Cesa
Cesa. Encuentra docenas de cesa con fotos para copiar y compartir.
Para el hombre falso, el universo entero es falso, impalpable, y todo lo que palpa se convierte en nada. Y él mismo, mostrándose bajo un falso aspecto, se convierte en una sombra, o acaso cesa de existir.
Nathaniel Hawthorne
Inmensidad de La Noche
En medio de la noche surge a veces
una pregunta, y la noche se agranda,
y es inmensa la noche hasta la angustia.
Como un barco sin luces, silencioso,
surca así nuestro cuarto tanta sombra
que parece sin límites el mundo.
Nos rodea el vacío, es agua oscura
más densa aún que la sangre. Nada se oye,
tan solo un chapoteo de hondo cieno
allá en lo más profundo de ese agua:
es nuestro corazón. Pero la noche
no cesa de crecer y ya es un ojo
de insoportable desnudez que mira
nuestro terror. Y es esa la pregunta,
y la noche lo sabe y mira entonces
(sólo a veces) el desvalido ser
que somos, con ternura, y vuelve el sueño.
Y la infinita gruta que es el universo
de nuevo resplandece.
De "Espejos" 1986 - 1991
Pre-Textos, 1991 Valencia-España
En medio de la noche surge a veces
una pregunta, y la noche se agranda,
y es inmensa la noche hasta la angustia.
Como un barco sin luces, silencioso,
surca así nuestro cuarto tanta sombra
que parece sin límites el mundo.
Nos rodea el vacío, es agua oscura
más densa aún que la sangre. Nada se oye,
tan solo un chapoteo de hondo cieno
allá en lo más profundo de ese agua:
es nuestro corazón. Pero la noche
no cesa de crecer y ya es un ojo
de insoportable desnudez que mira
nuestro terror. Y es esa la pregunta,
y la noche lo sabe y mira entonces
(sólo a veces) el desvalido ser
que somos, con ternura, y vuelve el sueño.
Y la infinita gruta que es el universo
de nuevo resplandece.
De "Espejos" 1986 - 1991
Pre-Textos, 1991 Valencia-España
Abelardo Linares
El amor en la mujer está siempre mezclado con una admiración involuntaria, y cesa cuando cree convencerse de que el hombre le es inferior.
Christian Friedrich Hebbel
El Camino Cegado Por El Bosque
Créeme, no es piedad lo que siento por ti,
ahora que estoy lejos, sino un recuerdo herido.
Por ti y por el camino cegado por el bosque
que no pude seguir aquella noche joven,
perfumada y abierta como el cuerpo de un pino.
No es piedad, sino una sensación de fracaso,
de suave y entrañable dolor que nunca cesa.
Fuiste buena conmigo en mis días de entonces:
me diste cuanto soy, este veneno dulce
que me impulsa a luchar contra el mar, contra el tiempo
y contra el mismo amor de los que bien me quieren.
No es piedad, aún te busco en la noche perfecta,
deseoso, sediento de tus colores ácidos,
de tus estrellas frías, de tus ramas y ríos
helados tras los cielos del más hermoso invierno.
Te lo digo dolido y con los ojos húmedos,
aunque la mente esté segura, serenada:
no te pude tener más cerca, pues mis labios
llegaron a rozar tus nieves, tu horizonte.
No es piedad, créeme; solo sé que una tarde
avanzada, profunda, descendí de aquel monte
puro y purificado como un fuego de junio.
Creí volver a ti definitivamente
y me encontré el camino cegado por el bosque.
"Astrolabio" 1975 - 1979
Créeme, no es piedad lo que siento por ti,
ahora que estoy lejos, sino un recuerdo herido.
Por ti y por el camino cegado por el bosque
que no pude seguir aquella noche joven,
perfumada y abierta como el cuerpo de un pino.
No es piedad, sino una sensación de fracaso,
de suave y entrañable dolor que nunca cesa.
Fuiste buena conmigo en mis días de entonces:
me diste cuanto soy, este veneno dulce
que me impulsa a luchar contra el mar, contra el tiempo
y contra el mismo amor de los que bien me quieren.
No es piedad, aún te busco en la noche perfecta,
deseoso, sediento de tus colores ácidos,
de tus estrellas frías, de tus ramas y ríos
helados tras los cielos del más hermoso invierno.
