Oraciones de duelo ( 2 )
Oraciones de duelo. Encuentra docenas de oraciones de duelo con fotos para copiar y compartir.
Tardes de Lluvia
Bate la lluvia la vidriera
y las rejas de los balcones,
donde tupida enredadera
cuelga sus floridos festones.
Bajo las hojas de los álamos
que estremecen los vientos frescos,
piar se escucha entre sus tálamos
a los gorriones picarescos.
Abrillántase los laureles,
y en la arena de los jardines
sangran corolas de claveles,
nievan pétalos de jazmines.
Al último fulgor del día
que aún el espacio gris clarea,
abre su botón la peonía,
cierra su cáliz la ninfea.
Cual los esquifes en la rada
y reprimiendo sus arranques,
duermen los cisnes en bandada
a la margen de los estanques.
Parpadean las rojas llamas
de los faroles encendidos,
y se difunden por las ramas
acres olores de los nidos.
Lejos convoca la campana,
dando sus toques funerales,
a que levante el alma humana
las oraciones vesperales.
Todo parece que agoniza
y que se envuelve lo creado
en un sudario de ceniza
por la llovizna adiamantado.
Yo creo oír lejanas voces
que, surgiendo de lo infinito,
inícianme en extraños goces
fuera del mundo en que me agito.
Veo pupilas que en las brumas
dirígenme tiernas miradas,
como si de mis ansias sumas
ya se encontrasen apiadadas.
Y, a la muerte de estos crepúsculos,
siento, sumido en mortal calma,
vagos dolores en los múscolos,
hondas tristezas en el alma.
Bate la lluvia la vidriera
y las rejas de los balcones,
donde tupida enredadera
cuelga sus floridos festones.
Bajo las hojas de los álamos
que estremecen los vientos frescos,
piar se escucha entre sus tálamos
a los gorriones picarescos.
Abrillántase los laureles,
y en la arena de los jardines
sangran corolas de claveles,
nievan pétalos de jazmines.
Al último fulgor del día
que aún el espacio gris clarea,
abre su botón la peonía,
cierra su cáliz la ninfea.
Cual los esquifes en la rada
y reprimiendo sus arranques,
duermen los cisnes en bandada
a la margen de los estanques.
Parpadean las rojas llamas
de los faroles encendidos,
y se difunden por las ramas
acres olores de los nidos.
Lejos convoca la campana,
dando sus toques funerales,
a que levante el alma humana
las oraciones vesperales.
Todo parece que agoniza
y que se envuelve lo creado
en un sudario de ceniza
por la llovizna adiamantado.
Yo creo oír lejanas voces
que, surgiendo de lo infinito,
inícianme en extraños goces
fuera del mundo en que me agito.
Veo pupilas que en las brumas
dirígenme tiernas miradas,
como si de mis ansias sumas
ya se encontrasen apiadadas.
Y, a la muerte de estos crepúsculos,
siento, sumido en mortal calma,
vagos dolores en los múscolos,
hondas tristezas en el alma.
Julián del Casal
Con Qué Dolor...
¡Con qué dolor, y válgame ser franco,
trazo los versos que a mi lado impetras!
Esta cuartilla de papel en blanco
me parece una lápida sin letras.
Tristísimo recuerdo me acongoja
y pienso, visionario como un zafio,
que escribo, no una endecha en una hoja,
sino sobre un sepulcro un epitafio.
No extrañes, no, que mi razón sucumba
a esta ilusión que envuelve algo de cierto
porque, ay, tu corazón es una tumba
desde el instante en que tu amor fue un muerto.
¡Tu amor! Ve el mío que cual ámbar de oro
paréceme que nunca se consume,
que ni siquiera sufre deterioro
aunque despida sin cesar perfume.
Mas ¿a dónde me lleva mi extravío?
Perdona a mi amargura ese reproche.
Por ti puedo decir como el judío:
¡un ángel ha pasado por mi noche!
Por ti en el molde general no cupe;
quise ovaciones, codicié oropeles
y en la tribuna y con la lira supe
ganar aplausos y obtener laureles.
Después... ¡mi gloria huyó con mi ventura
y, como nube tenebrosa, el duelo
ha cerrado en mi alma la abertura
que daba grande y esplendente al cielo!
Adiós. Dejo a tus plantas un gemido
y retorno a la sombra más espesa
pues vuelvo a la que reina en el olvido,
y no hay otra tan negra como ésa.
¡Con qué dolor, y válgame ser franco,
trazo los versos que a mi lado impetras!
Esta cuartilla de papel en blanco
me parece una lápida sin letras.
Tristísimo recuerdo me acongoja
y pienso, visionario como un zafio,
que escribo, no una endecha en una hoja,
sino sobre un sepulcro un epitafio.
No extrañes, no, que mi razón sucumba
a esta ilusión que envuelve algo de cierto
porque, ay, tu corazón es una tumba
desde el instante en que tu amor fue un muerto.
