Mal empleada está la hacienda en quien no es señor de ella.
Refrán
Vieja madera para arder, viejo vino para beber, viejos amigos en quien confiar, y viejos autores para leer.
Después del crepúsculo, los gusanos de luz piensan: ¡nosotros hemos iluminado el mundo!.
Amar a quien no se ama es fatigar el corazón.
Si el dinero va delante, todos los caminos se abren.