Frases de Vince Lombardi ( 2 )
No se trata de que te derriben, sino si te levantas.
La medida de lo que somos es lo que hacemos con lo que tenemos.
El éxito exige unidad de propósito.
El compromiso individual a un esfuerzo de grupo - que es lo que hace un trabajo en equipo, un trabajo de la compañía, un trabajo de la sociedad, una obra civilización.
La verdadera gloria se tiró de rodillas y luego volvió. Esa es la gloria real. Esa es la esencia de la misma.
El fútbol es como la vida -requiere perseverancia, abnegación, trabajo duro, sacrificio, dedicación y respeto a la autoridad.
Una vez que usted está de acuerdo sobre el precio que usted y su família debe pagar por el éxito, que le permite hacer caso omiso de las heridas de menor importancia, la presión del rival, y los f...
No perdimos el juego, nos quedamos sin tiempo.
Una vez que aprendes a dejar de fumar, se convierte en un hábito.
Si no es despedido con entusiasmo, le encenderán con entusiasmo.
No hay lugar para el segundo lugar. Solo hay un lugar en mi juego y eso es el primer lugar. He terminado dos veces segundo en mi tiempo en Green Bay y nunca quiero terminar segundo de nuevo.
Si ganar no lo es todo, ¿por qué apuntamos los goles?
Es fácil tener fe en ti mismo y tener disciplina cuando eres un ganador, cuando eres el número uno. Lo que tienes que tener es fe y disciplina cuando no eres un ganador.
El precio del éxito es trabajar duro y la determinación de que, sin importar si perdiste o ganaste, diste lo mejor de ti mismo en el proyecto.
La práctica no hace la perfección. Solo la práctica perfecta hace la perfección.
Algunos de nosotros hacemos nuestro trabajo bien y otros no, pero vamos a ser juzgados por una sola cosa: el resultado.
La confianza es contagiosa. También lo es la falta de confianza.
La perfección no es alcanzable, pero si perseguimos la perfección podemos alcanzar la excelencia.
La calidad de vida de una persona es directamente proporcional a su compromiso con la excelencia, independientemente de su campo de actividad.
Ganar es hábito. Por desgracia, también lo es perder.