El amor ahuyenta el miedo y, recíprocamente el miedo ahuyenta al amor. Y no solo al amor el miedo expulsa; también a la inteligencia, la bondad, todo pensamiento de belleza y verdad, y solo queda la...
Todos los hombres son dioses para su perro. Por eso hay gente que ama más a sus perros que a los hombres.
Nunca es igual saber la verdad por uno mismo que tener que escucharla por otro.
El agnosticismo simplemente significa que una persona no dirá que sabe o cree aquello para lo que no tiene bases para sostener que cree.
El secreto de la genialidad es el de conservar el espíritu del niño hasta la vejez, lo cual quiere decir nunca perder el entusiasmo.
Existe al menos un rincón del universo que con toda seguridad puedes mejorar, y eres tú mismo.
Por muy lentamente que os parezca que pasan las horas, os parecerán cortas si pensáis que nunca más han de volver a pasar.
Tal vez, solo los genios son verdaderos hombres.
Solo hay un rincón en el universo que a buen seguro puedes mejorar y ese rincón eres tú.
Saber es relativamente fácil. Querer y obrar de acuerdo a lo que uno quisiera, es siempre más duro.
La experiencia no es lo que te sucede, sino lo que haces con lo que te sucede.
Los hechos no dejan de existir aunque se los ignore.
¿Cómo sabes si la Tierra no es más que el infierno de otro planeta?
Los vecinos que uno nunca ve de cerca son los vecinos ideales y perfectos.
La persona inteligente busca la experiencia que desea realizar.
Una verdad sin interés puede ser eclipsada por una falsedad emocionante.
La totalidad esta presente incluso en las piezas rotas.
El hombre silencioso no presta testimonio contra sí mismo.
El burgués es el perfecto animal humano domesticado.
Existen tres clases de inteligencia: la inteligencia humana, la inteligencia animal y la inteligencia militar.