Creyente sagan ( 4 )
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Cuando la gravedad es lo bastante elevada no deja escapar nada, ni siquiera la luz. Un lugar así recibe el nombre de agujero negro. Es una especie de gato cósmico de Chesire, enigmáticamente indiferente a lo que le rodea.
Carl Sagan
Los científicos siempre son castigados con la idea de que se gastaron 27 mil millones de dólares en los programas Apolo, y se preguntaban:" ¿Qué más queréis? "Nosotros no lo gastamos. Se hizo por razones políticas"... El programa Apolo fue una respuesta al fracaso de Bahía de Cochinos y al exitoso vuelo orbital de Yuri Gagarin. El objetivo del presidente Kennedy no era descubrir el origen de la luna a finales de la década; sino que consistía en poner un hombre en la Luna y traerlo de vuelta, y lo hicimos
Carl Sagan
Por regla general, las sociedades humanas no son innovadoras, sino más bien jerárquicas y ritualistas. Cualquier sugerencia de cambio se acoge con recelo, ya que implica la incómoda transformación futura del ritual y la jerarquía imperantes, es decir, la sustitución de una serie de rituales por otra o, tal vez, por una sociedad menos estructurada y regida por un número inferior de rituales. Sin embargo, llega un momento en que es preciso que las sociedades cambien. «Los dogmas de un pasado tranquilo son insuficientes para un presente tumultuoso», aseveró Abraham Lincoln.
Carl Sagan
En lugar de juzgar a la gente por sus méritos y defectos individuales, nos concentramos en un par de detalles de información sobre ellos y a continuación los colocamos en una serie de casillas previamente establecidas.
Con eso nos ahorramos el esfuerzo de pensar, al precio en muchos casos de cometer una profunda injusticia.
Con eso nos ahorramos el esfuerzo de pensar, al precio en muchos casos de cometer una profunda injusticia.
Carl Sagan
Nuestra intuición de Dios es una prueba insuficiente de su existencia. Hay otra más sólida: nuestra capacidad de dudar de él.
Arthur Schnitzler
Si el Padre Eterno existe, a fin de cuentas, el ve que no me comporto peor que si fuera un creyente.
George Brassens
No creo en dios y no me hace ninguna falta. Por lo menos estoy a salvo de ser intolerante. Los ateos somos las personas más tolerantes del mundo. Un creyente fácilmente pasa a la intolerancia. En ningún momento de la historia, en ningún lugar del planeta, las religiones han servido para que los seres humanos se acerquen unos a los otros. Por el contrario, solo han servido para separar, para quemar, para torturar. No creo en dios, no lo necesito y además soy buena persona.
José Saramago
Soy gran creyente en la suerte, y he descubierto que mientras más duro trabajo, más suerte tengo.
Stephen Leacock
MARIPOSAS
Ora blancas cual copos de nieve,
ora negras, azules o rojas,
en miríadas esmaltan el aire
y en los pétalos frescos retozan.
Leves saltan del cáliz abierto,
como prófugas almas de rosas
y con gracia gentil se columpian
en sus verdes hamacas de hojas.
Una chispa de luz les da vida
y una gota al caer las ahoga;
aparecen al claro del día,
y ya muertas las halla la sombra.
¿Quién conoce sus nidos ocultos?
¿En qué sitio de noche reposan?
¡Las coquetas no tienen morada!...
¡Las volubles no tienen alcoba!...
Nacen, aman, y brillan y mueren,
En el aire, al morir se transforman,
y se van sin dejarnos su huella,
cual de tenue llovizna las gotas.
Tal vez unas en flores se truecan,
y llamadas al cielo las otras,
con millones de alitas compactas
el arco iris espléndido forman.
Vagabundas, ¿en dónde está el nido?
Sulanita, ¿qué harén te aprisiona?
¿A qué amante prefieres, coqueta?
¿En qué tumbas dormís, mariposas?
¡Así vuelan y pasan y expiran
las quimeras de amor y de gloria,
esas alas brillantesdel alma,
ora blancas, azules o rojas!
¿Quién conoce en qué sitio os perdisteis,
ilusiones que sois mariposas?
¡Cuán ligero voló vuestro enjambre
al caer en el alma la sombra!
Tú, la blanca, ¿por qué ya no vienes?
¿No eres fresco azahar de mi novia?
te formé con un grumo del cirio
que de niño llevé a la parroquia;
eres casta, creyente, sencilla,
y al posarte temblando en mi boca
murmurabas, heraldo de goces,
"¡Ya está cerca tu noche de bodas!"
