Fuerza de voluntad ( 2 )
Fuerza de voluntad. Encuentra docenas de fuerza de voluntad con fotos para copiar y compartir.
La frase pertenecía a Winston Churchill y evidenciaba qué clase de hombre era Julián: «Estoy convencido de que en este día somos dueños de nuestro destino, que la tarea que se nos ha impuesto no es superior a nuestras fuerzas; que sus acometidas no están por encima de lo que soy capaz de soportar. Mientras tengamos fe en nuestra causa y una indeclinable voluntad de vencer, la victoria estará a nuestro alcance».
Robin S. Sharma
me habia quedado tambien casi por completo sin contactos con quienes anteriormente mehabia permitido confrontaciones, es decir, confrontaciones intelectuales en diálogos y discusiones, de todas esas personas, con mi inmersión cada vez más rigurosa en mi trabajo científico, em había apartado y mantenido alejado cada vez más y, como tuve que comprender de pronto, de la forma más peligrosa y, a partir de un momento determinado, no había tenido ya fuerzas para reanudar todos esos lazos intelectuales necesarios, ciertamente había comprendido de pronto que, sin esos contactos, difícilmente podría avanzar, que sin esos contactosm probablemente, en un plazo previsible, no podría ya pensar, que pronto tampoco podría ya existir, pero me faltaban fuerzas para detener, mediante mi propia inicativa, lo que veía ya que se me acercaba, la atrofia de mi pensamiento producida por el apartamiento voluntariamente provocado, de todas las personas suceptibles de un contacto que excediera del más imprescindible, del llamado vernáculo, simplemente del derivado de las necesidades más apremiantes de la existencia en mi casa y su entorno inmediato, y habían pasado años ya desde que había dejado de mantener correpondencia, totalmente absorbido en mis ciencias, había dejado pasar el momento en que todavía hubiera sido posible reanudar esos contactos y correspondencia abandonados, todos mis esfuerzos en ese sentido habían fracasado siempre, porque en el fondo me habían faltado ya por completo, si no las fuerzas para ello, sí, probablemente, la voluntad de hacerlo, y aunque en realidad había comprendido claramente que el camino que había tomado y había seguido ya durante años no era el verdadero camino, que sólo podía ser un camino hacia el aislamiento total, aislamiento no sólo de mi mente y de mi pensamiento, sino en realidad aislamiento de todo mi ser, de toda mi existencia, siempre espantada ya, de todos modos, por ese aislamiento, no había hecho ya nada para remediarlo, había seguido avanzando siempre por ese camino, aunque siempre horrorizado por su lógica, temiendo continuamente ese camino en el que, sin embargo, no hubiera podido ya dar la vuelta; había previsto ya muy pronto la catástrofe, pero no había podido evitarla y, en realidad, se había producido ya mucho antes de que yo la reconociera como tal. Por un lado, la necesidad de aislarse por amor al trabajo científico es la primera de las necesidades deun intelectual, por otro, sin embargo, el peligro de que ese aislamiento se produzca de una forma demasiado radical que, en fin de cuentas, no tenga ya consecuencias estimulantes como se pretendía, sino inhibidoras e incluso aniquiladoras, en el trabajo intelectual es el mayor de los peligros y, a partir de cierto momento, mi aislamiento del entorno por amor a mi trabajo científico (sobre los anticuerpos) había tenido precisamente esas consecuencias aniquiladoras en mi trabajo científico. La comprensión llega siempre, como había tenido que reconocer en mi mente de la forma más dolorosa, demasiado tarde y sólo queda, si es que queda algo, la desesperación, o sea, la comprensión directa del hecho de que ese estado devastador y, por tanto, intelectual, sentimental y, en fin de cuentas corporalmente devastador, surgido de pronto, no puede cambiarse ya, ni por ningún medio.
Thomas Bernhard
El valor no es la ausencia del miedo, sino el miedo junto a la voluntad de seguir.
Feliciano Franco de Urdinarrain
Pocos hombres tienen la fuerza de carácter suficiente para alegrase del éxito de un amigo sin sentir cierta envidia.
Esquilo
La no violencia es la fuerza más poderosa que hay a disposición de la humanidad. Es aún más poderosa que el arma más compleja de destrucción ideada por la ingenua capacidad del hombre.
Mahatma Gandhi
Leída cuidadosamente, la biblia es la fuerza más potente para el ateísmo jamás concebida.
Isaac Asimov
Serás amado el día en que podrás mostrar tu debilidad sin que el otro se sirva de esto para afirmar su fuerza.
Cesare Pavese
Yo tengo tantos hermanos que no los puedo contar. Gente de mano caliente por eso de la amistad, con uno lloro, pa’ llorarlo, con uno rezo pa’ rezar. Con un horizonte abierto que siempre está más allá. Y esa fuerza pa’ buscarlo con tesón y voluntad.
Atahualpa Yupanqui
Tenemos más fuerza que voluntad, y a menudo para disculparnos a nosotros mismos suponemos que las cosas son imposibles.
Francisco de La Rochefoucauld
Amigo
A tí
que te conocí por obra del destino
y que vines de lejos,
a tí
que llevas el cielo en tu ojos
y la bondad en tu sonrisa
a tí
que me escuchas sin reproches,
sin juicios;
porque en tu alma crece la llama de la fuerza,
del ímpetu,
porque a tu voluntad todo es posible,
porque tu corazón está abierto,
latiendo, viviendo,
porque sigues la filosofía de un niño
siendo todo un hombre
y hasta tu nombre
te describe;
Alexander,
protector y defensor de hombres,
dulce y fuerte amigo
mi gran amigo.
A tí
que te conocí por obra del destino
y que vines de lejos,
a tí
que llevas el cielo en tu ojos
y la bondad en tu sonrisa
a tí
que me escuchas sin reproches,
sin juicios;
porque en tu alma crece la llama de la fuerza,
del ímpetu,
porque a tu voluntad todo es posible,
porque tu corazón está abierto,
latiendo, viviendo,
porque sigues la filosofía de un niño
siendo todo un hombre
y hasta tu nombre
te describe;
Alexander,
protector y defensor de hombres,
dulce y fuerte amigo
mi gran amigo.
Claudia Lorena GacÃa Lara
Benevolencia no quiere decir tolerancia de lo ruin, o conformidad con lo inepto, sino voluntad de bien.
Antonio Machado
A partir de ahora, la verdadera fuerza de la República francesa ha de consistir en no admitir que exista una sola idea nueva que no le pertenezca.
Napoleón Bonaparte
No se vive sin la fe. La fe es el conocimiento del significado de la vida humana. La fe es la fuerza de la vida. Si el hombre vive es porque cree en algo.
León Tolstoi
Cuando el amor es la normas, no hay voluntad de poder, y donde el poder se impone, el amor falta.
Carl Jung
La verdadera bondad del hombre solo puede manifestarse con absoluta limpieza y libertad en relación con quien no representa fuerza alguna.
Milan Kundera
Ella es la fuerza viva, el soplo ardiente de cuanto sueña y goza, piensa y siente; de cuanto canta y ríe, vibra y ama.
Salvador Rueda
La democracia constituye necesariamente un despotismo, por cuanto establece un poder ejecutivo contrario a la voluntad general. Siendo posible que todos decidan contra uno cuya opinión pueda diferir, la voluntad de todos no es por tanto la de todos, lo cual es contradictorio y opuesto a la libertad.
Immanuel Kant
El gobierno tuvo su origen en el propósito de encontrar una forma de asociación que defienda y proteja la persona y la propiedad de cada cual con la fuerza común de todos.
Jean-Jacques Rousseau