Pablo neruda poemas cortos ( 2 )
Pablo neruda poemas cortos. Encuentra docenas de pablo neruda poemas cortos con fotos para copiar y compartir.
Nadie puede estar en las filas de la izquierda si está a favor del maltrato a los animales. Vamos, a Pablo Iglesias le hablaban de los toros y blasfemaba
Pablo Castellano
El vino mueve la primavera, crece como una planta la alegría. Caen muros, peñascos, se cierran los abismos, nace el canto.
Pablo Neruda
El vino abre las puertas con asombro y en el refugio de los meses vuelca su cuerpo de empapadas alas rojas.
Pablo Neruda
De pronto mientras ibas conmigo te toqué y se detuvo mi vida: frente a mis ojos estabas, reinándome, y reinas. Como hoguera en los bosques el fuego es tu reino.
Pablo Neruda
Si me preguntan qué es mi poesía debo decirles no sé; pero si le preguntan a mi poesía, ella les dirá quién soy yo
Pablo Neruda
Llegamos de noche a las Islas Afortunadas, y nuestro amor se extendía como peces en la red de nuestros besos.
Pablo Neruda
Paz dedica a la fabricación de un poema en forma de harina dedica a la fabricación de pan.
Pablo Neruda
Por qué se me vendrá todo el amor de golpe cuando me siento triste, y te siento lejana ...
Pablo Neruda
Y uno por uno las noches entre nuestras ciudades separadas se unen a la noche que nos une.
Pablo Neruda
Pero a partir de cada crimen nacen balas que un día buscar en dónde se encuentra el corazón.
Pablo Neruda
Desnuda eres tan simple como una de tus manos: lisa, terrestre, mínima, redonda, transparente. Tienes líneas de luna, caminos de manzana.
Pablo Neruda
Porque en noches como ésta la tuve entre mis brazos, mi alma no se contenta con haberla perdido.
Pablo Neruda
Amo el amor que se reparte en besos, lecho y pan. Amor que puede ser eterno y puede ser fugaz. Amor que quiere libertarse para volver a amar. Amor divinizado que se acerca Amor divinizado que se va.
Pablo Neruda
Yo me crié en esta ciudad, mi poesía nació entre el cerro y el río, tomó la voz de la lluvia, y al igual que la madera, se empapa en sí en los bosques.
Pablo Neruda
Todo era de los otros y de nadie, hasta que tu belleza y tu pobreza llenaron el otoño de regalos.
Pablo Neruda
Amor mío, nos hemos encontrado sedientos y nos hemos bebido toda el agua y la sangre, nos encontramos con hambre y nos mordimos como el fuego muerde, dejándonos heridas. Pero espérame, guárdame tu dulzura. Yo te daré también una rosa.
Pablo Neruda
Los libros que ayudan a que la mayoría son los que te hacen pensar que la mayoría. La forma más difícil de aprender es la de facilitar la lectura, pero un gran libro que viene de un gran pensador es un buque de pensamiento, profundamente cargado de verdad y belleza.
Pablo Neruda
Muere lentamente quien evita una pasión y su remolino de emociones, justamente éstas que regresan el brillo a los ojos y restauran los corazones destrozados
Pablo Neruda
Eres libre de tomar las opciones que quieras, pero eres prisionero de sus consecuencias.
Pablo Neruda
Pocas razas hay sobre la tierra más dignas que la raza araucana. Alguna vez veremos universidades araucanas, libros impresos en araucano, y nos daremos cuenta de todo lo que hemos perdido en diafanidad, pureza y energía volcánica.
Pablo Neruda
Hacia tus pies resbalo, a las ocho aberturas, de tus dedos agudos, lentos, peninsulares, y de ellos el vacío de la sábana blanca caigo, buscando ciego y hambriento tu contorno de vasija quemante.
Pablo Neruda
Creo que el hombre debe vivir en su propio país y creo que el desarraigo es para el ser humano una frustración que, de una u otra manera, atrofia la claridad de su espíritu.
Pablo Neruda
¡Cómo sabría amarte, mujer cómo sabría amarte, amarte como nadie supo jamás! Morir y todavía amarte más. Y todavía amarte más
Pablo Neruda
Yo conocí salones cenicientos, túneles habitados por la luna, hangares crueles que se despedían, preguntas que insistían en la arena.
Pablo Neruda
Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos, te pareces al mundo en tu actitud de entrega.
Pablo Neruda
He dormido contigo y al despertar tu boca salida de tu sueño me dio el sabor de tierra, de agua marina, de algas, del fondo de tu vida, y recibí tu beso mojado por la aurora como si me llegara del mar que nos rodea.
Pablo Neruda
Las lágrimas que no se lloran, ¿esperan en pequeños lagos?, ¿o serán ríos invisibles que corren hacia la tristeza?
Pablo Neruda
...Para nacer he nacido, para encerrar el paso de cuanto se aproxima, de cuanto a mi pecho golpea como un nuevo corazón tembloroso.
Pablo Neruda
Estoy mirando, oyendo, con la mitad del alma en el mar y la mitad del alma en la tierra, y con las dos mitades del alma miro el mundo
Pablo Neruda
Y cuando asomas suenan todos los ríos en mi cuerpo, sacuden el cielo las campanas, y un himno llena el mundo.
Pablo Neruda
Puedo escribir los versos más tristes esta noche; escribir, por ejemplo: 'La noche está estrellada, y tiritan, azules, los astros, a lo lejos'.
