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Amargura ( 3 )

Amargura. Encuentra docenas de amargura con fotos para copiar y compartir.


Los que no pueden trabajar con el corazón, pero lograr un hueco éxito a medias que engendra amargura por todas partes.


Abdul Kalam


Terminando días aciagos

Buscador de amor
desamparado estás en la estación del amor.
Añoranza del pasado
de segundos de amor hallados,
termina tus días aciagos
cantando himnos fúnebres.

Mujer querida que ya no está
quedan en tu alma alucinada,
espejismos lejanos que te quiebran:
esos cabellos cortos jugando con el viento,
ojos enigmáticos,jugetes de tus miradas,
labios queriendo besarlos en noches de encantos,
bello rostro de deidad sin igual.

Suspira en noche clara
callando tu amargura,
fatiga tu corazón a punto de estallar.
Inicia el periplo al más allá,
hacia la playa del eterno descanso.

Solo sin esperanza de amar
en silencioso y extenso desierto.
Aurea de tu fin que corona tu cuerpo y alma
en noche de eterna agonía.
Muerte con cantos de sinfonía
sin adioses,muerte con sollozos de melancolía.


Miguel Visurraga Sosa




Me siento a pensar que usted no recibe la crítica más efectiva de un hombre hasta que lo provocan. Verdad severa se expresa con un poco de amargura.


Henry David Thoreau


Tuve el honor de conocer a Nelson Mandela, y le escuché explicar el perdón de sus captores de 27 años diciendo que el odio y la amargura es destructiva - la energía está en el amor y el perdón.


Dick Gephardt


Lo siento al pensar que tú no recibes la mejor crítica de un hombre hasta que lo provocas. La auténtica verdad se expresa con cierta amargura.


Henry David Thoreau


La gran cosa sobre cultura de la celebridad es que parece que no puede parar de mostrar su comportamiento ridículo. Siento que es mi trabajo como periodista de investigación serio para presenciar todo tipo de comportamiento y luego informar a la audiencia a través del prisma de mi propia ira y la amargura.


Kathy Griffin




Nuestra historia nacional tantas veces nos ha llenado de amargura y el sentimiento de impotencia.


Lech Walesa


Belleza, más de amargura, hace que el corazón roto.


Sara Teasdale


El que da, tendrá verdadera ganancia. El que se somete será libre; dejará de ser esclavo de las pasiones. El hombre justo echa fuera el mal, y eliminando la lujuria, la amargura y la ilusión llega al Nirvana.


Buda




La decepción es inevitable. Pero desanimarse, hay una opción que hago. Dios nunca me desanimaría. Él siempre me consigo mismo punto de confiar en él. Por lo tanto, mi desaliento viene de Satanás. Al pasar por las emociones que tenemos, la hostilidad no es de Dios, la amargura, el rencor, todos estos son los ataques de Satanás.


Charles Stanley


Hay mucha amargura, hay una gran cantidad de ira que hay. Todos tenemos que trabajar duro para sanar esas heridas.


Allen Boyd


El sistema capitalista es un sistema en el que la promoción es, precisamente, de acuerdo al mérito. Si la gente no sale adelante, no hay amargura en sus mentes. Son reacios a admitir que no avanzan debido a su falta de inteligencia. Llevan a cabo su falta de avance en la sociedad. Muchos culpan a la sociedad y se convierten al socialismo.


Ludwig von Mises


Necesitamos la compasión y el coraje para cambiar las condiciones que apoyan nuestro sufrimiento. Estas condiciones son cosas como la ignorancia, la amargura, la negligencia, se aferran, y aguantando.


Sharon Salzberg




Las palabras se pueden decir en la amargura y la ira, y muchas veces parece que hay un elemento de verdad en la maldad. Y las palabras no desaparecen, solo se hacen eco de todo.


Jane Goodall


Estaría yo con tales pobres infelices entre el placer y la amargura, en una forma muy curiosa, como un recluso o un réprobo, habitando un lugar parecido a una prisión o a un monasterio. Quizá podría ser el consejero o el confesor espiritual de esas extrañas criaturas de la lujuria.