¡Tu amor! Ve el mío que cual ámbar de oro
paréceme que nunca se consume,
que ni siquiera sufre deterioro
aunque despida sin cesar perfume.
Mas ¿a dónde me lleva mi extravío?
Perdona a mi amargura ese reproche.
Por ti puedo decir como el judío:
¡un ángel ha pasado por mi noche!
Por ti en el molde general no cupe;
quise ovaciones, codicié oropeles
y en la tribuna y con la lira supe
ganar aplausos y obtener laureles.
Después... ¡mi gloria huyó con mi ventura
y, como nube tenebrosa, el duelo
ha cerrado en mi alma la abertura
que daba grande y esplendente al cielo!
Adiós. Dejo a tus plantas un gemido
y retorno a la sombra más espesa
pues vuelvo a la que reina en el olvido,
y no hay otra tan negra como ésa.
Salvador DÃaz Mirón
A Un Arroyo
A mi hermano Juan de Dios Peza
Cuando todo era flores tu camino,
cuando todo era pájaros tu ambiente,
cediendo de tu curso a la pendiente
todo era en tí fugaz y repentino.
Vino el invierno con sus nieblas vino
el hielo que hoy estanca tu corriente,
y en situación tan triste y diferente
ni aún un pálido sol te da el destino.
Y así en la vida el incesante vuelo
mientras que todo es ilusión, avanza
en solo una hora cuanto mide un cielo;
Y cuando el duelo asoma en lontananza
entonces como tú cambiada en hielo
no puede reflejar ni la esperanza.
A mi hermano Juan de Dios Peza
Cuando todo era flores tu camino,
cuando todo era pájaros tu ambiente,
cediendo de tu curso a la pendiente
todo era en tí fugaz y repentino.
Vino el invierno con sus nieblas vino
el hielo que hoy estanca tu corriente,
y en situación tan triste y diferente
ni aún un pálido sol te da el destino.
Y así en la vida el incesante vuelo
mientras que todo es ilusión, avanza
en solo una hora cuanto mide un cielo;
Y cuando el duelo asoma en lontananza
entonces como tú cambiada en hielo
no puede reflejar ni la esperanza.
Manuel Acuña
Oración de Un Desocupado
Padre,
desde los cielos bájate, he olvidado
las oraciones que me enseñó la abuela,
pobrecita, ella reposa ahora,
no tiene que lavar, limpiar, no tiene
que preocuparse andando el día por la ropa,
no tiene que velar la noche, pena y pena,
rezar, pedirte cosas, rezongarte dulcemente.
Desde los cielos bájate, si estás, bájate entonces,
que me muero de hambre en esta esquina,
que no sé de qué sirve haber nacido,
que me miro las manos rechazadas,
que no hay trabajo, no hay,
bájate un poco, contempla
esto que soy, este zapato roto,
esta angustia, este estómago vacío,
esta ciudad sin pan para mis dientes, la fiebre
cavándome la carne,
este dormir así,
bajo la lluvia, castigado por el frío, perseguido
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
tócame el alma, mírame
el corazón,!
yo no robé, no asesiné, fui niño
y en cambio me golpean y golpean,
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
si estás, que busco
resignación en mí y no tengo y voy
a agarrarme la rabia y a afilarla
para pegar y voy
a gritar a sangre en cuello
Padre,
desde los cielos bájate, he olvidado
las oraciones que me enseñó la abuela,
pobrecita, ella reposa ahora,
no tiene que lavar, limpiar, no tiene
que preocuparse andando el día por la ropa,
no tiene que velar la noche, pena y pena,
rezar, pedirte cosas, rezongarte dulcemente.
Desde los cielos bájate, si estás, bájate entonces,
que me muero de hambre en esta esquina,
que no sé de qué sirve haber nacido,
que me miro las manos rechazadas,
que no hay trabajo, no hay,
bájate un poco, contempla
esto que soy, este zapato roto,
esta angustia, este estómago vacío,
esta ciudad sin pan para mis dientes, la fiebre
cavándome la carne,
este dormir así,
bajo la lluvia, castigado por el frío, perseguido
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
tócame el alma, mírame
el corazón,!
yo no robé, no asesiné, fui niño
y en cambio me golpean y golpean,
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
si estás, que busco
resignación en mí y no tengo y voy
a agarrarme la rabia y a afilarla
para pegar y voy
a gritar a sangre en cuello
Juan Gelman
Interior
Tu piel me devolvía
algo remoto. (¿Es esto
un Poema de amor?
¿Es un canto de duelo
o de esperanza? Un himno
triunfal o una nostalgia
acariciada sobre
la realidad?)
No había
nadie, sino nosotros.
(Los demás no existían.)
Una botella, un libro,
un cenicero. Ahora
la vida es de cristal,
de metal, de papel.
Ahora es la botella
más bella que una flor.