Pablo Neruda
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
Pablo Neruda
VINO color de día,
vino color de noche,
vino con pies de púrpura
o sangre de topacio,
vino,
estrellado hijo
de la tierra,
vino, liso
como una espada de oro,
suave
como un desordenado terciopelo,
vino encaracolado
y suspendido,
amoroso,
marino,
nunca has cabido en una copa,
en un canto, en un hombre,
coral, gregario eres,
y cuando menos, mutuo.
A veces
te nutres de recuerdos
mortales,
en tu ola
vamos de tumba en tumba,
picapedrero de sepulcro helado,
y lloramos
lágrimas transitorias,
pero
tu hermoso
traje de primavera
es diferente,
el corazón sube a las ramas,
el viento mueve el día,
nada queda
dentro de tu alma inmóvil.
vino color de noche,
vino con pies de púrpura
o sangre de topacio,
vino,
estrellado hijo
de la tierra,
vino, liso
como una espada de oro,
suave
como un desordenado terciopelo,
vino encaracolado
y suspendido,
amoroso,
marino,
nunca has cabido en una copa,
en un canto, en un hombre,
coral, gregario eres,
y cuando menos, mutuo.
A veces
te nutres de recuerdos
mortales,
en tu ola
vamos de tumba en tumba,
picapedrero de sepulcro helado,
y lloramos
lágrimas transitorias,
pero
tu hermoso
traje de primavera
es diferente,
el corazón sube a las ramas,
el viento mueve el día,
nada queda
dentro de tu alma inmóvil.
Pablo Neruda
No te vayas por un minuto, bienamada,
porque en ese minuto te habrás ido tan lejos
que yo cruzaré toda la tierra preguntando
si volverás o si me dejarás muriendo.
porque en ese minuto te habrás ido tan lejos
que yo cruzaré toda la tierra preguntando
si volverás o si me dejarás muriendo.
Pablo Neruda
Contra los indios todas las armas se usaron con generosidad: el disparo de carabina, el incendio de sus chozas, y luego, en forma más paternal, se empleó la ley y el alcohol.
Pablo Neruda
Si consideras largo y loco
el viento de banderas
que pasa por mi vida
y te decides a dejarme a la orilla del corazón en que tengo raíces,
piensa, que en ese día, a esa hora, levantaré los brazos y saldrán mis raíces a buscar otra tierra.
el viento de banderas
que pasa por mi vida
y te decides a dejarme a la orilla del corazón en que tengo raíces,
piensa, que en ese día, a esa hora, levantaré los brazos y saldrán mis raíces a buscar otra tierra.
Pablo Neruda
Tengo hambre de tu boca, de tu voz, de tu pelo
y por las calles voy sin nutrirme, callado,
no me sostiene el pan, el alba me desquicia,
busco el sonido líquido de tus pies en el día.
Estoy hambriento de tu risa resbalada,
de tus manos color de furioso granero,
tengo hambre de la pálida piedra de tus uñas,
quiero comer tu piel como una intacta almendra.
Quiero comer el rayo quemado en tu hermosura,
la nariz soberana del arrogante rostro,
quiero comer la sombra fugaz de tus pestañas
y hambriento vengo y voy olfateando el crepúsculo
buscándote, buscando tu corazón caliente
como un puma en la soledad de Quitratúe
y por las calles voy sin nutrirme, callado,
no me sostiene el pan, el alba me desquicia,
busco el sonido líquido de tus pies en el día.
Estoy hambriento de tu risa resbalada,
de tus manos color de furioso granero,
tengo hambre de la pálida piedra de tus uñas,
quiero comer tu piel como una intacta almendra.
Quiero comer el rayo quemado en tu hermosura,
la nariz soberana del arrogante rostro,
quiero comer la sombra fugaz de tus pestañas
y hambriento vengo y voy olfateando el crepúsculo
buscándote, buscando tu corazón caliente
como un puma en la soledad de Quitratúe
Pablo Neruda
Cuando yo abro los ojos y los cierro, cuando mis pasos van, cuando vuelven mis pasos, niégame el pan, el aire, la luz, la primavera, pero tu risa nunca porque me moriría
Pablo Neruda
SAUDADE
SAUDADE...-Que será... yo no sé... lo he buscado
en unos diccionarios empolvados y antiguos
y en otros libros que no han dado el significado
de esta dulce palabra de perfiles ambiguos.
Dicen que azules son las montañas como ella,
que en ella se obscurecen los amores lejanos,
y un nobre y buen amigo mío(y de las estrellas)
la nombra en un temblor de trenzas y de manos.
Y hoy en Eça de Queiroz sin mirar la adivino,
su secreto se evade, su dulzura me obsede
como una mariposa de cuerpo extraño y fino
siempre lejos - tan lejos! - de mis tranquilas redes.
Saudade... Oiga, vencido, sabe el significado
de esta palabra blanca que como un pez se evade?
No... Y me tiembla en la boca su temblor delicado...
Saudade...
SAUDADE...-Que será... yo no sé... lo he buscado
en unos diccionarios empolvados y antiguos
y en otros libros que no han dado el significado
de esta dulce palabra de perfiles ambiguos.
Dicen que azules son las montañas como ella,
que en ella se obscurecen los amores lejanos,
y un nobre y buen amigo mío(y de las estrellas)
la nombra en un temblor de trenzas y de manos.
Y hoy en Eça de Queiroz sin mirar la adivino,
su secreto se evade, su dulzura me obsede
como una mariposa de cuerpo extraño y fino
siempre lejos - tan lejos! - de mis tranquilas redes.
Saudade... Oiga, vencido, sabe el significado
de esta palabra blanca que como un pez se evade?
No... Y me tiembla en la boca su temblor delicado...
Saudade...
Pablo Neruda