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Para una amiga que se casa

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20 Reglas para tener una buena calidad de Vida

AHÍ LES PASO ESTO QUE ACABO DE LEER

El Instituto Francés de la Ansiedad y el Stress, en París, definió veinte reglas de vida que dicen los expertos que, si uno consigue asimilar diez, puede tener una buena calidad de vida:

1.-HAGA una pausa de mínima de 5 a 10 minutos por cada 2 horas de trabajo, a lo máximo. Repita estas pausas en su vida diaria y piense en usted, analizando sus actitudes.
2.- APRENDA a DECIR NO, sin sentirse culpable, o creer que lastima a alguien. Querer agradar a todos es un desgaste enorme.
3.- PLANEE su día, pero deje siempre un buen espacio para cualquier imprevisto, consciente de que no todo depende de usted.
4.- CONCÉNTRESE en apenas una tarea a la vez. Por mas ágil que sean sus cuadros mentales, usted se cansa.
5.- OLVÍDESE de una vez por todas de que usted es indispensable en su trabajo, su casa o su grupo habitual. Por más que eso le desagrade, todo camina sin su actuación, salvo usted mismo.
6.- DEJE de sentirse responsable por el placer de los otros. Usted no es fuente de los deseos, ni el eterno maestro de ceremonia.
7.- PIDA AYUDA siempre que sea necesario, teniendo el buen sentido de pedírsela a las personas correctas.
8.- SEPARE los problemas reales de los imaginarios y elimínelos, porque son pérdida de tiempo y ocupan un espacio mental precioso para cosas más importantes.
9.- INTENTE descubrir el placer de cosas cotidianas como dormir, comer y pasear, sin creer que es lo máximo que puede conseguir en la vida.
10.- EVITE envolverse en ansiedades y tensiones ajenas, en lo que se refiere a ansiedad y tensión. Espere un poco y después retorne al diálogo y a la acción.
11.- SU FAMILIA NO es usted, está junto a usted, compone su mundo, pero no es su propia identidad.
12.- COMPRENDA qué principios y convicciones inflexibles pueden ser un gran peso que evite el movimiento y la búsqueda.
13.- ES NECESARIO tener siempre a alguien a quien le pueda confiar y hablar abiertamente. No sirve de nada si está lejos.
14.- CONOZCA la hora acertada de salir de una cena, levantarse del palco y dejar una reunión. Nunca pierda el sentido de la importancia sutil de salir la hora correcta.
15.- NO QUIERA saber si hablaron mal de usted, ni se atormente con esa basura mental. Escuche lo que hablaron bien de usted, con reserva analítica, sin creérselo todo.
16.- COMPETIR en momentos de diversión, trabajo y vida entre pareja, es ideal para quien quiere quedar cansado o perder la mejor parte.
17.- LA RIGIDEZ es buena en las piedras pero no en los seres humanos.
Una hora de 18.- INMENSO PLACER sustituye, con tranquilidad, tres horas de sueño perdido. El placer recompensa más que el sueño. Por eso, no deje pasar una buena oportunidad de divertirse.
19.- NO ABANDONE sus tres grandes e invaluables amigas. Intuición, Inocencia y Fe.
20.- ENTIENDA de una vez por todas, definitivamente y en conclusión: Usted ES LO QUE USTED HAGA de USTED MISMO.


NIRVANA


DECIR ABUELA...
decir abuela es decir mama, amiga...
tantas cosas...
es una casa grande llena de recuerdos
que los años nos fueron regalando.
es un sillón hamaca donde tejimos miles
de sueños, el que cobijo nuestra inocencia
y la imaginación del que a través nuestro
intentaba mantener vivo al niño que llevaba dentro.
Es una cocina perfumada, un cuarto con aroma a la lavanda.
Decir abuela es un regazo generoso donde encontrar abrigo,
una mirada tierna y compasiva.
Es el tan rechazado consejo que deberíamos haber
obedecido...
porque las abuelas saben..
Es emprender un viaje al pasado, no muy lejano, marcado en los surcos de sus rostros.
Es el pelo encanecido.
Los pies cansados por tanto camino recorrido.
Son agujas peleando con ovillos, tejiendo historias infinitas.
Decirte mama es decir amiga, es la abuela que no fuiste.
Son las caricias que mis hijos no pudieron disfrutar.
Son las eternas historias de madrugada que jamas les podrás contar,Son plazas llenas de tu ausencia...!


