Enrique heine
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Es una historia vieja que siempre sigue siendo nueva y, a quien le pasa, el corazón se le parte en dos.
La verdadera locura es tan rara como la verdadera sabiduría. Quizá no sea en el fondo, otra cosa que la sabiduría misma, que cansada ya de saberlo todo y de descubrir las vergüenzas del mundo, ha ...
El inteligente se percata de todo; el tonto hace observaciones sobre todo.
Hasta después del llanto más sublime siempre acaba uno por sonarse.
El estilo, como las uñas, es más fácil tenerlo brillante que limpio.
No hay nada más silencioso que un cañon cargado
Mejor que el talento es el carácter.
El matrimonio es una alta mar para la que no se ha inventado todavía brújula alguna.
Chopin es un gran poeta de la música, un artista tan genial que solo puede compararse con Mozart, Beethoven, Rossini y Berlioz.
Es una antigua historia que resulta siempre nueva.
Todo se te perdonará, excepto que seas un genio.
Allí donde se queman los libros que también, al final, quemar seres humanos.
Estoy seriamente convencido de que un francés que blasfema es un espectáculo más agradable para Dios que un inglés que reza
El historiador es un profeta que mira para atrás.
Cuando una mujer nos cautiva, ¿cómo discernir dónde empieza su sonrisa y dónde termina su boca?.
El que piensa en la muerte está ya muerto a medias.
A mi estómago poco le importa la inmortalidad.
La Biblia es la gran crónica de la família de los Judios.
El sueño es preciosa, la muerte es mejor aún, por no haber nacido, por supuesto, el milagro.
¿Locura de amor? Es un pleonasmo. El amor es ya una locura
Los ángeles lo llaman placer divino; los demonios, sufrimiento infernal; los hombres, amor.
No hay hombre más infeliz que aquel para quien la indecisión se ha hecho costumbre
La vida y el mundo son el sueño de un dios ebrio, que escapa silencioso del banquete divino y se va a dormir a una estrella solitaria, ignorando que crea cuanto sueña...
En cuanto a la virtud, la fealdad es ya la mitad del camino
Todos los hombres, ya sea para su terror o consuelo, tiene un cierto sentido de la religión.
Los romanos nunca habrían tenido tiempo de conquistar el mundo si antes hubiesen tenido que aprender latín.
Verdadero elocuencia consiste en decir todo lo que es necesario, y nada más que lo necesario.
Matrimonio: alta mar donde no se ha inventado una brújula para orientarse.
Pocas veces he comprendido a los demás y pocas veces ellos me han comprendido a mí. Solo cuando nos encontramos en el fango nos comprendimos enseguida.
Cuando las palabras se van apagado, comienza la música.
Perseguir al que no piensa igual que nosotros, ése ha sido en otro lugar el privilegio de los religiosos.
Ya sea una revolución tiene éxito o fracasa la gente de gran corazón siempre será ofrecido sacrificios.
El ateísmo es la última palabra del teísmo.
Música jugado en las bodas siempre me recuerda a la música que se reproduce para los soldados antes de ir a la batalla.
La miseria humana es demasiado grande para que los hombres lo hacen sin fe.
Dios me perdone, eso es asunto suyo.
El mal fundamental del mundo surgió del hecho de que el buen Dios no ha creado el dinero suficiente.
Dios me perdonará. Es su trabajo.
El sueño es bueno, la muerte es mejor, pero por supuesto, lo mejor sería que nunca han nacido en absoluto.
Si los romanos habían visto obligados a aprender latín, nunca habría encontrado tiempo para conquistar el mundo.
