Frases de Valeriu Butulescu
A veces los árboles se rompen sobre el peso de sus propias frutas.
Estas páginas. La caja negra de mi corto vuelo.
Los parásitos florecen en la herida del árbol.
Afortunosamente, no respetamos la geometría. Somos iguales, pero no somos semejantes.
Hacer un mundo en seis días, para contemplar sus imperfecciones tantas eras.
Dice la suciedad: la limpieza mancha.
Mitología. El buho duerme todo el día y pasa como pájaro de la sabiduría.
Los críticos ven la música y oyen la pintura.
Su poesía es seca, así como una momia, por eso ha resistido tantos siglos.
Pensamos que los meteoritos viven poco. Para nosotros ellos nacen en el momento que empiezan a quemarse.
Los tacones y las aureolas ayudan a los enanos a crecer.
Tribuno, tribuna, tribunal.
En la ternura de la serpiente nadie cree. Nadie no es trastornado por la sangre incolora de las flores.
El hombre es un animal evolucionado. El puede vestirse con la piel de otros animales.
Desagradables y deformes, algunos artistas son como las conchas babosas de moluscos, en las que nacen perlas.
Amaré al prójimo, solo si no se acerca más.
Creo que la verdad desnuda no es moral.
Imbecilidad. La propiedad de algunos cerebros de no dejarse contaminar por ninguna idea.
En estos pensamientos he puesto un rayo de sol, para la noche infinita que me espera.
Los hombres excepcionales son siempre una minoría.