Autores

Populares

Recientes

Temáticas


Frases para Facebook

frases de amor

frases romanticas

frases cortas de amor

frases de desamor

te extraño

frases de despedida

poemas de desamor

frases para enamorar

frases tristes

frases de reflexion

frases de agradecimiento

frases lindas

frases de amistad

frases de aliento

frases para pensar

Ropa ( 2 )

Ropa. Encuentra docenas de ropa con fotos para copiar y compartir.


Me pasé la mañana luchando con la sensación de volutas descarriadas de un mundo intentando filtrarse por las grietas de otro. ¿Conocéis la sensación de empezar un libro nuevo antes de que el recuerdo del último haya tenido tiempo de cerrarse detrás de vosotros? Deja uno el libro anterior con ideas y temas ?personajes incluso? atrapados en las fibras de la ropa y cuando abre el libro nuevo siguen ahí.


Diane Setterfield


Sin pronunciar palabra, Crowley sacó su pistola y acalló para siempre al vigilante con una lluvia de plomo. Cuando el agente cayó, Crowley saltó del automóvil, empuñó el revólver de la víctima y disparó otra bala en el cuerpo tendido. Y este es el asesino que dijo: "Tengo bajo la ropa un corazón fatigado, un corazón bueno: un corazón que a nadie haría daño". Crowley fue condenado a la silla eléctrica. Cuando llegó a la cámara fatal en Sing Sing no declaró, por cierto: "Esto es lo que me pasa por asesino". No. Dijo: "Esto es lo que me pasa por defenderme". La moraleja de este relato es: "Dos Pistolas" Crowley no se echaba la culpa de nada.


Dale Carnegie




¿Qué me motivaba? Creo que la mayoría de las personas creativas quieren expresar su agradecimiento por ser capaces de aprovechar el trabajo que otros han llevado a cabo antes que ellos. Yo no inventé el lenguaje ni las matemáticas que utilizo. Produzco solo una pequeña parte de mis alimentos, y ninguna de mis prendas de ropa está hecha por mí. Todo lo que hago depende de otros miembros de nuestra especie y de los hombros a los que nos subimos. Y muchos de nosotros queremos contribuir con algo para devolverle el favor a nuestra especie y para añadir algo nuevo al flujo de la humanidad. Es algo que tiene que ver con el intento de expresar una idea de la única forma en que muchos sabemos, porque no podemos escribir canciones como Bob Dylan u obras como Tom Stoppard. Tratamos de utilizar el talento que sí tenemos para expresar nuestros sentimientos más profundos, para mostrar nuestro aprecio por todas las aportaciones que vinieron antes que nosotros y para añadir algo a toda esa corriente. Eso es lo que me ha motivado. C


Walter Isaacson


La mayoría de la gente se avergüenza de la ropa raída y de los muebles destartalados, pero más debería ruborizarse de las ideas nocivas y de las filosofías gastadas.


Albert Einstein


Volveré temprano. Te traeré la aurora y, para tu espalda, polvo de mariposa. Si nadan estrellas hoy bajo tu ropa, allí estaré yo. Y si te despiertas antes de que salga el sol y algo se enreda en tu pecho, ese seré yo.


Ismael Serrano


Sábana de Arriba

Me instalé cuidadosamente doblado
entre la ropa blanca del closet
Sacaste las sábanas de tu cama
y me pusiste de sábana de arriba

Te deslizaste debajo de las tapas
y te cubrí centímetro a centímetro

Entonces fuimos barridos por el huracán
y caímos jadeando en el ojo de la tormenta

Ahora yaces bañada en transpiración
con la vista perdida en el cielo raso

y la sábana de arriba aún enredada entre las piernas.


Oscar Hahn




El Animal Que Llora, Ése Estuvo En Tu Alma Antes de Ser Amarillo;

el animal que lame las heridas blancas,

ése está ciego en la misericordia;

el que duerme en la luz y es miserable,

ése agoniza en el relámpago.


La mujer cuyo corazón es azul y te alimenta sin descanso,

ésa es tu madre dentro de la ira;

la mujer que no olvida y está desnuda en el silencio,

ésa fue música en tus ojos.


Vértigo en la quietud: en los espejos entran sustancias
corporales y arden palomas. Tú dibujas juicios y tempestades
y lamentos.


Así es la luz de la vejez, así

la aparición de las heridas blancas.

* * *

Estoy desnudo ante el agua inmóvil. He dejado mi ropa en el
silencio de las últimas ramas.

Esto era el destino:

llegar al borde y tener miedo de la quietud del agua.


Antonio Gamoneda


El amor de la mujer, en la ropa del marido se echa a ver.