El cenicero tiene
el sonámbulo brillo
de las olas. El libro
es una roca... (¿Es esto
un poema de amor?)
En una habitación
en penumbra, entre el humo
que nos aleja... (¿Es esto
un Poema de amor?) 25
...sin hablar...(nada está
dicho aún...).
Olvidaba
otra cosa: la música
frutal, el corazón
errante de los siglos,
suena para nosotros.
Toqué tu frente como
si me fuera a morir
un instante después.
Igual que si me anclases
a la verdad. (¿Es esto
un poema de amor?
¿Fuimos sus criatura
melancólicas...?)
Libro,
botella, cenicero.
(No flor, ni ola, ni rocas.)
He llamado a las cosas
por su nombre, aunque el nombre
rompa el hechizo. Quiero
todo aquello que ha sido
el instante, su carne
y su alma (no solo
su alma), lo que el tiempo
roe (no lo que el tiempo
purifica).
Al contacto
de tu frente, los días
volaban desprendidos
de la copa. Pensé
que los días... ¿Amor
es eso que devuelve
el tiempo huido? ¿Eras
entonces el amor?
¿Me estoy cantando a mí,
recobrado y perdido?
¿Al amor, al que duerme
bajo tu piel, la pobre
criatura del cielo
destinada a morir
sin haber conocido
sus imposibles padres.
Tu piel me devolvía
algo remoto. (¿Es esto
un Poema de amor?
¿Es un canto de duelo
o de esperanza? Un himno
triunfal o una nostalgia
acariciada sobre
la realidad?)
No había
nadie, sino nosotros.
(Los demás no existían.)
Una botella, un libro,
un cenicero. Ahora
la vida es de cristal,
de metal, de papel.
Ahora es la botella
más bella que una flor.
El cenicero tiene
el sonámbulo brillo
de las olas. El libro
es una roca... (¿Es esto
un poema de amor?)
En una habitación
en penumbra, entre el humo
que nos aleja... (¿Es esto
un Poema de amor?) 25
...sin hablar...(nada está
dicho aún...).
Olvidaba
otra cosa: la música
frutal, el corazón
errante de los siglos,
suena para nosotros.
Toqué tu frente como
si me fuera a morir
un instante después.
Igual que si me anclases
a la verdad. (¿Es esto
un poema de amor?
¿Fuimos sus criatura
melancólicas...?)
Libro,
botella, cenicero.
(No flor, ni ola, ni rocas.)
He llamado a las cosas
por su nombre, aunque el nombre
rompa el hechizo. Quiero
todo aquello que ha sido
el instante, su carne
y su alma (no solo
su alma), lo que el tiempo
roe (no lo que el tiempo
purifica).
Al contacto
de tu frente, los días
volaban desprendidos
de la copa. Pensé
que los días... ¿Amor
es eso que devuelve
el tiempo huido? ¿Eras
entonces el amor?
¿Me estoy cantando a mí,
recobrado y perdido?
¿Al amor, al que duerme
bajo tu piel, la pobre
criatura del cielo
destinada a morir
sin haber conocido
sus imposibles padres.
José Hierro
El ajedrez se trata de un duelo de un hombre contra otro, donde lo que es la personalidad del hombre queda comprometida. Cada jugador lucha contra su enemigo interior que es su torpeza o sus hallazgos.
Juan José Arreola
Inextinguibles
¡Oh tú que duermes tan hondo
que no despiertas!
Milagrosas de vivas,
milagrosas de muertas,
y por muertas y vivas
eternamente abiertas,
alguna noche en duelo
yo encuentro tus pupilas
bajo un trapo de sombra
o una blonda de luna.
Bebo en ellas la Calma
como en una laguna.
Por hondas, por calladas,
por buenas, por tranquilas
un lecho o una tumba
parece cada una.
¡Oh tú que duermes tan hondo
que no despiertas!
Milagrosas de vivas,
milagrosas de muertas,
y por muertas y vivas
eternamente abiertas,
alguna noche en duelo
yo encuentro tus pupilas
bajo un trapo de sombra
o una blonda de luna.
Bebo en ellas la Calma
como en una laguna.
Por hondas, por calladas,
por buenas, por tranquilas
un lecho o una tumba
parece cada una.
Delmira Agustini
El Parto
Mujer, toda mi sangre está presente
contigo en esa lucha que sostienes.
Contigo está mi amor incandescente
y en tu llanto y tu duelo me contienes.
Nunca en la vida estuve tan de prisa
tan lleno de relámpagos y ruegos,
como ahora que ha muerto tu sonrisa
y están con tu dolor todos los fuegos.
Nunca estuvo mi amor tan a tu lado,
nunca como esta noche de tortura
cuando sufre mi amor crucificado
en el mismo tablón de tu amargura.
Mujer, toda mi sangre está presente
contigo en esa lucha que sostienes.
Contigo está mi amor incandescente
y en tu llanto y tu duelo me contienes.
