Esfera
Esfera. Encuentra docenas de esfera con fotos para copiar y compartir.
El universo es una esfera infinita cuyo centro está en todas partes y la circunferencia en ninguna.
Jorge Luis Borges
En la esfera de las cosas materiales, dar significa ser rico. No es rico el que tiene mucho, sino el que da mucho.
Erich Fromm
Inventariar perpetuamente lo que se que es, renegar constantemente de sí y refugiarse en una esfera en que no se es ya nada más que una pura y libre mirada
Jean-Paul Sartre
La oscura esfera de lo oscuro ha inundado mi ámbito y se cierra como el beso de dos cúpulas.
Hanni Ossott
El tiempo se deslizaba, incesante, con ese rumor sedoso que tiene la arena que cae de una esfera*
José Saramago
No se me ocurriría trabajar en otra esfera musical. Es la única música que me gusta, la de vanguardia. Así ha sido desde que era un niño... Nunca he tenido ningún tipo de interés por la música mainstream.
David Bowie
En aquel momento me parecía que con dos tercios de la población mundial viviendo en un nivel económico muy bajo, el mundo desarrollado tenía la responsabilidad y la oportunidad de ayudar a que toda esa gente ascendiera a una esfera económicamente más elevada, lo que sería de provecho para todos
Akio Morita
Precisamente el alma es la que se pierde, porque es la que se fascina, la que se engaña, la que sueña mil bellezas y superiores goces, la que aspira con sed insaciable a lo que no posee y a hacer posible la imposibilidad, y a querer estar donde no está, y a marchar siempre de esfera en esfera buscando horizontes.
Benito Pérez Galdós
No existe realmente una diferencia entre el anarquismo y la ecología social. Considero a esta última como una tentativa de ampliar el horizonte del anarquismo. No veo una oposición entre ambos; pienso que la ecología social es una extensión del anarquismo hacia una esfera más amplia de intereses humanos, en este período de descomposición de las clases sociales.
Murray Bookchin
La naturaleza es una esfera infinita cuyo centro está en todas partes y su circunferencia en ninguno.
Blaise Pascal
No pueden invocarse los problemas que se le presentan a toda teoría moral en situaciones extremas para invalidar las reglas de las situaciones normales. En cualquier esfera de teoría moral, intentamos articular una ética para el hombre basada en su naturaleza y en la naturaleza del mundo, y esto es cabalmente lo que se entiende por naturaleza normal, por el modo usual de fluir la vida, y no por las situaciones raras o anómalas.
Murray Rothbard
Murió de Nuevo Un Día...
Murió de nuevo un día... yo la amaba,
mas sin remedio se murió ese día...
-¡Vuelve, Rabino, vuelve!... - yo clamaba -
pero el Rabino rubio no volvía.
Pasó la niña veinte siglos muerta,
murió Cafarnaún de Palestina
y el alma mía, inútil y desierta,
lloraba de inmortal sobre las ruinas.
¡Y la amaba, la amaba... Su blancura
la buscaba en la blanca nebulosa,
su cabellera entre la noche oscura
y en el Poniente su color de rosa...
Y al fin la hallé... Escondida entre los tules
de una puesta de sol, estaba Ella;
su carne inmóvil entre dos azules
inauguraba la primera estrella...
Y la encontré más blanca todavía,
flotando en el azul, sin vestidura,
¡qué blanca estaba así!... la niña mía
tenía veinte siglos de blancura...
Clamé al Amor entonces... Voces buenas
dijeron a lo lejos: - Te ha escuchado! -
clamé al eterno Amor... y a mi lado
la blanca niña era una nube apenas...
Llegó el Amor. Los cielos fueron mudos,
su leve paso silenció la esfera,
llegó el eterno amor de pies desnudos,
maduro el trigo de la cabellera...
"No es muerta... duerme!... y le ordenó:
-¡Levanta!
y Ella se alzó, delgada de martirio,
y una voz le subió por la garganta
como una abeja que abandona un lirio.
Y ha vuelto a mí... su cabellera oscura,
su misma voz... pero en la mano fría
con veinte siglos de amasar blancura,
persiste el miedo de morirse un día....