Refrán


Yo Soy Danae

Yo soy Dánae. Desnuda caía en el lecho come
bianca neve scende senza vento.
Y llegó secreto con el fulgor
convertido en monedas de oro que cayeron
sobre mí, alrededor, en el suelo
Díjose a sí mismo una voz y aquel oro de ceca
se arremolinó en un amén y se hizo el varón.
Me encontró virgen, me surcó y me sembró.
Me bebió, como quien se echa con sed sobre un río.
Pero lo pasado pasado está.
Ahora soy vieja, y en un reino de columnas derrumbadas
voy y vengo por entre los cipreses y las palomas.
Me tienen por loca, y piensan que miento
cuando digo que fui desvirgada por Zeus.
Para burlarse de mí baten una moneda en el mármol
y yo pienso que él vuelve, y me quito la ropa
y me dejo caer desnuda en la hierba come
bianca neve scende senza vento.
Ni escucho sus risas. Ya voy vieja
pero nunca pude salir de aquel sueño de antaño.

De "Herba aquí ou acolá" 1980
Tr. César Antonio Molina


Álvaro Cunqueiro




La vida continua...
aun sabiendo que te amo y me amas
aun sabiendo que te extraño y me extrañas,
no sujetar la cuerda y atarla, es tedioso.
Sabes últimamente a sabor amargo,apenas puedes entristecer mi corazon, pero luego él se levanta y toma camino hacia el laberinto de los castigos.
El único testigo es el tiempo,él da la cara porque no soporta la verdadera razon de existir, si eres o soy la razon de vivir,ya no te apresures.
No permitire que tu aliento gris,rodeara ya mas mi vida.
Mucho ya has disfrutado mis enojos,mis caderas al caminar llendome de tu hogar dejando huellas que dejan siempre huellas.
Hogueras vacias al dejarte ir de la casa blanca que te encubrio de amor.
Sabanas limpias cuando apoyabas tu espalda al dormir por las noches después de los cuentos con juegos amarillos.
Vistete, ya es tarde, toma tus zapatillas, tu ropa que se despida de mi amarga lucura.
No hay rescate a la batalla... no pierdes... pero tampoco ganas,
solo disfruta de los momentos que quisimos solucionar, momentos sin sentido.
Rescates que se quisieron rehacer...
no pidas nada y solo vete en silencio.
Tu voz ya se torma insoportoble y mi voz se quebranta al no poder escucharte.
La vida continua,
ya veras...yo sin ti y tu sin mi.


Paloma Fernandez


¿Cómo ha ido todo? ¿Me has echado de menos? ¿Sabes,? anoche apareciste en mis sueños, llevabas menos ropa.


Ismael Serrano


Habiendo cambiado de ropa me siento pero muy solo.


Kobayashi Issa


Oración de Un Desocupado

Padre,
desde los cielos bájate, he olvidado
las oraciones que me enseñó la abuela,
pobrecita, ella reposa ahora,
no tiene que lavar, limpiar, no tiene
que preocuparse andando el día por la ropa,
no tiene que velar la noche, pena y pena,
rezar, pedirte cosas, rezongarte dulcemente.

Desde los cielos bájate, si estás, bájate entonces,
que me muero de hambre en esta esquina,
que no sé de qué sirve haber nacido,
que me miro las manos rechazadas,
que no hay trabajo, no hay,
bájate un poco, contempla
esto que soy, este zapato roto,
esta angustia, este estómago vacío,
esta ciudad sin pan para mis dientes, la fiebre
cavándome la carne,
este dormir así,
bajo la lluvia, castigado por el frío, perseguido
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
tócame el alma, mírame
el corazón,!
yo no robé, no asesiné, fui niño
y en cambio me golpean y golpean,
te digo que no entiendo, Padre, bájate,
si estás, que busco
resignación en mí y no tengo y voy
a agarrarme la rabia y a afilarla
para pegar y voy
a gritar a sangre en cuello


Juan Gelman




Una persona que se cambia de ropa siempre se oculta mientras se está cambiando.


Proverbio Africano


La luna cala por mi ropa ligera hasta mi piel.


Sugita Hisajo


Y yo recordando que olvidé tender la ropa, preguntándome qué andarás haciendo ahora.


Ismael Serrano


A fuego lento, revoltosas caricias que parecen mariposas se cuelan por debajo de la ropa y van dejando el sentimiento, amor forjado a fuego lento.


Rosana


Bares en los que la calma y la cerveza salvan nuestra vida, y mi cabeza soñando estar bajo tu ropa.


Ismael Serrano


Ella puso al niño a dormir, y ahora lava la ropa; La luna de verano.


Kobayashi Issa


El Blues de La Estrella Del Sur

La caracola azul
de la mañana
y el despertar violento de la rosa
volverán a latir
debajo de tu piel.
Las puertas de cristal del sentimiento
se abrirán con un blues:
con el blues
de la estrella del sur.
Es hora ya de que despierten los colores.
Es el blues de la estrella del sur.
El adiós, la aventura
están en los bolsillos de tu ropa.
Es el blues de la estrella del sur.
Brilla la luna
encima de las piedras.
Es hora ya, despierta.
Es el blues de la estrella del sur.


