Frases de pueblo
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La esclavitud es hija de tinieblas, un pueblo ignorante es instrumento ciego de su propia destrucción.
Simón BolÃvar
Todos los pueblos del mundo que han lidiado por la libertad han exterminado al fin a sus tiranos.
Simón BolÃvar
Si los pueblos no se ilustran, si no se divulgan sus derechos, si cada hombre no conoce lo que puede, vale, debe, nuevas ilusiones sucederán a las antiguas y será tal vez nuestra suerte cambiar de tiranos sin destruir la tiranía.
Mariano Moreno
El arte de nuestros enemigos es desmoralizar, entristecer a los pueblos. Los pueblos deprimidos no vencen. Por eso venimos a combatir por el país alegremente. Nada grande se puede hacer con la tristeza.
Arturo Jauretche
Sembrando trigo una vez, cosecharás una vez. Plantando un árbol, cosecharás diez veces. Instruyendo al pueblo, cosecharás cien veces.
Jiddu Krishnamurti
Los pueblos felices no tienen sociología, tienen costumbres, instituciones y leyes.
Jean-Baptiste Molière
Toda ley supone una autoridad de donde emana, y la causa eficiente y radical de ésta es, por derecho inherente, esencial al pueblo e imprescriptible de su soberanía.
Juan Pablo Duarte
Hay pueblos a los que se les soborna con el nivel de vida para no se paren a pensar por dónde anda el nivel de su vida.
Ana Diosdado
Ni la política ha de ser arte de escarceos, retazos y tráficos, ni es digno de confianza de su país el que mira más a parecer bien a sus adversarios -por sus seguridad y gloria de hombre hábil-que a intentar y realizar todas las mejoras que crea beneficiosas a su pueblo.
José MartÃ
El pueblo no debería temer a sus gobernantes, son los gobernantes los que deberían de temer al pueblo
V De Vendetta
Lo que da el ser religioso de un país, de un pueblo y de una sociedad no es la suma numérica de creencias o de creyentes, sino el esfuerzo creador de su mente, el rumbo que sigue su cultura.
Manuel Azaña
No hay nada que sea más fuerte que un pueblo. Lo único que se necesita es decidirlo a ser justo, libre y soberano
Eva Perón
Luchar, fracasar, volver a luchar, fracasar de nuevo, volver otra vez a la luchar, y así hasta la victoria: ésta es la lógica del pueblo, y él tampoco marchará jamás en contra de ella.
Mao Zedong
Quizás el arte de gobernar sea precisamente eso: el arte de saber valorar al pueblo y esforzarse por alentar y cumplir sus sueños.
Blanca Cotta
Hablar de la democracia y callar al pueblo es una farsa. Hablar de humanismo y negar a los hombres es una mentira.
Ovidio
Hasta que quienes ocupan puestos de responsabilidad no acepten cuestionarse con valentía su modo de administrar el poder y de procurar el bienestar de sus pueblos, será difícil imaginar que se pueda progresar verdaderamente hacia la paz.
Juan Pablo II
La demencia en el individuo es algo raro; en los grupos, en los partidos, en los pueblos, en las épocas, es la regla.
Friedrich Nietzsche
Mirá pibe. Si Beethoven hubiera nacido en Tacuarembó, hubiera llegado a ser director de la banda del pueblo.
Eduardo Galeano
El tanque, el B-12, el bombardero, la policía y el ejército son las armas de la dictadura. El rifle es el arma de la democracia. No en vano el revolver fue llamado empatador. Igualdad implica libertad. Esperemos que nuestras armas no sean nunca necesarias (pero no olvidemos que el pueblo sabía esto al incluir en la Declaración de Derechos: "una ciudadanía armada es la primera defensa, la mejor defensa y la última defensa contra la tiranía.").
Edward Abbey
La bomba atómica es fundamental. No para jugar a nada, sino para ser respetados. Es lo que en geopolítica se llama disuasión estratégica. Esto quiere decir, déjennos en paz. Cuando se tiene la bomba atómica se sienta para conversar en igualdad de condiciones. Lo mismo pasa con las Fuerzas Armadas. Si soy elegido, triplicaré su efectivo. Ellas son el brazo armaddo del pueblo.