Murió de nuevo un día... yo la amaba,
mas sin remedio se murió ese día...
-¡Vuelve, Rabino, vuelve!... - yo clamaba -
pero el Rabino rubio no volvía.
Pasó la niña veinte siglos muerta,
murió Cafarnaún de Palestina
y el alma mía, inútil y desierta,
lloraba de inmortal sobre las ruinas.
¡Y la amaba, la amaba... Su blancura
la buscaba en la blanca nebulosa,
su cabellera entre la noche oscura
y en el Poniente su color de rosa...
Y al fin la hallé... Escondida entre los tules
de una puesta de sol, estaba Ella;
su carne inmóvil entre dos azules
inauguraba la primera estrella...
Y la encontré más blanca todavía,
flotando en el azul, sin vestidura,
¡qué blanca estaba así!... la niña mía
tenía veinte siglos de blancura...
Clamé al Amor entonces... Voces buenas
dijeron a lo lejos: - Te ha escuchado! -
clamé al eterno Amor... y a mi lado
la blanca niña era una nube apenas...
Llegó el Amor. Los cielos fueron mudos,
su leve paso silenció la esfera,
llegó el eterno amor de pies desnudos,
maduro el trigo de la cabellera...
"No es muerta... duerme!... y le ordenó:
-¡Levanta!
y Ella se alzó, delgada de martirio,
y una voz le subió por la garganta
como una abeja que abandona un lirio.
Y ha vuelto a mí... su cabellera oscura,
su misma voz... pero en la mano fría
con veinte siglos de amasar blancura,
persiste el miedo de morirse un día....
Andrés Eloy Blanco
Límite
Esfera ceñida de esferas que no pueden
escaparse de la esfera única.
Manos esféricas ciñéndose a unas piernas
que se abrazan redondas, perfectísimas.
Si esta esfera que soy ya, que fui yo siempre,
desgajara de sí un anillo y lo arrojara,
se caería
cogido por su extremo, prolongándose
hasta pisar el polvo.
Ondularía siglos, y su música
subiría por temblores a la esfera
que le retiene siempre jamás, tan suyo.
Sería vertical, hasta que un siglo
la curva reclamara ser redonda
desde un albor sin ritmo. subiría
otra vez a ser anillo, anegándose
por amor de querencia inmarchitable,
en la esfera total.
Yo he sido anillo
tembloroso al caer, y erguida
me dejaba correr desde los tiempos...
Mas la esfera sintió que al fin mi esencia
debía descansar en lo redondo.
Esfera ceñida de esferas que no pueden
escaparse de la esfera única.
Manos esféricas ciñéndose a unas piernas
que se abrazan redondas, perfectísimas.
Si esta esfera que soy ya, que fui yo siempre,
desgajara de sí un anillo y lo arrojara,
se caería
cogido por su extremo, prolongándose
hasta pisar el polvo.
Ondularía siglos, y su música
subiría por temblores a la esfera
que le retiene siempre jamás, tan suyo.
Sería vertical, hasta que un siglo
la curva reclamara ser redonda
desde un albor sin ritmo. subiría
otra vez a ser anillo, anegándose
por amor de querencia inmarchitable,
en la esfera total.
Yo he sido anillo
tembloroso al caer, y erguida
me dejaba correr desde los tiempos...
Mas la esfera sintió que al fin mi esencia
debía descansar en lo redondo.
Carmen Conde
La Biblioteca es una esfera cuyo centro cabal es cualquier hexágono, cuya circunferencia es inaccesible.
Jorge Luis Borges
Escribo Y Apareces Siempre
Este amor ¿canta o atestigua?
¿Confesión o hilos invisibles
sueño o verdad
la luz que visita
para hacerse vestido
tantos como mundos
que en este hermoso oficio
yo procuro?
Espiando tú mi pensamiento
aventuras:
canto y testimonio
no pueden separar
ave sobre velero
en el dominio mar y
siempre pagarás ser dueña
pues de agua llamaste un barco
que obedece.
No estoy conforme. Mira el ancho
de los versos:
Te amo bajo los astros
(testimonio sería)
o
Estamos abrazando al mundo
(canto parece).