Manu Cáncer


Si nuestros errores fueran ropa sucia que quedaria se los lavaramos.


yashira


Mar

Bajo mi cama estáis, conchas, algas, arenas:
comienza vuestro frío donde acaban mis sábanas.
Rozaría una jábega con descolgar los brazos
y su red tendería del palo de mesana
de este lecho flotante entre ataúd y tina.
Cuando cierro los ojos se me cubren de escamas.

Cuando cierro los ojos, el viento del Estrecho
pone olor de Guinea en la ropa mojada,
pone sal en un cesto de flores y racimos
de uvas verdes y negras encima de mi almohada,
pone henchido el insomnio, y en un larguero entonces
me siento con mi sueño a ver pasar el agua.


María Victoria Atencia


El Pozo, El Pozo

La enramada más honda es esa verja
donde te subes para mirar
que ando descalza que ordenando voy
algunos pensamientos a flor de piel,
que solo llevo puesto ojos ausentes
y la ropa tirada junto a un pozo
donde antes tú me has amado
y antes de haberme amado
yo sabía que lo harías
de tu pecho expuesto al mío.

¿Cuántas algas vuelven
a convertirse en roce arenas
si los orígenes del mundo
quedan atrapados en tus ojos
y es verdad la sal de la tierra
como también es lo de la miel
hilándome la boca?
Toda joya con engarce es un nido
ardiendo pero que asilvestrado
conoce el marino punto
donde aparecen olas para sofocar
el instante cuando los espejos
chocan en pleno vuelo chocan
sin romperse pero sí el aire
que ha perdido esencia ante
nuestro único cuerpo.

Debes acordarte siempre
de enramada, pozo, espejo
algas, brocal de haberte amado
y yo olvidar sabiduría, poema,
que no valen para nada
si me has rodeado de tu fuerza
igual que decides mi cuerpo
más esbelto a pesar de los años
que no solo pasea la mujer por dentro
sino la mujer de luna
bien entrada en lugar creciente.

De: Pasión inédita


Pureza Canelo


La mujer pensaba: "Si logro tocar aunque sea su ropa, sanaré." Al momento cesó su hemorragia y sintió en su cuerpo que estaba sana. Pero también Jesús se dio cuenta del poder que había salido de él y, dándose vuelta, preguntó: "¿Quién me tocó el manto?" Sus discípulos le contestaron: "Cuando ves a esa gente que te aprieta, ¿cómo puedes preguntar quién te tocó?" Pero él seguía mirando a su alrededor para ver quién era aquella que lo tocó. Entonces la mujer, que sabía muy bien lo ocurrido, asustada y temblando, se postró ante él y le contó toda la verdad. Jesús le dijo: "Hija, tu fe te ha salvado, vete en paz y queda sana de tu enfermedad".


Jesús Cristo


Cada vez que te veo, abordando un autobús, cruzando alguna calle, hablando por algún telefono publico, o simplemente en mi imaginación, cierro los ojos, aprieto mis puños, tenso todo mi cuerpo, se me eriza la piel, pero después de una dura lucha instantanea, logro controlar la lagrima que amenazaba con escapar de mis ojos. Pienso, “¿Por qué no puedo olvidarla?” tus ojos me visitan cada noche, tus labios, tus mejillas, todos los recuerdos de ti se entierran en mi pecho y luchar por hacerme caer en llanto. Algunas veces lo consiguen, otras no. Recuerdo las primeras palabras, las invitaciones a la iglesia, a los grupos de jóvenes, a las posadas, a las prosesiones, a tus entrenos de futbol, a tus presentaciones en las obras religiosas. Recuerdo las platicas en la banqueta color verde que solias visitar día con dia. Recuerdo mi cobardia constante y desesperante al momento de una insinuación tuya. Recuerdo el día que te enamoraste de el, recuerdo cuando usabas braquets, el pelo descompuesto, tu inocencia se veia a flor de piel, tu belleza era como la de una niña, esa ropa floja que te caracterizaba en medio de todas tus amigas, que al contrario de ti, buscaban verse cada vez mas bellas, atractivas, seducir chavos. Tu no, tu eras diferente, eras especial. No te pasabas horas en el espejo, no te depilabas día a dia, no te bañabas en perfume. Pero a pesar de todo eso, tu belleza resaltaba, tu atractivo era mas que evidente, tu carisma te hacia cada día mas inolvidable.


Cristian Argueta


asi como la polilla consume la ropa asi mis mo la envia te consume a ti siguiendo con la importancia que me das más tú y que no sabes si pasó o no pasó, pero dime a que sabe mmi baba


dalia maria anotta jassi




Una noche oscura, una noche melancólica, en donde reinaba el silencio y las estrellas eran su única compañía, hizo que recuerde los ojos café de mi querida abuela. Esos ojos oscuros que miraban con compasión y amor, y que parecían dos hermosas estrellas cuando lloraba, cuando lloraba de felicidad...De orgullo. Y el cantar de los grillos, me recordó también esas lindas y en su mayoría alegres melodías que cantaba mientras lavaba la ropa. Pero lo más importante de aquella noche, fue que logró que me sienta bien, en paz. En una palabra; con ella.


