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Por suerte, la naturaleza me ha dotado de una curiosidad irracional hasta para las cosas más nimias. Eso me salva. La curiosidad es lo único que me mantiene a flote. Todo lo demás me hunde. ¡Ah!, y la vocación. No sé si sería capaz de vivir sin ella.
Pedro Almodóvar
Mar Sin Orillas
Un dolor se me va y otro me arredra;
ola que se marchó y ola que viene
a batirme, y apenas se detiene
sobre mi viejo corazón de piedra.
Ola que llega, y rompe, y salta y medra
del dolor de la roca, y se mantiene
sólo el instante aquel que le conviene
para arrancarle hasta su airón de yedra.
Lucha sorda y tenaz; mudo combate
de la ola que se va, vuelve y se abate
en el peñón que su ira desafía...
Dolor perenne, inextinguible, intenso,
rudo y fiero combate en este inmenso
mar sin orillas de la vida mía...
Un dolor se me va y otro me arredra;
ola que se marchó y ola que viene
a batirme, y apenas se detiene
sobre mi viejo corazón de piedra.
Ola que llega, y rompe, y salta y medra
del dolor de la roca, y se mantiene
sólo el instante aquel que le conviene
para arrancarle hasta su airón de yedra.
Lucha sorda y tenaz; mudo combate
de la ola que se va, vuelve y se abate
en el peñón que su ira desafía...
Dolor perenne, inextinguible, intenso,
rudo y fiero combate en este inmenso
mar sin orillas de la vida mía...
Hilarión Cabrisas
me latima el tiempo y la distancia por que tenia que encontrarte en estas circunstancias te amo y no debo hacerlo te extraño y no te conosco tengo la necesidad de ti y estas lejos no se si algún día te tendre pero esa esperanza me mantiene con vida tengo unos celos que me están matando te amo y no puedo evitarlo,se que no te tendre por completo aun asi lo acepto lo único que quiero oir de tus labios es amor mio yo también TE AMO............
ALMITACHIKITA
¿Tú piensas que no es magia lo que te mantiene con vida?. Solo por que entiendes la mecánica de como algo funciona, eso no lo hace nada menos que un milagro, esta es sola otra palabra para magia. Todos nos mantenemos con vida con magia. Mi magia es solo un poco diferente a la tuya, eso es todo.
Charlaine Harris
Mi mano en tu corazón, te dice que ya no sufrirás más,
Mi mano en tu corazón, te dice que ya puedes respirar,
Mi mano en tu corazón, te pide perdon por no entenderte, ni enterderme, pero ya no debes de llorar más,
Mi mano en tu corazón, te dicen que ya me verás y te cuidaré y me cuidarás,
Mi mano en tu corazón, te sostiene y mantiene atado a mi amor, que te dejó fisicamente pero siempre te guardó en su ser.
Mi mano en tu corazón, te dice que ya puedes respirar,
Mi mano en tu corazón, te pide perdon por no entenderte, ni enterderme, pero ya no debes de llorar más,
Mi mano en tu corazón, te dicen que ya me verás y te cuidaré y me cuidarás,
Mi mano en tu corazón, te sostiene y mantiene atado a mi amor, que te dejó fisicamente pero siempre te guardó en su ser.
cisne
El deseo permanente y persistente de todas maneras te ayuda.
Mantiene viva la esperanza,de repente son la antesala de una realidad feliz.
Mantiene viva la esperanza,de repente son la antesala de una realidad feliz.
dochanlu
Tu falta de perdón hacia otros te mantiene preso y atado a esas personas. ¡ Sé libre perdonando !
rosi
El amor es la esencia del ser humano, pertenece a nuestros instintos libres y ocultos.
Pensamos en el y perdemos el juicio por el, es la manera mas hermosa de ver algo o alguien.
Es nuestra virtud y nuestra condena, el amor libera pero también no hace prisioneros.
El amor nos esclaviza y nos dignifica, es el preámbulo de todos nuestros logros y fracasos.
El amor es y será la razón que nos mantiene vivos.
Pensamos en el y perdemos el juicio por el, es la manera mas hermosa de ver algo o alguien.
Es nuestra virtud y nuestra condena, el amor libera pero también no hace prisioneros.
El amor nos esclaviza y nos dignifica, es el preámbulo de todos nuestros logros y fracasos.
El amor es y será la razón que nos mantiene vivos.
Walter Alfaro
COMO SOBREVIVIR SI LO QUE ME MANTIENE VIVA ME ESTA MATANDO:
En la claridad de una noche,
Pensando hasta no poder mas
me dije tan lejos y a la vez tan cerca.
El corazon se me parte por no poderte amar
temblando por tus besos los cuales mios se que algún día seran.
Lorando en silencio por tu amor que tan lejos esta
Soñandote despierta...
Amandote hasta la incoherencia y tu tan lejos y a la vez tan cerca sin saber de mis sueños, de mis tristezas
De cuanto te amo, de cuanto tuya soy, de cuanto te grita mi cuerpo, y tu tan lejos sin saber de todo esto.
Sin imaginarte por un momento, que me ahogo en mis delirios sin poderlos evitar, perdiendome en la distancia sin dejarte de amar...
Porque la esperanza de tenerte en mis brazos conmigo esta.
En la claridad de una noche,
Pensando hasta no poder mas
me dije tan lejos y a la vez tan cerca.
El corazon se me parte por no poderte amar
temblando por tus besos los cuales mios se que algún día seran.
Lorando en silencio por tu amor que tan lejos esta
Soñandote despierta...
Amandote hasta la incoherencia y tu tan lejos y a la vez tan cerca sin saber de mis sueños, de mis tristezas
De cuanto te amo, de cuanto tuya soy, de cuanto te grita mi cuerpo, y tu tan lejos sin saber de todo esto.
Sin imaginarte por un momento, que me ahogo en mis delirios sin poderlos evitar, perdiendome en la distancia sin dejarte de amar...
Porque la esperanza de tenerte en mis brazos conmigo esta.
Marisa Morales
El miedo nos mantiene enfocados en el pasado o preocuparse por el futuro. Si somos capaces de reconocer nuestros miedos, podemos darnos cuenta de que en este momento estamos bien. En este momento, hoy en día, todavía estamos vivos, y nuestros cuerpos están trabajando maravillosamente. Nuestros ojos todavía pueden ver el hermoso cielo. Nuestros oídos aún pueden escuchar las voces de nuestros seres queridos.
