Frases de sonrisa
Frases de sonrisa. Encuentra docenas de frases de sonrisa con fotos para copiar y compartir.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
Déjame que me calle con el silencio tuyo.
.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
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Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
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Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
Déjame que me calle con el silencio tuyo.
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Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
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Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
Pablo Neruda
Si alguna vez no te dan la sonrisa esperada, sé generoso y da la tuya. Porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa, como aquel que no sabe sonreír a los demás.
Dalai Lama
La revolución del amor comienza con una sonrisa. Sonríe cinco veces al día a quien en realidad no quisieras sonreír. Debes hacerlo por la paz.
Madre Teresa De Calcuta
Sonríe aunque solo sea una sonrisa triste, porque más triste que la sonrisa triste, es la tristeza de no saber sonreír.
El día que te levantes algo desanimado o no vaya como esperabas. mira la sonrisa de tu hijo(a) y tomala como pincel para dibujar la tuya! Intentalo, funciona!
Yessenia Martinez
Nunca dejes de sonreír ni siquiera.
Cuando estés triste, porque nunca!
sabes quien pueda enamorarse de tu sonrisa...
Cuando estés triste, porque nunca!
sabes quien pueda enamorarse de tu sonrisa...
Jackselins Arteaga
Por una mirada, un mundo; / por una sonrisa, un cielo; / por un beso... yo no sé /qué te diera por un beso.
Gustavo Adolfo Bécquer
La envidia no tiene nunca ni la franqueza de la risa, ni el arrebato de la cólera; no tiene más que sonrisas frías y lágrimas ocultas
Ignacio Manuel Altamirano
Da la bienvenida a cada mañana con una sonrisa. Mira cada nuevo día como otro regalo especial de tu creador, otra oportunidad de oro.
Og Mandino
Yo, cuando era pequeña, quería ser Dios. El dios de los cristianos, con D mayúscula. Hacia los cinco años, comprendí que mi ambición era irrealizable. Así que rebajé un poco mis pretensiones y decidí convertirme en Cristo. Imaginaba mi muerte sobre la cruz, ante toda la humanidad. A los siete años, tomé conciencia de que aquello no ocurriría. Decidí, más modestamente, convertirme en mártir. Durante años mantuve aquella decisión. Pero tampoco funcionó.
-¿Y después?
-Ya lo sabe: me hice contable en la empresa Yumimoto. Y creo que no podía caer más bajo.
-¿De verdad lo cree? -preguntó con una extraña sonrisa
-¿Y después?
-Ya lo sabe: me hice contable en la empresa Yumimoto. Y creo que no podía caer más bajo.
-¿De verdad lo cree? -preguntó con una extraña sonrisa
Amélie Nothomb
Y mañana, cuando tu primavera se derrumbe como la arquitectura de una flor, cuando te huyan todas las miradas y se te nieguen todas las sonrisas; cuando las noches alegres te vuelvan sus espaldas, y a puntapiés la música te arroje de su loco reinado; entonces volverás al suburbio, y será en una tarde con olor de aguas muertas, y el eco de tus pasos en la calle despertará recuerdos y exaltará fantasmas. Y cuando al fin descienda la lluvia de tus ojos una voz de muchacha cantará en algún patio:
Cascabel, cascabelito,
ríe, ríe y no llores
Cascabel, cascabelito,
ríe, ríe y no llores
Leopoldo Marechal
Hubiera sido tan fácil organizar un esquema coherente, un orden de pensamiento y de vida, una armonía. Bastaba la hipocresía de siempre, elevar el pasado a valor de experiencia, sacar partido de las arrugas de la cara, del aire vivido que hay en las sonrisas o los silencios de más de cuarenta años. Después uno se ponía un traje azul, se peinaba las sienes plateadas y entraba en las exposiciones de pintura, en la Sade y en el Richmond, reconciliado con el mundo. Un escepticismo discreto, un aire de estar de vuelta, un ingreso cadencioso en la madurez, en el matrimonio, en el sermón paterno a la hora del asado o de la libreta de clasificaciones insatisfactoria. Te lo digo porque yo he vivido mucho. Yo que he viajado. Cuando yo era muchacho. Son todas iguales, te lo digo yo. Te hablo por experiencia, m?hijo. Vos todavía no conocés la vida.
Julio Cortázar
Me di la vuelta, mientras se me pintaba una sonrisa en la cara. Siempre me pasaba lo mismo: solo la encontraba cuando había abandonado toda esperanza
Patrick Rothfuss
Y mientras aguardaba al mounstro concluí que Suiza era el país perfecto para las pesadillas de Füssli y para la chispa incendiaria de Rousseau, para la sonrisa regicida de Voltaire, para los laberintos espaciales de Joyce y para los laberintos mentales de Borges; que en cada rincón de aquellas montañas parece posible la rosa que resurge de la ceniza en las manos de Paracelso.
