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Maria ( 4 )

Maria. Encuentra docenas de maria con fotos para copiar y compartir.


¿has cumplido con tu deber?. . . Confía en el cielo que no te abandonará.


Félix María Samaniego


El arte es un compendio de la naturaleza formado por la imaginación.


José María Eça de Queirós




Mientras religión y ética pueden dirigirse al individuo aislado y podrían existir en un solo hombre sobre el mundo, la política necesita para su posibilidad la existencia de la sociedad.


María Zambrano


La primera tarea de la educación es agitar la vida, pero dejarla libre para que se desarrolle.


Maria Montessori


Gran libro es la vejez. ¡Lástima que el hombre tenga que morirse cuando comienza a leerlo con provecho!


Jose María de Pereda


Greenwich Avenue

Estoy muy satisfecho de mí mismo.
Yo era un ser seco, huraño y solitario
que envidiaba a los otros su alegría.

Pero rectifiqué. Me costó mucho
adquirir compañía y cara alegre.
Y así he gustado aquellos dulces bienes
que envidiaba a los otros: amistad,
mujer, hijos y el éxito en los negocios.

Uno llega a obtener lo que desea
si de veras se esfuerza en conseguirlo.
La insistencia es la clave del acierto.

La piedra que se encima persistente
sobre sus compañeras de sendero,
logrará que tropiece alguien en ella.

Estoy muy satisfecho de mí mismo
pues sé rectificar. Y comprobado
que amigos, mujer, hijos y negocios
siempre me molestaban y agobiaban,
los dejé sin aviso y sin reparos.

Y he vuelto con alivio a mi yo joven,
a mi ser seco, huraño y solitario.
Y estoy muy satisfecho de mí mismo.


José María Fonollosa




Pasión Sin Límites

Vuela mi corazón
unido con los pájaros
y deja entre los árboles
un invisible rastro
de alegría y de sangre.

Las gotas de rocío
se helaron en las manos
abiertas y floridas
de los enamorados
perdidos en la brisa.

Vuela mi corazón,
mi corazón atado
con cadenas de estrellas
a la sombra de un árbol
atado con cadenas
y con cantos de pájaros.


José María Hinojosa


La Sangre

El mustio peregrino
vió en el monte una huella de sangre:
la sigue pensativo
en los recuerdos claros de su tarde.

El triste, paso a paso,
la ve en la ciudad, dormida, blanca,
junto a los cadalsos,
y al morir de ciegas atalayas.

El curvo peregrino
transita por bosques adorantes
y los reinos malditos,
y siempre mira las rojas señales.


José María Eguren


Arrancad la esperanza del corazón del hombre y haréis de él un animal de presa.


María Barranco




El talento no es un don celestial, sino el fruto del desarrollo sistemático de unas cualidades especiales.


José María Rodero


Si la ayuda y la salvación han de llegar solo puede ser a través de los niños. Porque los niños son los creadores de la humanidad.


Maria Montessori


Campo-estelas

Almendros en flor.

La primavera
se acerca.

Cerezos en flor.

La primavera
está plena.

Granados en flor.

Ya se aleja
la primavera.


José María Hinojosa


Los investigadores alimentamos el instinto de saber; somos operarios del patrimonio intelectual de la humanidad.


José Maria Martin Senovilla




Frío

Cuento Bohemio

La tarde era triste,
la nieve caía,
su blanco sudario
los campos cubría;
ni un ave volaba,
ni oíase rumor.

Apenas la nieve
dejando su huella,
pasaba muy triste,
muy pálida y bella,
la niña que ha sido
del valle la flor.

Llevaba en el cinto
su pobre calzado;
su hermano pequeño
que marcha a su lado
le dice: -"No sienten
la nieve tus pies?"

"Mis pies nada sienten"
-responde con calma-
"El frío que yo siento
lo llevo en el alma;
y el frío de la nieve
más duro no es".

