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Conozco ( 3 )

Conozco. Encuentra docenas de conozco con fotos para copiar y compartir.


Inquietud

¿Dónde se guarda la estrella mía,
mi cristal de amor?

La noche me niega su torso de aurora
y vamos extrañas, desprendidas,
sin coincidir jamás.

¿Para qué, si a nada le soy amor
soy yo amor en lo desconocido mío?

Y esta ternura que ciñe mis hombros,
que entolda el oro de mi corazón,
¿Para qué, si estoy buscando el agua
y solo conozco el eco de la fuente?


Carmen Conde


La Vuelta

Soy tu hijo. Tu hermano. No es posible.
Sin duda que hay aquí un mal entendido
¿Soy el que quise ser o éste que he sido?
La casa es familiar ciclo increíble.

-Yo soy tu hijo, madre; soy el niño
de ayer.
-Hermana, soy tu hermano.
Aún me cogéis -recuerdo- de la mano
por el jardín remoto del cariño.

No me reconocéis, madre y hermana:
soy el sombrío y trágico viajero
y voy al lado ciego de ese muro.

-No te conozco; cierra la ventana.
-No sé quién eres; mueres porque muero.
(Porque moristeis, todo ya es oscuro).


Leopoldo de Luis




Aunque Se rían de Los Versos Que Te Escribo...

Aunque se rían de los versos que te escribo
y que dejo escondidos en las mantas del catre,
pedaleo.
Y Vegadeo es de lejos un fósforo encendido,
llevo alas en las ruedas,
voy en llanta,
pero conozco el paisaje y tengo alma
porque hago amistades
con recuas de perros de varios pueblos
y diversa índole.

Me ladran porque te amo.
Se arrojan a mis zapatos como fanecas salvajes.

De "Ballenas" 1988


Luisa Castro


Revelación

Lo supe de repente:
hay otro.
Y desde entonces duermo solo a medias
y ya casi no como.

No es posible vivir
con ese rostro
que es el mío verdadero
y que aún no conozco.


Rosario Castellanos


Palabras Lejanas

A Alejandro Pluma

Soy la antigua amiga de la correspondencia lejana
de cartas delirantes enredadas en los sueños.
Apenas te acordarás de las secretas frases
entre sedas vaporosas que vestía la curva de mi vientre.
y hoy cuando el sol ha bajado hasta los árboles
y los pájaros circundan la autopista
te imagino tan duro y tan flexible
entre los fragmentos dejados por mis dedos.
Yo, la que te enviaba las estrellas entrega inmediata
y con fugitivo aire de poeta
merodeaba el correo y al librero de cabellos blancos.
Yo, a quien después de tanto conoces poco,
he dejado mi vocación de errante,
mis secretas corrientes de aire
por donde escapaba mi soledad.
Te conozco allí donde pareces más lejano
en la transparencia de tu sonido.
Pobre poeta malhumorado de largas barbas,
¿vendrán tus palabras a dispersar mi angustia?
Yo, la que intentaba en tediosas noches
dejar mi rostro en fugaces cuerpos
para quedarme sola con el agua y los espejos,
me miro ahora en la palabra de tu carta más amada,
y esta vez no habrá intentos de suicidios
a cambio de tu fruta indescifrable.
Solo destellos de silencio.


Orietta Lozano


Conozco a alguien que tiene más espíritu que Napoleón, que Voltaire, que todos los ministros presentes y futuros: la opinión pública.


Charles-Maurice Talleyrand Périgord




Amor, sí me fuí, pero no te deje para hacerte daño,
te llevé siempre conmigo, y siempre estuviste a mi lado,
Amor, no entiendí tu forma de amar, desde lejos, siempre estuviste tan cerca y tan lejos, no se como retroceder el tiempo, y arreglar algunos mal entendidos por falta de hablar,
Amor, te extraño mucho y me has dolido tanto, pero eso solo lo sabe mi almohada y mi soledad,
Amor, siempre te veo y me haces compañia, porque tú siempre estás en mis noches y mis días, pero tu no lo sabes, y no se si te importará.
Amor, no conozco abrazo diferente que no sea el que tu me des siempre en mis sueños florecientes,
Amor, dime la forma de solucionar todo, pero este miedo de que yo no exista para tí no me deja seguir,
Amor, como llegar a tí,
Amor, como hablarte sin llorar y sonreir,
Amor, como explicarte que nunca te he dejado,
Amor, como saber si tu hoy me recordarás
Amor, como enfrentar que ahora soy un desconocido mas para tí,
Amor, como mirarte y acariciarte y volver a sonreir.
Amor, como quisiera ya tenerte aquí,
Amor, quiero atreverme, pero nunca me has buscado o acercado a mí,
Amor, que tontería escribir al viento, cuando hay tantas cosas que te quisiera decir.
Amor, nunca, nunca, te olvidé ni deje de sentir este inmenso amor por tí.