¡Ya no viene la blanca la buena!
¡Ya no viene tampoco la roja,
la que en sangre teñí, beso vivo,
al morder unos labios de rosa!
Ni la azul que me dijo: ¡poeta!
¡Ni la de oro, promesa de gloria!
¡Es de noche... ya no hay mariposas!
¡Ha caído la tarde en el alma!
Encended ese cirio amarillo...
¡Las que tienen las alas muy negras
Ya vendrán en tumulto las otras,
y se acercan en fúnebre ronda!
¡Compañeras, la pieza está sola!
Si por mi alma os habéis enlutado,
¡Venid pronto, venid mariposas!
Ora blancas cual copos de nieve,
ora negras, azules o rojas,
en miríadas esmaltan el aire
y en los pétalos frescos retozan.
Leves saltan del cáliz abierto,
como prófugas almas de rosas
y con gracia gentil se columpian
en sus verdes hamacas de hojas.
Una chispa de luz les da vida
y una gota al caer las ahoga;
aparecen al claro del día,
y ya muertas las halla la sombra.
¿Quién conoce sus nidos ocultos?
¿En qué sitio de noche reposan?
¡Las coquetas no tienen morada!...
¡Las volubles no tienen alcoba!...
Nacen, aman, y brillan y mueren,
En el aire, al morir se transforman,
y se van sin dejarnos su huella,
cual de tenue llovizna las gotas.
Tal vez unas en flores se truecan,
y llamadas al cielo las otras,
con millones de alitas compactas
el arco iris espléndido forman.
Vagabundas, ¿en dónde está el nido?
Sulanita, ¿qué harén te aprisiona?
¿A qué amante prefieres, coqueta?
¿En qué tumbas dormís, mariposas?
¡Así vuelan y pasan y expiran
las quimeras de amor y de gloria,
esas alas brillantesdel alma,
ora blancas, azules o rojas!
¿Quién conoce en qué sitio os perdisteis,
ilusiones que sois mariposas?
¡Cuán ligero voló vuestro enjambre
al caer en el alma la sombra!
Tú, la blanca, ¿por qué ya no vienes?
¿No eres fresco azahar de mi novia?
te formé con un grumo del cirio
que de niño llevé a la parroquia;
eres casta, creyente, sencilla,
y al posarte temblando en mi boca
murmurabas, heraldo de goces,
"¡Ya está cerca tu noche de bodas!"
¡Ya no viene la blanca la buena!
¡Ya no viene tampoco la roja,
la que en sangre teñí, beso vivo,
al morder unos labios de rosa!
Ni la azul que me dijo: ¡poeta!
¡Ni la de oro, promesa de gloria!
¡Es de noche... ya no hay mariposas!
¡Ha caído la tarde en el alma!
Encended ese cirio amarillo...
¡Las que tienen las alas muy negras
Ya vendrán en tumulto las otras,
y se acercan en fúnebre ronda!
¡Compañeras, la pieza está sola!
Si por mi alma os habéis enlutado,
¡Venid pronto, venid mariposas!
Muscat
Amor quimérico
rezo de tu creyente,
con cantos y músicas
seductoras
estoy en tí de atardecida,
hallándote,
no he demorado demasiado
...tenerte he ansiado
rezo de tu creyente,
con cantos y músicas
seductoras
estoy en tí de atardecida,
hallándote,
no he demorado demasiado
...tenerte he ansiado
Miguel Visurraga Sosa
Estoy muriendo, no entendés?
Ella lo miro, cómo no comprendiendo a que venia el comentario.
Si, en 45 minutos voy a morir.
Más o menos, tampoco puedo darte precisiones. Dijo el.
Pero si puedo decirte, que es desgarrador.
Ya se, no me digas nada.
Usar la palabra desgarrador en este momento a mí también me suena demasiado melodramática.
Pero no se me ocurre otra, para expresar lo que siento.
Además de temor, por supuesto.
Parada desde un ángulo, observándolo sin comprender nada, ella lo observa.
Lo estudia, como a un animal extraño al que no se comprende y se trata de descifrar.
Por supuesto que tengo miedo. Aterrado estoy ante la sensación de vacío.
Porque lamentablemente, no creo en nada. Ni en la reencarnación, ni en un cielo idílico y un paraíso salvador, como refugio de almas perdidas, ni en nada de eso.
Nunca fui creyente.
Creo que ni siquiera al atravesar los más duros momentos, me aferre a alguna de esas posibilidades.