Jackselins Arteaga




Una casa será fuerte e indestructible cuando esté sostenida por estas cuatro columnas: padre valiente, madre prudente, hijo obediente, hemano complaciente.


Confucio


Para conocer a la gente hay que ir a su casa.


Johann Wolfgang Von Goethe


si sientes que el mundo se cae
que el sol se apaga
que la vida termina
para eso esta la amistad
los amigos te ayudan, te quieren, te apoyan
sin importar el momento, el día o la hora
sin importar el lugar, en la plata o miramar

hazme caso, si te sientes solo
hazme caso, si te dejan por otro
llama a una amiga o amigo
y cuentale todo


Camii9829 Jonass


Como Desde Hace Años...

Como desde hace años me detestabas
porque a tu real saber y entender yo había sido
el mal marido de una amiga tuya
me elegiste para hacerme decir de tu marido
cosa que repetiste al inventarla
que yo había dicho de él, entre amigos comunes
en una casa precisa
"es un perfecto mediocre"
se te ocurrió darle esa aguja en el costado
celebro aquí esta gran precisión
de la perversidad femenina
Así compenso mis excesos en gloria y alabanza
de las mujeres
Me gustaría escuchar tu versión de los hechos algún día
pero naturalmente más allá de la muerte .


Enrique Lihn




Hola..
Pues les voy a contar mi historia por que tengo ganas de desahogarme y no se como hacerlo si no mejor de esta manera .. empecemos
Un día de navidades de hace ya tres años lo conoci a el rubio ojos azules verdosos , al principio no sabia para que me queria conocer pero nos fuimos conociendo y cuando nos conocimos nos enamoramos , fuimos viendonos poco a mis padres no querian que estubiera con el.. pero yo sabia que no lo podia dejar escapar y es asi nunca lo deveria haber dejado escapar , estuvimos un año como amigos pero decidimos intentarlo.. y asi pasaron las horas , los días , meses y años pero lo nuestro se iba apagando cuando llego el día q tuve que preguntarle si segia sintiendo lo mismo que sentia yo... llevava semanas sin verlo solo hablando por el por la red social , y el al rato contesto que si pero que nunca nos veiamos , ni nada y que yo me merecia algien a quien ver todos los días , me lo tome mal le puse q le odiaba el me dijo que yo me mericia algo que no me hiciera sufrir y que me quisiera deverdad ya que el no me supo apreciar ,llame a mi mejor amiga para contarle y que me alludara ella ya sabia todo me dijo que hablar cn el , yo llorando desesperada le pregunte por que .. me dijo que nunca mas le volveria a ver , le volvi a preguntar y el me respondio que se iva a quedar en barcelona para siempre cuando me quise dar cuenta me queria morir por dentro no tenia mas lagrimas para llorar , el se pensaba que no , pero sigio contando y había dejado alli a una ex sulla envarazada y que le avia llamado pocas semanas de que no le viera para que le alludara con su carisma el se marcho pero no se dio cuenta que se llevo mi corazon entre su maleta ... el me premetio q me amaria siempre que nunca se olvidaria que fui su amor y que esperaba que nunca lo olvidara .. y asi es hoy hace un año que se fue y no se nada de el pero yo lo sigo amando como el primer momento , y lo sigo esperando alli como me dejo .... y casa día lloro con la esperanza que vuelva junto ami ..
LO AMO ! :(
espero que les guste mis sentimientos .. pero tenia q compartirlos
grasias !




que difícil es creer en la gente, sobre todo cuando le abrís la puerta de tu casa para compartir reuniones, vacaciones, etc...y se burlan a tus espaldas, es muy doloroso. realmente no te consideraba mi mejor amiga, pero llegue a confiarte cosas muy mías, que a vos te serbia para destruir mi matrimonio..al principio empece a dudar de los dos , hasta que esas dudas se fueron concretando con detalles que no coincidían ,nunca pude encontrarlos juntos x suerte..xq no se lo que habría pasado!pero vos un día decidiste hablar y contar todo y querer destruir mas a los demás.. gracias a dios esto sirvió para recuperar todo lo que se estaba perdiendo en mi pareja y para que mis hijos no se quedaran sin padre..y vos estas sola como lo que sos una mal parida!! ya estas de vuelta.. aprovecha a vivir con las pocas personas que tenes al lado.. pero todo llega en la vida y las que se hacen se pagan!!