Roberto Alifano


Lo único que realmente demuestra es que nuestro futuro será igual a nuestro pasado, y que el pecado que hemos cometido una vez, y con amargura, lo repetiremos muchas veces, y con alegría.


Oscar Wilde


Nunca le gustó mirar atrás. El pasado estaba repleto de malos recuerdos, y los buenos lo dejaban lleno de amargura


Trudi Canavan


Virgen de la Amargura, devuélveme la vida, sin ti todo es usura, y noches perdidas


Joaquín Sabina


«La amargura hace más daño en la vida donde se acumula que en aquel sobre quien se derrama».


Stephen Kendrick


Toda la amargura de la existencia le parecía servida en su plato, y, con el humo del cocido, subían desde el fondo de su alma algo así como otras bocanadas del hastío


Gustave Flaubert


El verano es una estación triste en la que nada crece. Quién no prefiere el mes de diciembre pese a la amargura que provoca la felicidad ajena; incluso la establecida crueldad de abril es mil veces más estimulante. La canción del verano es siempre la peor canción del año. El amor de verano es un subgénero del amor, del gran amor que nunca podrá tener lugar en verano. Hablan de lecturas de verano, noches de verano, viajes de verano, bebidas de verano y con ello queda implícito un sutil desprecio.


David Trueba


Considérame simplemente como un ser que a veces siente que el cáliz de su amargura está lleno hasta los bordes.


Anne Frank


El mejor antídoto para una ofensa es responder con un acto de benevolencia o generosidad hacia alguien más. Al hacerlo, estará eligiendo alquilar más espacio en su corazón al amor y no a la falta de perdón, al odio, la ira, la amargura o a otras emociones tóxicas. Niéguese a regalar su salud emocional y física. El ex presidente de Sudáfrica Nelson Mandela, cuando se le preguntó cómo sobrevivió a los años en prisión sin volverse amargado, respondió: «La amargura solamente nos lastima a nosotros mismos. Si odias, estarás dándole a esa persona tu mente y tu corazón. No regales ni desperdicies esas cosas».


Don Colbert


En aquellas horas de amargura en que su vida se quebraba comprendió el valor del amor de una mujer. ¡Una mujer! sólo ella puede querer a un hombre pisoteado por botas de hierro. Allí está él, cubierto de escupitajos, y ella le lava los pies, le desenreda el pelo, acaricia sus ojos que se han vuelto apáticos. Cuanto más le han destruido el alma, cuanto más repugnante se ha convertido y más despreciable para el mundo, más querido es para ella. [... ] No todas las mujeres con las que te acuestas pueden ser tu mujer.


Vasili Grossman


Ahora tengo treinta años, y mis sienes jaspea
la ceniza precoz de la muerte. En mis días,
como la lluvia eterna de los polos, gotea
la amargura con lágrimas lentas, salobre y fría.

Mientras arde la llama del pino, sosegada,
mirando a mis entrañas pienso qué hubiera sido
un hijo mío, infante con mi boca cansada,
mi amargo corazón y mi voz de vencido.

Y con tu corazón, el fruto de veneno,
y tus labios que hubieran otra vez renegado.
Cuarenta lunas él no durmiera en mi seno,
que sólo por ser tuyo me hubiese abandonado.

Y en qué huertas en flor, junto a qué aguas corrientes
lavara, en primavera, su sangre de mi pena,
si fui triste en las landas y en las tierras clementes,
y en toda tarde mística hablaría en sus venas.

Y el horror de que un día, con la boca quemante
de rencor, me dijera lo que dije a mi padre:
«¿Por qué ha sido fecunda tu carne sollozante
y se henchieron de néctar los pechos de mi madre?»

Siento el amargo goce de que duermas abajo
en tu lecho de tierra, y un hijo no meciera
mi mano, por dormir yo también sin trabajos
y sin remordimientos, bajo una zarza fiera.