Quizás en esas situaciones criticas, durante enfermedades de seres queridos y al dudar de su supervivencia, intenté entregarme en manos de “algo”, por ellos.
Pero la verdad, es que ni yo mismo lo creía.
Supongo que era un buen método para dejar que el tiempo transcurriera, hasta que me diesen el próximo parte medico.
En fin. La cuestión es, que como no creo en ninguna salvación,
Ni siquiera en que el alma me sobreviva.
Tengo mucho miedo.
Hasta podría contarte y describir, como el miedo me invade en estos momentos.
Imaginá un montón de puntos verdes.
Pero de un verde horrible, como de un fluor oscuro y tenebroso.
Y esas manchas, que son pequeñas.
Se van uniendo a otras y van formando un solo y único lamparón, que avanza desde mis pies hacia mi cabeza.
Los dos están solos, en ese ambiente silencioso y blanco.
Casi pulcro e inmaculado.
El, sentado en una de esas sillas de metal y cuerina, de un estilo tan impersonal, que suelen habitar las recepciones de hospitales, consultorios y oficinas.
Ella continúa ahí parada en el rincón.
Justo en la unión de las dos paredes blancas.
Algo recostada sobre ellas.
No atina a reaccionar ante esta declaración que la sorprendió.
Realmente la dejo perpleja, si...perpleja.
Otra vez una palabra demasiado rebuscada para describir una situación, simple y dolorosa.
La muerte como algo voraz.
Deseosa de comerse los trazos de vida que recuerda.
Se le acerca sigilosamente y aunque se hace el distraído, no puede evadirla.
Como alguna vez le contara ese viejo europeo, hablando español en su media lengua.
Avanza como el elefante, le decía.
Y ante su mirada de interés continuaba.
Si, como el elefante, lentamente, pero siempre hacia adelante.
Una imagen terrible, agobiante.
La sensación de que por su cerebro desfilan ,una tras otra, las mas variadas y caprichosas fotos de su vida, a una velocidad vertiginosa, tratando de hacerle revivir momentos, a la velocidad de la luz.
Como si eso sirviera de algo.
Como si eso le permitiera disfrutarlos nuevamente.
Nada tan alejado de ello.
La inmensa tristeza que lo invade y agobia, no le permite regodearse en viejos y amarillentos recuerdos.
Es más.
No son los más felices, esos que florecen, por así decirlo en este momento.
Ella desaparece de esa vieja escenografia.
Y no es que se haya ido.
Simplemente se esfumo.
Es parte de la macabra película que el esta viviendo.
Parte del reparto que imaginó para su escena.
Quizás para no sentirse tan solo en este momento crucial y doloroso.
No se porque será, que uno supone que al atravesar circunstancias difíciles, estando acompañado nos resultara mas sencillo.
Aunque cuando llegamos a enfrentarnos a ellos.
Tomamos conciencia, rápidamente que, no tenemos deseos de compartirlos con nadie.
Que ni siquiera deseamos que nos digan una palabra y mucho menos darnos charla consoladora.
¿Quien sabe que será de el?
Quien sabe donde habitara su ser, ya, ahora, en este mismo momento.
Tampoco muchos se lo preguntan.
Sopla una pequeña brisa.......y el mundo continúa....
Ella lo miro, cómo no comprendiendo a que venia el comentario.
Si, en 45 minutos voy a morir.
Más o menos, tampoco puedo darte precisiones. Dijo el.
Pero si puedo decirte, que es desgarrador.
Ya se, no me digas nada.
Usar la palabra desgarrador en este momento a mí también me suena demasiado melodramática.
Pero no se me ocurre otra, para expresar lo que siento.
Además de temor, por supuesto.
Parada desde un ángulo, observándolo sin comprender nada, ella lo observa.
Lo estudia, como a un animal extraño al que no se comprende y se trata de descifrar.
Por supuesto que tengo miedo. Aterrado estoy ante la sensación de vacío.
Porque lamentablemente, no creo en nada. Ni en la reencarnación, ni en un cielo idílico y un paraíso salvador, como refugio de almas perdidas, ni en nada de eso.
Nunca fui creyente.
Creo que ni siquiera al atravesar los más duros momentos, me aferre a alguna de esas posibilidades.
Quizás en esas situaciones criticas, durante enfermedades de seres queridos y al dudar de su supervivencia, intenté entregarme en manos de “algo”, por ellos.
Pero la verdad, es que ni yo mismo lo creía.
Supongo que era un buen método para dejar que el tiempo transcurriera, hasta que me diesen el próximo parte medico.