Thich Nhat Hanh
Te marchaste hace tiempo
y todo es mas lento
te alejaste con el viento
y se mantiene el suspenso
Escucha mi voz que te dice en silencio
escuchame que sigo sin miedo
atiende mi voz que te dice en silencio
escuchame me caigo de miedo
Maldicion escucha mi canto
maldicion pense podria soportarlo
Escuchame puedo aguantarlo
escuchame estoy agonizando!
y todo es mas lento
te alejaste con el viento
y se mantiene el suspenso
Escucha mi voz que te dice en silencio
escuchame que sigo sin miedo
atiende mi voz que te dice en silencio
escuchame me caigo de miedo
Maldicion escucha mi canto
maldicion pense podria soportarlo
Escuchame puedo aguantarlo
escuchame estoy agonizando!
Tovléz
El Hombre Superior distingue y trata con la manera apropiada su clase y condición. La amistad es la unión perfecta de todos los hombres. La amistad se mantiene aún cuando estén lejos. Si el ser amado se encuentra distante significa que no ha llegado el tiempo de la auténtica hermandad entre los hombres, pero aún así, con lo logrado no hay motivo de lamentaciones.
I CHING
Anuncia sus proclamas tan igual que el sudor fluye del cuerpo. El rey reparte sus tesoros entre el pueblo. No hay error. Dispersa la sangre y mantiene el mal a distancia. No hay reproche. Se libera de personas no gratas, continuando la ruta marcada de servicio a los demás. Pronto tendrá acogida de otras personas con sus mismos ideales.
I CHING
no logro olvidarme de akella doncella
de la mujer que logro despertarme de aquella pesadilla
con su sencilles y su divina comedia
hicieron que partiera asia otro lugar con ella
no logro despojarla de mi ni un solo segundo
y es lo que me mantiene vivo de seguro
la película rota en mi mente una y otra vez
de la cual ambos somos participes
que tiene mas de mil versiones d amor
y guiones esperando por escribirse
no logro olvidarla al cielo le pido una explicacion
y caen gotas que se asemejan a mis lagrimas
pensado en lo hermozo que Fue Y puede ser el milagro de volver a encontrarla
que puede ser peor amar a alguien y no ser correspondio
o amarse ambos y que ese amor sea prohibido
no logro olvidarla y no creo que la olvide tardare mas de mil años en hallarla
pero la encontrare ..lo hare
de la mujer que logro despertarme de aquella pesadilla
con su sencilles y su divina comedia
hicieron que partiera asia otro lugar con ella
no logro despojarla de mi ni un solo segundo
y es lo que me mantiene vivo de seguro
la película rota en mi mente una y otra vez
de la cual ambos somos participes
que tiene mas de mil versiones d amor
y guiones esperando por escribirse
no logro olvidarla al cielo le pido una explicacion
y caen gotas que se asemejan a mis lagrimas
pensado en lo hermozo que Fue Y puede ser el milagro de volver a encontrarla
que puede ser peor amar a alguien y no ser correspondio
o amarse ambos y que ese amor sea prohibido
no logro olvidarla y no creo que la olvide tardare mas de mil años en hallarla
pero la encontrare ..lo hare
cesarobregone
El ser amado se halla en una región distante. No existe lamentaciones. La amistad se mantiene aún cuando estén lejos. Si el ser amado se encuentra distante significa que no ha llegado el tiempo de la auténtica hermandad entre los hombres, pero aún así, con lo logrado no hay motivo de lamentaciones.
I CHING
El que es sincero y accesible, pero mantiene su dignidad, se hará acreedor a grandes honores. Estar bajo la protección celestial, es recibir la bendición de la buena fortuna y el éxito. Indica resplandor de la fuerza, la vitalidad, la belleza y dignidad. Un lugar de prestigio.
I CHING
Siempre buscamos algo que nos haga felices, y no nos damos cuenta que la felicidad son momentos y constantemente estamos en la busqueda y al final sera que es lo que nos mantiene vivos... Al final todo depende de nosotros
Alessandro Mazariegos
La belleza de la mujer es solo comparable a las vistas que nos regala la naturaleza, quizás celosa de su ternura, la marchita con el tiempo, mientras ella, mantiene eterna su hermosura.
Paco Bravo
El amor no se irrita; no es malcriado, grosero ni enemigo, en los momentos de adversidad se mantiene la sabiduría, la prudencia, y decoro.
Jonathan Colina
2do Mensaje a alguién que escribe con el nombre de Tovlez:
Son muchos tus poemas de esperar a ese amor,
que te ha roto el corazón...
de estar pasivamente, solo escribiendo,
y soñando en tú mente...
te escribo esto, porque, bueno ya te comenté,
a mí me pasó algo parecido, pero bueno, en mi caso,
yo nunca existí para esa persona o bueno nunca me lo hizo saber, lo cierto es que solo me fuí y me quedé con su hermoso recuerdo solo guardado en mi corazón y mi mente...
el caso es que hoy iba a regresar, y eso me alegraba el solo pensar en volverlo a mirar; pero, hoy es muy difícil para mí, así que creo que por ahora no lo podré hacer...
El caso Tovlez, es que te aconsejo que no pierdas más tu tiempo, escribiendole al viento...
son tan hermosos esos poemas tuyos, que no creo que alguién se pueda resistir a no quererte y abrazarte, y más aún si son dedicados a esa persona que te inspira y mantiene con las esperanzas empujando los latidos de tú corazón...
Anda, y busca a esa persona, toca a su puerta y dile todo lo que sientes por ella, ojo! ve suave, para que no se asuste, a lo mejor ella también espera por tí...a tí como hombre te corresponde dar ese gran paso, y verás que después todo vá a cambiar y vas a ser feliz.
No sigas dejando pasar los días de tú vida, esperando a que ella regrese algún día, a lo mejor no puede regresar, pero igual seguramente ella piensa en tí...
Tovlez, escribes muy hermoso, y espero ver noticias tuyas, de poemas que ya no estén esperando a nadie, sino de poemas en donde expreses lo maravilloso que habrá sido haber encontrado a esa persona que esperas tanto...
Son muchos tus poemas de esperar a ese amor,
que te ha roto el corazón...
de estar pasivamente, solo escribiendo,
y soñando en tú mente...
te escribo esto, porque, bueno ya te comenté,
a mí me pasó algo parecido, pero bueno, en mi caso,
yo nunca existí para esa persona o bueno nunca me lo hizo saber, lo cierto es que solo me fuí y me quedé con su hermoso recuerdo solo guardado en mi corazón y mi mente...
el caso es que hoy iba a regresar, y eso me alegraba el solo pensar en volverlo a mirar; pero, hoy es muy difícil para mí, así que creo que por ahora no lo podré hacer...
