Poesias del 6 de agosto día de la patria ( 4 )
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Todo boliviano que quiera sentir la realidad geográfica de su Patria, la misión histórica de nuestro pueblo, debe empaparse de las ideas de Jaime Mendoza.
Ãscar Ãnzaga
... Sí/ la patria está allá como está aquí
allá diseminada en pedacitos
aquí pidiendo que la conservemos
en todos los centímetros que somos
allá diseminada en pedacitos
aquí pidiendo que la conservemos
en todos los centímetros que somos
Mario Benedetti
Y al fin:
feliz aquel que tiene sus lugares de duración;
ya no será, aunque se haya trasladado para siempre a un país
extraño,
sin perspectivas de volver a su mundo,
nadie a quien han expulsado de su patria.
feliz aquel que tiene sus lugares de duración;
ya no será, aunque se haya trasladado para siempre a un país
extraño,
sin perspectivas de volver a su mundo,
nadie a quien han expulsado de su patria.
Peter Handke
Las derechas, sí, invocan a la Patria, invocan a las tradiciones; pero son insolidarias con el hambre del pueblo, insolidarias con la tristeza de esos campesinos que aquí, en Andalucía, y en Extremadura y en León, siguen viviendo como se vivía hace 500 años, siguen viviendo como desde la creación del mundo viven algunas bestias. Y esto no puede ser así.
José Antonio Primo de Rivera
Tendríamos que ser como Luis, no ya seguirlo, sino ser como él, dejar atrás inapelablemente el odio y la venganza, mirar al enemigo como lo mira Luis, con una implacable magnamidad que tantas veces ha suscitado en mi memoria (pero esto, ¿cómo decírselo a nadie?) una imagen de pantocrátor, un juez que empieza por ser el acusado y el testigo y que no juzga, que simplemente separa las tierras de las aguas para que al fin, alguna vez, nazca una patria de hombres en un amanecer tembloroso, a orillas de un tiempo más limpio.
Julio Cortázar
No sabes la emoción indescriptible con que te escribo... Emoción de pisar suelo europeo, de estar en la patria de Velásquez, Calderón, Cervantes, Tirso, Franco y tantos otros
Jaime Guzmán
Los soldados mexicanos se empiezan a pregun-tar qué hacen persiguiendo mexicanos, dónde quedaron la Patria y su historia, dónde el honor y la verguenza...
Subcomandante Marcos
Los esclavos o los hombres sometidos al poder absoluto no tienen patria, porque la Patria no se vincula a la tierra natal sino en el libre ejercicio de los derechos Ciudadanos
Esteban EcheverrÃa
Algunos estamos amenazados de muerte, por nuestra fidelidad desde cuando eramos jóvenes, a la Patria, al Pueblo, a los Trabajadores y a la causa del Socialismo
Jaime Pardo Leal
No se rompía la patria potestad cuando en el año 2002 aprobaron la Ley de Autonomía del Paciente, por la cual se permite que cualquier joven pueda operarse de lo que quiera, ponerse tetas, por ejemplo.
Bibiana AÃdo
Los florentinos, que carecían de ejércitos propios, trajeron diez mil franceses para conquistar a Pisa; y esta resolución les hizo correr más peligros de los que corrieran nunca en ninguna época. El emperador de Constantinopla, para ayudar a sus vecinos, puso en Grecia diez mil turcos, los cuales, una vez concluida la guerra, se negaron a volver a su patria; de donde empezó la servidumbre de Grecia bajo el yugo de los infieles.
Nicolás Maquiavelo
¡Cuánto daño, y todavía se reverencia e idolatra a uno de los más grandes destructores de la economía nacional! Casi se le reza ante los altares de la patria a este soñador suicida que hundió más en la miseria a quien deseaba ayudar. Cárdenas nos condujo al infierno, eso sí, con paternal cariño?
Francisco MartÃn Moreno
Vosotros, aquí abajo, estáis diciendo: revolución, revolución; la palabra revolución, amigos míos, es una palabra fácil de emplear, pero muy difícil de ejecutar. Tenemos que vencer, oídmelo bien; no podemos, no debemos trastornar cruelmente y tontamente el país; sería peor la falta de trabajo, el caos, sería mil veces peor que los problemas que tiene la República; tenemos que ir todos los días reformando una cosa, cambiando otra, sin cesar, cambio profundo, obras profundas, diariamente, todos los días. Queréis revolución. Hacedla primero dentro de vuestras almas. El amor a la humanidad, el amor a la Patria, el saber luchar, el saber hacer sacrificios, sin amilanarse, eso es la revolución : amor al progreso y a la justicia, de todos los días, venciendo todos los obstáculos y todos los trabajos.
José MarÃa Velasco Ibarra
Patria, Mujer
Digo patria, y a veces me parece
que mujer digo y que su cuerpo beso,
digo mujer y siento que me mece
una cuna de tierra desde el hueso.
Se me viene a la boca un nombre como
un sabor de tristeza y de esperanza.