Nunca en la vida estuve tan de prisa
tan lleno de relámpagos y ruegos,
como ahora que ha muerto tu sonrisa
y están con tu dolor todos los fuegos.
Nunca estuvo mi amor tan a tu lado,
nunca como esta noche de tortura
cuando sufre mi amor crucificado
en el mismo tablón de tu amargura.
Jorge Debravo
Esperanza
¡Esperar! ¡Esperar! Mientras, el cielo
cuelga nubes de oro a las lluviosas;
las espigas suceden a las rosas;
las hojas secas a la espiga; el yelo
sepulta la hoja seca; en largo duelo,
despide el ruiseñor las amorosas
noches; y las volubles mariposas
doblan en el caliente sol su vuelo.
Ahora, a la candela campesina,
la lenta cuna de mis sueños mecen
los vientos del octubre colorado...
La carne se me torna más divina,
viejas, las ilusiones, encanecen,
y lo que espero ¡ay! es mi pasado.
¡Esperar! ¡Esperar! Mientras, el cielo
cuelga nubes de oro a las lluviosas;
las espigas suceden a las rosas;
las hojas secas a la espiga; el yelo
sepulta la hoja seca; en largo duelo,
despide el ruiseñor las amorosas
noches; y las volubles mariposas
doblan en el caliente sol su vuelo.
Ahora, a la candela campesina,
la lenta cuna de mis sueños mecen
los vientos del octubre colorado...
La carne se me torna más divina,
viejas, las ilusiones, encanecen,
y lo que espero ¡ay! es mi pasado.
Juan Ramón Jiménez
Ay, Voz Secreta
Ay voz secreta del amor oscuro
¡ay balido sin lanas! ¡ay herida!
¡ay aguja de hiel, camelia hundida!
¡ay corriente sin mar, ciudad sin muro!
¡Ay noche inmensa de perfil seguro,
montaña celestial de angustia erguida!
¡Ay silencio sin fin, lirio maduro!
Huye de mi, caliente voz de hielo,
no me quieras perder en la maleza
donde sin fruto gimen carne y cielo.
Deja el duro marfil de mi cabeza
apiádate de mi, ¡rompe mi duelo!
¡que soy amor, que soy naturaleza!
Ay voz secreta del amor oscuro
¡ay balido sin lanas! ¡ay herida!
¡ay aguja de hiel, camelia hundida!
¡ay corriente sin mar, ciudad sin muro!
¡Ay noche inmensa de perfil seguro,
montaña celestial de angustia erguida!
¡Ay silencio sin fin, lirio maduro!
Huye de mi, caliente voz de hielo,
no me quieras perder en la maleza
donde sin fruto gimen carne y cielo.
Deja el duro marfil de mi cabeza
apiádate de mi, ¡rompe mi duelo!
¡que soy amor, que soy naturaleza!
Federico GarcÃa Lorca
APRENDIENDO...
He aprendido que no puedo hacer que alguien me ame, solo convertirme en alguien a quien se puede amar. El resto depende de los otros.
He aprendido que se pueden requerir años para construir la confianza y únicamente segundos para destruirla.
He aprendido que lo que verdaderamente cuenta en la vida no son las cosas que tengo alrededor, sino las personas.
He aprendido que no puedo compararme con lo mejor que hacen los demás, sino con lo mejor que puedo hacer yo.
He aprendido que hay cosas que puedo hacer en un instante y que pueden ocasionar dolor toda una vida...
He aprendido que puedo llegar mucho más lejos de lo que pensé posible.
He aprendido que los héroes son las personas que hacen aquello de lo que están convencidos, a pesar de las consecuencias.
He aprendido que el dinero es un pésimo indicador del valor de algo o alguien...
He aprendido que en muchos momentos tengo el derecho de estar enojado, más no el derecho de ser cruel.
He aprendido que el verdadero amor y la verdadera amistad, continúan creciendo a pesar de las distancias...
He aprendido que por más fuerte que sea mi duelo, el mundo no se detiene por mi dolor...
He aprendido que mientras mis antecedentes y circunstancias puedan haber influenciado en lo que soy, yo soy el responsable de lo que llego a ser...
He aprendido que dos personas pueden mirar la misma cosa y ver algo totalmente diferente.
He aprendido que el paradigma en el que vivo no es la única opción que tengo...
He aprendido que aunque la palabra amor pueda tener diferentes significados, pierde su valor cuando se utiliza
con ligereza..
He aprendido que sin duda alguna seguire aprendiendo... He aprendido que sin importar las circunstancias, cuando soy honesto conmigo, llego más lejos en la vida...
He aprendido que no puedo hacer que alguien me ame, solo convertirme en alguien a quien se puede amar. El resto depende de los otros.
He aprendido que se pueden requerir años para construir la confianza y únicamente segundos para destruirla.
He aprendido que lo que verdaderamente cuenta en la vida no son las cosas que tengo alrededor, sino las personas.