El caso Tovlez, es que te aconsejo que no pierdas más tu tiempo, escribiendole al viento...
son tan hermosos esos poemas tuyos, que no creo que alguién se pueda resistir a no quererte y abrazarte, y más aún si son dedicados a esa persona que te inspira y mantiene con las esperanzas empujando los latidos de tú corazón...
Anda, y busca a esa persona, toca a su puerta y dile todo lo que sientes por ella, ojo! ve suave, para que no se asuste, a lo mejor ella también espera por tí...a tí como hombre te corresponde dar ese gran paso, y verás que después todo vá a cambiar y vas a ser feliz.
No sigas dejando pasar los días de tú vida, esperando a que ella regrese algún día, a lo mejor no puede regresar, pero igual seguramente ella piensa en tí...
Tovlez, escribes muy hermoso, y espero ver noticias tuyas, de poemas que ya no estén esperando a nadie, sino de poemas en donde expreses lo maravilloso que habrá sido haber encontrado a esa persona que esperas tanto...
cisne
Mi Corazón…
Una máquina perfecta, y trabaja sin ningún interés,
No descansa, y nos mantiene todos los sentidos atentos,
A todo lo que nos rodea en lo externo.
Música, armonía y acordes, son los que oímos en su trabajar,
Latidos coordinados, ritmo y melodías podemos interpretar.
Pareciera que no ve, que no siente, que solo trabaja, pero; Cuando se enamora, se descontrola y nos bloquea los sentidos,A veces quisiéramos tranquilizar, pero él no nos escucha, y nos arrastra al más allá,a mundos que no conocemos y que nos dan mucho miedo.
Mi corazón, no entiende lo que pasa? Y mucho menos lo que pasará?
Mi corazón, se tranquiliza al pensarte, al mirarte lejos en este momento.
Mi corazón, cuando te encuentra me empuja y quisiera abrazarte.
Mi corazón, sonríe a veces sin razón.
Mi corazón, se acelera al solo escuchar tú voz.
Mi corazón, late fuerte, fuerte, para que lo escuches,
Pero que tristeza que tú no oigas sus latidos,
y no todos podamos controlar nuestros sentidos.
Una máquina perfecta, y trabaja sin ningún interés,
No descansa, y nos mantiene todos los sentidos atentos,
A todo lo que nos rodea en lo externo.
Música, armonía y acordes, son los que oímos en su trabajar,
Latidos coordinados, ritmo y melodías podemos interpretar.
Pareciera que no ve, que no siente, que solo trabaja, pero; Cuando se enamora, se descontrola y nos bloquea los sentidos,A veces quisiéramos tranquilizar, pero él no nos escucha, y nos arrastra al más allá,a mundos que no conocemos y que nos dan mucho miedo.
Mi corazón, no entiende lo que pasa? Y mucho menos lo que pasará?
Mi corazón, se tranquiliza al pensarte, al mirarte lejos en este momento.
Mi corazón, cuando te encuentra me empuja y quisiera abrazarte.
Mi corazón, sonríe a veces sin razón.
Mi corazón, se acelera al solo escuchar tú voz.
Mi corazón, late fuerte, fuerte, para que lo escuches,
Pero que tristeza que tú no oigas sus latidos,
y no todos podamos controlar nuestros sentidos.
cisne25
LO DE OTRO
Lo que otro coma a ti no te mantiene
Lo que otro beba no calmara tu sed
Si pescar quieres debes tirar la red
Para vivir esta lo que tu mano tiene
Lo que otro sepa no te da conocimiento
Ni la riqueza ajena te dará comodidad
Los sueños de otro no son tu realidad
Ni lo que otro entienda tu discernimiento
La herida ajena a ti no te causara dolor
Ni los logros de otro serán tu realización
Así la osadía de otro no te dará valor
Lo nefasto de otro no te dará tristeza
Ni el desengaño de otro será tu desilusión
Ni la fortuna de cualquier otro tu riqueza
Lo que otro coma a ti no te mantiene
Lo que otro beba no calmara tu sed
Si pescar quieres debes tirar la red
Para vivir esta lo que tu mano tiene
Lo que otro sepa no te da conocimiento
Ni la riqueza ajena te dará comodidad
Los sueños de otro no son tu realidad
Ni lo que otro entienda tu discernimiento
La herida ajena a ti no te causara dolor
Ni los logros de otro serán tu realización
Así la osadía de otro no te dará valor
Lo nefasto de otro no te dará tristeza
Ni el desengaño de otro será tu desilusión
Ni la fortuna de cualquier otro tu riqueza
jureme
La niebla me acompaña
En esta oscura mañana,
Apaña la encaminada y
Evapora mis pisadas.
Camino solo y la neblina
Me disipa como avispa,
Un Cuervo nocturno que se avista
O un lobo que a su presa domina..
Un pez que escapa del pescador
Y un tiburón lo asesina.
Pero soy un niño que imagina la nada
Y la poesía lo mantiene con vida.
En esta oscura mañana,
Apaña la encaminada y
Evapora mis pisadas.
Camino solo y la neblina
Me disipa como avispa,
Un Cuervo nocturno que se avista
O un lobo que a su presa domina..
Un pez que escapa del pescador
Y un tiburón lo asesina.
Pero soy un niño que imagina la nada
Y la poesía lo mantiene con vida.
Bryan Vicencio
PARA ARISTÓTELES la amistad era "lo más necesario para la vida", y nosotros, cuando oímos decir que "un amigo es un tesoro" o que "donde está tu amigo está tu tesoro", nos damos cuenta de que esas palabras resuenan como un aldabonazo en nuestro interior. No nos dejan indiferentes, porque todos sabemos o intuimos qué clase de tesoro puede llegar a ser una amistad.
A las personas nos gusta tener amigos: gente con la que compartir vida, experiencias, tiempo, conversación... Nos gustan los amigos y nos parecen muy importantes, incluso imprescindibles. La amistad es una relación humana con un valor muy especial. Junto con la família y el trabajo, es algo que nos parece que merece la pena y a lo cual dedicamos tiempo y esfuerzo. Queremos tener amigos en la vida: para no estar solos -a veces se siente la soledad incluso estando rodeados de gente-, para vivir la vida más a fondo y para disfrutarla de verdad. Como escribió Aristóteles, "sin amigos nadie querría vivir, aun cuando poseyera todos los demás bienes".