A la ventana de un amor me asomo
y hacia él el corazón se me abalanza
Me parece que sois la misma cosa,
la misma luz astral, la misma pena,
la misma soledad, la misma rosa
cortada, y esa música que suena
-patria, mujer- entre la oscura brinda
que el viento herido de la tarde mueve,
y esa nube que vagamente ronda
y por los campos y los ojos llueve.
Pequeño campo de batalla, mira
guerra civil y rastro de amargura
y un muerto no del todo que respira,
que aun en tus besos su esperanza apura.
Digo patria, y a veces me parece
que mujer digo y que su cuerpo beso,
digo mujer y siento que me mece
una cuna de tierra desde el hueso.
Se me viene a la boca un nombre como
un sabor de tristeza y de esperanza.
A la ventana de un amor me asomo
y hacia él el corazón se me abalanza
Me parece que sois la misma cosa,
la misma luz astral, la misma pena,
la misma soledad, la misma rosa
cortada, y esa música que suena
-patria, mujer- entre la oscura brinda
que el viento herido de la tarde mueve,
y esa nube que vagamente ronda
y por los campos y los ojos llueve.
Pequeño campo de batalla, mira
guerra civil y rastro de amargura
y un muerto no del todo que respira,
que aun en tus besos su esperanza apura.
Leopoldo de Luis
Auto de Fe
Esta noche de agosto
he quemado tus cartas...
¡Ocho años de vida apasionada!
Mi corazón ardía
en medio de las llamas,
rodeado de fechas,
¡cenizas de mi alma!
Los abrazos crujían,
los besos se quejaban,
y los dulces "¡te quiero!"
de tinta y de esperanza,
en una pirueta
de fuego, se rizaban.
Como una serpentina,
tu nombre se alargaba,
y era un puente la firma
sobre un río de brasas
que, silenciosamente,
sin voz, se desplomaba.
Esta noche de agosto
he quemado tus cartas...
¡Ocho años de vida apasionada!
Esta noche de agosto
he quemado tus cartas...
¡Ocho años de vida apasionada!
Mi corazón ardía
en medio de las llamas,
rodeado de fechas,
¡cenizas de mi alma!
Los abrazos crujían,
los besos se quejaban,
y los dulces "¡te quiero!"
de tinta y de esperanza,
en una pirueta
de fuego, se rizaban.
Como una serpentina,
tu nombre se alargaba,
y era un puente la firma
sobre un río de brasas
que, silenciosamente,
sin voz, se desplomaba.
Esta noche de agosto
he quemado tus cartas...
¡Ocho años de vida apasionada!
Rafael de León
Hola
Tú, que vienes caminando
desde el fondo de mi vida;
que traes como bandera
la música de tu risa;
tú que en tus ojos escondes
lo que mi alma necesita;
tú, que en mi pecho has vivido
por años como dormida
y hoy me despiertas de golpe
hasta que no da cabida
mi pequeño corazón
para esta explosión de dicha.
Eres el río al que quise
ponerle diques un día.
Hoy que subió tu corriente
ya no hay diques que resistan.
En la casa de mi pecho,
en mi sueño y mi vigilia,
en las calles de mis manos,
en la ciudad de mis días,
en la patria de mis pasos
y en el país de mi vida
ven, entra y manda: es tu reino,
tu victoria, tu conquista.
Tú, que vienes caminando
desde el fondo de mi vida;
que traes como bandera
la música de tu risa;
tú que en tus ojos escondes
lo que mi alma necesita;
tú, que en mi pecho has vivido
por años como dormida
y hoy me despiertas de golpe
hasta que no da cabida
mi pequeño corazón
para esta explosión de dicha.
Eres el río al que quise
ponerle diques un día.
Hoy que subió tu corriente
ya no hay diques que resistan.
En la casa de mi pecho,
en mi sueño y mi vigilia,
en las calles de mis manos,
en la ciudad de mis días,
en la patria de mis pasos
y en el país de mi vida
ven, entra y manda: es tu reino,
tu victoria, tu conquista.
Manuel José Arce
Lento
Un bosque de cuchillos ciñe un traje de novia.
Es la patria del fuego y la ignominia
que habita en los suburbios calcáreos de la memoria.
Los pájaros siempre son una despedida,
silente y pálida,
como ciertos atardeceres en el mar.
Crece un muro con la lumbre del abandono,
con las palabras del fango,
-tinta de la sangre o de la piedra-.
Las manos viven dentro del espejo,
desatan sin asombros la crueldad del estigma
negro, de mares de furia estéril.
El velo está roto y en silencio.
Los puentes se extienden como tigres
en el ocaso.
Pálidos musgos y pianos enredan un aire antiguo.
En la selva cantan los muslos tristes de una muchacha.
De "La epopeya del laberinto" 2001
Un bosque de cuchillos ciñe un traje de novia.
Es la patria del fuego y la ignominia
que habita en los suburbios calcáreos de la memoria.