Enéas Carneiro
No me sorprende que no puedan encontrar a nadie con suficiente liderazgo como para responsabilizarse de la administración de Alemania. ¿Saben por qué? Porque los mejores líderes nacionalistas están en la cárcel, y los demás suponen que si llevan a cabo la desnazificación ahora, ¿quién sabe si en diez años (después de que América se vaya, o de que una lucha entre oriente y occidente cambie la situación) no serán llevados ante un tribunal nacional alemán y acusados de traición? ¿Y qué piensa el pueblo germano? Ya os lo he dicho: '¡Siempre las cosas van mal, tenemos una democracia!' No se equivoquen, la gente sabe que estaban mejor cuando Hitler estaba en el poder antes de la guerra. Y no olviden que Hitler era algo más que una persona para nosotros.
Hermann Göring
¡Pueblo indolente! ¡Cuan diversa sería hoy vuestra suerte si conocieseis el precio de la libertad!
Policarpa Salavarrieta
Pero hoy, son nuestros amos, unos cuantos gringos que gobiernan a través de las logias, unos cuantos malos bolivianos, dueños de nuestra hacienda; la rosca, la gran minería, el imperialismo, los que tienen maniatado y sometido al pueblo.
Ãscar Ãnzaga
Atreverse; el progreso se obtiene a este precio.
Todas las conquistas sublimes son, más o menos, premios al atrevimiento. Para que la Revolución exista, no basta con que Montesquieu la presienta, ni con que Diderot la predique, ni con que Beaumarchais la anuncie, ni con que Condorcet la calcule, ni con que Arouet la prepare, ni con que Rousseau la premedite; es preciso que Danton se atreva.
El grito «¡Audacia!» es un fiat lux. Para la marcha hacia delante del género humano es preciso que encuentre en las cumbres de la sociedad ejemplos permanentes y altivos de valor. La temeridad deslumbra a la historia, y es una gran luz para el hombre. La aurora es audaz cuando se eleva sobre el horizonte. Intentar, desafiar, persistir, perseverar, ser fiel a sí mismo, hacer frente al destino, asombrar a la catástrofe por el poco miedo que nos infunde, ya sea enfrentándose a los poderes injustos o insultando a la victoria ebria, resistir y persistir; he aquí el ejemplo que necesitan los pueblos y la luz que los electriza. El mismo formidable relámpago va de la antorcha de Prometeo al botafuego de Cambronne.
Todas las conquistas sublimes son, más o menos, premios al atrevimiento. Para que la Revolución exista, no basta con que Montesquieu la presienta, ni con que Diderot la predique, ni con que Beaumarchais la anuncie, ni con que Condorcet la calcule, ni con que Arouet la prepare, ni con que Rousseau la premedite; es preciso que Danton se atreva.
El grito «¡Audacia!» es un fiat lux. Para la marcha hacia delante del género humano es preciso que encuentre en las cumbres de la sociedad ejemplos permanentes y altivos de valor. La temeridad deslumbra a la historia, y es una gran luz para el hombre. La aurora es audaz cuando se eleva sobre el horizonte. Intentar, desafiar, persistir, perseverar, ser fiel a sí mismo, hacer frente al destino, asombrar a la catástrofe por el poco miedo que nos infunde, ya sea enfrentándose a los poderes injustos o insultando a la victoria ebria, resistir y persistir; he aquí el ejemplo que necesitan los pueblos y la luz que los electriza. El mismo formidable relámpago va de la antorcha de Prometeo al botafuego de Cambronne.
Victor Hugo
Yo no hice otra cose que responder con la guerra a los manejos tenebrosos del Directorio me hacía por considerarme enemigo del centralismo, el cual sólo distaba un paso del realismo (la monarquía). Pero los Pueyrredones y sus acólitos querían hacer de Buenos Aires una nueva Roma imperial, mandando sus procónsules a gobernar a las provincias militarmente y despojarlas de toda representación política, como lo hicieron rechazando los diputados al Congreso que los pueblos de la Banda Oriental habían nombrado y poniendo precio a mi cabeza.