vanina


Toyita: Mi dulce y tierna niña de cuatro patas. Cuánto nos enseñaste!. Cuánto aprendimos contigo!. Fuiste lealtad, amor, amistad, alegría, valentía y lucha hasta el final. Tu recuerdo está en cada rincón de nuestro hogar (Tus juguetes, tu camita, tu comida). Pero más en nuestra alma, mente y corazón. Dejaste una huella imborrable. Te amamos desde el principio. Te convertiste en nuestra amiga incondicional; siempre estuviste con nosotros consintíéndonos. No pudiste querenos más y nosotros no tuvimos más fuerzas para amarte...No pudimos querernos ni entregarnos más. Tu partida nos deja un vacío enorme! Mi valiente niña. Mi consentida. Yo te traje a nuestra casa y te saqué de ella. Te dí la bienvenida y hoy te digo adiós!. Con solo mirarnos te sentías bien, con solo saber que estábamos ahí te sentías contenta. Te recordaremos como la luchadora, la hermosa y la que nos acompañó; ese ser incondicional con tanto amor para dar! Dios nos hizo un regalo mutuo y hasta hoy dispuso de el. Tus días estaban en sus tiernas y poderosas manos. Te amaremos por siempre... hasta el último respiro en este mundo!


Diana Carolina H.




PARA ARISTÓTELES la amistad era "lo más necesario para la vida", y nosotros, cuando oímos decir que "un amigo es un tesoro" o que "donde está tu amigo está tu tesoro", nos damos cuenta de que esas palabras resuenan como un aldabonazo en nuestro interior. No nos dejan indiferentes, porque todos sabemos o intuimos qué clase de tesoro puede llegar a ser una amistad.

A las personas nos gusta tener amigos: gente con la que compartir vida, experiencias, tiempo, conversación... Nos gustan los amigos y nos parecen muy importantes, incluso imprescindibles. La amistad es una relación humana con un valor muy especial. Junto con la família y el trabajo, es algo que nos parece que merece la pena y a lo cual dedicamos tiempo y esfuerzo. Queremos tener amigos en la vida: para no estar solos -a veces se siente la soledad incluso estando rodeados de gente-, para vivir la vida más a fondo y para disfrutarla de verdad. Como escribió Aristóteles, "sin amigos nadie querría vivir, aun cuando poseyera todos los demás bienes".

Quizá por eso escribo esto. Escribir sobre la amistad me ayuda a saber qué espero yo de ella, qué doy yo a mis amigos, si mi amistad con ellos es plena o solo algo "satisfactorio". Reflexionar sobre las cosas ayuda a vivirlas mejor. Reflexionar es un modo de vivir.

LA AMISTAD COMO REGALO
Decía más arriba que dedicamos esfuerzo a hacer amigos. Y el esfuerzo es necesario porque las cosas no salen solas. Sin embargo, la amistad no se puede forzar. Por eso también puede decirse que la amistad surge siempre como un regalo, como un don que se recibe. En un momento dado, aparece entre dos personas un deseo de compartir, de comunicarse, de contar lo que se lleva dentro y de contrastarlo, de ser conocido muy a fondo. De hecho, cuando uno vislumbra en el horizonte la posibilidad de hacer una nueva amistad, de esas profundas y verdaderas, que aportan y llenan tanto por dentro, parece que su espíritu se hincha y crece. Es como ver nacer un día radiante. La vida se ve de otro color porque los amigos hacen cobrar sentido a nuestras vivencias: estas no van a ser solo para nosotros. Las cosas son distintas porque las vivimos pensando en compartirlas, en transmitirlas, en discutirlas, en compararlas. De nuestros amigos nos interesa todo: lo que piensan, lo que hacen, cómo viven las cosas. Lo importante no es solo lo que cuentan ni lo que les pasa; lo importante es que eso "es tuyo", "eres tú".

Desde mi adolescencia he experimentado disgusto ante los momentos meramente descriptivos de los acontecimientos, o las que eran como una reseña informativa de lo que había ocurrido en el verano. Los momentos verdaderos son aquellos en las que los acontecimientos del lunes o del viernes se describen como cosas que me pasan y no solo como cosas que van pasando a mi lado. Lo interesante y lo que me hace disfrutar era ver cómo esas cosas se viven desde dentro de mis amigos.
El grado de amistad con los amigos puede distinguirse precisamente por eso. Por si los momentos estaban llenos de preguntas convencionales y frases que se repetían del mismo modo en todas los demás momentos o si e ellos te dejas llevar, trayendo a colación esto o aquello, y acabando en lugares desconocidos para ti mismo, pero bonitos y en los que habías disfrutado. Escribir para los amigos es descubrir el mundo con unos ojos nuevos para dárselo a ellos.