Los pájaros siempre son una despedida,
silente y pálida,
como ciertos atardeceres en el mar.
Crece un muro con la lumbre del abandono,
con las palabras del fango,
-tinta de la sangre o de la piedra-.
Las manos viven dentro del espejo,
desatan sin asombros la crueldad del estigma
negro, de mares de furia estéril.
El velo está roto y en silencio.
Los puentes se extienden como tigres
en el ocaso.
Pálidos musgos y pianos enredan un aire antiguo.
En la selva cantan los muslos tristes de una muchacha.
De "La epopeya del laberinto" 2001
Beatriz Hernanz
Rito Menor
Incendiar los orígenes como se queman labios
Y rechazar la máscara que el día nos prepara,
He ahí la forma secreta de pasar por otoño
Sin perder la ebriedad de los culpados jardines.
Que nunca aquellos ojos a los que dimos
El reposo de las aves solitarias,
La lejanía clara de los ponientes
Se claven en los espejos de la tarde.
Como fuegos perdidos
Que buscasen al hombre,
Su cuerpo sin lluvias atravesando abril
Viven en los libros rotos de las fronteras.
Quién destejió banderas en el hastío
De las playas siendo agosto
Y contempló el mar sin escuchar el canto
Del marino apresado por las lunas del sur,
Maldito sea!,
Y en la hora futura de las amapolas,
En el alto mástil de las noches en nuestros corazones,
Sea maldito,
Y toda esa estación a la que pueda darse,
Y todos sus puertos.
De Designium, 1984
Incendiar los orígenes como se queman labios
Y rechazar la máscara que el día nos prepara,
He ahí la forma secreta de pasar por otoño
Sin perder la ebriedad de los culpados jardines.
Que nunca aquellos ojos a los que dimos
El reposo de las aves solitarias,
La lejanía clara de los ponientes
Se claven en los espejos de la tarde.
Como fuegos perdidos
Que buscasen al hombre,
Su cuerpo sin lluvias atravesando abril
Viven en los libros rotos de las fronteras.
Quién destejió banderas en el hastío
De las playas siendo agosto
Y contempló el mar sin escuchar el canto
Del marino apresado por las lunas del sur,
Maldito sea!,
Y en la hora futura de las amapolas,
En el alto mástil de las noches en nuestros corazones,
Sea maldito,
Y toda esa estación a la que pueda darse,
Y todos sus puertos.
De Designium, 1984
Ramiro Fonte
Silencios
Muere un amor en mitad de la esperanza
y un silencio sepulta su cadáver de pájaro.
Sangra una niña herida sobre un lecho lúbrico
y un silencio se esconde entre los trapos.
Deguellan un muchacho en una patria
y un silencio se oculta en sus zapatos
Cogen la libertad, la escupen, la desangran,
y un silencio terrible cierra los campanarios.
Alguien pone candados en los libros
y un silencio se aprieta en los armarios.
Fusilan un patriota en un rincón oscuro
y un silencio se fuga sobre los techos blancos.
Un millón de niñitos se nos muere de hambre
y un silencio se duerme contemplándolos.
Muere un amor en mitad de la esperanza
y un silencio sepulta su cadáver de pájaro.
Sangra una niña herida sobre un lecho lúbrico
y un silencio se esconde entre los trapos.
Deguellan un muchacho en una patria
y un silencio se oculta en sus zapatos
Cogen la libertad, la escupen, la desangran,
y un silencio terrible cierra los campanarios.
Alguien pone candados en los libros
y un silencio se aprieta en los armarios.
Fusilan un patriota en un rincón oscuro
y un silencio se fuga sobre los techos blancos.
Un millón de niñitos se nos muere de hambre
y un silencio se duerme contemplándolos.
Jorge Debravo
Soneto Del Emigrado
Cataluña hilandera y labradora,
viñedo y olivar, almendra pura,
Patria: rememorada arquitectura,
ciudad junto a la mar historiadora.
Ola de la pasión descubridora,
ola de la sirena y la aventura
-Mediterráneo- hirió tu singlatura
la nave del destierro con su proa.
Emigrado, la ceiba de los mayas
te dio su sombra grande y generosa
cuando buscaste arrimo ante sus playas.
Y al llegar a la Mesa del Consejo
nos diste el sabor noble de tu prosa
de sal latina y óleo y vino añejo.
Cataluña hilandera y labradora,
viñedo y olivar, almendra pura,
Patria: rememorada arquitectura,
ciudad junto a la mar historiadora.
Ola de la pasión descubridora,
ola de la sirena y la aventura
-Mediterráneo- hirió tu singlatura
la nave del destierro con su proa.
Emigrado, la ceiba de los mayas
te dio su sombra grande y generosa
cuando buscaste arrimo ante sus playas.
Y al llegar a la Mesa del Consejo
nos diste el sabor noble de tu prosa
de sal latina y óleo y vino añejo.
Rosario Castellanos
Contigo
No estás tan sola sin mí.
Mi soledad te acompaña.
