Podrá no haber poetas; pero siempre habrá poesía.
Gustavo Adolfo Bécquer
Cobíjame en tus manos cariñosas y ampárame en tus besos.
El enamorado celoso soporta mejor la enfermedad de su amante que su libertad.
No esperemos recompensas de nuestras fatigas y desvelos.
Todos los hombres que han demostrado valer algo han sido los principales artífices de su educación.