La amistad es un regalo porque es vivir otra vida además de la propia. Es poder vivir dos veces. Y es también reafirmar tu propia existencia porque hay alguien que la quiere así: incondicionalmente. En el amigo encontramos aceptación plena.

La amistad es un don porque, en cierto modo, llega cuando y como quiere; no es programable; simplemente, surge y es como un regalo, un don que uno recibe.

Esa comunión del espíritu que hay entre los amigos, ese compartir denso e intenso, ese vivir y ser sin dar explicaciones porque estas no son necesarias para nuestro mutuo entendimiento, ese encontrar las puertas del alma siempre abiertas y acogedoras para ti porque eres tú, es el tesoro incalculable. No es extraño que los griegos la calificaran como regalo de los dioses.

Regalo es también en el sentido de que nunca es verdaderamente merecida. Si se puede hablar así, algunos podrían merecer más que otros el tener amigos. Pero, en el fondo, la amistad de una persona difícilmente es algo que uno llegue a "merecer". Se pueden tener de modo habitual disposiciones personales adecuadas para la amistad, para tener amigos (no todo el mundo las tiene).

Pero no se puede decidir en qué momento aparecerá el amigo o de quién seré amigo. Por ejemplo, todos contamos con momentos imborrables de la vida en los que comprendes repentinamente que tienes delante a alguien que puede leer dentro de ti como si fueras tú quien lo hiciera; que puede pasearse por tu alma sin explicaciones de tu parte; sin necesidad de mapas, brújulas o palabras clave que le hagan entender lo que se va a encontrar. Es la empatía, una sintonía especialísima que se establece con muy pocas personas a lo largo de la existencia, y que es un descenso y un ascenso vertiginoso por las entrañas de la verdadera vida.

MIRAR A LAS PERSONAS
Cuando nos sentimos así, vistos con unos ojos ajenos que al mismo tiempo son como los nuestros propios, es como si todo nuestro ser despertara. Querríamos saberlo todo acerca de aquella persona y que ella conociera nuestro yo hasta el final. Las conversaciones se convierten en un continuo maravillarse y aportarse mutuo. Sentimos el mundo como un pequeño globo terráqueo que gira entre nuestras manos y el motor de ese movimiento es la corriente que entre nosotros se ha creado.

Es un encuentro con otro yo, sin que ese yo se refiera a un yo idéntico, a un "alma gemela"; pues puede serlo o no. Es otro yo porque se pone en nuestra piel como si fuéramos nosotros mismos; pero al tiempo que mantiene su mismidad y su alteridad. Y por eso hay mucha riqueza en el trato con el amigo, porque lo distinto siempre nos enriquece.

Mirarnos en un amigo es mirarnos en un espejo. En un espejo que devuelve algo más que una simple reproducción de la propia imagen. Mirarnos en un amigo es encontrarnos a nosotros mismos vistos desde fuera y con mayor perspectiva, pero con el cuidado con que nosotros mismos pondríamos al mirarnos: "A través de él, los amigos se enriquecen y perfeccionan, se descubren e interpretan.

Se podría decir que, al ver al otro, cada uno de ellos aprende a conocerse" (Marias). La acción de mirar que tanto aparece entre los amigos, es algo que me parece esencial para que pueda surgir amistad entre dos personas para tener amigos hay que saber mirar.

En una carta que recibí hace unos meses me decía una amiga que "había encontrado el camino para trascender lo inmediato. El despertador para mirar (...) era el del pensamiento filosófico y la contemplación de las cosas bellas". En mi respuesta, le reafirmé en su descubrimiento porque me parecía realmente valioso: la filosofía y la contemplación estética son dos medios muy buenos para acceder a lo más hondo de la realidad.

La belleza es un camino hacia la verdad especialmente bueno. Porque la belleza no produce únicamente la mera delectación estética; posee una cualidad inestimable, y es que exige por nuestra parte contemplación. Ante las cosas bellas no basta pasear la vista. Para disfrutarlas verdaderamente hay que mirarlas con detenimiento, con miramiento. Con ellas hay que andarse con contemplaciones. Y contemplar es importante porque hace que nos detengamos y miremos las cosas tal como son, "dejando" que sean así.

