Frases de William Blake ( 2 )

El verdadero método de conocimiento es el experimento.

Evil activa es mejor que bien pasiva.

Lo que es grande es necesariamente oscuro para los hombres débiles. Lo que puede hacerse explÃcita al idiota no vale la pena mi cuidado.

Donde la misericordia, el amor y la compasión moran, no Dios mora también.

La eternidad está enamorada de las producciones de la época.

PoesÃa encadenada, encadena a la raza humana. Las naciones están destruidas o prosperan a medida que la poesÃa, la pintura y la música son destruidos o florecer.

La fundación del imperio es el arte y la ciencia. Eliminarlos o degradarlos, y el imperio ya no existe. Empire sigue viceversa arte y no como ingleses supongo.

La exuberancia es belleza.
No busca amistad en sà a favor,
Ni por sà mismo tenga algún cuidado,
Pero por otro da la facilidad,
Y construye un Cielo en la desesperación del infierno ".
AsÃ...

La gloria del cristianismo es conquistar el perdón.

En tiempo de siembra aprende, en la cosecha de enseñar, en invierno, goza.
¿Cuál es el precio de la experiencia? ¿Acaso se compran para una canción? O la sabidurÃa de un baile en la calle? No, no se compra con el precio de todos los hombres que tiene, su casa, su esposa...
No se puede tener la libertad en este mundo sin lo que se llama la virtud moral, y no se puede tener la virtud moral sin la esclavitud de los que la mitad de la raza humana que odia lo que usted llama...

El arte es el árbol de la vida. La ciencia es el árbol de la muerte.

Que los Judios supone un derecho exclusivamente a los beneficios de Dios será un testimonio duradero en su contra y lo mismo que estar en contra de los cristianos.

Debo crear un sistema o ser esclavizado por otro sirve, y no tengo razón y comparo: mi negocio es crear.

La imaginación es el mundo real y eterno de que este universo vegetal es más que un pálido reflejo.

Las grandes cosas se hacen cuando los hombres y las montañas se encuentran.

La abeja laboriosa no tiene tiempo para la tristeza.

Si el necio persistiera en su necedad se volverÃa sabio.