Ordenes
Ordenes. Encuentra docenas de ordenes con fotos para copiar y compartir.
Elegiré amigos entre los hombres, pero no esclavos ni amos. Elegiré solo a los que me plazcan, y a ellos amaré y respetaré, pero no obedeceré ni daré órdenes. Y uniremos nuestras manos cuando queramos, o andaremos solos cuando lo deseemos.
Ayn Rand
La diferencia entre una democracia y una dictadura consiste en que en la democracia puedes votar antes de obedecer las ordenes.
Charles Bukowski
La perfección del que imparte órdenes es ser pacífico; del que combate, carecer de cólera; del que quiere vencer, no luchar; del que se sirve de los hombres, ponerse por debajo de ellos.
Lao Tse
No estés siempre dando órdenes. Si en vez de órdenes, a veces me pidieras las cosas, yo lo haría más rápido y con más gusto
Jorge Bucay
El tiempo es un maestro de ceremonias que siempre acaba poniéndonos en el lugar que nos compete. Vamos avanzando, parando y retrocediendo según sus órdenes. Nuestro error es imaginar que podemos buscarle las vueltas.
José Saramago
Me daban órdenes. Obedecía. Me sentía justificado. Ahora nadie pueda ya darme órdenes y nada puede ya justificarme
Jean-Paul Sartre
?¿Tiene Ordenes Para Mí? ?preguntó lo que quedaba de Anghammarad, poniéndose de pie.
Terry Pratchett
Cuando hayas alcanzado tu propia habitación, sé amable con los que han escogido puertas distintas y con aquéllos que aún están en el pasillo. Si están equivocados, necesitan tus oraciones; y si son tus enemigos, estás bajo órdenes para rezar por ellos. Es una de las normas comunes a toda la casa
Clive Staples Lewis
:... esclavo es quien está obligado a obedecer las órdenes del señor, que solo buscan la utilidad del que manda...
Baruch Spinoza
Me parece que, al discutir los problemas naturales, no se debería partir de la autoridad de los pasajes de la Escritura, sino de la experiencia de los sentidos y de las demostraciones necesarias. Porque la Sagrada Escritura y la naturaleza proceden igualmente del Verbo divino, aquélla como dictado del Espíritu Santo, y ésta como la ejecutora perfectamente fiel de las órdenes de Dios
Galileo Galilei
Los ingleses avanzaban obedeciendo las órdenes de sus generales, hasta que estuvieron lo bastante cerca como para distinguir el rostro de sus oponentes, una visión que alentó su furia.
Mary Shelley
Realidad o imaginación han dado órdenes al jefe de estado de cada nación; conspiración contra nuestra libertad, lo llamo
Nach
He dejado órdenes para ser despertado en cualquier momento en caso de que haya una emergencia nacional, incluso cuando estoy en mis reuniones con mi gabinete
Ronald Reagan
Es la función de todo comandante aquella de hacerse odiar por sus soldados, para que cuando acometan una orden en batalla la ejecuten con todo ese odio que reservan para ti, el odio extremo que les lleva a matar... Pero nunca pude imaginar que se pudiera llegar a odiar tanto, tanto odio, que se negaran a obedecer las órdenes de un superior; no se puede odiar tanto, no es posible.
William Faulkner
Ser autoridad se basa no solo en la capacidad para realizar ciertas funciones sociales, sino igualmente en la esencia misma de una personalidad que ha conseguido un alto grado de desarrollo e integración. Estas personas irradian autoridad y no tienen que dar órdenes, amenazar ni sobornar
Erich Fromm
El mundo llegará a ser desnaturalizado por el poder de la pantalla doméstica. Toda mala influencia será desparramada groseramente sobre todo hogar y será impuesto por el comercio avisador que busca la masa. La masa embrutecerá dominada por las órdenes disfrazadas de paraísos fáciles y superiores, contemplará la estupidez y la inmoralidad
BenjamÃn Solari Parravicini
¿Hasta cuándo los países latinoamericanos seguiremos aceptando las órdenes del mercado como si fueran una fatalidad del destino? ¿Hasta cuándo seguiremos implorando limosnas, a los codazos, en la cola de los suplicantes? ¿Hasta cuándo seguirá cada país apostando al sálvese quien pueda? ¿Cuándo terminaremos de convencernos de que la indignidad no paga? ¿Por qué no formamos un frente común para defender nuestros precios, si de sobra sabemos que se nos divide para reinar? ¿Por qué no hacemos frente, juntos, a la deuda usurera? ¿Qué poder tendría la soga si no encontrara pescuezo?.