En fin. La cuestión es, que como no creo en ninguna salvación,
Ni siquiera en que el alma me sobreviva.
Tengo mucho miedo.
Hasta podría contarte y describir, como el miedo me invade en estos momentos.
Imaginá un montón de puntos verdes.
Pero de un verde horrible, como de un fluor oscuro y tenebroso.
Y esas manchas, que son pequeñas.
Se van uniendo a otras y van formando un solo y único lamparón, que avanza desde mis pies hacia mi cabeza.
Los dos están solos, en ese ambiente silencioso y blanco.
Casi pulcro e inmaculado.
El, sentado en una de esas sillas de metal y cuerina, de un estilo tan impersonal, que suelen habitar las recepciones de hospitales, consultorios y oficinas.
Ella continúa ahí parada en el rincón.
Justo en la unión de las dos paredes blancas.
Algo recostada sobre ellas.
No atina a reaccionar ante esta declaración que la sorprendió.
Realmente la dejo perpleja, si...perpleja.
Otra vez una palabra demasiado rebuscada para describir una situación, simple y dolorosa.
La muerte como algo voraz.
Deseosa de comerse los trazos de vida que recuerda.
Se le acerca sigilosamente y aunque se hace el distraído, no puede evadirla.
Como alguna vez le contara ese viejo europeo, hablando español en su media lengua.
Avanza como el elefante, le decía.
Y ante su mirada de interés continuaba.
Si, como el elefante, lentamente, pero siempre hacia adelante.
Una imagen terrible, agobiante.
La sensación de que por su cerebro desfilan ,una tras otra, las mas variadas y caprichosas fotos de su vida, a una velocidad vertiginosa, tratando de hacerle revivir momentos, a la velocidad de la luz.
Como si eso sirviera de algo.
Como si eso le permitiera disfrutarlos nuevamente.
Nada tan alejado de ello.
La inmensa tristeza que lo invade y agobia, no le permite regodearse en viejos y amarillentos recuerdos.
Es más.
No son los más felices, esos que florecen, por así decirlo en este momento.
Ella desaparece de esa vieja escenografia.
Y no es que se haya ido.
Simplemente se esfumo.
Es parte de la macabra película que el esta viviendo.
Parte del reparto que imaginó para su escena.
Quizás para no sentirse tan solo en este momento crucial y doloroso.
No se porque será, que uno supone que al atravesar circunstancias difíciles, estando acompañado nos resultara mas sencillo.
Aunque cuando llegamos a enfrentarnos a ellos.
Tomamos conciencia, rápidamente que, no tenemos deseos de compartirlos con nadie.
Que ni siquiera deseamos que nos digan una palabra y mucho menos darnos charla consoladora.
¿Quien sabe que será de el?
Quien sabe donde habitara su ser, ya, ahora, en este mismo momento.
Tampoco muchos se lo preguntan.
Sopla una pequeña brisa.......y el mundo continúa....
little john
La fe vive del creyente y no a la inversa, por mucho que al creyente le guste creerlo así. De que eso sea así se encargan los pocos que realmente viven de la fe: más, desde luego, de la fe de los otros que de la propia, aunque esto sea algo en lo que justamente el creyente no cree
Karlheinz Deschner
Yo soy un gran creyente en la educación, porque cuando yo crecí en Austria - cuando yo crecí en Austria tenía una gran educación. Tuve grandes maestros.
Arnold Schwarzenegger
Soy un gran creyente en la idea de que nuestro mayor potencial está en nuestras partes más oscuras. Hasta cierto punto, es solo para hacer frente a esas partes de nosotros mismos que podemos crecer realmente, y creo que eso es cierto de todos los personajes que he interpretado, sobre todo en los últimos años.
Zachary Quinto
En esta lucha de la vida, he aquí yo estoy entre ustedes plenamente consciente de que un verdadero creyente no tiene miedo de lo que Dios ha ordenado para él. Los que son visitados por el miedo vive solo para su presente, bajo la ilusión de que el mundo empezó con ellos y termina con su salida.
King Hussein I
He hecho una serie de cosas basado en personas reales o historias reales o basados ??en los libros, y yo soy un gran creyente de que hay que ser fiel al guión.
Clive Owen
Religión probará al creyente un edredón y una guía segura a la fuente de la verdadera felicidad.
Ellen G. White
Si tienen fe, el creyente no puede ser refrenado. Se traiciona a sí mismo. Él estalla. Confiesa y enseña el Evangelio a la gente a riesgo de la propia vida.