Y te acercas a la mesa
para decirme
no pierdas más tiempo
de tus manos que escriben
cosa mejor conmigo
ni busques más amparo
que el de tu voz nunca indecisa
ni temerosa al lado de tu amor
que sabe el movimiento puro
del zarpazo cuando habitas
un rostro de escribiente
que me parece abismo
si acerco tu cintura
clavada en esta sala.
Ven, tu poema mejor
es el mío, lo mío, la esfera.
La presa en tus brazos
¿será este libro
puntada de la sangre
fisura del pensamiento
camino de sencillez
amor crecido las estrellas
pegadas a mi cuerpo
egoísmo salvación
condena manzana dulce?
De: Pasión inédita
Este amor ¿canta o atestigua?
¿Confesión o hilos invisibles
sueño o verdad
la luz que visita
para hacerse vestido
tantos como mundos
que en este hermoso oficio
yo procuro?
Espiando tú mi pensamiento
aventuras:
canto y testimonio
no pueden separar
ave sobre velero
en el dominio mar y
siempre pagarás ser dueña
pues de agua llamaste un barco
que obedece.
No estoy conforme. Mira el ancho
de los versos:
Te amo bajo los astros
(testimonio sería)
o
Estamos abrazando al mundo
(canto parece).
Y te acercas a la mesa
para decirme
no pierdas más tiempo
de tus manos que escriben
cosa mejor conmigo
ni busques más amparo
que el de tu voz nunca indecisa
ni temerosa al lado de tu amor
que sabe el movimiento puro
del zarpazo cuando habitas
un rostro de escribiente
que me parece abismo
si acerco tu cintura
clavada en esta sala.
Ven, tu poema mejor
es el mío, lo mío, la esfera.
La presa en tus brazos
¿será este libro
puntada de la sangre
fisura del pensamiento
camino de sencillez
amor crecido las estrellas
pegadas a mi cuerpo
egoísmo salvación
condena manzana dulce?
De: Pasión inédita
Pureza Canelo
Alumbramiento
vino de mí
salió del fondo
el médico aplaudía
yo vine con el mar en la barriga
como un intenso parasol
un mapamundi
yo era la esfera que rodó en la madrugada
de corazón latí como un caballo
lo digo así
es que la crin
me perfumó
el vientre se movía
como suelen moverse los rebaños
venía con mi molusco mi amapola
mi potranco
con mi gorrión redondo
yo no podré faltar jamásme dije
a nuestra cita
así que estoy aquí
con esta fiesta
brincando por el talle
hice mi baile de rosas
mi aleteo
mugí como los barcos
el vientre daba vueltas
me esperaba
oculta en el carmín
donde el médico buscaba con su ceño
yo empujaba
el ventarrón del orbe en mi testuz
soplaba como un faro
Como los dioses marinos de los cuentos
una granada real a punto de volar
recuerdo que por suerte
César me retuvo del cabello
estaba emocionado
sin saber si tintinear o si envidiarme
de entero dedicado a mis pulmones
expirando inspirando y expirando
me miraba de adentro de sus ojos
como solo una vez me mirará
en toda la vida de su vida
y a mi vientre que cambia de paisaje
y así
vino de mí
salió del fondo
nos bendijo de un golpe con su grito
se puso a beber sol como una fiera
de lana o amaranto
yo estaba enamorada y me reía
de loca de centella de rodillas
quería besar el sxo el vellocino
de César que lloraba
tomar a mi criatura
correr a derrocharla por las calles
qué llovizna de leche que cabalga
toda la luz del mundo en el pezón
De "Verbo madre" 1995
vino de mí
salió del fondo
el médico aplaudía
yo vine con el mar en la barriga
como un intenso parasol
un mapamundi
yo era la esfera que rodó en la madrugada
de corazón latí como un caballo
lo digo así
es que la crin
me perfumó
el vientre se movía
como suelen moverse los rebaños
venía con mi molusco mi amapola
mi potranco
con mi gorrión redondo