Valeria Coz


Todo Sea Por El Amor

Tantas cosas he hecho por vos
que tengo que cuidar
que su recuento no te suene a reclamo;
porque todo ha sido hecho en virtud del amor
y los relámpagos y ciclones que solté
de la caja de Pandora
que un día me pusiste en las manos
sí es verdad que han dolido,
que muchas veces me han arrancado piel de la raíz
y me han hecho buscarme el corazón
con miedo a no encontrar su pasito de soldado
han sido mi propia, soberana decisión,
mi perdición, mi gozo,
por los que me he conocido más mujer
capaz de escaladas, acrobacias,
tenacidad de burra rentada,
por los que he recorrido sendas ignotas,
mareada por el olor tan cercano de la felicidad
y te he buscado detrás de gestos y puertas
y hasta de la manera de abandonar tu ropa
y cuando te he encontrado
me he abierto de par en par
como jaula repleta de ruiseñores
y he sabido también cómo se siente
tener un astro deslumbrante en las entrañas.
No quiero, pues, equivocarme con reclamos;
me hago responsable del sol y de la sombra,
pero, ay amor, cómo me duele
que estando yo en tu espacio
como estrella errabunda
fieramente colgada por vos en tu Universo,
no me hayás descubierto elresplandor;
no me hayás habitado,
tomado posesión de mi luz
y solo te hayás atrevido
a palparme
-como un ciego-
en la oscuridad.


Gioconda Belli


Me dijiste muchas veces
quítate esa ropa
que no te va,
me dijiste casi a diario
cambia esos zapatos,
que no vez que esa moda ya es del pasado.

Hay! pedacito!
así como tu criticaste mis trapitos
así el día de hoy
yo te mando lejecitos...

así como un día tiraste mis zapatos
yo desprecio esos besitos,
que a la fuerza quieres
dar con esos labios tan afeminados.

Recuerdas aquel roto pantalón
que nunca te gusto,
pues de la misma manera te digo
que nunca me gustaste tu
por roto y deslavado, ósea por usado...

No te creas ropa de marca,
ni creas que eres como dolche & gabbana
pues no eres mas que una playera barata.

Para mi guardarropa
busco prendas de calidad,
para mi corazón no es la excepción
no busco chicos al por mayor,
en oferta o liquidación.

Así, como busco un vestido
que me de seguridad,
busco un amor que no me ha de fallar
que sea un complemento,
que no me haga ver como todo un payaso.

No te creas ropa de marca,
ni creas que eres como dolche & gabbana
pues no eres mas que una playera barata.

Así que da la vuelta
camina hacia haya
y regresa al puesto de mercado
tu mi trapito barato.


Enaiiad Lebasí


LA ALEGRIA DIJESTIVA NO CONDUCE A NADA

Vivir riendo del dolor humano
siempre huyendo del penar ajeno
sin que importe nada
ni de nadie, sin el aliento
que justifique el anhelo
ver a nuestro paso un ser mendigo
y seguir por el camino indiferentes
murmurando ira casi entre los dientes
que se hace pena tras la risa sorda.

¡Cuantos hipócritas amarretes que tienen de más y no dan!
(con todo el respeto a UD. Lector si en algo este escrito le tocó, cuando vea una persona en situación de calle, si no le quiere dar plata déle comida o ropa que no usé; piense que UD. pudo haber sido esa persona; ojala nuestros hijos nunca lleguen a ese estado; pero piense que también él fue hijo.)


Ignacio Hernan Gonzalez Zapata


Esto es lo que debes enseñar e inculcar. Si alguien enseña en otra forma, en vez de conformarse a estas reglas que son las de Cristo Jesús nuestro Señor, y respetar las enseñanzas auténticas de la fe, ese hombre seguramente es un orgulloso y no entiende nada: tiene la enfermedad de ocasionar discusiones y cuestiones inútiles. De ahí provienen envidias, discordias, insultos, desconfianzas, discusiones propias de los que tienen la mente pervertida y andan lejos de la verdad; para ellos la religión es un puro negocio.
Pero en otro sentido la religión es una riqueza para quien se conforma con lo que tiene, pues al llegar al mundo no trajimos nada, ni tampoco nos llevaremos nada. Quedémonos entonces satisfechos con tener alimento y ropa. En cambio, los que quieren ser ricos caen en tentaciones y trampas, una multitud de ambiciones locas y dañinas los hunden en la ruina hasta perderlos. Está comprobado que la raíz de todos los males es el amor al dinero. Por entregarse a él, algunos se han extraviado lejos de la fe y se han torturado a sí mismos con un sinnúmero de tormentos.


