Humor siempre ha sido importante para mí. Si hay un escudo de la fe que se puede mantener con dificultades, el humor es el recubrimiento de teflón.
Una ofensa personal es como un rasguño en un disco fonográfico. No me podía mover mis pensamientos más allá de mi dolor. Se repetía, como si estuviera atrapado dentro de sus ranuras. Solo había...
A la enfermedad y su tratamiento pueden ser una serie de humillaciones, un cincel para la humildad.
He viajado a 50 países, pero yo nunca he estado en el cielo.