Poemas cortos de federico garcia lorca ( 2 )
Poemas cortos de federico garcia lorca. Encuentra docenas de poemas cortos de federico garcia lorca con fotos para copiar y compartir.
Yo soy español integral y me sería imposible vivir fuera de mis límites geográficos; pero odio al que es español por ser español nada más, yo soy hermano de todos y execro al hombre que se sacrifica por una idea nacionalista, abstracta, por el solo hecho de que ama a su patria con una venda en los ojos
Federico GarcÃa Lorca
¡No me mires más! Si quieres te daré mis ojos, que son frescos, y mis espaldas para que te compongas la joroba que tienes
Federico GarcÃa Lorca
Siempre has sido lista. Has visto lo malo de las gentes a cien leguas... Pero los hijos son los hijos. Ahora estás ciega
Federico GarcÃa Lorca
La nieve del alma tiene copos de besos y escenas que se hundieron en la sombra o en la luz del que las piensa
Federico GarcÃa Lorca
Con el alma de charol vienen por la carretera. Hunched y nocturnos, donde se respiran imponen el silencio de goma oscura, y el miedo de arena fina.
Federico Garcia Lorca
Desechad tristezas y melancolías. La vida es amable, tiene pocos días y tan solo ahora la hemos de gozar.
Federico GarcÃa Lorca
¿Si la esperanza se apaga y la Babel se comienza qué antorcha iluminará los caminos en la Tierra?
Federico GarcÃa Lorca
Un reposo claro y allí nuestros besos, lunares sonoros del eco, se abrirían muy lejos. Y tu corazón caliente, nada más
Federico GarcÃa Lorca
Oye, hijo mío, el silencio. Es un silencio ondulado, un silencio, donde resbalan valles y ecos y que inclina las frentes hacia el suelo
Federico GarcÃa Lorca
La creación poética es un misterio indescifrable, como el misterio del nacimiento del hombre. Se oyen voces, no se sabe de dónde, y es inútil preocuparse de dónde vienen
Federico GarcÃa Lorca
El primer beso que supo a beso y fue para mis labios niños como la lluvia fresca
Federico GarcÃa Lorca
Es un arca de besos de bocas ya cerradas, es eterna cautiva, del corazón hermana
Federico GarcÃa Lorca
La armonía hecha carne tú eres el resumen genial de lo lírico. En ti duerme la melancolía, el secreto del beso y del grito
Federico GarcÃa Lorca
Cuando sale la luna se pierden las campanas y aparecen las sendas impenetrables Cuando sale la luna, el mar cubre la tierra y el corazón se siente isla en el infinito
Federico GarcÃa Lorca
Verde que te quiero verde. Verde viento. Verdes ramas. El barco sobre la mar y el caballo en la montaña
Federico GarcÃa Lorca
Y aunque no me quisieras te querría por tu mirar sombrío como quiere la alondra al nuevo día, solo por el rocío
Federico GarcÃa Lorca
Porque eso son los viejos: la cuerda, la ligazón que hay entre la vida y el abismo de la muerte
Federico GarcÃa Lorca
Los árboles que cantan se tronchan y se secan. Y se tornan llanuras las montañas serenas. Mas la canción del agua es una cosa eterna
Federico GarcÃa Lorca
No soy un hombre, ni un poeta, ni una hoja, sino un pulso herido que presiente el más alla
Federico GarcÃa Lorca
La lluvia tiene un vago secreto de ternura, algo de soñolencia resignada y amable. Una música humilde se despierta con ella que hace vibrar el alma dormida del paisaje.
Federico GarcÃa Lorca
Desván donde el polvo viejo congrega estatuas y musgos, cajas que guardan silencio de cangrejos devorados en el sitio donde el sueño tropezaba con su realidad.
Federico GarcÃa Lorca
Tenía frio y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua; pedía libros, es decir horizontes, es decir escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural del cuerpo por hambre sed o frío dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida
Federico GarcÃa Lorca
No te conoce el toro ni la higuera,
ni caballos ni hormigas de tu casa.
No te conoce el niño ni la tarde
porque te has muerto para siempre.No te conoce el lomo de la piedra,
ni el raso negro donde te destrozas.