Quizá por eso escribo esto. Escribir sobre la amistad me ayuda a saber qué espero yo de ella, qué doy yo a mis amigos, si mi amistad con ellos es plena o solo algo "satisfactorio". Reflexionar sobre las cosas ayuda a vivirlas mejor. Reflexionar es un modo de vivir.
LA AMISTAD COMO REGALO
Decía más arriba que dedicamos esfuerzo a hacer amigos. Y el esfuerzo es necesario porque las cosas no salen solas. Sin embargo, la amistad no se puede forzar. Por eso también puede decirse que la amistad surge siempre como un regalo, como un don que se recibe. En un momento dado, aparece entre dos personas un deseo de compartir, de comunicarse, de contar lo que se lleva dentro y de contrastarlo, de ser conocido muy a fondo. De hecho, cuando uno vislumbra en el horizonte la posibilidad de hacer una nueva amistad, de esas profundas y verdaderas, que aportan y llenan tanto por dentro, parece que su espíritu se hincha y crece. Es como ver nacer un día radiante. La vida se ve de otro color porque los amigos hacen cobrar sentido a nuestras vivencias: estas no van a ser solo para nosotros. Las cosas son distintas porque las vivimos pensando en compartirlas, en transmitirlas, en discutirlas, en compararlas. De nuestros amigos nos interesa todo: lo que piensan, lo que hacen, cómo viven las cosas. Lo importante no es solo lo que cuentan ni lo que les pasa; lo importante es que eso "es tuyo", "eres tú".
Desde mi adolescencia he experimentado disgusto ante los momentos meramente descriptivos de los acontecimientos, o las que eran como una reseña informativa de lo que había ocurrido en el verano. Los momentos verdaderos son aquellos en las que los acontecimientos del lunes o del viernes se describen como cosas que me pasan y no solo como cosas que van pasando a mi lado. Lo interesante y lo que me hace disfrutar era ver cómo esas cosas se viven desde dentro de mis amigos.
El grado de amistad con los amigos puede distinguirse precisamente por eso. Por si los momentos estaban llenos de preguntas convencionales y frases que se repetían del mismo modo en todas los demás momentos o si e ellos te dejas llevar, trayendo a colación esto o aquello, y acabando en lugares desconocidos para ti mismo, pero bonitos y en los que habías disfrutado. Escribir para los amigos es descubrir el mundo con unos ojos nuevos para dárselo a ellos.
La amistad es un regalo porque es vivir otra vida además de la propia. Es poder vivir dos veces. Y es también reafirmar tu propia existencia porque hay alguien que la quiere así: incondicionalmente. En el amigo encontramos aceptación plena.
La amistad es un don porque, en cierto modo, llega cuando y como quiere; no es programable; simplemente, surge y es como un regalo, un don que uno recibe.
Esa comunión del espíritu que hay entre los amigos, ese compartir denso e intenso, ese vivir y ser sin dar explicaciones porque estas no son necesarias para nuestro mutuo entendimiento, ese encontrar las puertas del alma siempre abiertas y acogedoras para ti porque eres tú, es el tesoro incalculable. No es extraño que los griegos la calificaran como regalo de los dioses.
Regalo es también en el sentido de que nunca es verdaderamente merecida. Si se puede hablar así, algunos podrían merecer más que otros el tener amigos. Pero, en el fondo, la amistad de una persona difícilmente es algo que uno llegue a "merecer". Se pueden tener de modo habitual disposiciones personales adecuadas para la amistad, para tener amigos (no todo el mundo las tiene).
Pero no se puede decidir en qué momento aparecerá el amigo o de quién seré amigo. Por ejemplo, todos contamos con momentos imborrables de la vida en los que comprendes repentinamente que tienes delante a alguien que puede leer dentro de ti como si fueras tú quien lo hiciera; que puede pasearse por tu alma sin explicaciones de tu parte; sin necesidad de mapas, brújulas o palabras clave que le hagan entender lo que se va a encontrar. Es la empatía, una sintonía especialísima que se establece con muy pocas personas a lo largo de la existencia, y que es un descenso y un ascenso vertiginoso por las entrañas de la verdadera vida.
MIRAR A LAS PERSONAS
Cuando nos sentimos así, vistos con unos ojos ajenos que al mismo tiempo son como los nuestros propios, es como si todo nuestro ser despertara. Querríamos saberlo todo acerca de aquella persona y que ella conociera nuestro yo hasta el final. Las conversaciones se convierten en un continuo maravillarse y aportarse mutuo. Sentimos el mundo como un pequeño globo terráqueo que gira entre nuestras manos y el motor de ese movimiento es la corriente que entre nosotros se ha creado.
Es un encuentro con otro yo, sin que ese yo se refiera a un yo idéntico, a un "alma gemela"; pues puede serlo o no. Es otro yo porque se pone en nuestra piel como si fuéramos nosotros mismos; pero al tiempo que mantiene su mismidad y su alteridad. Y por eso hay mucha riqueza en el trato con el amigo, porque lo distinto siempre nos enriquece.
Mirarnos en un amigo es mirarnos en un espejo. En un espejo que devuelve algo más que una simple reproducción de la propia imagen. Mirarnos en un amigo es encontrarnos a nosotros mismos vistos desde fuera y con mayor perspectiva, pero con el cuidado con que nosotros mismos pondríamos al mirarnos: "A través de él, los amigos se enriquecen y perfeccionan, se descubren e interpretan.
Se podría decir que, al ver al otro, cada uno de ellos aprende a conocerse" (Marias). La acción de mirar que tanto aparece entre los amigos, es algo que me parece esencial para que pueda surgir amistad entre dos personas para tener amigos hay que saber mirar.
En una carta que recibí hace unos meses me decía una amiga que "había encontrado el camino para trascender lo inmediato. El despertador para mirar (...) era el del pensamiento filosófico y la contemplación de las cosas bellas". En mi respuesta, le reafirmé en su descubrimiento porque me parecía realmente valioso: la filosofía y la contemplación estética son dos medios muy buenos para acceder a lo más hondo de la realidad.