cisne


No creo en la llamada de la sangre. La sangre no hace hermanos ni hijos. Conozco hermanos de sangre y padres e hijos que no se hablan o no se respetan.


Jaime de Mora y Aragón


Admiro todo tu ser, tu forma de pensar y se que no eres perfeto, conozco tus virtudes y defectos, te amo así tal cual, cuando miro tus hermosos ojos, suspiro y quisiera ser la dueña de tu corazón, de tus noches de deseos y fantasias, una probadita me diste y ahora vivo con el antojo, deseando tus besos, abrazos y tus palabras.


Lorena Donaji




Estoy Aquí Sentada...

Estoy aquí, sentada, con todas mis palabras
como con una cesta de fruta verde, intactas.

Los fragmentos
de mil dioses antiguos derribados
se buscan por mi sangre, se aprisionan, queriendo
recomponer su estatua.
De las bocas destruidas
quiere subir hasta mi boca un canto,
un olor de resinas quemadas, algún gesto
de misteriosa roca trabajada.
Pero soy el olvido, la traición,
el caracol que no guardó del mar
ni el eco de la más pequeña ola.
Y no miro los templos sumergidos;
sólo miro los árboles que encima de las ruinas
mueven su vasta sombra, muerden con dientes ácidos
el viento cuando pasa.
Y los signos se cierran bajo mis ojos como
la flor bajo los dedos torpísimos de un ciego.
Pero yo sé: detrás
de mi cuerpo otro cuerpo se agazapa,
y alrededor de mí muchas respiraciones
cruzan furtivamente
como los animales nocturnos en la selva.
Yo sé, en algún lugar,
lo mismo
que en el desierto cactus,
un constelado corazón de espinas
está aguardando un hombre como el cactus la lluvia.
Pero yo no conozco más que ciertas palabras
en el idioma o lápida
bajo el que sepultaron vivo a mi antepasado.


Rosario Castellanos


al conocerte, mi corazon reboloteaba como papalotas dentro de mis cavidades. eras mi numero uno, increible...a mi lado, inseparable, esto les pasa a muchos, y ahora me tocó a mi. pero alguien del otro lado, talvz del otro lado te lavo el cerebro y te fuistes. hoy somos extraños sin razon aparente, yo no hice nada malo mas que confiar en tus manos mi corazon, pero le descuidastes por mucho tiempo y lo tomé devuelta al borde de morir. quien te crees que eres? hoy no te puedo dar ni un saludo de mano porque esto esta muy frio. vete. no te conozco ni quiero conocerte mas asi. reconociendo que todo fue solo una obra de teatro. excelente personaje...el de villano..abajo el telon!!!


own i


Para comprender, me destruí. Comprender es olvidarse de amar. No conozco nada más al mismo tiempo falso y significativo que aquel dicho de Leonardo da Vinci de que no se puede amar u odiar una cosa sino después de haberla comprendido.


Fernando Pessoa


Visita

No estoy.
No la conozco.
No quiero conocerla.
Me repugna lo hueco,
la afición al misterio,
el culto a la ceniza,
a cuanto se disgrega.
Jamás he mantenido contacto con lo inerte.
Si de algo he renegado es de la indiferencia.
No aspiro a transmutarme,
ni me tienta el reposo.
Todavía me intrigan el absurdo, la gracia.
No estoy para lo inmóvil,
para lo inhabitado.

Cuando venga a buscarme,
díganle:
"se ha mudado".


Oliverio Girondo




Conozco los secretos del alma del paisaje, y sé lo que entristece, y sé lo que consuela, y el viento traicionero y el bárbaro oleaje conocen la invencible firmeza de mi vela.