Yo desterrado, tú ausente.
¿Quién de los dos tiene patria?
Nos une el cielo y el mar.
El pensamiento y las lágrimas.
Islas y nubes de olvido
a ti y a mí nos separan.
¿Mi luz aleja tu noche?
¿Tu noche apaga mis ansias?
¿Tu voz penetra en mi muerte?
¿Mi muerte se fue y te alcanza?
En mis labios los recuerdos.
En tus ojos la esperanza.
No estoy tan solo sin ti.
Tu soledad me acompaña.
No estás tan sola sin mí.
Mi soledad te acompaña.
Yo desterrado, tú ausente.
¿Quién de los dos tiene patria?
Nos une el cielo y el mar.
El pensamiento y las lágrimas.
Islas y nubes de olvido
a ti y a mí nos separan.
¿Mi luz aleja tu noche?
¿Tu noche apaga mis ansias?
¿Tu voz penetra en mi muerte?
¿Mi muerte se fue y te alcanza?
En mis labios los recuerdos.
En tus ojos la esperanza.
No estoy tan solo sin ti.
Tu soledad me acompaña.
Manuel Altolaguirre
Tala
Llévese estos ojos, piedritas de colores,
esta nariz de tótem, estos labios que saben
todas la tablas de multiplicar
y las poesías más selectas.
Le doy la cara entera, con la lengua y el pelo,
me quito las uñas y dientes y le completo el peso.
No sirve esa manera de sentir.
Qué ojos ni qué dedos.
Ni esa comida recalentada, la memoria,
ni la atención, como una cotorrita perniciosa.
Tome las inducciones y las perchas
donde cuelgan las palabras lavadas y planchadas.
Arree con la casa, fuera de todo,
déjeme como un hueco, o una estaca.
Tal vez entonces, cuando no me valga
la generosidad de Dios, eso boy scout,
y esté igual que la alfombra que ha aguantado
su lenta lluvia de zapatos ochenta años
y es urdimbre no más, claro esqueleto donde
se borraron los ricos pavorreales de plata,
puede ser que sin vos diga tu nombre cierto
puede ocurrir que alcance sin manos tu cintura.
Llévese estos ojos, piedritas de colores,
esta nariz de tótem, estos labios que saben
todas la tablas de multiplicar
y las poesías más selectas.
Le doy la cara entera, con la lengua y el pelo,
me quito las uñas y dientes y le completo el peso.
No sirve esa manera de sentir.
Qué ojos ni qué dedos.
Ni esa comida recalentada, la memoria,
ni la atención, como una cotorrita perniciosa.
Tome las inducciones y las perchas
donde cuelgan las palabras lavadas y planchadas.
Arree con la casa, fuera de todo,
déjeme como un hueco, o una estaca.
Tal vez entonces, cuando no me valga
la generosidad de Dios, eso boy scout,
y esté igual que la alfombra que ha aguantado
su lenta lluvia de zapatos ochenta años
y es urdimbre no más, claro esqueleto donde
se borraron los ricos pavorreales de plata,
puede ser que sin vos diga tu nombre cierto
puede ocurrir que alcance sin manos tu cintura.
Julio Cortázar
Bárbara
Vuelvo a leer tus cartas de hace un siglo,
de cuando estaba en el cuartel, ¿recuerdas?,
o en la trena, mi amor, no exactamente
en la Cárcel de Amor, o en las terribles
provincias que he olvidado. Amarillean
los sobres de hilo, corazón. Los sellos
habrán cobrado algún valor. No en vano
oro es el tiempo de la filatelia.
Me hablas de tu fractura de escafoides,
de tu dolor de muelas, de tu perro,
de lo mal que lo pasas en agosto,
de una excursión a Andorra... Poco a poco,
me has vuelto desabrida la nostalgia:
mi dulce bien, no me quisiste nunca.
"Suma de varia intención" 1987
Vuelvo a leer tus cartas de hace un siglo,
de cuando estaba en el cuartel, ¿recuerdas?,
o en la trena, mi amor, no exactamente
en la Cárcel de Amor, o en las terribles
provincias que he olvidado. Amarillean
los sobres de hilo, corazón. Los sellos
habrán cobrado algún valor. No en vano
oro es el tiempo de la filatelia.
Me hablas de tu fractura de escafoides,
de tu dolor de muelas, de tu perro,
de lo mal que lo pasas en agosto,
de una excursión a Andorra... Poco a poco,
me has vuelto desabrida la nostalgia:
mi dulce bien, no me quisiste nunca.
"Suma de varia intención" 1987
Jon Juaristi
COLOR DEL MAR.
Tienen tus ojos un no se que, un invencible imán
tus ojos verdes son cambiante de color, color del mar.
Color del mar tus ojos son
y tu sonrisa espuma de ilusión
tus labios son rojo coral
y tus dientes de tentación.
Quiero mirarme en tus ojos y hundirme en sus olas
quiero mirar tu sonrisa que me parece aureola.