yo no podré faltar jamásme dije
a nuestra cita
así que estoy aquí
con esta fiesta
brincando por el talle
hice mi baile de rosas
mi aleteo
mugí como los barcos
el vientre daba vueltas
me esperaba
oculta en el carmín
donde el médico buscaba con su ceño
yo empujaba
el ventarrón del orbe en mi testuz
soplaba como un faro
Como los dioses marinos de los cuentos
una granada real a punto de volar
recuerdo que por suerte
César me retuvo del cabello
estaba emocionado
sin saber si tintinear o si envidiarme
de entero dedicado a mis pulmones
expirando inspirando y expirando
me miraba de adentro de sus ojos
como solo una vez me mirará
en toda la vida de su vida
y a mi vientre que cambia de paisaje
y así
vino de mí
salió del fondo
nos bendijo de un golpe con su grito
se puso a beber sol como una fiera
de lana o amaranto
yo estaba enamorada y me reía
de loca de centella de rodillas
quería besar el sxo el vellocino
de César que lloraba
tomar a mi criatura
correr a derrocharla por las calles
qué llovizna de leche que cabalga
toda la luz del mundo en el pezón
De "Verbo madre" 1995
Ana Istarú
Pasan Los Días
Pasan los días
El vidrio de la luz se desvanece
No hay espejo capaz de verle el polvo
No hay ojo que lo pesque entrando en la otra orilla
filtrándose en la sombra
Pasan los días
Se entume el dedo el lápiz el verbo la memoria
Piedra redonda dura el pensamiento
Esfera de vacío la palabra
Pasan los días
¿Qué hice ayer?
¿Dónde estuve?
Y este olor Esta mano
Este grito atorado en la garganta
como una nuez amarga.
"Ciudad bajo el relámpago" 1983
Pasan los días
El vidrio de la luz se desvanece
No hay espejo capaz de verle el polvo
No hay ojo que lo pesque entrando en la otra orilla
filtrándose en la sombra
Pasan los días
Se entume el dedo el lápiz el verbo la memoria
Piedra redonda dura el pensamiento
Esfera de vacío la palabra
Pasan los días
¿Qué hice ayer?
¿Dónde estuve?
Y este olor Esta mano
Este grito atorado en la garganta
como una nuez amarga.
"Ciudad bajo el relámpago" 1983
EfraÃn Bartolomé
Soneto
Sigo, Amor, con mi júbilo sin bridas
por senderos de mieles tu carrera,
viajando con tu llama y tus heridas
desde el justo contorno de tu esfera.
El pulso tengo de innombrables vidas
en tu perfil sesgado a tu manera
como tu fortaleza tiene asidas
las campanas al sol de mi bandera.
Por una eterna acariciada
llega desnuda y limpia tu figura
al filo de mi luz enamorada,
y en la ventana azul de mi ventura
tu beso, Amor, tu voz y tu mirada
velando mi desvelo de ternura.
Sigo, Amor, con mi júbilo sin bridas
por senderos de mieles tu carrera,
viajando con tu llama y tus heridas
desde el justo contorno de tu esfera.
El pulso tengo de innombrables vidas
en tu perfil sesgado a tu manera
como tu fortaleza tiene asidas
las campanas al sol de mi bandera.
Por una eterna acariciada
llega desnuda y limpia tu figura
al filo de mi luz enamorada,
y en la ventana azul de mi ventura
tu beso, Amor, tu voz y tu mirada
velando mi desvelo de ternura.
Ãngel Augier
Ser Onda, Oficio, Niña, Es de Tu Pelo
Ser onda, oficio, niña, es de tu pelo,
nacida ya para el marero oficio;
ser graciosa y morena tu ejercicio
y tu virtud más ejemplar ser cielo.
¡Niña!, cuando tu pelo va de vuelo,
dando del viento claro un negro indicio,
enmienda de marfil y de artificio
ser de tu capilar borrasca anhelo.
No tienes más quehacer que ser hermosa,
ni tengo más festejo que mirarte,
alrededor girando de tu esfera.
Satélite de ti, no hago otra cosa,
si no es una labor de recordarte.
-¡Date presa de amor, mi carcelera!