Te lo digo dolido y con los ojos húmedos,
aunque la mente esté segura, serenada:
no te pude tener más cerca, pues mis labios
llegaron a rozar tus nieves, tu horizonte.
No es piedad, créeme; solo sé que una tarde
avanzada, profunda, descendí de aquel monte
puro y purificado como un fuego de junio.
Creí volver a ti definitivamente
y me encontré el camino cegado por el bosque.
"Astrolabio" 1975 - 1979
Antonio Colinas
Por El Silencio Sigues...
Por el silencio sigues
embriagada y sonámbula
Detrás de los espejos
se desnuda tu nombre
Difusa entre las lámparas
es mortal tu pupila
Naciendo con el día
llevas un luto largo
de vasijas y cuerpos
Tu revelación no cesa nunca
en la noche sin huellas
Al fondo de tu voz que niega
hay otra voz que afirma
Tus dioses desplazados
se recrean sigilosos
en la realidad invisible.
Por el silencio sigues
embriagada y sonámbula
Detrás de los espejos
se desnuda tu nombre
Difusa entre las lámparas
es mortal tu pupila
Naciendo con el día
llevas un luto largo
de vasijas y cuerpos
Tu revelación no cesa nunca
en la noche sin huellas
Al fondo de tu voz que niega
hay otra voz que afirma
Tus dioses desplazados
se recrean sigilosos
en la realidad invisible.
Homero Aridjis
Cesa de definirte: concédete todas las posibilidades de ser, cambia de caminos cuantas veces te sea necesario.
Alejandro Jodorowsky
La gente que cesa de creer en dios o en la bondad todavía suele creer en el demonio. No sé por qué. O sí lo sé: la maldad es siempre posible, la bondad es una dificultad eterna.
Anne Rice
Escucha, Escúchame...
Escucha, escúchame, nada de vidrios verdes o doscientos días
de historia, o de libros
abiertos como heridas abiertas, o de lunas de Jonia y cosas así,
sino solo beber yedra mala, y zarzas, y erizadas anémonas
parecidas a flores.
Escucha, dime, siempre fue de este modo,
algo falta y hay que ponerle nombre,
creer en la poesía, y en la intolerancia de la poesía, y decir niña
o decir nube, adelfa,
sufrimiento,
decir desesperada vena sola, cosas así, casi reliquias, casi lejos.
Y no es únicamente por el órgano tiempo que cesa y no cesa,
por lo crecido, para lo sonriente,
para mi soledad hecha esquina, hecha torre, hecha leve notario,
hecha párvula muerta,
sino porque no hay otra forma más violenta de alejarse.
"De una niña de provincias que se vino a vivir en un Chagall"1980
Escucha, escúchame, nada de vidrios verdes o doscientos días
de historia, o de libros
abiertos como heridas abiertas, o de lunas de Jonia y cosas así,
sino solo beber yedra mala, y zarzas, y erizadas anémonas
parecidas a flores.
Escucha, dime, siempre fue de este modo,
algo falta y hay que ponerle nombre,
creer en la poesía, y en la intolerancia de la poesía, y decir niña
o decir nube, adelfa,
sufrimiento,
decir desesperada vena sola, cosas así, casi reliquias, casi lejos.
Y no es únicamente por el órgano tiempo que cesa y no cesa,
por lo crecido, para lo sonriente,
para mi soledad hecha esquina, hecha torre, hecha leve notario,
hecha párvula muerta,
sino porque no hay otra forma más violenta de alejarse.
"De una niña de provincias que se vino a vivir en un Chagall"1980
Blanca Andreu
Diosa
Dormida sobre el tigre,
su leve trenza yace.
Mirad su bulto. Alienta
sobre la piel hermosa,
tranquila, soberana.
¿Quién puede osar, quién sólo
sus labios hoy pondría
sobre la luz dichosa
que, humana apenas, sueña?
Miradla allí. ¡Cuán sola!
¡Cuán intacta! ¿Tangible?
Casi divina, leve
el seno se alza, cesa,
se yergue, abate; gime
como el amor. Y un tigre
soberbio la sostiene
como la mar hircana,
donde flotase extensa,
feliz, nunca ofrecida.