Francisco Villaespesa


Hoja Al Aire, Indefensa...

Hoja al aire, indefensa, detenida
apenas, única en el árbol
enrojecido y respirante; ojo
sobresaltado, abierto, lúcido:
en el temor mi corazón. Asfixia,
duermevela con fantasma inminente.
Deshabitado el traje suspendido,
suena con un temblor de piel que busca
su bestia desollada, su materia
de bestia próxima pudriéndose.
Oh, muerta, muerta, muerta.

Ineficaz del todo fue la sábana
subida hasta la nuca;
fija por nuca y manos, escudando
de la noche agresora y sus viscosos
jirones; y sucumben la garganta,
y los flancos y el vientre
sin armazón de hueso que los guarde.

Y qué de lo que pasa
clandestino, mimético sombrío;
lo invisible y con ruido, comprensible
por el tacto pasivo; la caída
al hielo tenue que dimana
del espinazo, y a la lengua
que tiembla y enmudece,
y al paladar de bóveda eclesiástica.

Ahora bien. ¿Soy este que se calla?
¿Soy el que gime lejos? ¿El que viene
soy, el que va saliendo, el que se queda?
¿Para qué servirá, de qué me vale
querer, sabiendo lo que sigue?
Si la sonda desciende, naufragada
sin esperanza y sin regreso,
al fondo inalcanzable que le huye.

Yo conozco las caras que se parten
en dos y en otras dos y en otras;
elementales casi formas
disfrazadas de ausentes enemigos.

Y en torno crujen las marchitas
maderas lamentables,
como un otoño cruje, como crujen
barcos difuntos, abrasados troncos,
alas crispadas y caducas
de domingos de ramos polvorientos.


Rubén Bonifaz Nuño


Como Antístenes, filósofo cínico, tuviese la capa rota y la anduviese enseñando a todos, díjole Sócrates: Por la hendidura de tu capa conozco tu vanidad. Quiso dar a entender que peor era aquella presunción que tenía enseñando su capa rota, que si trajera una vestidura más rica.


Erasmo De Rotterdam


No conozco ninguna buena obra de arte que no tenga misterio.


Henry Moore


El cine es una investigación sobre nuestras vidas. Sobre lo que somos. Sobre nuestras responsabilidades -si las hay-. Sobre lo que estamos buscando. ¿por que querría yo hacer una película sobre algo que ya conozco y entiendo?.


John Cassavetes


Juan Gert

Mi sueño se hizo dulcemente cal.
La bóveda perfecta de tu cráneo
enclavada en la mariposa de mis huesos
es frágil tulipán
coronando las alas abiertas de la pelvis.

Sacas el molde al mundo
en mi cintura breve;
recogido y devoto como un rezo,
hilas con mi sangre el Universo,
hijo mío.
Creces dentro de mí
como en vaso ritual.

Por ti conozco
la humildad de ser la tierra fértil,
por ti el orgullo del vital milagro;
por ti soy urna bíblica,
por ti soy comunión y penitencia.

Por ti la muerte en su medalla acuna
perfil de piedra en querubín de niebla.
El vivo tulipán de tu cabeza
saca de nuevo el molde al Universo.


Yolanda Bedregal


Amo tanto a España, porque la conozco.


Gregorio Marañón


Desde El Alma

Vals

Hermano cuerpo estás cansado
desde el cerebro a la misericordia
del paladar al valle del deseo
cuando me dices/ alma ayúdame
siento que me conmuevo hasta el agobio
que el mismísimo aire es vulnerable

hermano cuerpo has trabajado
a músculo y a estómago y a nervios
a riñones y a bronquios y a diafragma

cuando me dices/ alma ayúdame
sé que estás condenado/ eres materia
y la materia tiende a desfibrarse

hermano cuerpo te conozco
fui huésped y anfitrión de tus dolores
modesta rampa de tu sxo ávido

cuando me pides/ alma ayúdame
siento que el frío me envilece
que se me van la magia y la dulzura

hermano cuerpo eres fugaz
coyuntural efímero instantáneo
tras un jadeo acabarás inmóvil

y yo que normalmente soy la vida
me quedaré abrazada a tus huesitos
incapaz de ser alma sin tus vísceras


Mario Benedetti


Si no conozco una cosa, la investigaré.