Eduardo Galeano
La diferencia entre una democracia y una dictadura es que en una democracia, primero votás y después recibís órdenes. En una dictadura no tenés que perder el tiempo votando.
Charles Bukowski
Francisco de Asís, creador de las órdenes mendicantes (...) acabó de introducir al pueblo en la religión; al revestir al pobre con un hábito de monje, obligó al mundo a la caridad; elevó al mendigo ante los ojos del rico y estableció en una milicia cristiana proletaria el modelo de aquella fraternidad que será el cumplimiento de aquella parte política del cristianismo que todavía queda por desarrollar, y sin la cual jamás habrá libertad y justicia completa sobre la tierra.
François René De Chateaubriand
Los atenienses aconsejaban a Diógenes que tomase orden de sacerdote y se consagrase, diciendo que los que así eran ordenados tenían después señorío en el cielo. A esto respondió Diógenes: Ciertamente ésta es cosa de reír si pensamos que Argesilao y Epaminondas están en el infierno y Patecio ladrón y otros tales como él están en el cielo, y esto porque tomaron orden sacerdotal. Gravemente reprendió la mala costumbre de los sacerdotes de aquel tiempo, los cuales por sus intereses persuadían a los hombres ignorantes y supersticiosos que si tomaban aquella orden o seña sacerdotal serían bienaventurados después de esta vida. Siendo cierto que la bienaventuranza está aparejada con aquellos que con buenas obras la merecen, tengan órdenes o no.
Erasmo De Rotterdam
Cuando las órdenes son razonables, justas, sencillas, claras y consecuentes, existe una satisfacción recíproca entre el líder y el grupo.
Sun Tzu
Cuando el gobernante mismo obra rectamente, ejercerá influencia sobre el pueblo sin dar órdenes, y cuando el gobernante mismo no obra rectamente, todas sus órdenes serán inútiles.
Confucio
Las órdenes y las costumbres tienen una cosa en común: parece que vienen de fuera que se te imponen sin pedirte permiso. En cambio, los caprichos te salen de dentro.
Fernando Savater
Un Cuerpo Está Esperando
Detrás de la cortina un cuerpo espera.
Nada es verdad si no es su encarnizada
inminencia, esa insaciable culpa
que a mí mismo me absuelvo aborreciéndome.
Nada es verdad. Un cuerpo está esperando
tras el mudo estertor de la cortina.
En la oquedad propicia del instante
que mientras más deseo más maldigo,
quiero amar este cuerpo, que él no muera
hasta que su orfandad esté cumplida.
Paredes resignadas, tinto el suelo
de mercenaria obstinación, allí
nos conducimos mutuamente
al voraz simulacro de la vida.
(La amarra del amor nos hace libres.)
Solo yo estoy suspenso del engaño:
movible fuego oscuro,
mi memoria consume sus fronteras
entre las turbias órdenes del tiempo.
De todo cuanto amé, nada logró
sobrevivir a las abdicaciones.
(La noche se agazapa entre las telas
que un falaz movimiento hace carnales.)
Una mentira solo está esperando
detrás de la cortina. Soy
mi enemigo: consisto en mi deseo,
busco a ciegas la luz, me reconozco
después de extraviarme, despedazo
ese espejo de muerte en que el placer
se asoma, expío
con mi turno de amor mi propia vida.
De un hilo funeral pendiente el cuerpo,
ya no es posible reducir su lastre.
Detrás de la cortina un cuerpo espera.
Nada es verdad si no es su encarnizada
inminencia, esa insaciable culpa
que a mí mismo me absuelvo aborreciéndome.
Nada es verdad. Un cuerpo está esperando
tras el mudo estertor de la cortina.