He aprendido que no puedo compararme con lo mejor que hacen los demás, sino con lo mejor que puedo hacer yo.
He aprendido que hay cosas que puedo hacer en un instante y que pueden ocasionar dolor toda una vida...
He aprendido que puedo llegar mucho más lejos de lo que pensé posible.
He aprendido que los héroes son las personas que hacen aquello de lo que están convencidos, a pesar de las consecuencias.
He aprendido que el dinero es un pésimo indicador del valor de algo o alguien...
He aprendido que en muchos momentos tengo el derecho de estar enojado, más no el derecho de ser cruel.
He aprendido que el verdadero amor y la verdadera amistad, continúan creciendo a pesar de las distancias...
He aprendido que por más fuerte que sea mi duelo, el mundo no se detiene por mi dolor...
He aprendido que mientras mis antecedentes y circunstancias puedan haber influenciado en lo que soy, yo soy el responsable de lo que llego a ser...
He aprendido que dos personas pueden mirar la misma cosa y ver algo totalmente diferente.
He aprendido que el paradigma en el que vivo no es la única opción que tengo...
He aprendido que aunque la palabra amor pueda tener diferentes significados, pierde su valor cuando se utiliza
con ligereza..
He aprendido que sin duda alguna seguire aprendiendo... He aprendido que sin importar las circunstancias, cuando soy honesto conmigo, llego más lejos en la vida...
desconhecido reconstruido por Layra
Mi Amante
Desnuda, mi funesta amante
de piel vencida y casta como deshabitada,
sacudes sobre el lecho voces
y ternuras contrarias a mis manos,
y un crepúsculo escucho entre tu cuerpo
cuando al caer en ti agonizo
en un nacer marchito, sin el duelo
comparable al temor de tu agonía.
Contigo transparento la caída
de un alud o huracán de rosas:
suspiros de manzanas en tumulto
diciéndome que el hombre está vencido,
confuso en amarguras y vacías miradas.
En ti respondo al mundo, y en tu cuerpo
respiro ese sabor de los sepulcros;
una noche no más, y tu mirada
persiste, implora y vence entre mis ojos,
decidida a una lucha prolongada
donde el recuerdo se convierte
en esa área languidez del pensamiento,
como materia de tus ojos mismos.
Lloras a veces arrojando
fúnebres aguas de perfume ciego,
como si desprendida de una antigua idea
vinieras hasta mí, tan clara
como un ángel dormido en el espacio,
a dejar evidencia, luz y vida;
y en tus lágrimas miro surgir tu suave piel
como si en ellas prolongaras
o hicieras más probable tu existencia,
derramando el aroma de tu sueño
sobre esta soledad de tu desnudo.
Desnuda, mi funesta amante
de piel vencida y casta como deshabitada,
sacudes sobre el lecho voces
y ternuras contrarias a mis manos,
y un crepúsculo escucho entre tu cuerpo
cuando al caer en ti agonizo
en un nacer marchito, sin el duelo
comparable al temor de tu agonía.
Contigo transparento la caída
de un alud o huracán de rosas:
suspiros de manzanas en tumulto
diciéndome que el hombre está vencido,
confuso en amarguras y vacías miradas.
En ti respondo al mundo, y en tu cuerpo
respiro ese sabor de los sepulcros;
una noche no más, y tu mirada
persiste, implora y vence entre mis ojos,
decidida a una lucha prolongada
donde el recuerdo se convierte
en esa área languidez del pensamiento,
como materia de tus ojos mismos.
Lloras a veces arrojando
fúnebres aguas de perfume ciego,
como si desprendida de una antigua idea
vinieras hasta mí, tan clara
como un ángel dormido en el espacio,
a dejar evidencia, luz y vida;
y en tus lágrimas miro surgir tu suave piel
como si en ellas prolongaras
o hicieras más probable tu existencia,
derramando el aroma de tu sueño
sobre esta soledad de tu desnudo.
Alà Chumacero
TU Y YO (POEMAS)
Si la vida de mi te separó
aquí te reúno de nuevo
tus pensamientos de juventud
y los míos desde que te conocí
nuestros sentimientos y recuerdos
como un himno a la posteridad.
Tus clamores conocí
hasta ayer que los descubrí
los míos, algunos te susurré
otros ocultos quedaron
los tuyos en mi recuerdo llevare
y los míos en plegarias te aclamaré.
Ni la muerte podrá separarlos
porque yo los llevo a diario
serán mi libro de oraciones
en tus cumpleaños regalos
para tus hijas cuentas de sus rosario
y todos llenarnos de tu paz y bendiciones.
2010/06/23.
Si la vida de mi te separó
aquí te reúno de nuevo
tus pensamientos de juventud
y los míos desde que te conocí
nuestros sentimientos y recuerdos
como un himno a la posteridad.
