Arrastra ( 2 )
Arrastra. Encuentra docenas de arrastra con fotos para copiar y compartir.
A veces, nos olvidamos de la magnitud de los estragos que puede causar al descargar nuestra mente en las máquinas super-inteligentes, es decir, hasta que se queda lejos de nosotros, como aprendices de brujo loco ', y nos arrastra hasta el precipicio de una mirar hacia el abismo.
Richard Dooling
Jesús no dijo: "Bienaventurados los que cuidan de los pobres." Él dijo: "Bienaventurados los que estuvimos somos pobres, donde estamos rotos. Es allí donde Dios nos ama profundamente y nos arrastra a una comunión más profunda con él.
Henri Nouwen
Hay un lado el glamour de la misma, lo que le permite satisfacer una gran variedad de personas con las que usted puede simplemente pasar un buen rato, pero también hay un lado triste de que te arrastra a un mundo superficial y artificial.
Karolina Kurkova
Creo que usted oye, al menos en voz baja, y que va a crecer más fuerte, es que creemos que el capitalismo es el mantra del día y todo lo que se arrastra hacia el socialismo es un problema.
Tim Scott
La verdad es una mujer recatada, demasiado elegante para golpearle en la cabeza y que arrastra a su cueva. Ella está ahí, pero la gente debe querer ella y buscarla fuera.
William F. Buckley Jr.
La lentitud y la memoria. Si va deprisa, el presente arrastra con él los instantes que le han precedido: retenidos así en una única estela, no corren el peligro de descolgarse y de caer en el olvido, cuando un tiempo se estira, el pasado se difumina en una lejanía confusa en una historia antigua en la que dejamos de prestar atención. Nos basta con ser consientes de ello con ejercitarnos en luchar contra esta forma de separación. Así aumentamos nuestra capacidad de acordarnos. Existen, pues, dos clases de memoria: la primera fácil y débil, la segunda más escasa y más fuerte.
Pierre Sansot
Mañana y mañana y mañana se arrastra con paso mezquino día tras día hasta la sílaba final del tiempo escrito. La luz de nuestro ayer guió a los necios hacia el polvo de la muerte. ¡Apágate, apágate breve llama! La vida es una sombra que camina, un pobre actor que en escena se arrebata y contonea y a quien nunca más se oye. La vida es un cuento narrado por un idiota, lleno de ruido y furia, y que nada significa.
William Shakespeare
El tiempo vuela a veces como un pájaro, y a veces se arrastra como un caracol. Pero la mayor felicidad del hombre sobreviene cuando no se advierte si su paso es raudo o moroso.
Iván Turgueniev
... una cosa empieza a ir mal, ésta hace que otra también funcione mal y la situación va empeorando indefinidamente. Acabas por no poder salir de allí. Hasta que viene alguien y te arrastra fuera.
Haruki Murakami
Cuanto más se quiere
Cuanto más se quiere descansar
Tanto más horrible se hace la vida;
La neblina húmeda se arrastra desde los campos,
La neblina húmeda penetra al pecho.
Arrastrándose por el terciopelo de la noche...
Olvida que hubo la vida,
Que la vida habrá, olvida...
Se arrastran desde los campos las tinieblas nocturnas...
Solo uno, solo uno,
Quedarse dormido, quedarse dormido...
Pero de todas maneras
Alguien te despertará.
Cuanto más se quiere descansar
Tanto más horrible se hace la vida;
La neblina húmeda se arrastra desde los campos,
La neblina húmeda penetra al pecho.
Arrastrándose por el terciopelo de la noche...
Olvida que hubo la vida,
Que la vida habrá, olvida...
Se arrastran desde los campos las tinieblas nocturnas...
Solo uno, solo uno,
Quedarse dormido, quedarse dormido...
Pero de todas maneras
Alguien te despertará.
Aleksandr Blok
La amistad es una ráfaga de peces luminosos,
y te arrastra
hacia un océano feliz de mariposas.