Y dice el pequeño
que helado tirita:
-"¡Más frío que el de nieve!...
¿Cuál es, hermanita?
¡No hay otro que pueda
decirse mayor!..."

-"Aquel que de muerte
las almas taladre;
aquel que en el alma
me puso mi madre
el día que a mi esposo
me unió sin amor".


Manuel María Flores


Los científicos necesitamos especialmente la imaginación. No bastan las matemáticas ni la lógica: Necesitamos algo de estética y poesia.


María Casares


Muchas cosas me dieron en el mundo, solo es mia la pura soledad.


Dulce María Loynaz


Times Square Ii

Contemplo como salen del local
parejas enlazadas de las manos.
Cuánta mujer hermosa en todas partes.
El vestíbulo exhibe con orgullo
su muestrario de chicas estupendas.

Un amigo a mi lado me saluda.
Me comenta: «Qué film más aburrido.
Las historias de amor son soporíferas».
Yo asiento. Y admirados vigilamos
a una mujer preciosa. Acompañada.

Observo cómo mira ávidamente
las muchachas que surgen de la sala
como los coches surgen de un garaje
ostentando sus líneas sugestivas.
Como las miro yo seguramente.

También él siente el tedio. Ambos quisiéramos
un amor, un hogar de esos que vemos
en el cine y decimos nos aburren.
No igual a aquel que tienen los amigos
que en su gran mayoría se han casado.

Ante una moto grande y esplendente,
como un bello caballo de fuel puro,
nos paramos: «¿Te dejo en algún sitio?»,
precavido pregunta. Yo no acepto.
Buscaré a alguna chica por el Village.


José María Fonollosa


El Bote Viejo

Bajo brillante niebla,
de saladas actinias cubierto,
amaneció en la playa,
un bote viejo.

Con arena, se mira
la banda de sus bateleros,
y en la quilla verdosos
calafateos.

Bote triste, yacente,
por los moluscos horadado;
ha venido de ignotos
muelles amargos.

Apareció en la bruma
y en la armonía de la aurora;
trajo de los rompientes
doradas conchas.

A sus bancos remeros,
a sus amarillentas sogas,
vienen los cormoranes
y las gaviotas.

Los pintorescos niños,
cuando dormita la marea
lo llenan de cordajes
y de banderas.

Los novios, en la tarde,
en su alta quilla se recuestan;
y a los vientos marinos,
de amor se besan.

Mas el bote ruinoso
de las arenas del estuario,
ansía los distantes
muelles dorados.

Y en la profunda noche,
en fino tumbo abrillantado,
partió el bote muriente
a los puertos lejanos.


José María Eguren


Una prueba de patriotismo es hablar mal cualquier idioma que no sea el nuestro.


José María de Queiroz


seras solo un recuerdo

Mientras que el sol siga brillando
Y las estrellas no cambien su lugar,
Te puedo asegurar q en mi corazón tú
Siempre pero siempre tendrás un lugar

Siempre vas estar pues tu recuerdo
Es muy grato y bello,
Pero si hoy me alejo de ti es para
Así no hacernos sufrir.

Es mejor q se quede asi pues no
Kiero mas sufrimiento,
Es que en verdad te kiero
Y todo será más fácil así
Aunque los 2 sin el otro pueda vivir

Y aunque se acabe esto nada podrá borrar
Tan lindo recuerdo q llevo de ti pues tu
Me enseñaste q la manera de ser feliz.


maria mendoza


me engaño una ilusion

Me sentí cautivada
Y también ilusionada
Totalmente asombrada
Y demasiado impactada

Pero fuiste como el teorema de Pitágoras
Y nada te entiendo a ninguna hora
Y por mas q no quiero tu vos me enamora

Te CREI como el agua lindo y transparente
Un ave q con sus alas vuelan libremente
Hiciste q mi corazón latiera fuertemente
Y ahora por ti el muere lentamente.
Me sentí lastimada
Y muy irrespetada al descubrir tantas mentiras
Por culpa de la vida
Era una película de ficción q creo mi corazón
Fue una simple ilusión de la cual me abrió los ojos la razón


maria mendoza


Ella

Para Teresita López

Ella tiene
una mirada
que aletea
sobre el sueño.
A veces duerme.
Y cuando despierta,
sus ojos
tienen plumas
y destilan mar.