Tus clamores conocí
hasta ayer que los descubrí
los míos, algunos te susurré
otros ocultos quedaron
los tuyos en mi recuerdo llevare
y los míos en plegarias te aclamaré.
Ni la muerte podrá separarlos
porque yo los llevo a diario
serán mi libro de oraciones
en tus cumpleaños regalos
para tus hijas cuentas de sus rosario
y todos llenarnos de tu paz y bendiciones.
2010/06/23.
Ignacio Rivas Castro
Juego A Dos
Como gota que resbalara
y no acabando la línea
de su cabeza
prende contra la luz
también hermosa, y abrasas.
Ya tengo doble la muerte
sin conseguir rehacerme
de tu perfil que avanza.
Un nudo de miel concentras
está cayendo
de la sien a mis labios
y de ahí al juego de tus manos.
Detenida estoy. Enamorada
con aire libertad en bosque.
El error es no mirarte de frente
apresar el ave
que se mece en la rama y suspiro
y se espanta.
Acaba con el juego, amor mío
que la niña se duele de comba
paciente su cadencia avaricias
no estrellando tu cuerpo
a favor de la reina.
Juego a dos es duelo
haciendo parteluz
hoguera en el bosque
y la rama te pide
benevolencia.
Entonces yo soy
quien el relevo toma
y nos vamos de una vez
de esta leña a más incendio.
Juego a dos porque
se siente la muerte.
De: Pasión inédita
Como gota que resbalara
y no acabando la línea
de su cabeza
prende contra la luz
también hermosa, y abrasas.
Ya tengo doble la muerte
sin conseguir rehacerme
de tu perfil que avanza.
Un nudo de miel concentras
está cayendo
de la sien a mis labios
y de ahí al juego de tus manos.
Detenida estoy. Enamorada
con aire libertad en bosque.
El error es no mirarte de frente
apresar el ave
que se mece en la rama y suspiro
y se espanta.
Acaba con el juego, amor mío
que la niña se duele de comba
paciente su cadencia avaricias
no estrellando tu cuerpo
a favor de la reina.
Juego a dos es duelo
haciendo parteluz
hoguera en el bosque
y la rama te pide
benevolencia.
Entonces yo soy
quien el relevo toma
y nos vamos de una vez
de esta leña a más incendio.
Juego a dos porque
se siente la muerte.
De: Pasión inédita
Pureza Canelo
Aun espero recuerdes esa cancion
que sin conocerte mas de meses
te dedique sin razon
Recuerda que la letra mencionaba
la hermosura de tus ojos y la locura de mi ser
de solo imaginar que algún día me podrias amar
Y aun asi hoy te veo y tus ojos aun me hacen volar,
si me dices que te alejas sabes que voy a llorar
y me alegra que no lo hagas, porque es de ti
de quien no me puedo olvidar
Adoro tus palabras, desde las que se lleva el viento
hasta las que puedo guardar en un mensaje abierto
inclusive tu voz dentro de mis sueños
me hace vibrar, me hace sentir que se puede alcanzar
...la magia y ternura q tienen sus ojos...
...q dulce saber q soy un pobre loco...
(Ultimas dos. Duelo -POBRE LOCO]
que sin conocerte mas de meses
te dedique sin razon
Recuerda que la letra mencionaba
la hermosura de tus ojos y la locura de mi ser
de solo imaginar que algún día me podrias amar
Y aun asi hoy te veo y tus ojos aun me hacen volar,
si me dices que te alejas sabes que voy a llorar
y me alegra que no lo hagas, porque es de ti
de quien no me puedo olvidar
Adoro tus palabras, desde las que se lleva el viento
hasta las que puedo guardar en un mensaje abierto
inclusive tu voz dentro de mis sueños
me hace vibrar, me hace sentir que se puede alcanzar
...la magia y ternura q tienen sus ojos...
...q dulce saber q soy un pobre loco...
(Ultimas dos. Duelo -POBRE LOCO]
Tovléz
¿En qué aventaja el sabio al tonto? ¿Qué tiene de más el pobre que sabe comportarse bien ante los demás?
Es mejor ir a un velorio que asistir a un banquete; porque éste es el fin de todo hombre y al que vive le sirve para reflexionar. Más vale la pena que la risa, porque la pena del rostro es remedio para el alma. El corazón sabio está en la casa del duelo, y el de los torpes en la casa alegre.
Es mejor ir a un velorio que asistir a un banquete; porque éste es el fin de todo hombre y al que vive le sirve para reflexionar. Más vale la pena que la risa, porque la pena del rostro es remedio para el alma. El corazón sabio está en la casa del duelo, y el de los torpes en la casa alegre.