La contemplación es un camino abierto hacia la verdad. Hacia la verdad personal, la de los demás y la del universo entero. Eso lo expresa muy bien de otro modo Lorenzo Silva en una de sus novelas. Escribía que "el mundo está lleno de tesoros sin descubrir porque no hay quien se pare a mirarlos. Pero en cuanto hay alguien que se detiene ante ellos, se abren ante esa persona como una maravillosa realidad llena de riqueza y significado ofreciéndole nuevos horizontes". Yo he pensado muchas veces que eso exactamente pasa con las personas.
Por eso, para tener amigos hay que saber mirar. Mirar es ver con atención, es contemplar, es concentrar nuestro ser entero en los ojos deseando captar lo que hay frente a ellos. Mirar presupone una vista limpia, sin prejuicios ni cargas anteriores, para captar lo que hay y no lo que yo he puesto o quiero poner. Mirar no es ver lo que yo quiero ver sino percibir cómo son las cosas o las personas en sí. Y además de limpieza interior, la mirada requiere también aceptación, renuncia a dominar. Cuando miramos de verdad, estamos dispuestos a dejar ser a las cosas y a las personas tal y como son. Esto es especialmente importante con las personas.

A las personas hay que dejarlas ser, hay que aceptarlas como son. Sin esa condición nunca sabremos lo que es una verdadera amistad; nunca llegaremos a saborear el gozo inmenso que produce esa identificación con el otro, ese compartir la vida, los sueños, los deseos, los fracasos. Habrá siempre en el amigo una zona de acceso prohibido o de "reservado".

Para mirar de verdad hay que aprender a hacerlo. Los hay que conocen ese arte de modo natural o han sido educados en él. Pero también puede aprenderse. Para mirar hay que pararse, parar la rueda de la actividad exterior y parar también nuestro ruido interior (qué tengo que hacer luego, cómo resolveré la cena en casa de mi hermano, qué ropa necesito, a ver cómo queda el Madrid, a ver si consigo cerrar un buen trato con este cliente...). Para mirar hay que perder el miedo a "pasar tiempo" sin haber sido ""eficaces"".

Todos hemos conocido a personas que provocan que los que están a su lado den lo mejor de sí mismos. Son personas que logran que los demás quieran -parafraseando a Salinas- "sacar de sí su mejor yo". Es así porque son personas que saben mirar, y que por eso han sabido encontrar la llave interior de las personas. Esa llave de la confianza que uno entrega solo cuando va a saberse visto, aceptado y querido por sí mismo.

LA MORADA DEL YO
Llegar a la intimidad del alma, al centro de la persona o solo rozar su periferia, exige rodeos: rodeos que son esencialmente contemplación, escucha atenta y activa, mirada abierta y receptiva. Solo cuando una persona percibe ese clima de confianza a su alrededor es capaz de empezar a abrir las rendijas de su yo. Y a través de esas rendijas pueden empezar a filtrarse los rayos de la luz que toda persona esconde. La intimidad, la interioridad, es siempre luminosa en el sentido de iluminadora. Porque muestra siempre algo desconocido para quien no está allí dentro. No siempre será lo original y nuevo el qué diga esa persona pero sí el cómo ella lo vive. Esta es la llave que entregamos a nuestros amigos y que hace que quedemos totalmente al descubierto: vulnerables, también.

Algunas veces, tras haber desnudado la intimidad del alma en conversación con la persona que nos ha inspirado esa confianza, uno siente el vértigo del miedo a romperse, a que le rompan, a que se burlen, a que no comprendan, al silencio indiferente o superficial.

Hasta ahora, esos pensamientos, deseos, aspiraciones, miedos y preguntas más íntimas habían quedado dentro de nuestra alma. A veces nos angustiaban, otras nos elevaban, otras nos desbordaban por dentro de tal forma, que había que expresarlos de algún modo (quién no ha cantado, llenado de piruetas su salón, compuesto una melodía o garabateado un poema, historia o carta, por puro desbordamiento. Tanto no cabía dentro; fuera crecía, pero tenía más apoyos para ser sostenido, para ser vivido).