La belleza es un camino hacia la verdad especialmente bueno. Porque la belleza no produce únicamente la mera delectación estética; posee una cualidad inestimable, y es que exige por nuestra parte contemplación. Ante las cosas bellas no basta pasear la vista. Para disfrutarlas verdaderamente hay que mirarlas con detenimiento, con miramiento. Con ellas hay que andarse con contemplaciones. Y contemplar es importante porque hace que nos detengamos y miremos las cosas tal como son, "dejando" que sean así.
La contemplación es un camino abierto hacia la verdad. Hacia la verdad personal, la de los demás y la del universo entero. Eso lo expresa muy bien de otro modo Lorenzo Silva en una de sus novelas. Escribía que "el mundo está lleno de tesoros sin descubrir porque no hay quien se pare a mirarlos. Pero en cuanto hay alguien que se detiene ante ellos, se abren ante esa persona como una maravillosa realidad llena de riqueza y significado ofreciéndole nuevos horizontes". Yo he pensado muchas veces que eso exactamente pasa con las personas.
Por eso, para tener amigos hay que saber mirar. Mirar es ver con atención, es contemplar, es concentrar nuestro ser entero en los ojos deseando captar lo que hay frente a ellos. Mirar presupone una vista limpia, sin prejuicios ni cargas anteriores, para captar lo que hay y no lo que yo he puesto o quiero poner. Mirar no es ver lo que yo quiero ver sino percibir cómo son las cosas o las personas en sí. Y además de limpieza interior, la mirada requiere también aceptación, renuncia a dominar. Cuando miramos de verdad, estamos dispuestos a dejar ser a las cosas y a las personas tal y como son. Esto es especialmente importante con las personas.
A las personas hay que dejarlas ser, hay que aceptarlas como son. Sin esa condición nunca sabremos lo que es una verdadera amistad; nunca llegaremos a saborear el gozo inmenso que produce esa identificación con el otro, ese compartir la vida, los sueños, los deseos, los fracasos. Habrá siempre en el amigo una zona de acceso prohibido o de "reservado".
Para mirar de verdad hay que aprender a hacerlo. Los hay que conocen ese arte de modo natural o han sido educados en él. Pero también puede aprenderse. Para mirar hay que pararse, parar la rueda de la actividad exterior y parar también nuestro ruido interior (qué tengo que hacer luego, cómo resolveré la cena en casa de mi hermano, qué ropa necesito, a ver cómo queda el Madrid, a ver si consigo cerrar un buen trato con este cliente...). Para mirar hay que perder el miedo a "pasar tiempo" sin haber sido ""eficaces"".
Todos hemos conocido a personas que provocan que los que están a su lado den lo mejor de sí mismos. Son personas que logran que los demás quieran -parafraseando a Salinas- "sacar de sí su mejor yo". Es así porque son personas que saben mirar, y que por eso han sabido encontrar la llave interior de las personas. Esa llave de la confianza que uno entrega solo cuando va a saberse visto, aceptado y querido por sí mismo.
LA MORADA DEL YO
Llegar a la intimidad del alma, al centro de la persona o solo rozar su periferia, exige rodeos: rodeos que son esencialmente contemplación, escucha atenta y activa, mirada abierta y receptiva. Solo cuando una persona percibe ese clima de confianza a su alrededor es capaz de empezar a abrir las rendijas de su yo. Y a través de esas rendijas pueden empezar a filtrarse los rayos de la luz que toda persona esconde. La intimidad, la interioridad, es siempre luminosa en el sentido de iluminadora. Porque muestra siempre algo desconocido para quien no está allí dentro. No siempre será lo original y nuevo el qué diga esa persona pero sí el cómo ella lo vive. Esta es la llave que entregamos a nuestros amigos y que hace que quedemos totalmente al descubierto: vulnerables, también.
Algunas veces, tras haber desnudado la intimidad del alma en conversación con la persona que nos ha inspirado esa confianza, uno siente el vértigo del miedo a romperse, a que le rompan, a que se burlen, a que no comprendan, al silencio indiferente o superficial.
Hasta ahora, esos pensamientos, deseos, aspiraciones, miedos y preguntas más íntimas habían quedado dentro de nuestra alma. A veces nos angustiaban, otras nos elevaban, otras nos desbordaban por dentro de tal forma, que había que expresarlos de algún modo (quién no ha cantado, llenado de piruetas su salón, compuesto una melodía o garabateado un poema, historia o carta, por puro desbordamiento. Tanto no cabía dentro; fuera crecía, pero tenía más apoyos para ser sostenido, para ser vivido).
Sin embargo, no dejaban de ser nuestros: los demás solo poseían de ellos su cara externa, lo que era fruto de la superabundancia. Por lo demás, no habían sido escuchados por nadie hasta el final y solo de vez en cuando abríamos a alguien una pequeña ventanita de nuestro interior, observando con atención la reacción del interlocutor ante aquello. Pero, de repente, hemos encontrado a alguien que ha provocado que primero quisiéramos abrir una ventanita y después otra, y otra... Luego le hemos pasado al interior de la casa y -poco a poco- le hemos encendido todas las luces que había en ella, iluminando incluso rincones sucios, destartalados, rincones sin ordenar o habitaciones llenas de trastos que no sabemos en dónde colocar. Le hemos enseñado el sillón de los sueños, frente a la ventana, y le hemos invitado a sentarse allí porque desde él puede conocerlos mejor. Le hemos presentado el rincón de los miedos, ese sí, está a oscuras porque nos parece que la luz acabará por hacerlos crecer. Es un rincón siempre difícil de enseñar; se supone que de esos no tenemos, y nos cuidamos mucho de dejarlos salir. También le hemos pasado al cuarto de las preguntas; esa habitación está llena de frases sueltas, de pensamientos, de párrafos incluso, y hasta de alguna página escrita. Pero sobre todo está lleno de interrogantes; es una habitación poblada de signos de interrogación que hemos ido recogiendo a lo largo de nuestra vida: por qué las relaciones humanas son tan complicadas, por qué hay personas que no miran hacia adentro, por qué las focas son más importantes que los países del Sur... Hay también un cuarto sin techo que mira directamente al sol, o al firmamento, si es de noche. Ese es el cuarto de las aspiraciones grandes, el cuarto en el que respiro hondo, el cuarto al que hay que acudir siempre que hemos pasado un día entre mucho polvo, o mucho tiempo en el sillón. También ha conocido la buhardilla; allí no vamos demasiadas veces porque es donde están los pedazos rotos de nuestra vida y todavía nos cuesta mirarlos sin sentir dolor o pena.