De "La Ciudad" 2001


Antonio María Flórez


Soneto

Quiere el Amor Feliz -el que se posa poco...-
arrancar un verso al alma oscura:
¿Cuándo la miel necesitó dulzura?
¿Quién esencia de pomo echa en la rosa?

Quédese en hojarasca temblorosa
lo que no pudo ser fruta madura:
No se rima la dicha; se asegura
desnuda de palabras, se reposa...

Si el verso es sombra, ¿qué hace con el mío
la luz?... Si es luz... ¿la luz por qué lo extraña?
¡Quien besar puede, bese y deje frío

símbolo, el beso escrito!... ¡En la maraña
del mapa no está el agua azul del río,
ni se apoya en su nombre la montaña!...


Dulce María Loynaz


Ese camino en el cual se habla mucho pero se hace poco; se piensa pero no se dice; se siente pero se confunde...


Maria Laura Casaretto


que saben los demás lo que sentimos? yo puedo decirte que te amo pero ya no creo merecerte por el solo hecho de que ignorarme se te ha hecho tan fácil como parpadear...


Maria Victoria Bottazzi


¿Sabes? No necesito nada más, no quiero mirar a otro lugar donde no estés tu, no quiero caminar sin sentir tu mano firme junto a la mía, no quiero reír con nadie más, ni que mi sombra se acompañe de otra que no sea la tuya; Sabes? El solo echo de oír tu silencio, abrazar tu calor, acariciar tus besos con los míos, enredar tu risa con la mía, compartir el tiempo con nuestros minutos; Me entrega todo lo que quiero recibir, ya no hace falta nada más, cada cosa que haces o dices o quizás sueñas, construye mi felicidad, nuestra felicidad, que a pesar de todo siempre insiste en estar ahí, así como yo insisto al tiempo, estar solo junto a ti; así como yo insisto en que eres el mejor, lo mejor, ahora y siempre; Y tan así y ciegamente, y bajo todas circunstancias tu me quieres, y yo te quiero, mi amor, mi único e irremplazable príncipe azul.


Rosa María Florensa Palacios




Sencillez

Los dedos de la nieve
repiquetearon
en el tamboril
del espacio.

Parábolas de nubes
forman un halo
de cristal,
sobre el monte nevado.

Una línea
y un plano.

Quiero poner mi vista
sólo en el espacio,
que es sencillo
y a la vez complicado.


José María Hinojosa


Si me quieres, quiéreme entera,
no por zonas de luz o sombra...
Si me quieres, quiéreme negra
y blanca, Y gris, verde, y rubia,
y morena...
Quiéreme día,
quiéreme noche...
¡Y madrugada en la ventana abierta!...

Si me quieres, no me recortes:
¡Quiéreme toda... O no me quieras!


Dulce María Loynaz


El amor es el susurro del alma ,es la tempestad en medio de calma , es el recuerdo en medio del olvido , es el secreto cuando todo sean ido.


Maria feliz


Memoria que se queda en las madrugadas frias.
Memoria que soportan la hipocrecia.
Memoria que desvacen el ama cuando ya no hay calma.
Mmemoria indelebre cuando cuando ya no se ama.

En medio de frio y agustia se escapan los incierto.
cuando la noche se cumbren en los entierro.
Quiza te ame mas de los debido .
Quiza fue la soleda o lo prohibido.
pero de tanto soñar me perdi sin pensar.
en medio de tanta niebla perdi casi la vida.


pero ahora te pido que jamas regrese.
ahora te pido que te pierda en el tiempo .
y que tu recuerdos queden borrrada a traves del olvido.