Sagradas Escrituras


Dios no mira tu ropa ni tu estilo,,, el ve como sta vestido tu corazon!!!!!!


ayeline


PARA ARISTÓTELES la amistad era "lo más necesario para la vida", y nosotros, cuando oímos decir que "un amigo es un tesoro" o que "donde está tu amigo está tu tesoro", nos damos cuenta de que esas palabras resuenan como un aldabonazo en nuestro interior. No nos dejan indiferentes, porque todos sabemos o intuimos qué clase de tesoro puede llegar a ser una amistad.

A las personas nos gusta tener amigos: gente con la que compartir vida, experiencias, tiempo, conversación... Nos gustan los amigos y nos parecen muy importantes, incluso imprescindibles. La amistad es una relación humana con un valor muy especial. Junto con la família y el trabajo, es algo que nos parece que merece la pena y a lo cual dedicamos tiempo y esfuerzo. Queremos tener amigos en la vida: para no estar solos -a veces se siente la soledad incluso estando rodeados de gente-, para vivir la vida más a fondo y para disfrutarla de verdad. Como escribió Aristóteles, "sin amigos nadie querría vivir, aun cuando poseyera todos los demás bienes".

Quizá por eso escribo esto. Escribir sobre la amistad me ayuda a saber qué espero yo de ella, qué doy yo a mis amigos, si mi amistad con ellos es plena o solo algo "satisfactorio". Reflexionar sobre las cosas ayuda a vivirlas mejor. Reflexionar es un modo de vivir.

LA AMISTAD COMO REGALO
Decía más arriba que dedicamos esfuerzo a hacer amigos. Y el esfuerzo es necesario porque las cosas no salen solas. Sin embargo, la amistad no se puede forzar. Por eso también puede decirse que la amistad surge siempre como un regalo, como un don que se recibe. En un momento dado, aparece entre dos personas un deseo de compartir, de comunicarse, de contar lo que se lleva dentro y de contrastarlo, de ser conocido muy a fondo. De hecho, cuando uno vislumbra en el horizonte la posibilidad de hacer una nueva amistad, de esas profundas y verdaderas, que aportan y llenan tanto por dentro, parece que su espíritu se hincha y crece. Es como ver nacer un día radiante. La vida se ve de otro color porque los amigos hacen cobrar sentido a nuestras vivencias: estas no van a ser solo para nosotros. Las cosas son distintas porque las vivimos pensando en compartirlas, en transmitirlas, en discutirlas, en compararlas. De nuestros amigos nos interesa todo: lo que piensan, lo que hacen, cómo viven las cosas. Lo importante no es solo lo que cuentan ni lo que les pasa; lo importante es que eso "es tuyo", "eres tú".

Desde mi adolescencia he experimentado disgusto ante los momentos meramente descriptivos de los acontecimientos, o las que eran como una reseña informativa de lo que había ocurrido en el verano. Los momentos verdaderos son aquellos en las que los acontecimientos del lunes o del viernes se describen como cosas que me pasan y no solo como cosas que van pasando a mi lado. Lo interesante y lo que me hace disfrutar era ver cómo esas cosas se viven desde dentro de mis amigos.
El grado de amistad con los amigos puede distinguirse precisamente por eso. Por si los momentos estaban llenos de preguntas convencionales y frases que se repetían del mismo modo en todas los demás momentos o si e ellos te dejas llevar, trayendo a colación esto o aquello, y acabando en lugares desconocidos para ti mismo, pero bonitos y en los que habías disfrutado. Escribir para los amigos es descubrir el mundo con unos ojos nuevos para dárselo a ellos.

La amistad es un regalo porque es vivir otra vida además de la propia. Es poder vivir dos veces. Y es también reafirmar tu propia existencia porque hay alguien que la quiere así: incondicionalmente. En el amigo encontramos aceptación plena.

La amistad es un don porque, en cierto modo, llega cuando y como quiere; no es programable; simplemente, surge y es como un regalo, un don que uno recibe.

Esa comunión del espíritu que hay entre los amigos, ese compartir denso e intenso, ese vivir y ser sin dar explicaciones porque estas no son necesarias para nuestro mutuo entendimiento, ese encontrar las puertas del alma siempre abiertas y acogedoras para ti porque eres tú, es el tesoro incalculable. No es extraño que los griegos la calificaran como regalo de los dioses.

Regalo es también en el sentido de que nunca es verdaderamente merecida. Si se puede hablar así, algunos podrían merecer más que otros el tener amigos. Pero, en el fondo, la amistad de una persona difícilmente es algo que uno llegue a "merecer". Se pueden tener de modo habitual disposiciones personales adecuadas para la amistad, para tener amigos (no todo el mundo las tiene).

Pero no se puede decidir en qué momento aparecerá el amigo o de quién seré amigo. Por ejemplo, todos contamos con momentos imborrables de la vida en los que comprendes repentinamente que tienes delante a alguien que puede leer dentro de ti como si fueras tú quien lo hiciera; que puede pasearse por tu alma sin explicaciones de tu parte; sin necesidad de mapas, brújulas o palabras clave que le hagan entender lo que se va a encontrar. Es la empatía, una sintonía especialísima que se establece con muy pocas personas a lo largo de la existencia, y que es un descenso y un ascenso vertiginoso por las entrañas de la verdadera vida.