No te conoce tu recuerdo mudo
porque te has muerto para siempre.El otoño vendrá con caracolas,
uva de niebla y montes agrupados,
pero nadie querrá mirar tus ojos
porque te has muerto para siempre.Porque te has muerto para siempre,
como todos los muertos de la Tierra,
como todos los muertos que se olvidan
en un montón de perros apagados.No te conoce nadie. No. Pero yo te canto.
Yo canto para luego tu perfil y tu gracia.
La madurez insigne de tu conocimiento.
Tu apetencia de muerte y el gusto de su boca.
La tristeza que tuvo tu valiente alegría.
ni caballos ni hormigas de tu casa.
No te conoce el niño ni la tarde
porque te has muerto para siempre.No te conoce el lomo de la piedra,
ni el raso negro donde te destrozas.
No te conoce tu recuerdo mudo
porque te has muerto para siempre.El otoño vendrá con caracolas,
uva de niebla y montes agrupados,
pero nadie querrá mirar tus ojos
porque te has muerto para siempre.Porque te has muerto para siempre,
como todos los muertos de la Tierra,
como todos los muertos que se olvidan
en un montón de perros apagados.No te conoce nadie. No. Pero yo te canto.
Yo canto para luego tu perfil y tu gracia.
La madurez insigne de tu conocimiento.
Tu apetencia de muerte y el gusto de su boca.
La tristeza que tuvo tu valiente alegría.
Federico GarcÃa Lorca
La nostalgia terrible de una vida perdida, el fatal sentimiento de haber nacido tarde, o la ilusión inquieta de un mañana imposible con la inquietud cercana del dolor de la carne.
Federico GarcÃa Lorca
Cuando el chino lloraba en el tejado sin encontrar el desnudo de su mujer y el director del banco observaba el manómetro que mide el cruel silencio de la moneda, el mascarón llegaba a Wall Street.
Federico GarcÃa Lorca
¡Qué esfuerzo! ¡Qué esfuerzo del caballo por ser perro! ¡Qué esfuerzo del perro por ser golondrina! ¡Qué esfuerzo de la golondrina por ser abeja!
Federico GarcÃa Lorca
El corazón
Que tenía en la escuela
Donde estuvo pintada
La cartilla primera
¿Está en ti
Noche negra
Frío frío
Como el agua
Del río.
El primer beso
Que supo a beso y fue
Para mis labios niños
Como la lluvia fresca
¿Está en ti
Noche negra
Que tenía en la escuela
Donde estuvo pintada
La cartilla primera
¿Está en ti
Noche negra
Frío frío
Como el agua
Del río.
El primer beso
Que supo a beso y fue
Para mis labios niños
Como la lluvia fresca
¿Está en ti
Noche negra
Federico GarcÃa Lorca
Le atrajeron con engaños,
que el creyó, por su desdicha,
y se acercó, satisfecho,
con sus buques, a la orilla.
¡Malhaya el corazón noble
que de los malos se fía!,
que al poner el pie en la arena,
le prendieron los realistas.
que el creyó, por su desdicha,
y se acercó, satisfecho,
con sus buques, a la orilla.
¡Malhaya el corazón noble
que de los malos se fía!,
que al poner el pie en la arena,
le prendieron los realistas.
Federico GarcÃa Lorca
Llena, pues, de palabras mi locura
o déjame vivir en mi serena
noche del alma para siempre oscura.
o déjame vivir en mi serena
noche del alma para siempre oscura.
Federico GarcÃa Lorca
Tus hijas están y viven como metidas en alacenas. Pero ni tú ni nadie puede vigilar por el interior de los pechos. BERNARDA.
Federico GarcÃa Lorca
Quiero dormir un rato,
un rato, un minuto, un siglo;
pero que todos sepan que no he muerto;
que haya un establo de oro en mis labios;
que soy un pequeño amigo del viento Oeste;
que soy la sombra inmensa de mis lágrimas
un rato, un minuto, un siglo;
pero que todos sepan que no he muerto;
que haya un establo de oro en mis labios;
que soy un pequeño amigo del viento Oeste;
que soy la sombra inmensa de mis lágrimas
Federico GarcÃa Lorca
¡Qué vidrios se me clavan en la lengua!
Porque yo quise olvidar
y puse un muro de piedra
entre tu casa y la mía.
Es verdad. ¿No lo recuerdas?