Sagradas Escrituras
Acudían asiduamente a la enseñanza de los apóstoles, a la convivencia, a la fracción del pan y a las oraciones. Toda la gente estaba asombrada, ya que se multiplicaban los prodigios y milagros hechos por los apóstoles en Jerusalén. Todos los creyentes vivían unidos y compartían todo cuanto tenían. Vendían sus bienes y propiedades y se repartían de acuerdo a lo que cada uno de ellos necesitaba. Acudían diariamente al Templo con mucho entusiasmo y con un mismo espíritu y "compartían el pan" en sus casas, comiendo con alegría y sencillez. Alababan a Dios y gozaban de la simpatía de todo el pueblo; y el Señor hacía que los salvados cada día se integraran a la iglesia en mayor número.
Sagradas Escrituras
No importa cuán fino sea el papel, cuán artístico sea el sobre, cuán poética la composición de la carta; esta no llegará al destinatario, si carece de la estampilla correspondiente. Así también, todos los adornos, vestuarios, chales, capas y rosarios son inútiles, no pueden llegar al destinatario, Dios. Lo que hará llegar sus oraciones al destinatario es la estampilla de la Devoción.
Sathya Sai Baba
ADIOS ROCÍO FRÍO DE INVIERNO
Adios con manos de desencantos
a este rocío de invierno frío,
mis ojos recorridos
por caminos prohibidos
se esfumarán con tu huída,
se cerrarán
no te acompañarán
en tu declive.
Mi ser revive
con el rocío tibio de primavera
caminando por jardines de encantos:
con besos tiernos
con amores sin desvaríos,
en tardes quietas,
junto a letras vivas
de armonía
de miel en labios
de oraciones de fidelidad
de recojo en noches de entrega.
Amor de primavera tibia
estabilidad sedentaria,
visibilidad de fantasía
tornándose realidad,
alma en tranquilidad.
Adios con manos de desencantos
a este rocío de invierno frío,
mis ojos recorridos
por caminos prohibidos
se esfumarán con tu huída,
se cerrarán
no te acompañarán
en tu declive.
Mi ser revive
con el rocío tibio de primavera
caminando por jardines de encantos:
con besos tiernos
con amores sin desvaríos,
en tardes quietas,
junto a letras vivas
de armonía
de miel en labios
de oraciones de fidelidad
de recojo en noches de entrega.
Amor de primavera tibia
estabilidad sedentaria,
visibilidad de fantasía
tornándose realidad,
alma en tranquilidad.
Miguel Visurraga Sosa
Imaginaré tu llegada por la vereda del amor,fantasías de oraciones al cielo invocaré,horas y horas esperaré,mis rezos honrarás...legarás y te amaré.
Miguel Visurraga Sosa
Solo fuiste el sueño, que más me dolio tirar por los suelos... solo eres el recuerdo, del amor y el duelo.
Mamen López. Uasp
Doy gracias a Dios que sirvo con limpia conciencia como mis antepasados, mientras te recuerdo sin cesar, noche y día, en mis oraciones. Al acordarme de tus lágrimas, siento un gran deseo de verte y así llenarme de alegría. Recuerdo tu fe sincera. Por eso te invito a que reavives el don de Dios que recibiste por la imposición de mis manos. Porque Dios no nos dio un espíritu de timidez, sino un espíritu de fortaleza, de amor y de buen juicio. Por eso no te avegüences del testimonio que tienes que dar de nuestro Señor, ni de mí al verme preso. Al contrario, lucha conmigo por el Evangelio, sostenido por la fuerza de Dios. El nos salvó y nos llamó para ser santos, no como premiando méritos nuestros, sino gratuitamente y por iniciativa propia.
Sagradas Escrituras
Saulo aprobaba entonces aquella muerte. Ese día se desencadenó una gran persecución contra la Iglesia de Jerusalén. Todos, excepto los apóstoles, se dispersaron por las regiones de Judea y Samaria. Unos hombres piadosos enterraron a Esteban e hicieron por él gran duelo. Mientras tanto, Saulo hacía destrozos en la Iglesia, entraba a las casas, llevaba a la fuerza hombres y mujeres y los metía en la cárcel. Al mismo tiempo, los que se habían dispersado iban de un lugar a otro anunciando la Palabra. Felipe por su cuenta fue a una ciudad de Samaria, donde empezó a predicar a Cristo. Toda la gente se interesó por la predicación de Felipe. Iban a oírlo y a ver los prodigios que realizaba; pues de muchos endemoniados salían los espíritus malos dando gritos, y numerosos paralíticos y cojos quedaron sanos, de tal modo que hubo una gran alegría en aquella ciudad.
Sagradas Escrituras
Dios entiende nuestras oraciones , aun cuando nosotros no podemos encontrar las palabras para expresarlas.
Cuando ponemos nuestras preocupaciones en sus manos, Él pone su paz en nuestros corazones.
Cuando ponemos nuestras preocupaciones en sus manos, Él pone su paz en nuestros corazones.
Marisol
Los hombres que no se baten en duelo creen que los que se baten en duelo a muerte son valerosos.