MIRAR A LAS PERSONAS
Cuando nos sentimos así, vistos con unos ojos ajenos que al mismo tiempo son como los nuestros propios, es como si todo nuestro ser despertara. Querríamos saberlo todo acerca de aquella persona y que ella conociera nuestro yo hasta el final. Las conversaciones se convierten en un continuo maravillarse y aportarse mutuo. Sentimos el mundo como un pequeño globo terráqueo que gira entre nuestras manos y el motor de ese movimiento es la corriente que entre nosotros se ha creado.

Es un encuentro con otro yo, sin que ese yo se refiera a un yo idéntico, a un "alma gemela"; pues puede serlo o no. Es otro yo porque se pone en nuestra piel como si fuéramos nosotros mismos; pero al tiempo que mantiene su mismidad y su alteridad. Y por eso hay mucha riqueza en el trato con el amigo, porque lo distinto siempre nos enriquece.

Mirarnos en un amigo es mirarnos en un espejo. En un espejo que devuelve algo más que una simple reproducción de la propia imagen. Mirarnos en un amigo es encontrarnos a nosotros mismos vistos desde fuera y con mayor perspectiva, pero con el cuidado con que nosotros mismos pondríamos al mirarnos: "A través de él, los amigos se enriquecen y perfeccionan, se descubren e interpretan.

Se podría decir que, al ver al otro, cada uno de ellos aprende a conocerse" (Marias). La acción de mirar que tanto aparece entre los amigos, es algo que me parece esencial para que pueda surgir amistad entre dos personas para tener amigos hay que saber mirar.

En una carta que recibí hace unos meses me decía una amiga que "había encontrado el camino para trascender lo inmediato. El despertador para mirar (...) era el del pensamiento filosófico y la contemplación de las cosas bellas". En mi respuesta, le reafirmé en su descubrimiento porque me parecía realmente valioso: la filosofía y la contemplación estética son dos medios muy buenos para acceder a lo más hondo de la realidad.

La belleza es un camino hacia la verdad especialmente bueno. Porque la belleza no produce únicamente la mera delectación estética; posee una cualidad inestimable, y es que exige por nuestra parte contemplación. Ante las cosas bellas no basta pasear la vista. Para disfrutarlas verdaderamente hay que mirarlas con detenimiento, con miramiento. Con ellas hay que andarse con contemplaciones. Y contemplar es importante porque hace que nos detengamos y miremos las cosas tal como son, "dejando" que sean así.

La contemplación es un camino abierto hacia la verdad. Hacia la verdad personal, la de los demás y la del universo entero. Eso lo expresa muy bien de otro modo Lorenzo Silva en una de sus novelas. Escribía que "el mundo está lleno de tesoros sin descubrir porque no hay quien se pare a mirarlos. Pero en cuanto hay alguien que se detiene ante ellos, se abren ante esa persona como una maravillosa realidad llena de riqueza y significado ofreciéndole nuevos horizontes". Yo he pensado muchas veces que eso exactamente pasa con las personas.
Por eso, para tener amigos hay que saber mirar. Mirar es ver con atención, es contemplar, es concentrar nuestro ser entero en los ojos deseando captar lo que hay frente a ellos. Mirar presupone una vista limpia, sin prejuicios ni cargas anteriores, para captar lo que hay y no lo que yo he puesto o quiero poner. Mirar no es ver lo que yo quiero ver sino percibir cómo son las cosas o las personas en sí. Y además de limpieza interior, la mirada requiere también aceptación, renuncia a dominar. Cuando miramos de verdad, estamos dispuestos a dejar ser a las cosas y a las personas tal y como son. Esto es especialmente importante con las personas.

A las personas hay que dejarlas ser, hay que aceptarlas como son. Sin esa condición nunca sabremos lo que es una verdadera amistad; nunca llegaremos a saborear el gozo inmenso que produce esa identificación con el otro, ese compartir la vida, los sueños, los deseos, los fracasos. Habrá siempre en el amigo una zona de acceso prohibido o de "reservado".

Para mirar de verdad hay que aprender a hacerlo. Los hay que conocen ese arte de modo natural o han sido educados en él. Pero también puede aprenderse. Para mirar hay que pararse, parar la rueda de la actividad exterior y parar también nuestro ruido interior (qué tengo que hacer luego, cómo resolveré la cena en casa de mi hermano, qué ropa necesito, a ver cómo queda el Madrid, a ver si consigo cerrar un buen trato con este cliente...). Para mirar hay que perder el miedo a "pasar tiempo" sin haber sido ""eficaces"".