Porque yo no cerrara los párpados, y loca
escuchase a través de la muerte, y me hincara,
deshechas las rodillas, retorcida la boca,
si lo viera pasar con mi fiebre en su cara.

Y la tregua de Dios a mí no descendiera:
en la carne inocente me hirieran los malvados,
y por la eternidad mis venas exprimieran
sobre mis hijos de ojos y de frente extasiados.

¡Bendito pecho mío en que a mis gentes hundo
y bendito mi vientre en que mi raza muere!
¡La cara de mi madre ya no irá por el mundo
ni su voz sobre el viento, trocada en miserere!

La selva hecha cenizas retoñará cien veces
y caerá cien veces, bajo el hacha, madura.
Caeré para no alzarme en el mes de las mieses;
conmigo entran los míos a la noche que dura.

Y como si pagara la deuda de una raza,
taladran los dolores mi pecho cual colmena.
Vivo una vida entera en cada hora que pasa;
como el río hacia el mar, van amargas mis venas.

Mis pobres muertos miran el sol y los ponientes
con un ansia tremenda, porque ya en mí se ciegan.
Se me cansan los labios de las preces fervientes
que antes que yo enmudezca por mi canción entregan.

No sembré por mi troje, no enseñé para hacerme
un brazo con amor para la hora postrera,
cuando mi cuello roto no pueda sostenerme
y mi mano tantee la sábana ligera.

Apacenté los hijos ajenos, colmé el troje
con los trigos divinos, y sólo a Ti espero,
¡Padre nuestro que estás en los cielos!, recoge
mi cabeza mendiga, si en esta noche muero.


Gabriela Mistral


¡Oh, Siddharta Gautama!, tú tenías razón:
las angustias nos vienen del deseo; el edén
consiste en no anhelar, en la renunciación
completa, irrevocable, de toda posesión;
quien no desea nada, dondequiera está bien.

El deseo es un vaso de infinita amargura,
un pulpo de tentáculos insaciables, que al par
que se cortan, renacen para nuestra tortura.
El deseo es el padre del esplín, de la hartura,
¡y hay en él más perfidias que en las olas del mar!

Quien bebe como el Cínico el agua con la mano,
quien de volver la espalda al dinero es capaz,
quien ama sobre todas las cosas al Arcano,
¡ése es el victorioso, el fuerte, el soberano...
y no hay paz comparable con su perenne paz!


Amado Nervo




Mariposa,
Vagarosa
Rica en tinte y en donaire
¿qué haces tú de rosa en rosa?
¿de qué vives en el aire?

Yo, de flores
Y de olores,
Y de espumas de la fuente,
Y del sol resplandeciente
Que me viste de colores

¿Me regalas
tus dos alas?
¡son tan lindas! ¡te las pido!
deja que orne mi vestido
con la pompa de tus galas

Tú, niñito
tan bonito,
tú que tienes tanto traje,
¿Por qué quieres un ropaje
que me ha dado Dios bendito?

¿De qué alitas
necesitas
si no vuelas cual yo vuelo?
¿qué me resta bajo el cielo
si mi todo me lo quitas?

Días sin cuento
De contento
El Señor a ti me envía;
Mas mi vida es un solo día,
No me lo hagas de tormento

¿te divierte
dar la muerte
a una pobre mariposa?
¡ay¡ quizás sobre una rosa
Me hallarás muy pronto inerte.

Oyó el niño
Con cariño
Esta queja de amargura,
Y una gota de miel pura
Le ofreció con dulce guiño

Ella, ansiosa,
Vuela y posa
En su palma sonrosada,
Y allí mismo, ya saciada,
Y de gozo temblorosa,
Expiró la mariposa.


Rafael Pombo


Vivir es sentir, sin amarguras, todas las edades, hasta que llega la muerte.


Margaret Thatcher


¿Que esta pasando?
La tristeza se esta convirtiendo en algo parecido al odio,
pero no contra ella,
sino con todo a mi alrededor,
me he vuelto volatil e inestable,
Ahora miro con desprecio al ser humano.


Jordan Cortes