Y cuando te vi de lejos
me eché en los ojos arena.
Pero montaba a caballo
y el caballo iba a tu puerta.
Con alfileres de plata
mi sangre se puso negra,
y el sueño me fue llenando
las carnes de mala hierba.
Que yo no tengo la culpa,
que la culpa es de la tierra
y de ese olor que te sale
de los pechos y las trenzas.
Porque yo quise olvidar
y puse un muro de piedra
entre tu casa y la mía.
Es verdad. ¿No lo recuerdas?
Y cuando te vi de lejos
me eché en los ojos arena.
Pero montaba a caballo
y el caballo iba a tu puerta.
Con alfileres de plata
mi sangre se puso negra,
y el sueño me fue llenando
las carnes de mala hierba.
Que yo no tengo la culpa,
que la culpa es de la tierra
y de ese olor que te sale
de los pechos y las trenzas.
Federico GarcÃa Lorca
yo, poeta sin brazos, perdido entre la multitud que vomita, sin caballo efusivo que corte los espesos musgos de mis sienes.
Federico GarcÃa Lorca
Amor de mis entrañas, viva muerte,
en vano espero tu palabra escrita
y pienso, con la flor que se marchita,
que si vivo sin mí quiero perderte.
El aire es inmortal. La piedra inerte
ni conoce la sombra ni la evita.
Corazón interior no necesita
la miel helada que la luna vierte.
Pero yo te sufrí. Rasgué mis venas,
tigre y paloma, sobre tu cintura
en duelo de mordiscos y azucenas.
Llena pues de palabras mi locura
o déjame vivir en mi serena
noche del alma para siempre oscura.
en vano espero tu palabra escrita
y pienso, con la flor que se marchita,
que si vivo sin mí quiero perderte.
El aire es inmortal. La piedra inerte
ni conoce la sombra ni la evita.
Corazón interior no necesita
la miel helada que la luna vierte.
Pero yo te sufrí. Rasgué mis venas,
tigre y paloma, sobre tu cintura
en duelo de mordiscos y azucenas.
Llena pues de palabras mi locura
o déjame vivir en mi serena
noche del alma para siempre oscura.
Federico GarcÃa Lorca
Si en esta casa hubiera hierbas, ya te encargarías de traer a pastar las ovejas del vecindario.
Federico GarcÃa Lorca
Hace apenas 3 años ni siquiera pensaba en que tu existirias, solo me preocupaba por lucir bien, poco tiempo después supe que te esperaba, y me di cuenta que mi vida apenas comenzaba.... 9 meses pasaron, entre, nauseas y antojos, por fin llego el día esperado... Cuando te tuve entre mis brazos y tus ojitos me miraban con esperanza, entendi que de mi tu dependias....Después tus pequeños labios una palabra decian, y yo jamas crei que aquellas palabras a mi corazon emocionarian, cuando tus primeros pasos inentaste dar, muchos tropiezos tuviste y yo jamas había sentido un dolor tan grande como cuando te vi llorar, ahora después de tantas y tantas cosas que hemos vivido juntos en 3 años a Dios te vengo a presentar, para que me permita estar contigo muchos años mas.....
Para mi pequeño Jose Maria Perez Garcia..
te kiero muxo mi bebe
Para mi pequeño Jose Maria Perez Garcia..
te kiero muxo mi bebe
alma garcia saavedra
Dedicado para: carolina Zamora choque
La razón de mi vivir
Eres el amor de mi vida la razón de mi vivir por ti soy como soy gracias a ti estoy frente de todos gritando nuestro amor no importa si el mundo entero este en contra del amor que nos tenemos
Si tu estas junto a mi nada nos impedirá que seamos felices en lo que resta de vida
Eres el amor de vida cada noche espero que salgan las estrellas el cielo se ilumina como mi corazón cuando te miro
Quiero ser la poesía de tus labios
Quiero ser la miel que endulce tu despertar por las mañanas
Quiero ser el primero al que veas junto a ti.
Wesly chuquilín García
La razón de mi vivir
Eres el amor de mi vida la razón de mi vivir por ti soy como soy gracias a ti estoy frente de todos gritando nuestro amor no importa si el mundo entero este en contra del amor que nos tenemos
Si tu estas junto a mi nada nos impedirá que seamos felices en lo que resta de vida
Eres el amor de vida cada noche espero que salgan las estrellas el cielo se ilumina como mi corazón cuando te miro
Quiero ser la poesía de tus labios
Quiero ser la miel que endulce tu despertar por las mañanas
Quiero ser el primero al que veas junto a ti.