Todos hemos conocido a personas que provocan que los que están a su lado den lo mejor de sí mismos. Son personas que logran que los demás quieran -parafraseando a Salinas- "sacar de sí su mejor yo". Es así porque son personas que saben mirar, y que por eso han sabido encontrar la llave interior de las personas. Esa llave de la confianza que uno entrega solo cuando va a saberse visto, aceptado y querido por sí mismo.

LA MORADA DEL YO
Llegar a la intimidad del alma, al centro de la persona o solo rozar su periferia, exige rodeos: rodeos que son esencialmente contemplación, escucha atenta y activa, mirada abierta y receptiva. Solo cuando una persona percibe ese clima de confianza a su alrededor es capaz de empezar a abrir las rendijas de su yo. Y a través de esas rendijas pueden empezar a filtrarse los rayos de la luz que toda persona esconde. La intimidad, la interioridad, es siempre luminosa en el sentido de iluminadora. Porque muestra siempre algo desconocido para quien no está allí dentro. No siempre será lo original y nuevo el qué diga esa persona pero sí el cómo ella lo vive. Esta es la llave que entregamos a nuestros amigos y que hace que quedemos totalmente al descubierto: vulnerables, también.

Algunas veces, tras haber desnudado la intimidad del alma en conversación con la persona que nos ha inspirado esa confianza, uno siente el vértigo del miedo a romperse, a que le rompan, a que se burlen, a que no comprendan, al silencio indiferente o superficial.

Hasta ahora, esos pensamientos, deseos, aspiraciones, miedos y preguntas más íntimas habían quedado dentro de nuestra alma. A veces nos angustiaban, otras nos elevaban, otras nos desbordaban por dentro de tal forma, que había que expresarlos de algún modo (quién no ha cantado, llenado de piruetas su salón, compuesto una melodía o garabateado un poema, historia o carta, por puro desbordamiento. Tanto no cabía dentro; fuera crecía, pero tenía más apoyos para ser sostenido, para ser vivido).

Sin embargo, no dejaban de ser nuestros: los demás solo poseían de ellos su cara externa, lo que era fruto de la superabundancia. Por lo demás, no habían sido escuchados por nadie hasta el final y solo de vez en cuando abríamos a alguien una pequeña ventanita de nuestro interior, observando con atención la reacción del interlocutor ante aquello. Pero, de repente, hemos encontrado a alguien que ha provocado que primero quisiéramos abrir una ventanita y después otra, y otra... Luego le hemos pasado al interior de la casa y -poco a poco- le hemos encendido todas las luces que había en ella, iluminando incluso rincones sucios, destartalados, rincones sin ordenar o habitaciones llenas de trastos que no sabemos en dónde colocar. Le hemos enseñado el sillón de los sueños, frente a la ventana, y le hemos invitado a sentarse allí porque desde él puede conocerlos mejor. Le hemos presentado el rincón de los miedos, ese sí, está a oscuras porque nos parece que la luz acabará por hacerlos crecer. Es un rincón siempre difícil de enseñar; se supone que de esos no tenemos, y nos cuidamos mucho de dejarlos salir. También le hemos pasado al cuarto de las preguntas; esa habitación está llena de frases sueltas, de pensamientos, de párrafos incluso, y hasta de alguna página escrita. Pero sobre todo está lleno de interrogantes; es una habitación poblada de signos de interrogación que hemos ido recogiendo a lo largo de nuestra vida: por qué las relaciones humanas son tan complicadas, por qué hay personas que no miran hacia adentro, por qué las focas son más importantes que los países del Sur... Hay también un cuarto sin techo que mira directamente al sol, o al firmamento, si es de noche. Ese es el cuarto de las aspiraciones grandes, el cuarto en el que respiro hondo, el cuarto al que hay que acudir siempre que hemos pasado un día entre mucho polvo, o mucho tiempo en el sillón. También ha conocido la buhardilla; allí no vamos demasiadas veces porque es donde están los pedazos rotos de nuestra vida y todavía nos cuesta mirarlos sin sentir dolor o pena.

Hay personas a las que paseamos por nuestra morada interior sin miedo alguno; es más: deseamos desde lo más íntimo de nuestro ser hacerlo. Sentimos desde muy hondo que apreciará, entenderá y comprenderá cada objeto que encuentre en ella. No le importarán los cacharros rotos, aunque tengamos la estantería llena de ellos; no querrá reírse de nuestras inquietudes: se le iluminará la mirada al conocerlas porque . también ella las había sentido latir más de una vez. Le encantará que tengamos un sillón de sueños y un cuarto sin techo, y querrá saber qué nos dicen los astros por la noche y cómo es el vuelo de los pájaros que vemos pasar. Son personas que hacen que sintamos la necesidad de hacer crecer todo eso, de mostrárselo, de hacerlo vivir para ellas.