Louis Pasteur


Estimo mucho a las personas que conozco. De aquí que no trate de conocer a nadie.


Pitigrilli


Lo poco que conozco del matrimonio procede de lo mucho que sé del divorcio.


David Brown


Anda Un Amigo

Anda un amigo en medio de la noche.
Han cerrado los bares. Las persianas
de acero bajaron con estrépito. Los gatos
deslizan apetitos. Anda la luna
por ahí, velada. Pasan coches y luces;
sobreviene, después, un silencio
que mueve la plantita en la cornisa;
silencio que hace un chambelán
de un grillo -del canto de ese grillo-.
Anda un amigo en medio de la noche.
No lo conozco. Y él no me conoce.
Andamos cerca o lejos, nos cruzamos
-acaso- en una calle. Compartimos
un ómnibus, un cine, un banco de una plaza.
Anda un amigo y ando yo que soy amigo
de ese hombre. En órbitas distintas
-nunca ajenas-. Pero vamos a hallarnos.

En medio de la noche o con la aurora
de rosados dedos, vamos a hallarnos.
Y tenemos que estar preparados a ese encuentro.
Por ahora, susurra el viento oscuro,
graznan letreros viejos y el grillo mete lima.
Ya no pasan los coches. Pasan restos de diarios
y un cartel liberado zapateando en el polvo.
Estoy seguro. Nos encontraremos.

De "Murciélagos" 1981


Washington Benavides


Como Octubre Disponga

No más refugio
que la faz de mis brazos
si nos entra el otoño
desgajando
lo que al viento apetece
en su alfombra de bosque
y cuerpo a tIerra.

Mírame.
Otoño aún no somos en años
pero cuando él se nos acerca
hay que extender la batalla real
de los buenos amantes
en el recuento las hojas
de infinitos sabores ocres.

Mírame, y
hagamos la abundancia
a ras de nuestro suelo.
La variedad de un amor
es sepultar la inteligencia
entre los cuerpos.
No conozco otro refugio
ni mejor temperatura.

Solo que estoy adivinando
cómo será el Otoño
nuestras vidas
de verdad calzadas en su estación
y otra vez
el nacimiento de amarse
la pasión inédita
que alumbrará mis versos.

Debo callar.
Ahora vamonos
a lo único
que del lento mudar
es ocre, ocres
como la alfombra disponga
tú y yo
obligando a trabajar
un viento revelación
lo más humano
para empujar las lumbres
bien cernida la noche.

De: Pasión inédita


Pureza Canelo




Conjuro

Los guerreros más augustos ya son sombras
bajo la sombra del viejo encinar.
Cárdena crepita la noche.
Latigazos, ladridos, remotos rayos.
Chirrían las cornejas en el pozo ciego.
Guiarán al manso corcel de hielo.
La tormenta. El sol verde de aguas negras.
No me conozco. Es un lago el pecho muerto.
Bajel de oro, cadalso prieto del día.
Mi cuerpo, como la cuerda de un arco.
Ya labora el invierno, cuando rasga
las cortinas, teatro del mar.
Se enmascara tras las nieblas densas.
Arquero negro, detén tu paso.
Petrifícase el arquero de azabache.
La saeta conoce el derrotero.
Palmo a palmo mensuramos la fosa.
Fango y hojas nos daban la yacija.
Arde y arde el guante de oro del barquero.
La laguna, de nieve y azafrán.
No pensabas que fuera así de blanca.
Ahora vienen las huestes. Cielo allá,
las huestes vienen. Verdor de la encina
en los ojos vacíos, de cal llenos.


Pere Gimferrer


Un hombre como yo necesita u caballo de guerra, una pasión que le consuma, un talento. yo eh encontrado mi talento, y es el servicio, no conozco limites, mi talento es la psicologia


sigmund freud


Aveces me decepcionó de mi, y me esperanzo en ti, ¿Dependencia? talvez... poca fé en mi? talvez, pero te conozco, y sé cuando mas te necesite estarás aqui... por cierto ¿Dependencia? NO, claro que no, es absoluta confianza en ti, Te amo


Azudinner


Poco es el tiempo que llevo conociendote
pocas son las cosas que conozco de ti
es lo poco que crece entre mas tiempo
ese tiempo imparable que es mas corto cada vez
lastima que a la vez no haya oportunidad!!!!!