Hay personas a las que paseamos por nuestra morada interior sin miedo alguno; es más: deseamos desde lo más íntimo de nuestro ser hacerlo. Sentimos desde muy hondo que apreciará, entenderá y comprenderá cada objeto que encuentre en ella. No le importarán los cacharros rotos, aunque tengamos la estantería llena de ellos; no querrá reírse de nuestras inquietudes: se le iluminará la mirada al conocerlas porque . también ella las había sentido latir más de una vez. Le encantará que tengamos un sillón de sueños y un cuarto sin techo, y querrá saber qué nos dicen los astros por la noche y cómo es el vuelo de los pájaros que vemos pasar. Son personas que hacen que sintamos la necesidad de hacer crecer todo eso, de mostrárselo, de hacerlo vivir para ellas.
Esas personas son los amigos, el amigo aquel con quien me atrevo a ser yo misma; sin restricciones y sin temores. Esa persona con la que puedo decir todo porque todo lo va a entender en su contexto; esa persona con la que puedo hablar en borrador: sin orden, sin hilazón, sin sentido algunas veces. Con rabia o ira, con desesperación, con alegría exultante, desvariando. Descubriendo todas las raíces de mi alma y sabiendo que en ningún momento se aprovechará de ello para arrancarme de mi lugar. Y sabiendo que -como escribió alguien- "comprende esas contradicciones en mi naturaleza que llevarían a otros a juzgarme mal". Eso es un amigo.
A las personas nos gusta tener amigos: gente con la que compartir vida, experiencias, tiempo, conversación... Nos gustan los amigos y nos parecen muy importantes, incluso imprescindibles. La amistad es una relación humana con un valor muy especial. Junto con la família y el trabajo, es algo que nos parece que merece la pena y a lo cual dedicamos tiempo y esfuerzo. Queremos tener amigos en la vida: para no estar solos -a veces se siente la soledad incluso estando rodeados de gente-, para vivir la vida más a fondo y para disfrutarla de verdad. Como escribió Aristóteles, "sin amigos nadie querría vivir, aun cuando poseyera todos los demás bienes".
Quizá por eso escribo esto. Escribir sobre la amistad me ayuda a saber qué espero yo de ella, qué doy yo a mis amigos, si mi amistad con ellos es plena o solo algo "satisfactorio". Reflexionar sobre las cosas ayuda a vivirlas mejor. Reflexionar es un modo de vivir.
LA AMISTAD COMO REGALO
Decía más arriba que dedicamos esfuerzo a hacer amigos. Y el esfuerzo es necesario porque las cosas no salen solas. Sin embargo, la amistad no se puede forzar. Por eso también puede decirse que la amistad surge siempre como un regalo, como un don que se recibe. En un momento dado, aparece entre dos personas un deseo de compartir, de comunicarse, de contar lo que se lleva dentro y de contrastarlo, de ser conocido muy a fondo. De hecho, cuando uno vislumbra en el horizonte la posibilidad de hacer una nueva amistad, de esas profundas y verdaderas, que aportan y llenan tanto por dentro, parece que su espíritu se hincha y crece. Es como ver nacer un día radiante. La vida se ve de otro color porque los amigos hacen cobrar sentido a nuestras vivencias: estas no van a ser solo para nosotros. Las cosas son distintas porque las vivimos pensando en compartirlas, en transmitirlas, en discutirlas, en compararlas. De nuestros amigos nos interesa todo: lo que piensan, lo que hacen, cómo viven las cosas. Lo importante no es solo lo que cuentan ni lo que les pasa; lo importante es que eso "es tuyo", "eres tú".
Desde mi adolescencia he experimentado disgusto ante los momentos meramente descriptivos de los acontecimientos, o las que eran como una reseña informativa de lo que había ocurrido en el verano. Los momentos verdaderos son aquellos en las que los acontecimientos del lunes o del viernes se describen como cosas que me pasan y no solo como cosas que van pasando a mi lado. Lo interesante y lo que me hace disfrutar era ver cómo esas cosas se viven desde dentro de mis amigos.
El grado de amistad con los amigos puede distinguirse precisamente por eso. Por si los momentos estaban llenos de preguntas convencionales y frases que se repetían del mismo modo en todas los demás momentos o si e ellos te dejas llevar, trayendo a colación esto o aquello, y acabando en lugares desconocidos para ti mismo, pero bonitos y en los que habías disfrutado. Escribir para los amigos es descubrir el mundo con unos ojos nuevos para dárselo a ellos.
La amistad es un regalo porque es vivir otra vida además de la propia. Es poder vivir dos veces. Y es también reafirmar tu propia existencia porque hay alguien que la quiere así: incondicionalmente. En el amigo encontramos aceptación plena.
La amistad es un don porque, en cierto modo, llega cuando y como quiere; no es programable; simplemente, surge y es como un regalo, un don que uno recibe.
Esa comunión del espíritu que hay entre los amigos, ese compartir denso e intenso, ese vivir y ser sin dar explicaciones porque estas no son necesarias para nuestro mutuo entendimiento, ese encontrar las puertas del alma siempre abiertas y acogedoras para ti porque eres tú, es el tesoro incalculable. No es extraño que los griegos la calificaran como regalo de los dioses.
Regalo es también en el sentido de que nunca es verdaderamente merecida. Si se puede hablar así, algunos podrían merecer más que otros el tener amigos. Pero, en el fondo, la amistad de una persona difícilmente es algo que uno llegue a "merecer". Se pueden tener de modo habitual disposiciones personales adecuadas para la amistad, para tener amigos (no todo el mundo las tiene).
Pero no se puede decidir en qué momento aparecerá el amigo o de quién seré amigo. Por ejemplo, todos contamos con momentos imborrables de la vida en los que comprendes repentinamente que tienes delante a alguien que puede leer dentro de ti como si fueras tú quien lo hiciera; que puede pasearse por tu alma sin explicaciones de tu parte; sin necesidad de mapas, brújulas o palabras clave que le hagan entender lo que se va a encontrar. Es la empatía, una sintonía especialísima que se establece con muy pocas personas a lo largo de la existencia, y que es un descenso y un ascenso vertiginoso por las entrañas de la verdadera vida.
MIRAR A LAS PERSONAS
Cuando nos sentimos así, vistos con unos ojos ajenos que al mismo tiempo son como los nuestros propios, es como si todo nuestro ser despertara. Querríamos saberlo todo acerca de aquella persona y que ella conociera nuestro yo hasta el final. Las conversaciones se convierten en un continuo maravillarse y aportarse mutuo. Sentimos el mundo como un pequeño globo terráqueo que gira entre nuestras manos y el motor de ese movimiento es la corriente que entre nosotros se ha creado.
