Pensamientos politicos de juan pablo duarte. Encuentra docenas de pensamientos politicos de juan pablo duarte con fotos para copiar y compartir.
El mundo es un pensamiento realizado de la luz. Un pensamiento dichoso.
Era una pasión por la mirada, y en su mirada estaban los ojos antes del tiempo; dice su padre que el tiempo es melancolía, y cuando se para lo llamamos eternidad.
Jardín
La sonrisa apagada y el jardín en la sombra.
Un mundo entre los labios que se aprietan en lucha.
Bajo mi boca seca que la tuya aprisiona
siento los dientes fuertes de tu fiel calavera.
Hay ...
La razón, un recurso científico, sirve de antítesis a la inspiración poética.
Pintar como los pintores del renacimiento, me llevó unos años, pintar como los niños me llevó toda la vida.
La propaganda desvirtúa el producto que, vendido a voces, pierde el silencio de su calidad.
El que pretende dirigirse a la humanidad, o es un tramposo o este equivocado. La pretendida comunicación se cumple o no; el autor no es responsable, ella se da o no por añadidura. El que quiera envi...
Porque eso es la muerte: vivir ese instante dominado tan solo por ese instante.
La soledad es la causa de muchos excesos de la teoría del conocimiento.
La luna olvidada espera en la ventana del cielo abierta a la tarde.
La Rueda
El arco o puente que va
de tu mano a la mía cuando
no se tocan, abre
una flor intermedia.
¿Qué toca, qué retoca, qué trastoca
ese vacío de las manos
solas en su fatiga?
Nace una flor, ...
La Rosa
La imagen del amor como una rosa
abre sus encendidas ilusiones
y sobre el tallo esbelto resplandece
su oscura primavera deseada;
el naciente reflejo de su sombra
nubla el claro contorno de la...
El vino abre las puertas con asombro y en el refugio de los meses vuelca su cuerpo de empapadas alas rojas.
La admiración por los libros me llevó a escribir. Yo admiraba a la gente por transferencia.
La inspiración existe, pero tiene que encontrarte trabajando.
En El Sopor Azul E Hirviente de La Siesta...
En el sopor azul e hirviente de la siesta,
el jardín arde al sol. Huele a rosas quemadas.
La mar mece, entre inmóviles guirnaldas de floresta,
una diama...
El sol era un melón, la tarde una sandía y la vida, la vida una pura gana de morder y morder manzanas.
Desterrada la justicia que es vínculo de las sociedades humanas, muere también la libertad que está unida a ella y vive por ella.
Véante mis ojos, pues eres lumbre de ellos, y solo para ti quiero tenerlos.
En la soledad no se encuentra más que lo que a la soledad se lleva.
El error obliga a rehacer el camino y eso enseña muchas cosas. La duda, no. Entre el error y la duda, opto siempre por el primero.
La paz en la tierra, suprema aspiración de toda la humanidad a través de la historia, es indudable que no puede establecerse ni consolidarse si no se respeta fielmente el orden establecido por Dios.
El camino de la juventud lleva toda una vida.
Los Estados, para la diplomacia, no son los pueblos, sino los reyes que los dirigen o los esclavizan.
El ámbito iluminado por la ciencia está rodeado de un espacio en tinieblas tan extenso, que ha de parecer ridícula la pretensión de limitar la existencia al hábitat del conocimiento.
Si quieres la paz, lucha por la justicia.
Por desgracia uso las cosas según me lo dicta mi pasión.
Un pájaro equivocado firmó mi poema en blanco.
Sembremos la llanura antes de arar la loma.
Y el corazón a cada latido amanece una esperanza nueva que tiene algo del cielo.
El poeta no es un filósofo, sino un clarividente.
A los puros todas las cosas les parecen puras.
El hombre es libre, tiene que ser libre. Su primera virtud, su gran hermosura, su gran amor es la libertad.
La filosofía es la ciencia que complica las cosas que todo el mundo sabe.
El principal enemigo de la creatividad es el buen gusto.
Aunque solo existiera una verdad única, no se podrían pintar cien cuadros sobre el mismo tema.
Tan perjudicial es desdeñar las reglas como ceñirse a ellas con exceso.
Nada pesa tanto como el corazón cuando está cansado.
El ajedrez se trata de un duelo de un hombre contra otro, donde lo que es la personalidad del hombre queda comprometida. Cada jugador lucha contra su enemigo interior que es su torpeza o sus hallazgos...
Es inútil toda polémica si no hay esperanza de que resulte provechosa.