Quiero beber en tus labios la miel de los dioses
y quiero mirar tus dientes como perlas en concha.
Milagros Villegas Orozco.
18 de Agosto de 1950.
Tienen tus ojos un no se que, un invencible imán
tus ojos verdes son cambiante de color, color del mar.
Color del mar tus ojos son
y tu sonrisa espuma de ilusión
tus labios son rojo coral
y tus dientes de tentación.
Quiero mirarme en tus ojos y hundirme en sus olas
quiero mirar tu sonrisa que me parece aureola.
Quiero beber en tus labios la miel de los dioses
y quiero mirar tus dientes como perlas en concha.
Milagros Villegas Orozco.
18 de Agosto de 1950.
Ignacio Rivas Castro
Sentir El Peso Cálido...
Sentir el peso cálido.
Girar
previsora la vista, y saber
que no hay nadie.
Agacharse. Enrollar
el vestido, dejar en las rodillas
la mínima blancura
de la tela, su felpa
y el fruncido que abraza
la cintura y las ingles.
Mojar
con el chorro dorado,
tibio y dulce la tierra
tan reseca de agosto, el desamparo
sutil de las hormigas en la hollada
palidez de los henos.
Mezclar
su fragancia espumosa con el verde
vapor denso de mayo, sus alados
murmullos, la espantada
carrera de los grillos.
Y en invierno, elevar
un aliento de nube
caldeada, aspirando el helor
de hoja fría del aire.
Orinar
era un rito pequeño
de dulzura
en el campo.
(De Fisterra, Libertarias, Madrid 1992)
Sentir el peso cálido.
Girar
previsora la vista, y saber
que no hay nadie.
Agacharse. Enrollar
el vestido, dejar en las rodillas
la mínima blancura
de la tela, su felpa
y el fruncido que abraza
la cintura y las ingles.
Mojar
con el chorro dorado,
tibio y dulce la tierra
tan reseca de agosto, el desamparo
sutil de las hormigas en la hollada
palidez de los henos.
Mezclar
su fragancia espumosa con el verde
vapor denso de mayo, sus alados
murmullos, la espantada
carrera de los grillos.
Y en invierno, elevar
un aliento de nube
caldeada, aspirando el helor
de hoja fría del aire.
Orinar
era un rito pequeño
de dulzura
en el campo.
(De Fisterra, Libertarias, Madrid 1992)
Juana Castro
QUIEREME.
Quiéreme un instante solamente
déjame que te adore eternamente
tenme amor como yo, único, intenso
y olvídame después, jamás recuerdes
a la mujer que tu amor mata.
Recuerda que la vida es muy ingrata
y ya lo pagaras, cuando menos acuerdes
te destrozaran el alma tus quereres.
Cuando estés solo, abatido y traicionado
te acordaras de mi, pero no esperes
que te pida como hoy: ¡ quiéreme un poco ¡
porque no veras entonces
mas que la sombra de un amor, marchito y loco.
Milagros Villegas Orozco.
6 de Agosto de 1950.
Quiéreme un instante solamente
déjame que te adore eternamente
tenme amor como yo, único, intenso
y olvídame después, jamás recuerdes
a la mujer que tu amor mata.
Recuerda que la vida es muy ingrata
y ya lo pagaras, cuando menos acuerdes
te destrozaran el alma tus quereres.
Cuando estés solo, abatido y traicionado
te acordaras de mi, pero no esperes
que te pida como hoy: ¡ quiéreme un poco ¡
porque no veras entonces
mas que la sombra de un amor, marchito y loco.
Milagros Villegas Orozco.
6 de Agosto de 1950.
Ignacio Rivas Castro
SED DE TI.
Tengo sed de mirarte a los ojos
de estrecharte en mis brazos, y de besar tu boca.
Tengo sed, mucha sed de quererte
tengo sed, mucha sed de adorarte
quiero verme en tus ojos de cielo
quiero beber en tus labios de granate
el néctar de los dioses, de tu boca fragante.
Tienen tus labios divinos veneno de amor
y quiero saciar mi sed en ellos; aunque después
tenga que llorar mi dolor.
Tienen tus ojos en mi extraña atracción
pues en cada mirada me robas el corazón.
Milagros Villegas Orozco.
4 de Agosto de 1950.
Tengo sed de mirarte a los ojos
de estrecharte en mis brazos, y de besar tu boca.
Tengo sed, mucha sed de quererte
tengo sed, mucha sed de adorarte
quiero verme en tus ojos de cielo
quiero beber en tus labios de granate
el néctar de los dioses, de tu boca fragante.
Tienen tus labios divinos veneno de amor
y quiero saciar mi sed en ellos; aunque después
tenga que llorar mi dolor.
Tienen tus ojos en mi extraña atracción
pues en cada mirada me robas el corazón.
Milagros Villegas Orozco.
4 de Agosto de 1950.
Ignacio Rivas Castro
Soledad Habitada
La soledad marina que convoca a los peces,
la soledad del cielo herida de alas,
se prolongan en ti sobre la tierra,
soledad despoblada, soledad habitada.