Es un encuentro con otro yo, sin que ese yo se refiera a un yo idéntico, a un "alma gemela"; pues puede serlo o no. Es otro yo porque se pone en nuestra piel como si fuéramos nosotros mismos; pero al tiempo que mantiene su mismidad y su alteridad. Y por eso hay mucha riqueza en el trato con el amigo, porque lo distinto siempre nos enriquece.
Mirarnos en un amigo es mirarnos en un espejo. En un espejo que devuelve algo más que una simple reproducción de la propia imagen. Mirarnos en un amigo es encontrarnos a nosotros mismos vistos desde fuera y con mayor perspectiva, pero con el cuidado con que nosotros mismos pondríamos al mirarnos: "A través de él, los amigos se enriquecen y perfeccionan, se descubren e interpretan.
Se podría decir que, al ver al otro, cada uno de ellos aprende a conocerse" (Marias). La acción de mirar que tanto aparece entre los amigos, es algo que me parece esencial para que pueda surgir amistad entre dos personas para tener amigos hay que saber mirar.
En una carta que recibí hace unos meses me decía una amiga que "había encontrado el camino para trascender lo inmediato. El despertador para mirar (...) era el del pensamiento filosófico y la contemplación de las cosas bellas". En mi respuesta, le reafirmé en su descubrimiento porque me parecía realmente valioso: la filosofía y la contemplación estética son dos medios muy buenos para acceder a lo más hondo de la realidad.
La belleza es un camino hacia la verdad especialmente bueno. Porque la belleza no produce únicamente la mera delectación estética; posee una cualidad inestimable, y es que exige por nuestra parte contemplación. Ante las cosas bellas no basta pasear la vista. Para disfrutarlas verdaderamente hay que mirarlas con detenimiento, con miramiento. Con ellas hay que andarse con contemplaciones. Y contemplar es importante porque hace que nos detengamos y miremos las cosas tal como son, "dejando" que sean así.
La contemplación es un camino abierto hacia la verdad. Hacia la verdad personal, la de los demás y la del universo entero. Eso lo expresa muy bien de otro modo Lorenzo Silva en una de sus novelas. Escribía que "el mundo está lleno de tesoros sin descubrir porque no hay quien se pare a mirarlos. Pero en cuanto hay alguien que se detiene ante ellos, se abren ante esa persona como una maravillosa realidad llena de riqueza y significado ofreciéndole nuevos horizontes". Yo he pensado muchas veces que eso exactamente pasa con las personas.
Por eso, para tener amigos hay que saber mirar. Mirar es ver con atención, es contemplar, es concentrar nuestro ser entero en los ojos deseando captar lo que hay frente a ellos. Mirar presupone una vista limpia, sin prejuicios ni cargas anteriores, para captar lo que hay y no lo que yo he puesto o quiero poner. Mirar no es ver lo que yo quiero ver sino percibir cómo son las cosas o las personas en sí. Y además de limpieza interior, la mirada requiere también aceptación, renuncia a dominar. Cuando miramos de verdad, estamos dispuestos a dejar ser a las cosas y a las personas tal y como son. Esto es especialmente importante con las personas.
A las personas hay que dejarlas ser, hay que aceptarlas como son. Sin esa condición nunca sabremos lo que es una verdadera amistad; nunca llegaremos a saborear el gozo inmenso que produce esa identificación con el otro, ese compartir la vida, los sueños, los deseos, los fracasos. Habrá siempre en el amigo una zona de acceso prohibido o de "reservado".
Para mirar de verdad hay que aprender a hacerlo. Los hay que conocen ese arte de modo natural o han sido educados en él. Pero también puede aprenderse. Para mirar hay que pararse, parar la rueda de la actividad exterior y parar también nuestro ruido interior (qué tengo que hacer luego, cómo resolveré la cena en casa de mi hermano, qué ropa necesito, a ver cómo queda el Madrid, a ver si consigo cerrar un buen trato con este cliente...). Para mirar hay que perder el miedo a "pasar tiempo" sin haber sido ""eficaces"".
Todos hemos conocido a personas que provocan que los que están a su lado den lo mejor de sí mismos. Son personas que logran que los demás quieran -parafraseando a Salinas- "sacar de sí su mejor yo". Es así porque son personas que saben mirar, y que por eso han sabido encontrar la llave interior de las personas. Esa llave de la confianza que uno entrega solo cuando va a saberse visto, aceptado y querido por sí mismo.
LA MORADA DEL YO
Llegar a la intimidad del alma, al centro de la persona o solo rozar su periferia, exige rodeos: rodeos que son esencialmente contemplación, escucha atenta y activa, mirada abierta y receptiva. Solo cuando una persona percibe ese clima de confianza a su alrededor es capaz de empezar a abrir las rendijas de su yo. Y a través de esas rendijas pueden empezar a filtrarse los rayos de la luz que toda persona esconde. La intimidad, la interioridad, es siempre luminosa en el sentido de iluminadora. Porque muestra siempre algo desconocido para quien no está allí dentro. No siempre será lo original y nuevo el qué diga esa persona pero sí el cómo ella lo vive. Esta es la llave que entregamos a nuestros amigos y que hace que quedemos totalmente al descubierto: vulnerables, también.
Algunas veces, tras haber desnudado la intimidad del alma en conversación con la persona que nos ha inspirado esa confianza, uno siente el vértigo del miedo a romperse, a que le rompan, a que se burlen, a que no comprendan, al silencio indiferente o superficial.
Hasta ahora, esos pensamientos, deseos, aspiraciones, miedos y preguntas más íntimas habían quedado dentro de nuestra alma. A veces nos angustiaban, otras nos elevaban, otras nos desbordaban por dentro de tal forma, que había que expresarlos de algún modo (quién no ha cantado, llenado de piruetas su salón, compuesto una melodía o garabateado un poema, historia o carta, por puro desbordamiento. Tanto no cabía dentro; fuera crecía, pero tenía más apoyos para ser sostenido, para ser vivido).