William Ospina
Mientras recogía las bolsas de la compra, un familiar Lexus berlina color coñac se detuvo a su lado. La ventanilla del conductor bajó apareció el rostro del Duque del Infierno en persona,
sonrisa burlona incluida.
_ Pareces una vagabunda.
Sugar Beth supuso que lo decía por las bolsas, no por sus tejanos o su cazadora de motera.
_ Gracias, que tengas un buen día tú también.
Él la contempló a través de unas gafas sin montura.
_ ¿Quieres que te lleve?
_ ¿Dejas subir plebeyos a tu carruaje?
_ Hoy me siento benevolente.
_ Es mi día de suerte.
sonrisa burlona incluida.
_ Pareces una vagabunda.
Sugar Beth supuso que lo decía por las bolsas, no por sus tejanos o su cazadora de motera.
_ Gracias, que tengas un buen día tú también.
Él la contempló a través de unas gafas sin montura.
_ ¿Quieres que te lleve?
_ ¿Dejas subir plebeyos a tu carruaje?
_ Hoy me siento benevolente.
_ Es mi día de suerte.
Susan Elizabeth Phillips
En los dormidos labios del viejo se ha posado, como una mariposa, una sonrisa: la idea que aleteaba en su corazón cuando le envolvió el sueño:
¡Grande, la vida!
¡Grande, la vida!
José Luis Sampedro
«Yo la conozco desde hace más tiempo», decía mi sonrisa. «Sí, tú has estado entre sus brazos, has probado el sabor de su boca, has sentido su calor, y eso es algo que yo nunca he tenido. Pero hay una parte de ella que es solo para mí. Tú no puedes tocarla, por mucho que te esfuerces. Y cuando te deje, yo seguiré estando aquí, haciéndola reír. Y mi luz brillará en ella. Yo seguiré estando aquí mucho después de que ella haya olvidado tu nombre.»
Patrick Rothfuss
Lindo perro mío, buen perro, chucho querido, acércate y ven a respirar un excelente perfume, comprado en la mejor perfumería de la ciudad.
Y el perro, meneando la cola, signo, según creo, que en esos mezquinos seres corresponde a la risa y a la sonrisa, se acerca y pone curioso la húmeda nariz en el frasco destapado; luego, echándose atrás con súbito temor, me ladra, como si me reconviniera.
?¡Ah miserable can! Si te hubiera ofrecido un montón de excrementos los hubieras husmeado con delicia, devorándolos tal vez. Así tú, indigno compañero de mi triste vida, te pareces al público, a quien nunca se ha de ofrecer perfumes delicados que le exasperen, sino basura cuidadosamente elegida.
Y el perro, meneando la cola, signo, según creo, que en esos mezquinos seres corresponde a la risa y a la sonrisa, se acerca y pone curioso la húmeda nariz en el frasco destapado; luego, echándose atrás con súbito temor, me ladra, como si me reconviniera.
?¡Ah miserable can! Si te hubiera ofrecido un montón de excrementos los hubieras husmeado con delicia, devorándolos tal vez. Así tú, indigno compañero de mi triste vida, te pareces al público, a quien nunca se ha de ofrecer perfumes delicados que le exasperen, sino basura cuidadosamente elegida.
Charles Baudelaire
Una sonrisa, por ejemplo, puede significar que estás divertido, feliz, agradecido o satisfecho. Puedes sonreír para consolar a alguien. Puedes sonreír porque estás contento o porque estás enamorado. Una sonrisa compungida o una sonrisa de burla no se distinguen mucho de una sonrisa de alegría, pero significan cosas muy diferentes.
Patrick Rothfuss
Los pensamientos de Dios no son nuestros pensamientos, ni siquiera son como los nuestros. Ni siquiera estamos en el mismo vecindario. Nosotros pensamos: protege el cuerpo; él está pensando: salva el alma. Nosotros soñamos con un aumento de sueldo; él sueña con levantar a un muerto. Nosotros evitamos el dolor y buscamos la paz. Dios usa el dolor para traer paz. Nosotros decidimos: «Voy a vivir antes de morir». Él nos ordena: «Muere para que puedas vivir». Nosotros amamos lo que se corrompe. Él ama lo que perdura. Nosotros nos gozamos en nuestros logros. Él se goza en nuestras confesiones. Nosotros le mostramos a nuestros hijos la estrella de Nike y le decimos con una sonrisa millonaria: «Sé como Mike». Dios nos señala al carpintero crucificado con labios ensangrentados y costado traspasado y dice: «Sé como Cristo».