Martin Luther
Mi madre es un gran creyente en ser responsable de su propia felicidad. Ella siempre hablaba de encontrar la alegría en los pequeños momentos e insistió en que nos detenemos a disfrutar de la belleza de un día cualquiera. Cuando paro el coche para que mis hijos realmente ver una puesta de sol, oigo la voz y la sonrisa de mi madre.
Jennifer Garner
I planta de una gran cantidad de árboles. Yo soy un gran creyente en la plantación de las cosas para las generaciones futuras. Detesto la cultura actual en el que solo vive para hoy.
Penelope Keith
Y yo soy un creyente de que usted echa un negativo y convertirlo en algo positivo y, como se vio después, fue una de las mejores cosas que me han pasado. Y así que agradezco al personal Ranger y la organización del guardabosques por darme esta oportunidad.
Nolan Ryan
Malcolm era un firme creyente en el valor y la importancia de nuestro patrimonio. Él cree que tenemos tradiciones culturales valiosos y distintas que deben ser institucionalizados para que puedan ser transmitidos a nuestros herederos.
Betty Shabazz
Soy un creyente muy apasionado en la unidad del conocimiento. Hay un mundo de la realidad - un mundo de nuestra experiencia que estamos tratando de describir.
John Polkinghorne
Soy un republicano conservador, un firme creyente en el capitalismo de libre mercado. Un sistema de libre mercado permite a todas las partes para competir, lo que garantiza la mejor y más competitiva del proyecto surge, y garantiza un proceso justo y democrático.
Sarah Palin
Ningún creyente verdadero puede ser intolerante o un perseguidor. Si yo fuera un juez y la ley permitiera la pena de muerte contra los ateos, me gustaría empezar por enviar a la hoguera a quien denunció a otro.
Jean-Jacques Rousseau
Éramos muy pobres y mi família lo perdió todo durante la guerra - nuestro hogar y nuestra identidad. Pero yo soy un creyente en la suerte y que las condiciones sociales que se nace en brindar la oportunidad para que usted pueda probar su suerte. Y supongo que he tenido suerte.
Sigmar Polke
Soy un no creyente profundamente religioso - esto es un poco nuevo tipo de religión.
Albert Einstein
La resistencia de esta gente es increíble. Yo soy un gran creyente que, cuanto antes lleguemos cosas en marcha y funcionando en términos de deporte en esta área, mejor.
Ian Botham
Tan pronto como me convertí en la edad suficiente para hacer mis sueños mi realidad, me convertí en un firme creyente de que el subconsciente y el mundo fuera de nuestra carne y sangre es esencialmente la verdad.
Melissa Auf der Maur
Si no crees en algo, te vas a caer para nada. Creo que todo sucede por una razón. Si eres fuerte desde el interior, se puede disponer cualquier cosa. Soy un firme creyente de que donde hay una voluntad, hay un camino.
Eric Davis
Soy un creyente de que cuanto más doy, más feliz soy, y el más hermoso de mi exterior será.
Janelle Monae
El hecho de que yo era un creyente, un cristiano, todo el mundo pensó inmediatamente que este tipo es un ministro, que es muy agradable y, ah, por cierto, que puede jugar un poco. La otra cosa para mí está siendo inferior al permitido. ¡Qué gran historia, lo que es un mérito adicional, una especie de Rudy.
Mike Singletary
Soy un verdadero creyente que tiene la obligación moral de mantener a sus empleados honestos, y es por eso que usted tiene los controles, así que nunca estoy tentado o puesto en una posición en la que podía hacer algo para defraudar a mi empleador.
Frank Abagnale
Soy un creyente. Yo no voy a la iglesia. Yo no pertenezco a ninguna religión en particular, pero sí creo en Dios. Yo no podría escribir lo que escribo y ser creativo sin una cierta forma de creencia.
Nick Cave
Nadie se sostuvo hasta el final para convertirse en un creyente en la gran base de la lógica y la razón. Para ello se requiere un salto de fe.
Francis Collins
No soy un gran creyente en una cosa que se llama suerte. Creo que tiene mucho que ver con el destino y realmente tener una visión de la forma en que se vería su vida.
Marla Maples
Más que un actor, soy un artista... Soy un gran creyente - sinceramente así, descaradamente así, vulgarmente así - que el cine es para el entretenimiento. Si usted desea enviar mensajes, está el servicio de correos.
Shahrukh Khan
Cuando usted pone su fe total en Dios, no importa lo que pase, a una persona que es un verdadero creyente, si usted muere, usted sabe que va al cielo para estar con Dios.
Jim Bakker