Ser onda, oficio, niña, es de tu pelo,
nacida ya para el marero oficio;
ser graciosa y morena tu ejercicio
y tu virtud más ejemplar ser cielo.
¡Niña!, cuando tu pelo va de vuelo,
dando del viento claro un negro indicio,
enmienda de marfil y de artificio
ser de tu capilar borrasca anhelo.
No tienes más quehacer que ser hermosa,
ni tengo más festejo que mirarte,
alrededor girando de tu esfera.
Satélite de ti, no hago otra cosa,
si no es una labor de recordarte.
-¡Date presa de amor, mi carcelera!
Miguel Hernández
Mi Corazón Se Amerita...
A Rafael López
Mi corazón, leal, se amerita en la sombra.
Yo lo sacara al día, como lengua de fuego
que se saca de un ínfimo purgatorio a la luz;
y al oírlo batir su cárcel, yo me anego
y me hundo en la ternura remordida de un padre
que siente, entre sus brazos, latir un hijo ciego.
Mi corazón, leal, se amerita en la sombra.
Placer, amor, dolor... todo le es ultraje
y estimula su cruel carrera logarítmica,
sus ávidas mareas y su eterno oleaje.
Mi corazón, leal, se amerita en la sombra.
Es la mitra y la válvula... Yo me lo arrancaría
para llevarlo en triunfo a conocer el día,
la estola de violetas en los hombros del alba,
el cíngulo morado de los atardeceres,
los astros, y el perímetro jovial de las mujeres.
Mi corazón, leal, se amerita en la sombra.
Desde una cumbre enhiesta yo lo he de lanzar
como sangriento disco a la hoguera solar.
Así extirparé el cáncer de mi fatiga dura,
seré impasible por el Este y el Oeste,
asistiré con una sonrisa depravada
a las ineptitudes de la inepta cultura,
y habrá en mi corazón la llama que le preste
el incendio sinfónico de la esfera celeste.
A Rafael López
Mi corazón, leal, se amerita en la sombra.
Yo lo sacara al día, como lengua de fuego
que se saca de un ínfimo purgatorio a la luz;
y al oírlo batir su cárcel, yo me anego
y me hundo en la ternura remordida de un padre
que siente, entre sus brazos, latir un hijo ciego.
Mi corazón, leal, se amerita en la sombra.
Placer, amor, dolor... todo le es ultraje
y estimula su cruel carrera logarítmica,
sus ávidas mareas y su eterno oleaje.
Mi corazón, leal, se amerita en la sombra.
Es la mitra y la válvula... Yo me lo arrancaría
para llevarlo en triunfo a conocer el día,
la estola de violetas en los hombros del alba,
el cíngulo morado de los atardeceres,
los astros, y el perímetro jovial de las mujeres.
Mi corazón, leal, se amerita en la sombra.
Desde una cumbre enhiesta yo lo he de lanzar
como sangriento disco a la hoguera solar.
Así extirparé el cáncer de mi fatiga dura,
seré impasible por el Este y el Oeste,
asistiré con una sonrisa depravada
a las ineptitudes de la inepta cultura,
y habrá en mi corazón la llama que le preste
el incendio sinfónico de la esfera celeste.
Ramón López Velarde
Hoy como cada año durante veintitrés, te recuerdo a cada minute, a cada instante, mi chele te he llamado siempre, pero hoy es especial, todos me han pedido que te olvide, que te deje descansar, pero me resisto a olvidarte, alguien me dijo ayer que estas como ángel a mi espera, lejos de la esfera; pero yo te he tenido siempre en el mismo lugar que se llama mis recuerdos, te he visto crecer eres bello, blanco alto y muy robusto, con voz grave y varonil, pero para mí eres mi bebe, aquel que me lleno de sueños e ilusiones cuando yo adolecente aun no comprendí, el porque me dejaste ese día, tu eres aquel que me dejo solitaria y triste después de acompañarme 9 meses y unos días, quisiera tener alas y volar por un día a ti, conocer y saber que estas bien, hoy quiero llorar, gritar, reir ,solo yo se que existes en mis pensamientos te describí, a mi has hablado; tu voz ,he escuchado cuando dulcemente me has dicho duerme mamá; ya no estes triste no sueñes más.