Jonathan Roger Calva C


A Una Magnolia

Acércame los pétalos de fragante magnolia
con que, en horas de sueño,
el Amor poderoso ilumina mi sombra.
En la sien, en la palma, entre ébanos de noche
tus pétalos reposan.
No los turba el ardiente llamado de mi pulso,
ni del santo madero la grave y sorda música.
Hasta que alguna vez los clavo con mis ojos
en una cruz severa,
y una herida sin sangre les descubro.
-Es una saeta oculta
que atraviesa en verano el claroscuro
del agua Pura y quieta en los lagos nocturnos.-

Gime el ser en silencio. Con mi fuego dialoga
tu distante fragancia, tu impasible blancura.
De lejos nos contestan, en el aire nocturno
de jardines y selvas, las cítaras insomnes.
Me acerco a ti; te busco
la herida misteriosa que solo yo conozco.

Todos mis huesos cantan despiertos, dolorosos,
el canto en que se queman,
sin quemarte, en la sombra.

Tú acércate; amortigua esta sedienta lumbre.
Acércame en el fuego tus frescos, apacibles
pétalos de magnolia.

acércate, magnolia!


Esther de Cáceres


Como la mano que posa sobre una sábana de seda mi memoria recorre los pliegues y hendiduras del recuerdo, en busca de señales de imágenes que habían surgir las palabras la figura en mi memoria tiene un rostro que me hace ver la satisfacción que hay en su interior y en cuanto continuo explorando es una mujer recostada, desnuda sobre un cojín, aprieta el cojín como si tuviera frío y no muestra sus senos parece estar muerta más disfruta de un profundo sueño hicimos el amor un par de noches nos perdimos en el placer del descubrimiento pero sabíamos……. Ella sabía que nuestra relación no tenia mañana teníamos amaneceres pero no futuro la mutua exploración de nuestros cuerpos alimento el fuego que calentaba una olla de presión que siempre estabas a punto de estallar, un día creo estar seguro que ella dijo que esto no iba a funcionar y yo moví afirmativamente la cabeza….. ….pocos días después salió de mi vida dejando una profunda herida y yo solo pensaré “TATUASTE CAMINOS EN MI PIEL CON TUS MANOS” por eso digo que está muerta murió adentro de mí……. Aunque siga caminando entre los vivos nos hemos llegado a encontrar y la veo como alguien a quien no conozco……….como se mira uno su propia mano y no sabe porque corre sangre por su interior……….


pensador


Cuando Todo Suceda

Digo: comience el sendero a serpear
delante de la casa. Vuelva el día
vivido a transportarme
lejano entre los chopos.

Allí te esperaré.

Me anunciará tu paso el breve salto
de un pájaro en ese instante fresco y huidizo
que determina el vuelo,
y la hierba otra vez como una orilla
cederá poco a poco a tu presencia.

Te volveré a mirar, a sonreír
desde el borde del agua.
Sé lo que me dirás. Conozco el soplo
de tus labios mojados:
tardabas en llegar. Y luego un beso
repetido en el río.

De nuevo en pie siguiendo tu figura
regresaré a la casa lentamente
cuando todo suceda.


José Agustín Goytisolo


Te amo como amo al amor, no conozco otra manera más, que amarte.


Carlos Casanti


TENGO ALMA DE POETA
A veces me siento mal, no me conozco,
Veo mi pasado y me parece como un sueño
Yo no comprendo a que planeta pertenezco
Me siento grande y tal vez…soy muy pequeño

Yo soy extraño, tengo el alma de poeta
De cigarrillos encendidos en la niebla
No tengo tranquilidad, Todo me inquieta
Soy como un pato caminando por la selva

Con un andar gracioso y elegante
Voy por la vida en realidad sin esperanza
Vivir de sueños es perfecto y desgastante
Es dar al mundo cada día nula confianza

No puedo pensar en nada bueno
Un toque mágico desea mi corazón
Quiero llegar a un lugar sereno
Y conocer de mi existencia la razón.