Maria feliz


Los pensamientos son como el viento que no saben de su venir pero tampoco de su regreso.


Maria feliz


SI quieres mantener tu surco derecho ,ata tu arado a una estrella ,lanza tu sombra a la nada y empaca tus sueños al infinito.


Maria Feliz


L muerte vigila los sueños , se acuesta con la soledad , se arropa con la agonia y coloca de almohada tus desaliento y pesares.


Maria Feliz


Hoy me propongo opacar la luz del sol, robar la fuerza de la naturaleza ,escalar el cielo ,tomarte de las manos y huir al infinito.


Maria Feliz


Máscara

Esta mañana fue difícil
colocarme la máscara
No lograba encajarla conmigo
Tal vez llegó el momento
de cambiarla.

De "Pulso interno"


María Clara González


Mar

Bajo mi cama estáis, conchas, algas, arenas:
comienza vuestro frío donde acaban mis sábanas.
Rozaría una jábega con descolgar los brazos
y su red tendería del palo de mesana
de este lecho flotante entre ataúd y tina.
Cuando cierro los ojos se me cubren de escamas.

Cuando cierro los ojos, el viento del Estrecho
pone olor de Guinea en la ropa mojada,
pone sal en un cesto de flores y racimos
de uvas verdes y negras encima de mi almohada,
pone henchido el insomnio, y en un larguero entonces
me siento con mi sueño a ver pasar el agua.


María Victoria Atencia


Yo Te Fui Desnudando...

Yo te fui desnudando de ti mismo,
de los «tus» superpuestos que la vida
te había ceñido...

Te arranqué la corteza -entera y dura-
que se creía fruta, que tenía
la forma de la fruta.

Y ante el asombro vago de tus ojos
surgiste con tus ojos aún velados
de tinieblas y asombros...

Surgiste de ti mismo; de tu misma
sombra fecunda, intacto y desgarrado
en alma viva...


Dulce María Loynaz


Lied I

Era el alba,
cuando las gotas de sangre en el olmo
exhalaban tristísima luz.

Los amores
de la chinesca tarde fenecieron
nublados en la música azul.

Vagas rosas
ocultan en ensueño blanquecino
señales de muriente dolor.

Y tus ojos
el fantasma de la noche olvidaron,
abiertos a la joven canción.

Es el alba;
hay una sangre bermeja en el olmo
y un rencor doliente en el jardín.

Gime el bosque,
y en la bruma hay rostros desconocidos
que contemplan el árbol morir.


José María Eguren


Desprendimiento

Dulzura de sentirse cada vez más lejano.
Más lejano y más vago...
Sin saber si es porque las cosas se van yendo
o es uno el que se va.
Dulzura del olvido como un rocío leve cayendo en la tiniebla...
Dulzura de sentirse limpio de toda cosa.
Dulzura de elevarse y ser como la estrella inaccesible y alta,
alumbrando en silencio...
En silencio,
¡Dios mío!...


Dulce María Loynaz


Argent Vivo

¡Qué vida más tranquila parece llevar mi familia!
-pensó Gregorio
Franz Kafka

La voluntad y los apetitos... ah!
Edmund Burke

¿Lo recuerdas? Tuvimos
la Luna en la palma de la mano.
Nunca otra vez la música
de aquel tambalillo de la playa
volverá a hacernos bailar,
ni, sin que nosotros lo escuchemos,
a crujir el mundo volverá.
Volverá tu marido, no es mal tipo,
en su jardín tu aburrimiento a colgar,
y el calorcillo que alumbra entre tus muslos
¿a quién llamará?
Quizá otros brazos y otros besos
profundamente sentirás,
y tu marido y yo quizá acabemos
bebiendo solitarios en un bar,
haciéndonos amigos; como es lógico
evocarte nos unirá.
Pero recuerda, como yo te he leído a Scott Fitzgerald
nadie te lo leerá.


José María Álvarez