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Nadie tiene dominio sobre el amor, pero el amor domina todas las cosas.
La amistad no puede ir muy lejos cuando ni unos ni otros están dispuestos a perdonarse los pequeños defectos.
Más fácil es encontrar un amor apasionado que una amistad perfecta.
La amistad del hombre es con frecuencia un apoyo; la de la mujer es siempre un consuelo.
Es muy difícil pensar noblemente cuando no se piensa más que para vivir.
Un vaso medio vacío de vino es también uno medio lleno, pero una mentiras a medias, de ningún modo es una media verdad.
Amar es, en su esencia, el proyecto de hacerse amar.
La amistad entre dos mujeres comienza o acaba por ser un complot contra una tercera.
El amor que nace repentinamente mas tarda en irse.
Es verdaderamente libre aquel que desea solamente lo que es capaz de realizar y que hace lo que le agrada.
El hombre está condenado a ser libre.
El hombre es una pasión inútil.
De nada sirve el correr, lo importante es el partir a tiempo.
Incluso el pasado puede modificarse; los historiadores no paran de demostrarlo.
Nadie es como otro. Ni mejor ni peor. Es otro. Y si dos están de acuerdo es por un malentendido.
Un hombre honrado no encontrará jamás una amiga mejor que su esposa.
La juventud sabe lo que no quiere antes de saber lo que quiere.
Cuando los ricos hacen la guerra, son los pobres los que mueren.
Si la razón hace al hombre, el sentimiento lo conduce.
La vida es una tragedia para los que sienten, y una comedia para los que piensan.
Mi libertad se termina donde empieza la de los demás.
Las personas no están jamás tan cerca de la estupidez como cuando se creen sabias.
Ella no creía en nada; solo su esceptisismo le impedía ser atea.
El dolor silencioso es el más funesto.
La moda muere joven.
Los países son como las estrellas: pueden resplandecer y brillar siglos enteros después de su extinción.
Todos los medios son buenos cuando son eficaces.
Haré el bien: todavía es la mejor manera de estar solo.
El simulacro no es lo que oculta la verdad. Es la verdad la que oculta que no hay verdad. El simulacro es verdadero.
Los celos son una mezcla explosiva de amor, odio, avaricia y orgullo.
Existen verdades que pueden matar a un pueblo.
Amar al otro es renunciar a poseerlo, incluso muerto; renunciar a que vuelva, descubrir que sigue estando ahí, en un silencio que ya no nos causa pavor, en un desierto que se hace acogedor de lo más...
No puedo tomar mi libertad como fin sino tomando igualmente por fin la de los otros.
La imaginación tiene sobre nosotros mucho más imperio que la realidad.
Solo se reconoce el error cuando todo el mundo lo comparte.
Es bueno para los hombres creer en las ideas y morir por ellas.
Los cobardes son los que se esconden bajo las normas.
Un amor, una carrera, una revolución: tantas empresas que comenzamos ignorando su resultado.
La conciencia es la voz de las almas, las pasiones son las voces del cuerpo.
La avaricia lo pierde todo por quererlo todo.