Max Lucado
Las buenas palabras, la sonrisa, y los hechos buenos, son los rayos del Sol, reflejados en el alma del hombre.
Nicolae Iorga
¿Les hecha de menos?
-¿A la familia?
Fermín se encogió de hombros, varado en una sonrisa nostálgica.
-¿Qué se yo? Pocas cosas engañan más que los recuerdos
-¿A la familia?
Fermín se encogió de hombros, varado en una sonrisa nostálgica.
-¿Qué se yo? Pocas cosas engañan más que los recuerdos
Carlos Ruiz Zafón
¿Llevaras mi ámbar, Jess?
Una sonrisa que le dijo que era amado, que era de ella.
-Siempre.
- Galen y Jessamy
Una sonrisa que le dijo que era amado, que era de ella.
-Siempre.
- Galen y Jessamy
Nalini Singh
Todo cuanto el sombrerero destilaba de afabilidad y entusiasmo, don Ricardo exhalaba en crueldad y fortaleza. Su sonrisa canina dejaba claro que era capaz de leer sus pensamientos y sus deseos y que se reía de ellos. Sophie sintió por él ese anémico desprecio que despiertan las cosas que más deseamos sin saberlo
Carlos Ruiz Zafón
Todas las chicas tienen el corazón roto. Las carreteras están atascadas durante el fin de semana. Todo el mundo quiere estar lejos de donde ha nacido. Al menos el viernes por la noche. Los bares ya no dan dos por una y en esta ciudad tienes que ganar mucho para poder beber en el centro. Los camareros han enterrado sus sonrisas porque es viernes por la noche y la gente coge todo lo que brilla. Con o sin permiso. Las niñas bonitas siempre son las que están más tristes porque saben que hay más tipos dispuestos a hacerles daño. Las niñas feas se dejan ir y bailan toda la noche solas, o unas con otras y no tienen suerte ni atrayendo las desgracias. Los tíos con coche juegan con los dados trucados y los que tienen dinero nos están viendo a todos las cartas. Las madres no duermen en toda la noche porque saben que duele pero también saben que no hay nada mejor y no acaban de decidir qué es lo más peligroso. No hay nadie que no dispare el viernes por la noche, ni hay quien esquive los disparos.
Sé que no puedo esperar que estés siempre sola, lo único que te pido es que no te lo creas todo. No te fíes de los anillos de oro, ni de las carrozas de plata.
Todos mentimos bien los viernes por la noche.
Sé que no puedo esperar que estés siempre sola, lo único que te pido es que no te lo creas todo. No te fíes de los anillos de oro, ni de las carrozas de plata.
Todos mentimos bien los viernes por la noche.
Ray Loriga
Dejando aparte que mi cuerpo ya no estará aquí, no hay por qué estar triste ?prosiguió tras hacer una pausa?. Y sí, ¿sabes? Me da la sensación de que el paraíso sí existe. Empiezo a sentirme como si esto ya lo fuera.
?Vendré enseguida ?logré decirle, al fin.
?Te espero ?Aki esbozó una sonrisa fugaz?. No hace falta que te des prisa. Aunque no esté aquí, yo siempre estaré contigo.
?Ya lo sé.
?Encuéntrame otra vez, ¿vale?
?Te encontraré enseguida.
?Vendré enseguida ?logré decirle, al fin.
?Te espero ?Aki esbozó una sonrisa fugaz?. No hace falta que te des prisa. Aunque no esté aquí, yo siempre estaré contigo.
?Ya lo sé.
?Encuéntrame otra vez, ¿vale?
?Te encontraré enseguida.
Kyoichi Katayama
Porque rehusé transigir con Babilonia, y traté de servir fielmente a mi Señor, me encuentro en prisión, por lo cual estoy agradecido. [... ] Preferiría mucho más Su aprobación y sonrisa, y estar en prisión, a transigir con la Bestia o ceder a ella y hallarme libre y tener el aplauso del mundo entero. Es una experiencia bendita y dulce la de sufrir por rendir servicio fiel al Señor. En el Reino estimaremos la sonrisa del Padre por encima de todas las cosas. Esto debe estar en primer lugar en la mente de todo hijo de Dios. Anhelamos la unión que hará de nosotros Uno allí. Me siento feliz, pero anhelo verlos a todos de nuevo. La asamblea y la reunión anual se acercan. Que el espíritu de Cristo llene el corazón de todo el que asista
Joseph Franklin Rutherford