José Gervasio Artigas
La educación de los militares, desde el soldado raso hasta las más altas jerarquías, les convierte necesariamente en enemigos de la sociedad civil y el pueblo. Incluso su uniforme, con todos esos adornos ridículos que distinguen los regimientos y los grados, todas esas tonterías infantiles que ocupan buena parte de su existencia y les haría parecer payasos si no estuvieran siempre amenazantes, todo ello les separa de la sociedad. Ese atavío y sus mil ceremonias pueriles, entre las que transcurre la vida sin más objetivo que entrenarse para la matanza y la destrucción, serían humillantes para hombres que no hubieran perdido el sentimiento de la dignidad humana. Morirían de vergüenza si no hubieran llegado, mediante una sistemática perversión de ideas, a hacerlo fuente de vanidad. La obediencia pasiva es su mayor virtud. Sometidos a una disciplina despótica, acaban sintiendo horror de cualquiera que se mueva libremente. Quieren imponer a la fuerza la disciplina brutal, el orden estúpido del que ellos mismos son víctimas».
Michail Bakunin
El Perú ha emitido ya su opinión y nos parece muy correcto como un partido democrático de gente decente y correcta, aceptar que esa es la palabra del pueblo peruano.
Lourdes Flores
Cercano está el momento en que veremos si el pueblo manda, si el pueblo ordena, si el pueblo es el pueblo y no una multitud anónima de siervos.
Jorge Eliécer Gaitán
No soy un libertador. Los libertadores no existen. Son los pueblos quienes se liberan a si mismos.
Che Guevara
El gobierno es, a lo más, una conveniencia; aunque la mayoría de ellos suelen ser inútiles, y alguna vez, todos sin excepción, inconvenientes. Las objeciones puestas al hecho de contar con un ejército regular, que son muchas y de peso, y merecen prevalecer, pueden ser referidas en última instancia a la presencia de un gobierno igual de establecido. El ejército regular no es sino el brazo armado del gobierno permanente. Éste, a su vez, aunque no representa sino el modo elegido por el pueblo de ejecutar su voluntad, es igualmente susceptible de abuso y perversión antes de que aquél pueda siquiera actuar por su mediación.
Henry David Thoreau
¿Quién iba a dar el golpe? ¿Y contra quién? No: en la sociedad moderna hay que luchar en los medios de comunicación y en la calle, apelar al pueblo y, si se pierde, resistirse con uñas y dientes. En última instancia, el levantamiento popular. Lo ultimísimo, los militares.
Federico Jiménez Losantos
2:10 Canta y alégrate, hija de Sión; porque he aquí vengo, y moraré en medio de ti, ha dicho Yahweh. 2:11 Y se unirán muchas naciones a Yahweh en aquel día, y me serán por pueblo, y moraré en medio de ti; y entonces conocerás que Yahweh de los ejércitos me ha enviado a ti. 2:12 Y Yahweh poseerá a Judá su heredad en la tierra santa, y escogerá aún a Jerusalem. 2:13 Calle toda carne delante de Yahweh, porque él se ha despertado de su santa morada. Zacariah
José Ãlvarez
Ni su pueblo ni su familia, que tanto lo amaban, lloraron su muerte, porque creían que el llanto obliga el espíritu a quedarse en el mundo para consolar a los vivos. Lo correcto era demostrar alegría para que el espíritu se fuera contento a cumplir otro ciclos en la rueda de la reencarnación, evolucionado en cada vida hasta alcanzar finalmente la iluminación y el cielo, o Nirvana
Isabel Allende
La guerra internacional entre pueblos americanos no puede ser sino el efecto de una locura criminal, no excusada por motivo alguno, ni por el menor pretexto.
Eduardo Santos
Creo de todo corazón en el lema ?El mejor gobierno es el que menos gobierna?, y me gustaría verlo hacerse efectivo más rápida y sistemáticamente. Llevado a cabo, finalmente resulta en algo en lo que también creo: ?El mejor gobierno es el que no tiene que gobernar en absoluto?. Y cuando los pueblos estén preparados para ello, ése será el tipo de gobierno que tengan.
Henry David Thoreau
Como la masa del pueblo es inconstante, apasionada e irreflexiva, y se halla además sujeta a deseos desenfrenados, es menester llenarla de temores para mantenerla en orden. Por eso los antiguos hicieron bien en inventar los dioses y la creencia en el castigo después de la muerte. Son más bien los modernos los que deben ser acusados de locura por su pretensión de extirpar tales creencias.
Polibio