Como convencer al ser amado
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Nunca se sufre tanto por amor como cuando volvemos a ver el objeto amado, o mejor cuando este está ausente.
Napoleón Bonaparte
Allá en mis años mozos adiviné del Arte la armonía y el ritmo, caros al musageta, y, pudiendo ser rico, preferí ser poeta. ¿Y después? He sufrido, como todos, y he amado. ¿Mucho? Lo suficiente para ser perdonado
Amado Nervo
Es cosa para mí inexplicable por qué se siente uno capaz de ser bueno cuando se siente amado
Amado Nervo
Hay algo tan necesario como el pan de cada día, y es la paz de cada día. La paz sin la cual el pan es amargo.
Amado Nervo
La amistad es como la música; dos cuerdas del mismo tono vibrarán ambas, aunque solo se toque una.
José Zorrilla
El que ha conocido solo a su mujer y la ha amado, sabe más de mujeres que el que ha conocido mil.
León Tolstoi
El arte de persuadir consiste tanto en el de agradar como en el de convencer; ya que los hombres se gobiernan más por el capricho que por la razón.
Blaise Pascal
Trabajar con amor es construir una casa con cariño, como si vuestro ser amado fuera a habitar en esa casa.
Khalil Gibran
En vano escarba el soñador en sus viejos sueños, como si fueran ceniza en la que busca algún rescoldo para reavivar la fantasía, para recalentar con nuevo fuego su enfriado corazón y resucitar en él una vez más lo que antes había amado tanto, lo que conmovía el alma, lo que enardecía la sangre, lo que arrancaba lágrimas de los ojos y cautivaba con espléndido hechizo.
Fiodor Dostoievski
En asuntos de amor los locos son los que tienen más experiencia. De amor no preguntes nunca a los cuerdos; los cuerdos aman cuerdamente, que es como no haber amado nunca.
Jacinto Benavente
Te amo para amarte y no para ser amado, puesto que nada me place tanto como verte a ti feliz.
George Sand
Este es mi mandamiento: Ámense los unos a los otros, como yo los he amado. No hay amor más grande que dar la vida por los amigos. Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando. [Juan 15, 12 - 14]
Jesús Cristo
Si amas sin despertar amor, esto es, si tu amor, en cuanto amor, no produce amor recíproco, si mediante una exteriorización vital como hombre amante no te conviertes en hombre amado, tu amor es impotente, una desgracia
Karl Marx
A la tarde te examinarán en el amor; aprende a amar como Dios quiere ser amado y deja tu condición
Juan de la Cruz
Os doy un mandamiento nuevo: que os améis los unos a los otros. Que, como yo os he amado, así os améis también vosotros los unos a los otros.
Jesús Cristo
Como se supone que termine algo, si aquellos peripatéticos a quienes hay que convencer se cierran hasta al argumento más sencillo
Galileo Galilei
¿Imagináis como es el tiempo que transcurre lejos del ser amado? ¿En el que no se puede oír su voz, en el que no se puede gozar de su mirada? ¿No es pedir a un hombre que exista separado de su alma?
Marqués de Sade
Me permito aclarar que no soy tan optimista como para creer que ya tengo un aliado, solo porque usted sea un ser humano como yo quisiera que lo fuese. Me encuentro en una situación demasiado anormal para convencer a alguien de la veracidad de mi relato. Aunque usted sea un ser humano, dudo que reconozca una esencia humana en mí.
Kobo Abe
Como consideraba que había nacido para el bello sexo, lo he amado siempre y me he hecho amar por él cuanto he podido.
Giacomo Casanova
Los Fieles del Amor tenemos a la amada como un culto de creación personal, como un ser menos cercano a nuestros deseos que a nuestro pensamiento. La mujer es el ser amado al cual rinde homenaje el amante, un ser tangible al que no necesariamente se ama con amor correspondido, sino un ser ideal que se convierte en algo inexistente y que habita más allá del alcance de nuestra imaginación o de nuestro pensamiento. Nosotros glorificamos y deificamos a la mujer amada, la comparamos a la Virgen María; la colocamos en un pedestal sublime. Pienso, por otro lado, que quien juzga sabiamente no puede sino acogerse a la contemplación.
Roberto Alifano
Y se odió por no haberla amado y cuidado como
merecía y por haber perdido la oportunidad de formar con ella un hogar amable, donde Amanda hubiera florecido.
merecía y por haber perdido la oportunidad de formar con ella un hogar amable, donde Amanda hubiera florecido.
Isabel Allende
Ama como puedas, ama a quien puedas, ama todo lo que puedas. No te preocupes de la finalidad de tu amor.
Amado Nervo
Utilizo el humor como un arma para denunciar hechos muy graves y para defender los intereses del pueblo.