Las hojas de árbol solas cada una en su sitio,
saben que les reservas una muerte privada.
No te pueden tragar, a mordiscos de música,
con su boca redonda el pez y la guitarra.
Cargada de desierto y de poniente
andas sobre el planeta, de viento disfrazada,
llenando cuevas, parques, dormitorios
y haciendo suspirar a las estatuas.
A tu trampa nos guías
con tu lengua de pájaro o lengua de campana.
En tu red prisioneros para siempre,
roemos el azul de la infinita malla.
Te hallas en todas partes, soledad,
única patria humana.
Todos sus habitantes llevamos en le pecho
extendido tu gris, inmensurable mapa.
La soledad marina que convoca a los peces,
la soledad del cielo herida de alas,
se prolongan en ti sobre la tierra,
soledad despoblada, soledad habitada.
Las hojas de árbol solas cada una en su sitio,
saben que les reservas una muerte privada.
No te pueden tragar, a mordiscos de música,
con su boca redonda el pez y la guitarra.
Cargada de desierto y de poniente
andas sobre el planeta, de viento disfrazada,
llenando cuevas, parques, dormitorios
y haciendo suspirar a las estatuas.
A tu trampa nos guías
con tu lengua de pájaro o lengua de campana.
En tu red prisioneros para siempre,
roemos el azul de la infinita malla.
Te hallas en todas partes, soledad,
única patria humana.
Todos sus habitantes llevamos en le pecho
extendido tu gris, inmensurable mapa.
Jorge Carrera Andrade
El Nombre de La Patria
Mi patria es altísima.
No puedo escribir una letra sin oír
el viento que viene de su nombre.
Su forma irregular la hace más bella
porque dan deseos de formarla, de hacerla
como a un niño a quien se enseña a hablar,
a decir palabras tiernas y verdaderas,
a quien se le muestran los peligros del mundo.
Mi patria es altísima.
Por eso digo que su nombre se descompone
en millones de cosas para recordármela.
Lo he oído sonar en los caracoles incesantes.
Venía en los caballos y en los fuegos
que mis ojos han visto y admirado.
Lo traían las muchachas hermosas en la voz
y en una guitarra.
Mi patria es altísima.
No puedo imaginármela bajo el mar
o escondiéndose bajo su propia sombra.
Por eso digo que más allá del hombre,
del amor que nos dan en cucharadas,
de la presencia viva del cadáver,
está ardiendo el nombre de la patria.
Mi patria es altísima.
No puedo escribir una letra sin oír
el viento que viene de su nombre.
Su forma irregular la hace más bella
porque dan deseos de formarla, de hacerla
como a un niño a quien se enseña a hablar,
a decir palabras tiernas y verdaderas,
a quien se le muestran los peligros del mundo.
Mi patria es altísima.
Por eso digo que su nombre se descompone
en millones de cosas para recordármela.
Lo he oído sonar en los caracoles incesantes.
Venía en los caballos y en los fuegos
que mis ojos han visto y admirado.
Lo traían las muchachas hermosas en la voz
y en una guitarra.
Mi patria es altísima.
No puedo imaginármela bajo el mar
o escondiéndose bajo su propia sombra.
Por eso digo que más allá del hombre,
del amor que nos dan en cucharadas,
de la presencia viva del cadáver,
está ardiendo el nombre de la patria.
Oscar Acosta
De pronto volviste,
ayer era ayer,
y ayer no estabas.
Y hoy, ya no es hoy, pero estás de nuevo.
Cayeron como hojas de árbol los meses,
y Diciembre, de nuevo estas aquí.
En Enero no te imaginaba,
para Julio, inevitablemente pensé en ti,
en Septiembre pensé en la patria,
de pronto en Octubre sentí el corazón roto de nuevo,
y Diciembre has vuelto, no se como llegaste aquí.
Se que el tiempo pasa,
se que las cosas cambian,
se que otras se mantienen.
Pero Diciembre, no imaginaba que llegaras tan pronto,
tan de repente,
y yo tan vulnerable.
Tu con tus vientos del norte,
y ofreciendo una manta,
¿Como puedo resistirme a eso?
Diciembre ¿Que diablos pasó por tu mente cuando me advertiste de tu regreso?
ayer era ayer,
y ayer no estabas.
Y hoy, ya no es hoy, pero estás de nuevo.
Cayeron como hojas de árbol los meses,
y Diciembre, de nuevo estas aquí.
En Enero no te imaginaba,
para Julio, inevitablemente pensé en ti,
en Septiembre pensé en la patria,
de pronto en Octubre sentí el corazón roto de nuevo,
y Diciembre has vuelto, no se como llegaste aquí.
Se que el tiempo pasa,
se que las cosas cambian,
se que otras se mantienen.
Pero Diciembre, no imaginaba que llegaras tan pronto,
tan de repente,
y yo tan vulnerable.