Sin embargo, no dejaban de ser nuestros: los demás solo poseían de ellos su cara externa, lo que era fruto de la superabundancia. Por lo demás, no habían sido escuchados por nadie hasta el final y solo de vez en cuando abríamos a alguien una pequeña ventanita de nuestro interior, observando con atención la reacción del interlocutor ante aquello. Pero, de repente, hemos encontrado a alguien que ha provocado que primero quisiéramos abrir una ventanita y después otra, y otra... Luego le hemos pasado al interior de la casa y -poco a poco- le hemos encendido todas las luces que había en ella, iluminando incluso rincones sucios, destartalados, rincones sin ordenar o habitaciones llenas de trastos que no sabemos en dónde colocar. Le hemos enseñado el sillón de los sueños, frente a la ventana, y le hemos invitado a sentarse allí porque desde él puede conocerlos mejor. Le hemos presentado el rincón de los miedos, ese sí, está a oscuras porque nos parece que la luz acabará por hacerlos crecer. Es un rincón siempre difícil de enseñar; se supone que de esos no tenemos, y nos cuidamos mucho de dejarlos salir. También le hemos pasado al cuarto de las preguntas; esa habitación está llena de frases sueltas, de pensamientos, de párrafos incluso, y hasta de alguna página escrita. Pero sobre todo está lleno de interrogantes; es una habitación poblada de signos de interrogación que hemos ido recogiendo a lo largo de nuestra vida: por qué las relaciones humanas son tan complicadas, por qué hay personas que no miran hacia adentro, por qué las focas son más importantes que los países del Sur... Hay también un cuarto sin techo que mira directamente al sol, o al firmamento, si es de noche. Ese es el cuarto de las aspiraciones grandes, el cuarto en el que respiro hondo, el cuarto al que hay que acudir siempre que hemos pasado un día entre mucho polvo, o mucho tiempo en el sillón. También ha conocido la buhardilla; allí no vamos demasiadas veces porque es donde están los pedazos rotos de nuestra vida y todavía nos cuesta mirarlos sin sentir dolor o pena.

Hay personas a las que paseamos por nuestra morada interior sin miedo alguno; es más: deseamos desde lo más íntimo de nuestro ser hacerlo. Sentimos desde muy hondo que apreciará, entenderá y comprenderá cada objeto que encuentre en ella. No le importarán los cacharros rotos, aunque tengamos la estantería llena de ellos; no querrá reírse de nuestras inquietudes: se le iluminará la mirada al conocerlas porque . también ella las había sentido latir más de una vez. Le encantará que tengamos un sillón de sueños y un cuarto sin techo, y querrá saber qué nos dicen los astros por la noche y cómo es el vuelo de los pájaros que vemos pasar. Son personas que hacen que sintamos la necesidad de hacer crecer todo eso, de mostrárselo, de hacerlo vivir para ellas.

Esas personas son los amigos, el amigo aquel con quien me atrevo a ser yo misma; sin restricciones y sin temores. Esa persona con la que puedo decir todo porque todo lo va a entender en su contexto; esa persona con la que puedo hablar en borrador: sin orden, sin hilazón, sin sentido algunas veces. Con rabia o ira, con desesperación, con alegría exultante, desvariando. Descubriendo todas las raíces de mi alma y sabiendo que en ningún momento se aprovechará de ello para arrancarme de mi lugar. Y sabiendo que -como escribió alguien- "comprende esas contradicciones en mi naturaleza que llevarían a otros a juzgarme mal". Eso es un amigo.


Diego Torrente


Siempre hay un tiempo para marchar aunque no haya sitio a donde ir.


Tennessee Williams


El verdadero amor no es otra cosa que el deseo inevitable de ayudar al otro para que sea quien es.


Jorge Bucay




Cuando la vida te presente razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una razones para reír.




Poema de La Despedida

Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.

Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco;
pero sí sé que nunca volveré a amar así.

Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.

Te digo adiós, y acaso, con esta despedida,
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.


José Angel Buesa


El amor, para que sea auténtico, debe costarnos.


Madre Teresa De Calcuta


Cuando quieres algo, todo el universo conspira para que realices tu deseo.


Paulo Coelho


Ya ves, a veces me canso de mí y de no tener valor para buscarte y cometer todo delito que este amor exija. "Quieta ahí, tus labios o la vida".


Ismael Serrano


No perdiste a nadie, el que murió, simplemente se nos adelantó, porque para allá vamos todos. Además lo mejor de él, el amor, sigue en tu corazón.


Facundo Cabral


No puedo parar de trabajar. Tendré toda la eternidad para descansar.