En la oquedad propicia del instante
que mientras más deseo más maldigo,
quiero amar este cuerpo, que él no muera
hasta que su orfandad esté cumplida.
Paredes resignadas, tinto el suelo
de mercenaria obstinación, allí
nos conducimos mutuamente
al voraz simulacro de la vida.
(La amarra del amor nos hace libres.)
Solo yo estoy suspenso del engaño:
movible fuego oscuro,
mi memoria consume sus fronteras
entre las turbias órdenes del tiempo.
De todo cuanto amé, nada logró
sobrevivir a las abdicaciones.
(La noche se agazapa entre las telas
que un falaz movimiento hace carnales.)
Una mentira solo está esperando
detrás de la cortina. Soy
mi enemigo: consisto en mi deseo,
busco a ciegas la luz, me reconozco
después de extraviarme, despedazo
ese espejo de muerte en que el placer
se asoma, expío
con mi turno de amor mi propia vida.
De un hilo funeral pendiente el cuerpo,
ya no es posible reducir su lastre.
José Manuel Caballero Bonald
Un problema es que un hombre lleve armas. Pero peor es que las lleve una colectividad organizada a las órdenes de gobernantes tarados.
Arturo Félix
Prevenid,prevenid caminad frente a tus enemigos mas no con ellos prevenid, prevenid caminad dentro de tus enemigos mas no con ellos prevenid,prevenid obedeces ordenes y vencerás..
yudelka vargas
El Rey imparte sus órdenes, concede territorios y títulos de nobleza; pero no se debe dar poder a los inferiores. Tras la victoria, los oficiales del ejército son recompensados con honores. Pero los inferiores son recompensados materialmente y no con tierras ni autoridad pues su inexperiencia llevaría a gobernal mal.
I CHING
Cuando la fuerza es debidamente controlada y se emplea la forma correcta, el buen gobierno prevalezca bajo los cielos. Grande es también la importancia de lo que se hace a su debido tiempo. Así el príncipe imparte sus ordenes y promulga sus leyes por todos los rincones de su reino.
I CHING
Así que hay un propósito de inteligencia exterior de cada uno de los órdenes de la FISA.
Robert Mueller
Pero sobre los impíos descargó hasta el fin tu cólera despiadada, porque Dios sabía de antemano lo que éstos iban a hacer, y que después de permitir a los suyos que salieran apresurando su partida, aquéllos cambiarían de parecer y saldrían en su persecución.
En efecto, todavía estaban preocupados por sus duelos, y se lamentaban junto a las tumbas de sus muertos, cuando imaginaron otra locura y se pusieron a perseguir fugitivos a los mismos que ellos habían rogado que se fueran.
Un destino justo los impulsaba a ese extremo yles inspiraba el olvido de sus pruebas pasadas: agregarían de ese modo a todos sus tormentos el suplicio que faltaba aún.
Y, mientras que tu pueblo haría un viaje maravilloso, ellos hallarían una muerte extraña.
La creación entera, obedeciendo a tus órdenes, se modificó de nuevo en su propia naturaleza para el servicio de tus hijos.
Se vio a la nube cubrir el campamento de sombra y la tierra firme salía de lo que era agua. Un camino despejado atravesó el Mar Rojo; entre las olas impetuosas se veía una verde llanura por la cual los que protegía tu mano pasaron como un solo pueblo, contemplando tus admirables prodigios.
En efecto, todavía estaban preocupados por sus duelos, y se lamentaban junto a las tumbas de sus muertos, cuando imaginaron otra locura y se pusieron a perseguir fugitivos a los mismos que ellos habían rogado que se fueran.
Un destino justo los impulsaba a ese extremo yles inspiraba el olvido de sus pruebas pasadas: agregarían de ese modo a todos sus tormentos el suplicio que faltaba aún.
Y, mientras que tu pueblo haría un viaje maravilloso, ellos hallarían una muerte extraña.
La creación entera, obedeciendo a tus órdenes, se modificó de nuevo en su propia naturaleza para el servicio de tus hijos.