Wesly chuquilín García
wesly chuquilin garcia
Cuando Pasa Una Joven Como Tú...
Cuando pasa una joven como tú salta el pecho,
se compran las parcelas de este sitio acotado.
No hay un cuerpo en la tarde que te iguale, criatura.
Porque vas explicando lo que queda de verte,
poniendo orden a un mundo que no está en este reino.
No hay un rostro que pueda dormir cuando te ha visto
ni sienta que, por dentro, van cantando los árboles.
Eres como quisieran ser los astros más lentos,
las altas catedrales, las ciudades de Europa
que desnudan sus flores con un copo de nieve.
Convocas impaciencias a los bancos de un parque
que, detrás de los ojos, te acogieran despacio.
Imposible es gozarte como no bendecirte.
No hay nadie que no mire sino dándote gracias.
Cuando pasa una joven como tú salta el pecho,
se compran las parcelas de este sitio acotado.
No hay un cuerpo en la tarde que te iguale, criatura.
Porque vas explicando lo que queda de verte,
poniendo orden a un mundo que no está en este reino.
No hay un rostro que pueda dormir cuando te ha visto
ni sienta que, por dentro, van cantando los árboles.
Eres como quisieran ser los astros más lentos,
las altas catedrales, las ciudades de Europa
que desnudan sus flores con un copo de nieve.
Convocas impaciencias a los bancos de un parque
que, detrás de los ojos, te acogieran despacio.
Imposible es gozarte como no bendecirte.
No hay nadie que no mire sino dándote gracias.
Ãngel GarcÃa López
Lo Que Se Sabe
Toda mi vida la pasión soterrada
en el bajo fondo de la placidez.
La idea de la pericia escapa. Un lento
proceso al amanecer. La quinta vez
que reescribo. Te lo dije. No creo.
La fe ha resbalado como la resina joven,
como el trazo de una oruga,
la fe se ha derretido en la baba
de varios caracoles. Toda tu vida
escapa o huye. No negué lo que vi.
No vi nada. Sombra en un pacto
toda mi vida: la ventana, arrullando
el más puro sonido del silencio, un crac
rompe la desidia, un sonido leve de rotura
precipita el único acontecimiento imposible
e indeseable. Soy tu túnica, tu vajilla
y tu despecho. Me voy irritada. Sé que ahora
el velo del día es un espeso manto,
una capa del rey Recaredo. Una enagua.
1993
Toda mi vida la pasión soterrada
en el bajo fondo de la placidez.
La idea de la pericia escapa. Un lento
proceso al amanecer. La quinta vez
que reescribo. Te lo dije. No creo.
La fe ha resbalado como la resina joven,
como el trazo de una oruga,
la fe se ha derretido en la baba
de varios caracoles. Toda tu vida
escapa o huye. No negué lo que vi.
No vi nada. Sombra en un pacto
toda mi vida: la ventana, arrullando
el más puro sonido del silencio, un crac
rompe la desidia, un sonido leve de rotura
precipita el único acontecimiento imposible
e indeseable. Soy tu túnica, tu vajilla
y tu despecho. Me voy irritada. Sé que ahora
el velo del día es un espeso manto,
una capa del rey Recaredo. Una enagua.
1993
Concha GarcÃa
Si Mis Poemas
Si mis poemas todos se perdiesen
la pequeña verdad que en ellos brilla
permanecería igual en alguna piedra gris
junto al agua, o en una verde yerba.
Si los poemas todos se perdiesen
el fuego seguiría nombrándolos sin fin
limpios de toda escoria, y la eterna poesía
volvería bramando, otra vez, con las albas.
Si mis poemas todos se perdiesen
la pequeña verdad que en ellos brilla
permanecería igual en alguna piedra gris
junto al agua, o en una verde yerba.
Si los poemas todos se perdiesen
el fuego seguiría nombrándolos sin fin
limpios de toda escoria, y la eterna poesía
volvería bramando, otra vez, con las albas.
Fina GarcÃa Marruz