Jorge Amado
¿Versos autobiográficos ? Ahí están mis canciones, allí están mis poemas: yo, como las naciones venturosas, y a ejemplo de la mujer honrada, no tengo historia: nunca me ha sucedido nada, ¡oh, noble amiga ignota!, que pudiera contarte
Amado Nervo
¡Qué importan males o bienes! Para mí todos son bienes. El rosal no tiene espinas: para mí solo da rosas. ¿Rosas de Pasión? ¡Qué importa! Rosas de celeste esencia, purpúreas como la sangre que vertiste por nosotros, ¡oh Cristo!
Amado Nervo
Todo hombre es como un cheque en blanco firmado por Dios. Nosotros mismos escribimos en él la cifra de su valor con nuestro merecimiento
Amado Nervo
Por esa puerta huyó diciendo :«¡nunca!»
Por esa puerta ha de volver un día ...
Al cerrar esa puerta dejo trunca
la hebra de oro de la esperanza mía.
Por esa puerta ha de volver un día.
Cada vez que el impulso de la brisa,
como una mano débil indecisa,
levemente sacude la vidriera,
palpita más aprisa, más aprisa,
mi corazón cobarde que la espera.
Desde mi mesa de trabajo veo
la puerta con que sueñan mis antojos
y acecha agazapando mi deseo
en el trémulo fondo de mis ojos.
¿Por cuánto tiempo, solitario, esquivo,
he de aguardar con la mirada incierta
a que Dios me devuelva compasivo
a la mujer que huyó por esa puerta?
¿Cuándo habrán de temblar esos cristales
empujados por sus manos ducales,
y, con su beso ha de llegar a ellas,
cual me llega en las noches invernales
el ósculo piadoso de una estrella?
¡Oh Señor!, ya la pálida está alerta;
¡oh Señor, cae la tarde ya en mi vía
y se congela mi esperanza yerta!
¡Oh, Señor, haz que se abra al fin la puerta
y entre por ella la adorada mía!...
¡Por esa puerta ha de volver un día!
Por esa puerta ha de volver un día ...
Al cerrar esa puerta dejo trunca
la hebra de oro de la esperanza mía.
Por esa puerta ha de volver un día.
Cada vez que el impulso de la brisa,
como una mano débil indecisa,
levemente sacude la vidriera,
palpita más aprisa, más aprisa,
mi corazón cobarde que la espera.
Desde mi mesa de trabajo veo
la puerta con que sueñan mis antojos
y acecha agazapando mi deseo
en el trémulo fondo de mis ojos.
¿Por cuánto tiempo, solitario, esquivo,
he de aguardar con la mirada incierta
a que Dios me devuelva compasivo
a la mujer que huyó por esa puerta?
¿Cuándo habrán de temblar esos cristales
empujados por sus manos ducales,
y, con su beso ha de llegar a ellas,
cual me llega en las noches invernales
el ósculo piadoso de una estrella?
¡Oh Señor!, ya la pálida está alerta;
¡oh Señor, cae la tarde ya en mi vía
y se congela mi esperanza yerta!
¡Oh, Señor, haz que se abra al fin la puerta
y entre por ella la adorada mía!...
¡Por esa puerta ha de volver un día!
Amado Nervo
¡Oh, Siddharta Gautama!, tú tenías razón:
las angustias nos vienen del deseo; el edén
consiste en no anhelar, en la renunciación
completa, irrevocable, de toda posesión;
quien no desea nada, dondequiera está bien.
El deseo es un vaso de infinita amargura,
un pulpo de tentáculos insaciables, que al par
que se cortan, renacen para nuestra tortura.
El deseo es el padre del esplín, de la hartura,
¡y hay en él más perfidias que en las olas del mar!
Quien bebe como el Cínico el agua con la mano,
quien de volver la espalda al dinero es capaz,
quien ama sobre todas las cosas al Arcano,
¡ése es el victorioso, el fuerte, el soberano...
y no hay paz comparable con su perenne paz!
las angustias nos vienen del deseo; el edén
consiste en no anhelar, en la renunciación
completa, irrevocable, de toda posesión;
quien no desea nada, dondequiera está bien.
El deseo es un vaso de infinita amargura,
un pulpo de tentáculos insaciables, que al par
que se cortan, renacen para nuestra tortura.
El deseo es el padre del esplín, de la hartura,
¡y hay en él más perfidias que en las olas del mar!
Quien bebe como el Cínico el agua con la mano,
quien de volver la espalda al dinero es capaz,
quien ama sobre todas las cosas al Arcano,
¡ése es el victorioso, el fuerte, el soberano...
y no hay paz comparable con su perenne paz!
Amado Nervo