Esas personas son los amigos, el amigo aquel con quien me atrevo a ser yo misma; sin restricciones y sin temores. Esa persona con la que puedo decir todo porque todo lo va a entender en su contexto; esa persona con la que puedo hablar en borrador: sin orden, sin hilazón, sin sentido algunas veces. Con rabia o ira, con desesperación, con alegría exultante, desvariando. Descubriendo todas las raíces de mi alma y sabiendo que en ningún momento se aprovechará de ello para arrancarme de mi lugar. Y sabiendo que -como escribió alguien- "comprende esas contradicciones en mi naturaleza que llevarían a otros a juzgarme mal". Eso es un amigo.


Diego Torrente


A cada ser su colorida ropa viste la luz.


Jacques Delille


Era el inicio del año escolar,
dentro del salón de clases
se encontraba la maestra al frente
de sus alumnos de 5to Grado.

En la fila de adelante hundido
en su asiento estaba un niño de nombre Pedro
a quien la maestra conocía desde el año anterior.

Sabía que no jugaba bien con los otros niños,
que su ropa estaba desaliñada
y que frecuentemente necesitaba un baño.

Con el paso del tiempo
la relación entre ellos se volvió incómoda,
al grado que ella sentía gusto
al marcar sus tareas con grandes taches en color rojo.

Un día al revisar los expedientes de sus alumnos
se llevo una gran sorpresa
l descubrir los comentarios de los anteriores profesores de Pedro.

"Es un niño brillante con una sonrisa espontánea,
hace sus deberes limpiamente y tiene buenos modales;
es un deleite tenerlo cerca".

"Pedro es un excelente alumno,
apreciado por sus compañeros pero tiene problemas,
su madre tiene una enfermedad incurable
y su vida en casa debe ser una constante lucha".

Otro maestro escribió:
"La muerte de su madre ha sido dura para él,
trata de hacer su máximo esfuerzo,
pero su padre no muestra mucho interés".

Y por último: "Pedro es descuidado,
no tiene amigos y en ocasiones se duerme en clase".

La maestra se dio cuenta del problema y se sintió apenada,
más aún cuando al llegar Navidad,
todos los alumnos le llevaron regalos
envueltos en papeles brillantes y hermosos listones,
excepto el de Pedro que estaba torpemente envuelto
en papel de una bolsa del súper.

Algunos niños rieron;
la maestra encontró un viejo brazalete de piedras
y la cuarta parte de un frasco de perfume,
minimizando la risa de los niños al exclamar
¡Que brazalete tan bonito, Pedro!
poniéndoselo y rociando un poco de perfume en la muñeca.

Pedro se acercó y le dijo:
"Maestra, hoy usted huele como mi mamá".
Ella lo abrazó y lloró.

A medida que trabajaban juntos
la maestra percibió que a Pedro, mientras más lo motivaba,
mejor respondía,
al final del año era uno de los niños más listos de la clase,
volviéndose su consentido. Ambos se adoraban.

Un año después, encontró una nota de Pedro que decía
"Usted es la mejor maestra que he tenido en toda mi vida".

Cuatro años después, recibió otra carta,
diciéndole que pronto se graduaría
de la Universidad con los máximos honores.

Y le aseguro que era la mejor maestra que había tenido en su vida.

Pasaron otros cuatro años y llego otra carta,
esta vez le explicó
que después de haber recibido su titulo universitario,
él decidió estudiar más y que ella era la mejor.

Solo que ahora su nombre era mas largo
y la carta estaba firmada por el Cardiólogo Pedro Alonso.

El tiempo siguió su marcha y en una carta posterior,
Pedro le decía que
había conocido a una chica y que se iba a casar.
Explicó que su padre había muerto hacia dos años
y él preguntaba si ella accedería
a sentarse en el lugar que normalmente
esta reservado para la mamá del novio.

Por supuesto, la maestra aceptó.

El día de la boda lució aquel brazalete
con varias piedras faltantes
y se aseguró de usar el mismo perfume,
con el que Pedro recordaba el calor de su mamá.

Se abrazaron y él susurró al oído de su maestra preferida,
"Gracias, gracias por creer en mi.
¡Muchas gracias! por hacerme sentir importante
y por enseñarme que yo podía hacer la diferencia".
¡Gracias maestra!

Mariano Osorio


Jackselins Arteaga


Asaltan a un hombre y lo dejan completamente desnudo, eso es comicidad. En cambio, si lo dejan en camiseta y calzoncillos, es humorismo. Yo hago humorismo, porque prefiero que la gente se quede, por lo menos, en ropa interior


Juan Verdaguer


Hago ropa para mujeres reales y con curvas, como yo


Natalia Oreiro


La moda siempre fue un enorme interés mío. Me encanta la ropa hermosa. Aprecio bien puntillas y telas preciosas.


Sasha Cohen


Ropa cara son una pérdida de dinero.


Meryl Streep


El choque de la manera en que yo mezclo patrones y tejidos puede ser desconcertante, pero lo que estoy tratando de hacer es provocar nuevas ideas acerca de la cantidad de piezas se pueden unir de diferentes maneras. Creo que esta es una forma más moderna de llevar ropa que de por sí son bastante clásico.


Jean Paul Gaultier