Tu con tus vientos del norte,
y ofreciendo una manta,
¿Como puedo resistirme a eso?
Diciembre ¿Que diablos pasó por tu mente cuando me advertiste de tu regreso?
LinaAceves
POESIAS DE AMOR
Me gustaría mirarte a los ojos
me gustaría decirte que te quiero
me gustaría besar tus labios
y decirte que eres el primero
{____________}
El cristal de mi ventana
con aliento lo empañe
en el escribi tu Nombre
y con besos lo borre
{___________}
Mucho quiero a tus ojitos,
a tus ojitos mucho quiero,
pero mas quiero a los mios
porque fueron quienes te vieron
{__________}
Dile que no le quiero
dile que no le amo ,
pero nunca le digas
que te lo digo llorando
{__________}
Ha mi corazon le pregunte
si puede ser que te olvide
y sonriendo me dijo:
No sueñes con lo imposible.
Me gustaría mirarte a los ojos
me gustaría decirte que te quiero
me gustaría besar tus labios
y decirte que eres el primero
{____________}
El cristal de mi ventana
con aliento lo empañe
en el escribi tu Nombre
y con besos lo borre
{___________}
Mucho quiero a tus ojitos,
a tus ojitos mucho quiero,
pero mas quiero a los mios
porque fueron quienes te vieron
{__________}
Dile que no le quiero
dile que no le amo ,
pero nunca le digas
que te lo digo llorando
{__________}
Ha mi corazon le pregunte
si puede ser que te olvide
y sonriendo me dijo:
No sueñes con lo imposible.
gitanabarby
Que sería de la música sin sus melodías
Que sería de la pintura sin sus lienzos
Que sería de la poesía sin sus rimas
Que sería de mí sin ti, la dueña de mi vida
Qe sería del mundo sin tu melodiosa fantasía
ese lienzo en el que dibujas tu vida día a dia
Que sería de mi sin tí? musa de mis poesias.
Extraño esa sensación de lapiel de tus manos
acariciando mis brazos
Extraño el sabor de tus labios,
en esos besos dulces que me haz dado
Extraño la luz que iraddia tu mirada,
con esos ojos que me tienen preso de tu alma.
Extraño las palabras, los momentos, las risas,
los lugares, las miradas, te extraño dueña de mi alma.
Que sería de la pintura sin sus lienzos
Que sería de la poesía sin sus rimas
Que sería de mí sin ti, la dueña de mi vida
Qe sería del mundo sin tu melodiosa fantasía
ese lienzo en el que dibujas tu vida día a dia
Que sería de mi sin tí? musa de mis poesias.
Extraño esa sensación de lapiel de tus manos
acariciando mis brazos
Extraño el sabor de tus labios,
en esos besos dulces que me haz dado
Extraño la luz que iraddia tu mirada,
con esos ojos que me tienen preso de tu alma.
Extraño las palabras, los momentos, las risas,
los lugares, las miradas, te extraño dueña de mi alma.
Tovléz Neunzehn
Son políticos
Son políticos los creyentes ilusos de eternos tiempos buenos
Sabios, “culpables inocentes”, licenciados amnésicos
Son los genios invisibles que nos ofrecen sin garantía
Para llenarse los bolsillos de la siniestra economía.
Son políticos hombres que hablan tanto, hombres de palabras vencidas
Por su causa el mar Caribe se traga tantas inocentes vidas
Eso músicos de la angustia que venden el alma por pedazos
Evadiendo las lagrimas del hambre y los mismos pies descalzos.
Son políticos los de duro corazón y sensibles en la televisión
Eso colores apagados que hacen brindis por el dolor de mi patria
Esas verdades mentirosas que por tanto tiempo hemos creído
Vagas esperanzas que dejaran a Duarte condenado al olvido
Son políticos los creyentes ilusos de eternos tiempos buenos
Sabios, “culpables inocentes”, licenciados amnésicos
Son los genios invisibles que nos ofrecen sin garantía
Para llenarse los bolsillos de la siniestra economía.
Son políticos hombres que hablan tanto, hombres de palabras vencidas
Por su causa el mar Caribe se traga tantas inocentes vidas
Eso músicos de la angustia que venden el alma por pedazos
Evadiendo las lagrimas del hambre y los mismos pies descalzos.
Son políticos los de duro corazón y sensibles en la televisión
Eso colores apagados que hacen brindis por el dolor de mi patria
Esas verdades mentirosas que por tanto tiempo hemos creído
Vagas esperanzas que dejaran a Duarte condenado al olvido
FELIX LEON
! México, como me duele ver tu suelo ensangrentado, patria mía tan amada......
Hombres y mujeres con su vida redimieron.....
La injusticia, y el oprobio traicionero.....
Y....
Sinembargo inútil fueron,pués justicia y vida digno no hemos alcanzado.
Hombres y mujeres con su vida redimieron.....
La injusticia, y el oprobio traicionero.....
Y....
Sinembargo inútil fueron,pués justicia y vida digno no hemos alcanzado.
