El amor es poesía; la religión es amor. Dos cosas semejantes a una tercera son iguales entre sí
Gustavo Adolfo Bécquer
En el tiempo real, en la historia, cada vez que un hombre se enfrenta con diversas alternativas opta por una y pierde las otras; no así en el ambiguo tiempo del arte, que se parece al de la esperanza...
Pero incluso los fariseos y los escribas sacan ventaja de tales adversarios, tienen que haber poseído algún valor para ser odiados de manera tan indecente.
Creo, sinceramente, con ustedes, que los establecimientos bancarios son más peligrosos que los ejércitos permanentes y que el principio de gastar dinero para ser pagado por la posteridad, bajo el no...
El sistema de vida occidental se acaba