Se vio a la nube cubrir el campamento de sombra y la tierra firme salía de lo que era agua. Un camino despejado atravesó el Mar Rojo; entre las olas impetuosas se veía una verde llanura por la cual los que protegía tu mano pasaron como un solo pueblo, contemplando tus admirables prodigios.
Sagradas Escrituras
El corazón nuevo. Dice Yavé: "No hago esto por tenerles lástima a ustedes, sino para salvar el honor de mi Nombre, quea causa de ustedes ha sido despreciado en todas las naciones donde han llegado. Yo mostraré la santidad de mi gran Nombre que ustedes han profanado. Y las naciones sabrán que yo soy Yavé, cuando manifieste mi santidad en ustedes a la vista de ellas.
Los recogeré de todos los países, los reuniré y los conduciré a su tierra. Derramaré sobre ustedes agua purificadora y quedarán purificados. Los purificaré de toda mancha y de todos sus ídolos. Les daré un corazón nuevo, y pondré dentro de ustedes un espirítu nuevo. Les quitaré del cuerpo el corazón de piedra y les pondré un corazón de carne. Infundiré mi Espíritu en ustedes para que vivan según mis mandatos y respeten mis órdenes. Habitarán en la tierra que yo dí a sus padres. Ustedes serán para mí un pueblo y a mí me tendrán por su Dios. Los limpiaré de sus manchas. Mándare trigo y lo multiplicaré y no les dejaré pasar más hambre. Multiplicaré los frutos y los productos del campo, y no serán más humillados ante los demás pueblos, padeciendo hambre. Entonces ustedes recordarán sus costumbres perversas y sus malos afectos, y mirarán con amargura sus maldades y perversidades. Pero esto, no lo haré por amor de ustedes, dice el Señor, ténganlo bien entendido. Humíllense y avergüencense de su conducta, gente de la casa de Israel.
Los recogeré de todos los países, los reuniré y los conduciré a su tierra. Derramaré sobre ustedes agua purificadora y quedarán purificados. Los purificaré de toda mancha y de todos sus ídolos. Les daré un corazón nuevo, y pondré dentro de ustedes un espirítu nuevo. Les quitaré del cuerpo el corazón de piedra y les pondré un corazón de carne. Infundiré mi Espíritu en ustedes para que vivan según mis mandatos y respeten mis órdenes. Habitarán en la tierra que yo dí a sus padres. Ustedes serán para mí un pueblo y a mí me tendrán por su Dios. Los limpiaré de sus manchas. Mándare trigo y lo multiplicaré y no les dejaré pasar más hambre. Multiplicaré los frutos y los productos del campo, y no serán más humillados ante los demás pueblos, padeciendo hambre. Entonces ustedes recordarán sus costumbres perversas y sus malos afectos, y mirarán con amargura sus maldades y perversidades. Pero esto, no lo haré por amor de ustedes, dice el Señor, ténganlo bien entendido. Humíllense y avergüencense de su conducta, gente de la casa de Israel.
Sagradas Escrituras
No tengo ni idea de cuáles son las ordenes de Eddie Irvine, pero las esta cumpliendo extraordinariamente bien
Murray Walker
A pesar de nuestra conciencia moral es una parte de nuestra conciencia, no nos sentimos a nosotros mismos en igualdad con él. En esta voz que resuena solo para darnos órdenes y establecer prohibiciones, no podemos reconocer nuestras propias voces, el tono en el que nos habla nos advierte que expresa algo dentro de nosotros que no es de nosotros mismos.
Emile Durkheim
Cuando las órdenes se dan de manera clara, sencilla y consecuente a las tropas, éstas las aceptan. Cuando las órdenes son confusas, contradictorias y cambiantes las tropas no las aceptan o no las entienden.
Sun Tzu
, Niñas afectados de buen humor, no va a hacer por un hombre que se ha utilizado a las mujeres sensibles. Se trata de dos órdenes distintos de ser.
Jane Austen
Fui inducido a establecer varios órdenes de mérito, de la convicción de que la emulación, bien dirigida, se convierte en un siervo útil, y que el genio latente de algunos jóvenes se pone más fácilmente a la acción de esta manera, que por la gratificación más sórdida de la auto- interés.
Joseph Lancaster