DINAH
En las cosas de la vida,
Como en cosas de la Patria,
Deben de estar definidas,
Nuestras metas...¡nuestras ansias!
Como en cosas de la Patria,
Deben de estar definidas,
Nuestras metas...¡nuestras ansias!
pupykuba
Amigos que por siempre nos dejaron, caros amigos para siempre idos, fuera del Tiempo y fuera del Espacio! Para el alma nutrida de pesares, para el transido corazón, acaso
Aunque es más conocido por sus novelas, Edgar Allan Poe también realizó diversas poesías. En este corto ejemplo observamos cómo el autor expresa la tristeza que le embarga al contemplar cómo entierran a un amigo.
Aunque es más conocido por sus novelas, Edgar Allan Poe también realizó diversas poesías. En este corto ejemplo observamos cómo el autor expresa la tristeza que le embarga al contemplar cómo entierran a un amigo.
Edgar Allan Poe
En la sierra de oaxaca
en un viejo jacalito
nació un pobre niño indito
Su raza era zapoteca
y no hablaba el español
cuidaba a sus borreguitos
bajo los rayos del sol.
Fue un valiente mexicano
que a su patria defendió
llego a ser presidente
de esta gran nación
se llamo Benito Juarez
y por la libertad lucho¡¡¡
en un viejo jacalito
nació un pobre niño indito
Su raza era zapoteca
y no hablaba el español
cuidaba a sus borreguitos
bajo los rayos del sol.
Fue un valiente mexicano
que a su patria defendió
llego a ser presidente
de esta gran nación
se llamo Benito Juarez
y por la libertad lucho¡¡¡
Benito Juarez
No ya mi corazón desasosiegan
las mágicas visiones de otros días.
¡Oh Patria! ¡oh casa! ¡oh sacras musas mías!...
Silencio! Unas no son, otras me niegan.
Los gajos del pomar ya no doblegan
para mí sus purpúreas ambrosías;
y del rumor de ajenas alegrías
sólo ecos melancólicos me llegan.
Dios lo hizo así. Las quejas, el reproche
son ceguedad. ¡Feliz el que consulta
oráculos más altos que su dueño!
Es la Vejez viajera de la noche;
y al paso que la tierra se le oculta,
abrese amigo a su mirada el cielo.
las mágicas visiones de otros días.
¡Oh Patria! ¡oh casa! ¡oh sacras musas mías!...
Silencio! Unas no son, otras me niegan.
Los gajos del pomar ya no doblegan
para mí sus purpúreas ambrosías;
y del rumor de ajenas alegrías
sólo ecos melancólicos me llegan.
Dios lo hizo así. Las quejas, el reproche
son ceguedad. ¡Feliz el que consulta
oráculos más altos que su dueño!
Es la Vejez viajera de la noche;
y al paso que la tierra se le oculta,
abrese amigo a su mirada el cielo.
Rafael Pombo
Tu grandeza y tu gloria
palpitan en la historia
del México moderno;
atrás quedó el pasado
mas tu nombre sagrado
ha de brillar eterno.
Tu enorme sacrificio
nos lega el beneficio
de tener patria nueva;
una patria grandiosa,
progresista y dichosa,
que ante el mundo se eleva.
???????????.
48
A JUAREZ
Juárez, Juárez, tu eximia figura
fue dejando una estela de honor,
en la historia, tu nombre sublime
¡Brilla siempre con gran esplendor!
Son tus hechos eternas victorias
que trascienden a gloria y honor,
pues es grande y sublime tu gloria
¡porque fuiste un gran redentor!
Consagraste tu vida en la Patria
desterrando la infame traición,
es por eso que hoy vive tu nombre
¡En la trama de nuestro pendón!
Tus hazañas doquiera resuenan
con clarines de áureo metal,
y los cielos escriben tu nombre
¡Con pinceles de luz celestial!
palpitan en la historia
del México moderno;
atrás quedó el pasado
mas tu nombre sagrado
ha de brillar eterno.
Tu enorme sacrificio
nos lega el beneficio
de tener patria nueva;
una patria grandiosa,
progresista y dichosa,
que ante el mundo se eleva.
???????????.
48
A JUAREZ
Juárez, Juárez, tu eximia figura
fue dejando una estela de honor,
en la historia, tu nombre sublime
¡Brilla siempre con gran esplendor!
Son tus hechos eternas victorias
que trascienden a gloria y honor,
pues es grande y sublime tu gloria
¡porque fuiste un gran redentor!
Consagraste tu vida en la Patria
desterrando la infame traición,
es por eso que hoy vive tu nombre
¡En la trama de nuestro pendón!
Tus hazañas doquiera resuenan
con clarines de áureo metal,
y los cielos escriben tu nombre
¡Con pinceles de luz celestial!
Benito Juarez
Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
Déjame que me calle con el silencio tuyo.
.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
Déjame que me calle con el silencio tuyo.
.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.
Pablo Neruda