La amistad es un plañir de campanas
que invocan el aroma de los cuerpos
en un jardín amanecido de heliotropos.
y te arrastra
hacia un océano feliz de mariposas.
La amistad es un plañir de campanas
que invocan el aroma de los cuerpos
en un jardín amanecido de heliotropos.
Carmen DÃaz Margarit
Una mirada de reojo a mi sombrero de Hamlet. ¿Si me quedara súbitamente desnudo aquí mismo donde estoy sentado? No lo estoy. A través de las arenas de todo el mundo, seguida hacia el oeste por la espada llameante del sol, emigrando hacia tierras crepusculares. Ella marcha agobiada, schleppea, remolca, arrastra, trascina su carga. Una marea hacia el oeste, selenearrastrada, en su estela. Mareas, dentro de ella, miríadinsulada, sangre no mía, oinoma ponton, un mar vino oscuro. He aquí la criada de la luna. En sueños el signo líquido le dice su hora, le ordena abandonar el lecho. Leche nupcial natal mortal, cirioespectroiluminada. Omnis caro ad te veniet. Él viene, pálido vampiro, atravesando la tormenta con sus ojos, su velamen de murciélago navega ensangrentando el mar, boca al beso de su boca.
Vamos. Tomémoslo al vuelo, ¿quieres? Mis tabletas. Boca a su besar. No. Debe de haber dos. Pégalas bien. Boca al beso de su boca.
Sus labios dieron labios y boca a inmateriales besos de aire. Boca a su vientre. Antro, tumba donde todo entra. Del molde de su boca en su aliento fue exhalado sin palabras: ooeehah; estruendo de astros en catarata, igniciones esféricas bramando sevanvanvanvanvanvanvan. Papel. Los billetes de banco, malditos sean.
Vamos. Tomémoslo al vuelo, ¿quieres? Mis tabletas. Boca a su besar. No. Debe de haber dos. Pégalas bien. Boca al beso de su boca.
Sus labios dieron labios y boca a inmateriales besos de aire. Boca a su vientre. Antro, tumba donde todo entra. Del molde de su boca en su aliento fue exhalado sin palabras: ooeehah; estruendo de astros en catarata, igniciones esféricas bramando sevanvanvanvanvanvanvan. Papel. Los billetes de banco, malditos sean.
James Joyce
En mi cielo al crepúsculo eres como una nube
y tu color y forma son como yo los quiero.
Eres mía, eres mía, mujer de labios dulces,
y viven en tu vida mis infinitos sueños.
La lámpara de mi alma te sonrosa los pies,
el agrio vino mío es más dulce en tus labios:
oh segadora de mi canción de atardecer,
cómo te sienten mía mis sueños solitarios!
Eres mía, eres mía, voy gritando en la brisa
de la tarde, y el viento arrastra mi voz viuda.
Cazadora del fondo de mis ojos, tu robo
estanca como el agua tu mirada nocturna.
En la red de mi música estás presa, amor mío,
y mis redes de música son anchas como el cielo.
Mi alma nace a la orilla de tus ojos de luto.
En tus ojos de luto comienza el país del sueño.
y tu color y forma son como yo los quiero.
Eres mía, eres mía, mujer de labios dulces,
y viven en tu vida mis infinitos sueños.
La lámpara de mi alma te sonrosa los pies,
el agrio vino mío es más dulce en tus labios:
oh segadora de mi canción de atardecer,
cómo te sienten mía mis sueños solitarios!
Eres mía, eres mía, voy gritando en la brisa
de la tarde, y el viento arrastra mi voz viuda.
Cazadora del fondo de mis ojos, tu robo
estanca como el agua tu mirada nocturna.
En la red de mi música estás presa, amor mío,
y mis redes de música son anchas como el cielo.
Mi alma nace a la orilla de tus ojos de luto.
En tus ojos de luto comienza el país del sueño.
Pablo Neruda