¡Ah, mortales! No, nunca;
desnuda, nunca vuestra.
Sobre la piel hoy ígnea
miradla, exenta: es diosa.
Dormida sobre el tigre,
su leve trenza yace.
Mirad su bulto. Alienta
sobre la piel hermosa,
tranquila, soberana.
¿Quién puede osar, quién sólo
sus labios hoy pondría
sobre la luz dichosa
que, humana apenas, sueña?
Miradla allí. ¡Cuán sola!
¡Cuán intacta! ¿Tangible?
Casi divina, leve
el seno se alza, cesa,
se yergue, abate; gime
como el amor. Y un tigre
soberbio la sostiene
como la mar hircana,
donde flotase extensa,
feliz, nunca ofrecida.
¡Ah, mortales! No, nunca;
desnuda, nunca vuestra.
Sobre la piel hoy ígnea
miradla, exenta: es diosa.
Vicente Aleixandre
Si hoy presto oídos, escucho música que viene de muy lejos, del pasado también, de cuanto ha muerto, de horas y signos distintos de los de hoy, y de otras vidas. Quizás la nuestra –y nosotros mismos no somos otra cosa que ella- no sea más que tal música. Porque todos fuimos alguna vez mejores y más dignos. No obstante, toda música cesa. Hasta en nuestro recuerdo toda música cesa.
Boabdil
Tiempo Del Amor
En el amor el tiempo es como un pájaro
aleteante, estremecido, trágico.
Parece detenerse en nuestros brazos,
jadear dulcemente en nuestros labios.
Y fluye tierno como el valle verde
por un secreto afán de vida breve.
Su vuelo cesa bajo el beso largo,
tensas las alas, dulce y hechizado.
Y cuando el beso acaba hay en su luz
un brillo de asombrada juventud.
Ahora acecha cautivo de los labios
el lento desunirse, desmayados.
Ahora yace, quemadas ya las alas,
mientras ávidamente se desangre.
En el amor el tiempo es como un pájaro
aleteante, estremecido, trágico.
En el amor el tiempo es como un pájaro
aleteante, estremecido, trágico.
Parece detenerse en nuestros brazos,
jadear dulcemente en nuestros labios.
Y fluye tierno como el valle verde
por un secreto afán de vida breve.
Su vuelo cesa bajo el beso largo,
tensas las alas, dulce y hechizado.
Y cuando el beso acaba hay en su luz
un brillo de asombrada juventud.
Ahora acecha cautivo de los labios
el lento desunirse, desmayados.
Ahora yace, quemadas ya las alas,
mientras ávidamente se desangre.
En el amor el tiempo es como un pájaro
aleteante, estremecido, trágico.
José Luis Cano
«La Conciencia Universal del Bien es la Inteligencia que no cesa ni suspende su reinado y complejidad en el Firmamento»
Alberto Jiménez Ure
«Por orden de la Prominencia Infame o la Autoridad de su Desquicio, el sátrapa (que asevera estar pacíficamente armado) decidió dar discrecionalmente latigazos: pero, he ahí a una resistencia con marcas de tortura que no cesa»
Alberto Jiménez Ure
El verdadero amor nunca cesa, pues esta fundamentado en el Padre celestial porque El es amor
Jonathan Colina
El matrimonio es una hoguera, donde
arden dos brasas; si cualquiera de las
dos se aísla, cesa el fuego.
arden dos brasas; si cualquiera de las
dos se aísla, cesa el fuego.
jureme
los risos de la amada son rojos como el alba
y al despertar y ver la mañana con su dulce mirada,
calma el amor sin igual que con su amado tuvo en una playa
desolada.
en su mente reboca la historia de su aventura
y con una mrada pura no lo puede olvidar.
ella siente que puede vivir su alegria.
despertando y a su lado oyendo la vos de su amado.
pero las circunstancias alejan la vida que ella deseo,muchas son las cosas
que se quieren pero pocas son las que se obtienen.
el amado lucha por cuidar el sueño de su amada
y por una causa noble alivia su querer.
ellos lloran en sus noches de pasión pero esta noche recuerdan
el lugar y el momento en el que su amor nacio.
cuando convierten su aventura en realidad, miran los problemas
que sin una visión pura pudieron mirar.