A veintitrés años de que te fuiste, hoy como ayer te recuerdo, un recuerdo si muy triste, pero en la lejanía y en mi soledad, donde solo tu puedes entrar, a solas con mi pluma te vuelvo a escribir como cada año, aunque mis cartas no puedas recibir.
Para decirte que te amo y que estas presente en cada instante de mi vida, que te he buscado en otras personas, te he oído cantar y cantas bello, te he oído orar y es maravilloso escucharte, te he visto caminar y te he perseguido sin darte alcanze, hemos conversado sin tener tus respuesta, pero estas aquí frente a mi, alguien me dijo que estoy loca y si fuera eso cierto que bella es la locura porque solo con ella te he podido persivir..
Tu mamá
A veintitrés años de que te fuiste, hoy como ayer te recuerdo, un recuerdo si muy triste, pero en la lejanía y en mi soledad, donde solo tu puedes entrar, a solas con mi pluma te vuelvo a escribir como cada año, aunque mis cartas no puedas recibir.
Para decirte que te amo y que estas presente en cada instante de mi vida, que te he buscado en otras personas, te he oído cantar y cantas bello, te he oído orar y es maravilloso escucharte, te he visto caminar y te he perseguido sin darte alcanze, hemos conversado sin tener tus respuesta, pero estas aquí frente a mi, alguien me dijo que estoy loca y si fuera eso cierto que bella es la locura porque solo con ella te he podido persivir..
Tu mamá
Casta sulmeze
Hora Ciega
Quisiera abrir mis venas bajos los durazneros,
en aquel distraído verano de mi boca.
Quisiera abrir mis venas para buscar tus rastros,
lenta rueda comida por agrias amapolas.
Yo te ignoraba fina colmena vigilante.
Río de mariposas naciendo en mi cintura.
Y apartaba las yemas, el temblor de los álamos,
y el viento que venía con máscara de uvas.
Yo no quise borrarme cuando no te miraba
pero me sostenías, fresca mano de olivo.
Estrella navegante no pude ver tu borda
pero me atravesaste como a un mar distraído.
Ahora te descubro, tan herido extranjero,
paraíso cortado, esfera de mi sangre.
Una hierba de hierro me atraviesa la cara...
sólo ahora mis ojos desheredados se abren.
Ahora que no puedo derruir tu frontera
debajo de mi frente, detrás de mis palabras.
Tocar mi vieja sombra poblada de azahares,
mi ciego corazón perdido en la manzana.
Ahora estoy despierto. Nacen al fin mis ojos
pisados por el humo, agujereando arañas,
duros estratos de algas con muertos veladores
que sin cesar devoran sus raicillas heladas.
Y te cruzo despierto, fiero túnel de ortigas,
remolino de espadas, vómito de la muerte.
Voy asido a las crines de un caballo espinoso
que vuela con ciudades quemadas en el vientre.
Voy despierto, despierto y obediente a mis manos,
con un río de pólvora cuajado en el aliento,
ahora que estoy solo y enemigo del aire,
seco, desarraigado, desnudo, combatiendo.
Quisiera abrir mis venas bajos los durazneros,
en aquel distraído verano de mi boca.
Quisiera abrir mis venas para buscar tus rastros,
lenta rueda comida por agrias amapolas.
Yo te ignoraba fina colmena vigilante.
Río de mariposas naciendo en mi cintura.
Y apartaba las yemas, el temblor de los álamos,
y el viento que venía con máscara de uvas.
Yo no quise borrarme cuando no te miraba
pero me sostenías, fresca mano de olivo.
Estrella navegante no pude ver tu borda
pero me atravesaste como a un mar distraído.
Ahora te descubro, tan herido extranjero,
paraíso cortado, esfera de mi sangre.
Una hierba de hierro me atraviesa la cara...
sólo ahora mis ojos desheredados se abren.
Ahora que no puedo derruir tu frontera
debajo de mi frente, detrás de mis palabras.
Tocar mi vieja sombra poblada de azahares,
mi ciego corazón perdido en la manzana.