Madre Teresa De Calcuta


El peor de todos los pasos es el primero. Cuando estamos listos para una decisión importante, todas las fuerzas se concentran para evitar que sigamos adelante. Ya estamos acostumbrados a esto. Es una vieja ley de la física: romper la inercia es difícil. Como no podemos cambiar la física, concentremos la energía extra y a si conseguiremos dar el primer paso. Después el camino mismo ayuda.


Paulo Coelho


Si supiera que hoy fuera la última vez que te voy a ver dormir, te abrazaría fuertemente y rezaría al señor para poder ser el guardián de tu alma.


Gabriel García Márquez


La mejor amiga de una mujer es una tarjeta de crédito.


Javier Minuesa


Me he quedado con mi alma para pensar solo en ti.


Alejandro Sanz


Se necesitan dos años para aprender a hablar y sesenta para aprender a callar.


Ernest Hemingway




Tristeza y melancolía no las quiero en casa mía.


Para ejercer una influencia benéfica entre los niños, es indispensable participar de sus alegrías.


Don Bosco




Para hacer de una casa un hogar se necesita vivir mucho en ella.


EAGuest


¿Qué poco vale uno ya! Hasta las ratas se suben a ensuciar la azotea de los pensamientos. Esto es lo que hay de nuevo en mi vida: ratas. Ya tengo ratas, piojos, pulgas, chinches, sarna. Este rincón que tengo para vivir será muy pronto un parque zoológico, o mejor dicho, una casa de fieras...


Miguel Hernández


El egoísta sería capaz de pegar fuego a la casa del vecino para hacer freir un huevo.


Sir Francis Bacon


Trabaja uno toda la vida para comprar una casa, y cuando, por fin, la casa ya es de uno... no hay quien viva en ella.


Arthur Miller


Para sentirse como en casa, quedarse en casa.


Clifton Fadiman


La estructura de una obra de teatro es siempre la historia de cómo los pájaros regresan a casa para sentar la cabeza


Arthur Miller


Cuando hayas alcanzado tu propia habitación, sé amable con los que han escogido puertas distintas y con aquéllos que aún están en el pasillo. Si están equivocados, necesitan tus oraciones; y si son tus enemigos, estás bajo órdenes para rezar por ellos. Es una de las normas comunes a toda la casa


Clive Staples Lewis


Nunca falta una amiga, con su historia serpiente, para vender intrigas, necesitas un cliente, si te clava una duda y soy yo el penitente


Ricardo Arjona


Pocos hombres son llamados para gobernar ciudades o imperios; pero cada cual está obligado a gobernar sabia y prudentemente su família y su casa.


Plutarco


Yo nazco en Cartagena, una ciudad a orillas del Mediterráneo con más de tres mil años de historia. Y nazco en una biblioteca, en la de mi abuelo, en donde están las historias de ese mar; las historias de las Cruzadas y de los griegos y del Peloponeso y de la batalla de Salamina. De los corsarios, de los berberiscos... Para mí, el mar es escuela, es memoria, es historia. Y es mi casa.


Arturo Pérez-Reverte


Las lágrimas se guardan para los entierros, y la vida hay que buscarla allí donde lo dejan a uno. En una casa buena de Cádiz, o en el infierno. Donde sea. Donde se pueda


Arturo Pérez-Reverte


Estaba como no creo que pueda aguantar esta promesa, (Esperar a casarse para tener sexo) porque este chico es muy mono. El tema del sexo nunca fue hablado en mi casa, pero era una pequeña chica curiosa.


Katy Perry


En la tradición china del té, se dice que la primera taza no es la mejor. Su sabor aparece de una forma natural en la segunda o la tercera taza. Por eso la casa de té ofrece el termo, para que uno pueda disfrutar el té tranquilamente mientras contempla el jardín.


Qiu Xiaolong


La mayoría de las personas que se ocupan de las palabras no tienen mucha fe en ellos mismos y yo no soy una excepción; en especial con los grandes términos como felicidad, amor, honestidad, fortaleza, que son muy difíciles de alcanzar y están lejos de lo familiar, si se las compara con lo que significan pequeñas palabras como punk, barato, falso... Me siento como en casa con ellas, porque son escuálidas, fáciles de precisar, pero los grandes términos son difíciles; se necesita ser un sacerdote o un tonto para usarlos con confianza.


Hunter S. Thompson