NORA ELIZA SANCHEZ JACQUEZ


Sentirte cerca.

Amor, hoy te siento cerca,
de tenerte, de encontrarte, de volar contigo, de escuchar solo nuestros latidos, música que alegraría a nuestros sentidos.

No tendré miedo, no tendrás miedo y no dejarás que me vaya ni que me sienta más sola.

Amor, todo mejorará y así será nuestra verdadera felicidad, tu no me conoces yo no te conozco, pero nuestras almas gemelas se funden y se mezclan y hacen de nuestro sentimiento un solo derroche, no hace falta nada, solo nuestras miradas que nos transportan y nos lleven al más allá.

Así, sentirte tan cerca, tan cerca y no creerlo que después de tanto necesitábamos quizás alejarnos, para al encontrarnos no dejarnos y protegernos y crecer juntos en nuestro sueño carnal hasta la eternidad.


cisne


Où Picoraient Des Chouettes

Cuando desapareces con el día
quisiera visitar la luna negra.
Dicen que allí no hay fábricas de faros,
que no se posa nunca la lechuza
donde nadie plantó un árbol escrito;
que allí nada se arraiga a tu recuerdo.

La noche es el tendero del recuerdo
y vende los cadáveres del día.
Sé que los astros son el resto escrito,
lenguaje morse en una mancha negra,
que ya solo responde la lechuza
o el eco voluntario de los faros.

Y a veces te pareces a los faros
cuando le compro al velo tu recuerdo;
y a veces eres pluma de lechuza
que trae seca la luz de último día.
Pero cierro los ojos y eres negra:
eres la tinta endeble de un escrito.

Yo te conozco bien porque te he escrito
incluso donde no llegan los faros.
Me supe camuflar, marea negra,
a la velocidad de algún recuerdo
o travestirme luego de ancho día
con la ágil crueldad de la lechuza.

Aunque tú eres la auténtica lechuza
y el eterno reencuentro estaba escrito
desde el primer crepúsculo del día,
desde el primer engaño de los faros:
que en mi ventana dejes en recuerdo
tu sola discordante pluma negra.

También tu inverosímil sombra es negra
y me la das, incólume lechuza,
ciñéndola a esta noche de recuerdo
tan blanco como nunca se hubo escrito.
Y luces para mí tu nuevo día.

Deja que cribe el día en mi alma negra
-de faros picoteos, de lechuza-,
deja que viva escrito en tu recuerdo.


Esther Giménez


Es verdad dolor yo te conozco... tu eres nostalgia de la vida buena y soledad del corazón sombrío, de barco sin naufragio y sin estrellas.


Nathy.A


Todo da vueltas y vueltas sin parar,todo es tan borroso, todo se vuelve sin color. Es como estar en un mundo donde no conoces a nadie y todos te miran como una persona extraña.
Pero entonces ahí lo vez, vez a esa persona la única que te conoce,la única que sabe de ti, la única que te ha visto, quieres correr hacia el, pero sabes que no puedes, por el simple hecho que al verlo a los ojos, ellos te dicen "no te conozco mas".
Quieres suplicar por que te saquen de este mundo extraño, absurdo, estupido, incoherente y sin vida.
pero sabes que solo esta este mundo, el único en el que siempre has estado.


Laviiana


Un día como tantos desperté
sintiendo la necesidad,
de encontrar esa mirada profunda
que le diera cordura a cada hora,
para no enloquecer extrañándote.

Y al encontrarte, quiero mirarte
y tratar de entender
¿por que? sin encontrarte amor,
En sueños sigo buscando
La mirada de aquel
Que me haga desfallecer.

Al conocerte quiero leerte
como un libro que tal vez no entenderé
y sin embargo me arriesgo a leer...

Dame la oportunidad de pintar
el retrato de tus labios
ya con la seguridad de que hay algo mas.

Ten por seguro que encontraras
mas de mi cantar,
hasta que de mis sueños
salgas a la realidad
y así poder entender la razón
de dedicarte cada canción
si aun no conozco tu corazón.

A partir de hoy, me gusta,
la simpleza de lo nuestro,
me encanta,
la tranquilidad de lo que siento,
y la seguridad de tus besos...
aun que sea solo en sueños.


Enaiiad Lebasí