Sin embargo, no dejaban de ser nuestros: los demás solo poseían de ellos su cara externa, lo que era fruto de la superabundancia. Por lo demás, no habían sido escuchados por nadie hasta el final y solo de vez en cuando abríamos a alguien una pequeña ventanita de nuestro interior, observando con atención la reacción del interlocutor ante aquello. Pero, de repente, hemos encontrado a alguien que ha provocado que primero quisiéramos abrir una ventanita y después otra, y otra... Luego le hemos pasado al interior de la casa y -poco a poco- le hemos encendido todas las luces que había en ella, iluminando incluso rincones sucios, destartalados, rincones sin ordenar o habitaciones llenas de trastos que no sabemos en dónde colocar. Le hemos enseñado el sillón de los sueños, frente a la ventana, y le hemos invitado a sentarse allí porque desde él puede conocerlos mejor. Le hemos presentado el rincón de los miedos, ese sí, está a oscuras porque nos parece que la luz acabará por hacerlos crecer. Es un rincón siempre difícil de enseñar; se supone que de esos no tenemos, y nos cuidamos mucho de dejarlos salir. También le hemos pasado al cuarto de las preguntas; esa habitación está llena de frases sueltas, de pensamientos, de párrafos incluso, y hasta de alguna página escrita. Pero sobre todo está lleno de interrogantes; es una habitación poblada de signos de interrogación que hemos ido recogiendo a lo largo de nuestra vida: por qué las relaciones humanas son tan complicadas, por qué hay personas que no miran hacia adentro, por qué las focas son más importantes que los países del Sur... Hay también un cuarto sin techo que mira directamente al sol, o al firmamento, si es de noche. Ese es el cuarto de las aspiraciones grandes, el cuarto en el que respiro hondo, el cuarto al que hay que acudir siempre que hemos pasado un día entre mucho polvo, o mucho tiempo en el sillón. También ha conocido la buhardilla; allí no vamos demasiadas veces porque es donde están los pedazos rotos de nuestra vida y todavía nos cuesta mirarlos sin sentir dolor o pena.
Hay personas a las que paseamos por nuestra morada interior sin miedo alguno; es más: deseamos desde lo más íntimo de nuestro ser hacerlo. Sentimos desde muy hondo que apreciará, entenderá y comprenderá cada objeto que encuentre en ella. No le importarán los cacharros rotos, aunque tengamos la estantería llena de ellos; no querrá reírse de nuestras inquietudes: se le iluminará la mirada al conocerlas porque . también ella las había sentido latir más de una vez. Le encantará que tengamos un sillón de sueños y un cuarto sin techo, y querrá saber qué nos dicen los astros por la noche y cómo es el vuelo de los pájaros que vemos pasar. Son personas que hacen que sintamos la necesidad de hacer crecer todo eso, de mostrárselo, de hacerlo vivir para ellas.
Esas personas son los amigos, el amigo aquel con quien me atrevo a ser yo misma; sin restricciones y sin temores. Esa persona con la que puedo decir todo porque todo lo va a entender en su contexto; esa persona con la que puedo hablar en borrador: sin orden, sin hilazón, sin sentido algunas veces. Con rabia o ira, con desesperación, con alegría exultante, desvariando. Descubriendo todas las raíces de mi alma y sabiendo que en ningún momento se aprovechará de ello para arrancarme de mi lugar. Y sabiendo que -como escribió alguien- "comprende esas contradicciones en mi naturaleza que llevarían a otros a juzgarme mal". Eso es un amigo.
Diego Torrente
Los médicos saben que la salud de una población no se obtiene o mantiene con los medicamentos, que es mucho mejor, más fácil y prudente adoptar medidas preventivas para evitar enfermedades.
Robert Owen
Nadie debería decir que se mantiene lejos de los pobres porque sus opciones de vida implican prestar más atención a otros asuntos
Papa Francisco
El problema es que cuando el gobierno controla la economía, los que pueden influir en el gobierno siguen ganando, y todo el mundo solo se mantiene igual.
Marco Rubio
LO DE OTRO
Lo que otro coma a ti no te mantiene
Lo que otro beba no calmara tu sed
Si pescar quieres debes tirar la red
Para vivir esta lo que tu mano tiene
Lo que otro sepa no te da conocimiento
Ni la riqueza ajena te dará comodidad
Los sueños de otro no son tu realidad
Ni lo que otro entienda tu discernimiento
La herida ajena a ti no te causara dolor
Ni los logros de otro serán tu realización
Así la osadía de otro no te dará valor
Lo nefasto de otro no te dará tristeza
Ni el desengaño de otro será tu desilusión
Ni la fortuna de cualquier otro tu riqueza
No eres reo si otro es quien mata
Mas si tú matas no será otro el reo
La acción tuya no es del otro creo
Ni el juicio de otro tuyo si la ley acata
De tus errores no es otro el culpable
Tus fracasos no son de otro derrota
El mensaje para otro no será tu nota
Ni de tus fallos es otro el responsable
Con que otro camine tú jamás avanza
Ni otro avanza si eres tu quien camina
Tampoco el triunfo tuyo si otro lo alcanza
Tampoco es tuya la torre que otro erige
Padre no eres si otro es quien insemina
Tampoco tuya la pena que a otro aflige
Lo que otro coma a ti no te mantiene
Lo que otro beba no calmara tu sed
Si pescar quieres debes tirar la red
Para vivir esta lo que tu mano tiene
Lo que otro sepa no te da conocimiento
Ni la riqueza ajena te dará comodidad
Los sueños de otro no son tu realidad
Ni lo que otro entienda tu discernimiento
La herida ajena a ti no te causara dolor
Ni los logros de otro serán tu realización
Así la osadía de otro no te dará valor
Lo nefasto de otro no te dará tristeza
Ni el desengaño de otro será tu desilusión
Ni la fortuna de cualquier otro tu riqueza
No eres reo si otro es quien mata
Mas si tú matas no será otro el reo
La acción tuya no es del otro creo
Ni el juicio de otro tuyo si la ley acata
De tus errores no es otro el culpable
Tus fracasos no son de otro derrota
El mensaje para otro no será tu nota
Ni de tus fallos es otro el responsable
Con que otro camine tú jamás avanza
Ni otro avanza si eres tu quien camina
Tampoco el triunfo tuyo si otro lo alcanza
Tampoco es tuya la torre que otro erige
Padre no eres si otro es quien insemina
Tampoco tuya la pena que a otro aflige
jureme
El sistema no castiga a sus hombres: los premia. No encarcela a sus verdugos: los mantiene.
Rodolfo Walsh
La vida no se mantiene por sí misma. Aquel que nos la ha dado, ha dejado a cargo nuestro el cuidado de mantenerla, desarrollarla y perfeccionarla.
Frédéric Bastiat