Ahora estoy despierto. Nacen al fin mis ojos
pisados por el humo, agujereando arañas,
duros estratos de algas con muertos veladores
que sin cesar devoran sus raicillas heladas.
Y te cruzo despierto, fiero túnel de ortigas,
remolino de espadas, vómito de la muerte.
Voy asido a las crines de un caballo espinoso
que vuela con ciudades quemadas en el vientre.
Voy despierto, despierto y obediente a mis manos,
con un río de pólvora cuajado en el aliento,
ahora que estoy solo y enemigo del aire,
seco, desarraigado, desnudo, combatiendo.
Sara de Ibáñez
esfera que gira entre voces lejanas
pletórico sendero de un pasado que vuelve;
mágica esencia de aquello que ya fue.
pletórico sendero de un pasado que vuelve;
mágica esencia de aquello que ya fue.
ines rivera
Querer saber que nos depara el futuro, incluso creer saber que vienes mas alla de la muerte, me parece un ejercisio infuctuoso,
es como intentar buscarle bordes a la tierra, no los tiene puesto que es una esfera.
es como intentar buscarle bordes a la tierra, no los tiene puesto que es una esfera.
omilkar hoos
la esfera del reloj
En el compás de la espera
la esfera del reloj se desespera.
En el compás de la espera
la esfera del reloj se desespera.
Miguel Visurraga Sosa
La diferencia entre el modo de tener y el modo de ser en la esfera del conocimiento se expresa con dos formulas: Tengo conocimiento y Conozco. Tener conocimiento es tomar y conservar la posesion del conocimiento disponible (la informacion); conocer es funcional y solo sirve como medio en el proceso de pensar productivamente
Erich Fromm
Por último, no es la libertad de la restricción de la ley solo a su esfera racional de organizar el derecho de la persona a la legítima defensa, de castigar la injusticia?
Frederic Bastiat
Y sé que tengo que sentirme culpable por querer la gente a comprar mis libros... y los libros en general? Las novelas y poesía, pertenecen a la esfera del arte. ¿Cómo sucia de nosotros para tratar de arte halcón! Pero, después de una década de apretones de manos y las disculpas, no puedo bastante reunir la culpabilidad más.
Julianna Baggott
Siempre he considerado el desarrollo mundial como una lucha entre las fuerzas del bien y del mal. Para no ser simplificada como una lucha entre Jesús y Satanás, ya que no considero que el proceso se limita a nuestra propia esfera de la cultura.
Alva Myrdal
En la esfera del pensamiento, el absurdo y la perversidad siguen siendo los amos del mundo, y su dominio se suspende solo por períodos breves.
Arthur Schopenhauer
Enseñar al hombre su relativamente pequeña esfera en la creación, sino que también lo anima por sus lecciones de la unidad de la naturaleza y le muestra que su poder de los aliados de comprensión él con la gran inteligencia de largo alcance sobre todos.
Annie Jump Cannon
Es en los escritos de Rousseau, sobre todo, que la historia empieza a volverse de honor de la clase alta de humanitarismo de clase media. Pity, la simpatía y la compasión se encuentran en el centro de su visión moral. Los valores asociados a lo femenino comienzan a infiltrarse en la vida social en su conjunto, en lugar de limitarse a la esfera doméstica.
Terry Eagleton
La discreción es otra cosa que el sentido de la justicia con respecto a la esfera de los contenidos íntimos de la vida.
Georg Simmel
Si hubiéramos suficiente mundo y tiempo,
Esta timidez , señora, no eran delito.
Nos gustaría sentarse y pensar de qué manera
Para caminar , y pasar el día de nuestro largo amor ;
Tú, por el lado del Ganges Indian '
Rubíes deberás encontrar , yo por la marea
De Humber se quejaría . lo haría
Love you diez años antes del Diluvio ;
Y usted debe , por favor , se niegan
Hasta que la conversión de los Judios .
Mi vegetal amor se extendería
Vasto que un imperio y más lento.
Cien años yo daría para alabar
Tus ojos y tu frente ;
Doscientos adorando cada pecho ,
Pero treinta mil para el resto ;
Una era , al menos, a todas las partes ,
Y la última edad debe mostrar su corazón.