ellos mantienen su ilusion,y el frio en su sangre es inevitable
pero la vida en su corazón es incansable.
la calma es dura de mantener. el consejo no para y el amor no cesa,
solo la amada con su esperanza esta. aunque cansada y agotada recuerda a quien amo.
no lo olvida no lo deja de pensar, por que su promesa fue firme
y con todo su corazón y porsupuesto con todo su amor¡¡.
poema inspirado en el titanic.
y al despertar y ver la mañana con su dulce mirada,
calma el amor sin igual que con su amado tuvo en una playa
desolada.
en su mente reboca la historia de su aventura
y con una mrada pura no lo puede olvidar.
ella siente que puede vivir su alegria.
despertando y a su lado oyendo la vos de su amado.
pero las circunstancias alejan la vida que ella deseo,muchas son las cosas
que se quieren pero pocas son las que se obtienen.
el amado lucha por cuidar el sueño de su amada
y por una causa noble alivia su querer.
ellos lloran en sus noches de pasión pero esta noche recuerdan
el lugar y el momento en el que su amor nacio.
cuando convierten su aventura en realidad, miran los problemas
que sin una visión pura pudieron mirar.
ellos mantienen su ilusion,y el frio en su sangre es inevitable
pero la vida en su corazón es incansable.
la calma es dura de mantener. el consejo no para y el amor no cesa,
solo la amada con su esperanza esta. aunque cansada y agotada recuerda a quien amo.
no lo olvida no lo deja de pensar, por que su promesa fue firme
y con todo su corazón y porsupuesto con todo su amor¡¡.
poema inspirado en el titanic.
ALONSO
Los celos se cría en dudas. Cuando esas dudas se transforman en certezas, entonces la pasión ni cesa o se vuelve una locura absoluta.
Francisco de La Rochefoucauld
Si estamos sufriendo la enfermedad, la pobreza o la desgracia, creemos que vamos a estar satisfechos el día en que cesa. Pero allí también, sabemos que es falso, tan pronto como uno se ha acostumbrado a no sufrir uno quiere algo más.
Simone Weil
Puse la inclinación general de toda la humanidad, un deseo perpetuo e incesante de poder tras poder, que solo cesa con la muerte.
Thomas Hobbes
La humanidad cesa de lanzar piedras contra sus espíritus superiores tan pronto les puede levantar un monumento.
Moritz Gottlieb Saphir
Sin duda la fábrica ya conocía el sistema de primas, pero la empresa se esfuerza más profundamente por imponer una modulación de cada salario, en estados de perpetua metastabilidad que pasan por desafíos, concursos y coloquios extremadamente cómicos. Si los juegos televisados más idiotas tienen tanto éxito es porque expresan adecuadamente la situación de empresa. La fábrica constituía a los individuos en cuerpos, por la doble ventaja del patrón que vigilaba a cada elemento en la masa, y de los sindicatos que movilizaban una masa de resistencia; pero la empresa no cesa de introducir una rivalidad inexplicable como sana emulación, excelente motivación que opone a los individuos entre ellos y atraviesa a cada uno, dividiéndolo en sí mismo. El principio modular del 'salario al mérito' no ha dejado de tentar a la propia educación nacional: en efecto, así como la empresa reemplaza a la fábrica, la formación permanente tiende a reemplazar a la escuela, y la evaluación continua al examen. Lo cual constituye el medio más seguro para librar la escuela a la empresa.
Gilles Deleuze
Definición de un Sufi
Para aprender, la gente debe abandonar mucho, y esto incluye el ritual como algo de lo cual imaginan que pueden aprender. Es para recalcar esto que Abu-Yaqub al-Susi, citado en Taarruf, de Kalabadhi, declara que el Sufi es ?alguien que no se preocupa cuando le quitan algo, pero que no cesa de buscar lo que no tiene.
Para aprender, la gente debe abandonar mucho, y esto incluye el ritual como algo de lo cual imaginan que pueden aprender. Es para recalcar esto que Abu-Yaqub al-Susi, citado en Taarruf, de Kalabadhi, declara que el Sufi es ?alguien que no se preocupa cuando le quitan algo, pero que no cesa de buscar lo que no tiene.
Idries Shah