Frases Cortas de Mario Benedetti. Encuentra docenas de Frases Cortas de Mario Benedetti con fotos para copiar y compartir.
Acá hay tres clases de gente: la que se mata trabajando, las que deberían trabajar y las que tendrían que matarse.
La infancia es un privilegio de la vejez. No sé por qué la recuerdo actualmente con más claridad que nunca.
Me gustaría mirar todo de lejos pero contigo
De dos peligros debe cuidarse el hombre nuevo: De la derecha cuando es diestra, de la izquierda cuando es siniestra.
Cinco minutos bastan para soñar toda una vida, así de relativo es el tiempo.
No vayas a creer lo que te cuentan del mundo (ni siquiera esto que te estoy contando) ya te dije que el mundo es incontable.
Un torturador no se redime suicidándose, pero algo es algo.
Yo no sé si dios existe, pero si existe, sé que no le va a molestar mi duda.
Quién lo diría, los débiles de veras nunca se rinden
La mariposa recordará por siempre que fue gusano
Después de todo la muerte es solo un síntoma de que hubo vida.
La perfección es una pulida colección de errores.
Cómo voy a creer... que el mundo se quedó sin utopías, cómo voy a creer que la esperanza es un olvido o que el placer una tristeza
La gloria no consiste en no caer nunca, sino más bien en levantarse las veces que sea necesario
Y para estar total, completa, absolutamente enamorado, hay que tener plena conciencia de que uno también es querido, que uno también inspira amor.
En la razón solo entraran las dudas que tengan llave
Contra el optimismo no hay vacunas.
Qué buen insomnio si me desvelo sobre tu cuerpo
Cómo voy a creer, dijo el fulano... que la útopia ya no existe, si vos, mengana dulce osada, eterna si vos sos mi utopía
Hay pocas cosas tan ensordecedoras como el silencio
Cuando el infierno son los otros, el paraíso no es uno mismo.
¡Si uno conociera lo que tiene, con tanta claridad como conoce lo que le falta!
La infancia es a veces un paraíso perdido. Pero otras veces es un infierno de mierda.
Los sentimientos son inocentes como las armas blancas
La muerte es una traición de Dios.
En ciertos oasis el desierto es solo un espejismo.
cuál fue el momento justo de la tristeza
cuál el buceo de la frustración
cuál el instante de tocar fondo
Pero con ella instalada en mi existencia, ya no habrá más soledad. Es decir: ojalá que no haya.
Dar a D?os lo que es de D?os y al César lo que es del César: repartija y prorrateo.
El amor tiene siempre, inevitablemente, algo de ridículo.
Los odios vivifican y estimulan solo si es uno quien los gobierna; destruyen y desajustan cuando son ellos los que dominan.
Tengo un cansancio equivalente a un año de trabajos forzados.
Más que sus ojos, su mirada. Miraba como queriendo decir algo y no diciéndolo.
El miedo es la condición previa del coraje
Una Ensenada sólo vista en postales
una región perpleja del recuerdo
Para mirar los diarios, hay que bajar los ojos.
El arte jamás deja de ser una mentira; cuando es verdad, ya no es arte y aburre, porque la realidad es solo un irremediable absurdo hastío.
La costumbre de amar suele limar el amor, debilitarlo. Hay que amar al margen de cualquier costumbre, improvisadamente.
y no obstante solía preguntarme cómo serías en tu espera si abrirías por ejemplo los brazos para abrazar mi ausencia
Usted tiene todas las condiciones para concurrir a mi felicidad, pero yo tengo muy pocas para concurrir a la suya. Y