Porque, señora, que usted merece este estado,
Tampoco voy a amar a una tasa más baja.
Pero a mi espalda siempre oigo
Tiempo de carro alado , inexorable:
Y allende de nosotros mentimos
Los desiertos de vasta eternidad .
Tu belleza no volverán a encontrarse ,
Tampoco , en tu bóveda de mármol , sonará
Mi canción eco , entonces los gusanos se trate
Esa larga virginidad preserv'd ,
Y tu honor pintoresco convierte en polvo ,
Y en cenizas todo mi lujuria .
La tumba es un lugar íntimo y bello ,
Pero no creo que allí nadie se abraza.
Ahora, pues , si bien el tono juvenil
Se sienta en tu piel cual rocío de la mañana ,
Y mientras tu alma diáfana transpire
En cada poro fuegos instantáneos ,
Ahora hagámonos deporte mientras podamos ;
Y ahora , como aves de rapiña am'rous ,
Más bien a la vez devorar nuestro tiempo ,
Que languidecer en su poder lento chapp'd .
Vamos a rodar toda nuestra fuerza y toda
Nuestra dulzura , en una esfera ;
Y romper nuestros placeres en pleito bruto
Minuciosas puertas del hierro de la vida .
Por lo tanto , aunque no podemos hacer que nuestro sol
Quédate quieto , sin embargo, vamos a hacer que se ejecute.
Esta timidez , señora, no eran delito.
Nos gustaría sentarse y pensar de qué manera
Para caminar , y pasar el día de nuestro largo amor ;
Tú, por el lado del Ganges Indian '
Rubíes deberás encontrar , yo por la marea
De Humber se quejaría . lo haría
Love you diez años antes del Diluvio ;
Y usted debe , por favor , se niegan
Hasta que la conversión de los Judios .
Mi vegetal amor se extendería
Vasto que un imperio y más lento.
Cien años yo daría para alabar
Tus ojos y tu frente ;
Doscientos adorando cada pecho ,
Pero treinta mil para el resto ;
Una era , al menos, a todas las partes ,
Y la última edad debe mostrar su corazón.
Porque, señora, que usted merece este estado,
Tampoco voy a amar a una tasa más baja.
Pero a mi espalda siempre oigo
Tiempo de carro alado , inexorable:
Y allende de nosotros mentimos
Los desiertos de vasta eternidad .
Tu belleza no volverán a encontrarse ,
Tampoco , en tu bóveda de mármol , sonará
Mi canción eco , entonces los gusanos se trate
Esa larga virginidad preserv'd ,
Y tu honor pintoresco convierte en polvo ,
Y en cenizas todo mi lujuria .
La tumba es un lugar íntimo y bello ,
Pero no creo que allí nadie se abraza.
Ahora, pues , si bien el tono juvenil
Se sienta en tu piel cual rocío de la mañana ,
Y mientras tu alma diáfana transpire
En cada poro fuegos instantáneos ,
Ahora hagámonos deporte mientras podamos ;
Y ahora , como aves de rapiña am'rous ,
Más bien a la vez devorar nuestro tiempo ,
Que languidecer en su poder lento chapp'd .
Vamos a rodar toda nuestra fuerza y toda
Nuestra dulzura , en una esfera ;
Y romper nuestros placeres en pleito bruto
Minuciosas puertas del hierro de la vida .
Por lo tanto , aunque no podemos hacer que nuestro sol
Quédate quieto , sin embargo, vamos a hacer que se ejecute.
Andrew Marvell
Contribuye en gran medida a la salud moral e intelectual de un hombre, que se pone en los hábitos de compañerismo con las personas a diferencia de él, que se preocupan poco por sus actividades, y cuya esfera y habilidades que debe salir de sí mismo para apreciar.
Nathaniel Hawthorne
Ahora, ocupamos una posición humilde, tanto en el espacio y el rango en comparación con la esfera celeste, y el Todopoderoso es el Altísimo no en el espacio, pero con respecto a la existencia absoluta, la grandeza y el poder.
Maimonides