor parte de los hombres?. Debe ser el fruto de la educación.
Quizás el sufrimiento y el amor tienen una capacidad de redención que los hombres han olvidado o, al menos, descuidado.
La pasión hace idiotas a los hombres más inteligentes, y hace que los mayores idiotas sean inteligentes.
Los sabios hablan porque tienen algo que decir. Los tontos hablan porque tienen que decir algo.
La guerra es el arte de destruir hombres, la política es el arte de engañarlos.
Solo cuando los hombres aprenden a rezar empiezan a creer.
Los hombres casados son horriblemente aburridos cuando son buenos maridos, e insoportablemente presumidos cuando no lo son.