Conde de Lautréamont
Esperar a tener esperanza reavivó. Espere que sus oraciones sean contestadas de manera maravillosas. Las estaciones secas en la vida no duran. Las lluvias de primavera vendrá de nuevo.
Sarah Ban Breathnach
La mente controla gran parte del cuerpo. Somos mucho más que carne y sangre, somos sistemas complejos. Los pacientes les va mejor cuando tienen fe en que van a hacer mejor. Por eso siempre les digo a mis pacientes ya sus familias a no descuidar sus oraciones. No hay nadie que no digo que a.
Benjamin Carson
PROMETO AMARTE
No dudes amor mío, cuando te digo que nunca te abandonaré, ni la muerte misma me podrá separar de
ti.
Tú, significas todo para mi…
Siempre guardé la esperanza de encontrar un lazo como el nuestro y ahora, no hay nada en el mundo
que desee más… que amarte y que me ames.
Aún el más perfecto de amor visto en un sueño con la fascinación de lo imaginado, empalidece al
compararlo con la dicha de mi vida contigo, mi amor es inmenso, y nunca cesará.
Siempre que pienso en nosotros, en como compartimos nuestros anhelos, el gozo, los triunfos, y el
dolor…Tengo la certeza de que nuestra unión perdurará…
Te prometo que siempre te amaré….
Se que no es nada fácil enfrentar
La vida…
Pero se que juntos tu y yo, inseparables, nos fortaleceremos mutuamente y venceremos cualquier
problema por fuerte que sea, y al transcurrir los años y estemos viejitos, nuestro cabello blanco
será testigo de los altibajos del vivir, de nuestras esperanzas, oraciones y el amor compartido de
por vida.
No dudes amor mío, cuando te digo que nunca te abandonaré, ni la muerte misma me podrá separar de
ti.
Tú, significas todo para mi…
Siempre guardé la esperanza de encontrar un lazo como el nuestro y ahora, no hay nada en el mundo
que desee más… que amarte y que me ames.
Aún el más perfecto de amor visto en un sueño con la fascinación de lo imaginado, empalidece al
compararlo con la dicha de mi vida contigo, mi amor es inmenso, y nunca cesará.
Siempre que pienso en nosotros, en como compartimos nuestros anhelos, el gozo, los triunfos, y el
dolor…Tengo la certeza de que nuestra unión perdurará…
Te prometo que siempre te amaré….
Se que no es nada fácil enfrentar
La vida…
Pero se que juntos tu y yo, inseparables, nos fortaleceremos mutuamente y venceremos cualquier
problema por fuerte que sea, y al transcurrir los años y estemos viejitos, nuestro cabello blanco
será testigo de los altibajos del vivir, de nuestras esperanzas, oraciones y el amor compartido de
por vida.
Gaby Gutierrez de Guevara
Realmente siento que la vida se dictan en sí. Usted debe permitir que se desarrolle lo más natural posible. Solo tienes que ir con la corriente. Cuando usted está realmente desesperada, usted dice algunas oraciones y esperar lo mejor. Esa es la manera que siempre he vivido mi vida.
Shania Twain
Judios tienen una relación especial con los libros y la Hagadá se ha traducido más ampliamente, y reimpreso con más frecuencia que cualquier otro libro judío. No es un libro de historia o filosofía, no un libro de oraciones, manual del usuario, línea de tiempo, un poema o palimpsesto - y sin embargo, es que todas estas cosas.
Jonathan Safran Foer
Este es un día horrible en Boston. Mis pensamientos y oraciones están con aquellos que han sido heridos.
Deval Patrick
La voluntad de Dios es grande y si quiso disponer de la vida de nuestro amado hermano, es porque le tiene guardado un espacio en el cielo exclusivo donde ya no hay sufrimiento y dolor, donde solo goza de su presencia y de su luz, ánimo, el camino en el mundo terminó para él pero no para nosotros y desde acá nuestras oraciones llegarán hasta allá, a ese lugar santo donde él está con toda la fuerza y con todo el poder
Mientras cantan oraciones religiosas de la paz y la armonía, la religión ha dividido a los seres humanos a través de una historia atroz de la enemistad y el derramamiento de sangre. Sin embargo, tras el velo de la superficialidad e hipocresía, yo siempre creí en la belleza inherente de Dios que está en la esencia de todos los verdaderos caminos espirituales.
Radhanath Swami
El duelo es el reto más aguda de nuestra confianza en Dios, si la fe puede superar esto, no hay montaña que no se puede quitar.
Dean Inge
Pero hay un malestar que rodea la pena. Esto hace que incluso las personas más buenas intenciones sin saber qué decir. Y así muchos de los recién duelo final con la sensación aún más solo.
Meghan O'Rourke
Su voz la escritura es la más profunda posible reflejo de lo que eres. El trabajo de su voz no es seducir y adular o hacer oraciones bien formadas. En su voz, sus lectores deben ser capaces de escuchar el contenido de su mente, su corazón, su alma.
Meg Rosoff