Frases de William Faulkner ( 2 )

Tal vez la única cosa peor que tener que dar gratitud constantemente es tener que aceptarla

Entre el dolor y la nada escogería el dolor.

Un escritor necesita tres cosas: la experiencia, la observación y la imaginación, dos de las cuales, a veces una de las cuales, puede suplantar la falta de las demás.
Él que sobre todas las cosas amaba la muerte, y que quizá solo amaba a la muerte, amó y vivió con deliberada y pervertida curiosidad, tal y como ama un enamorado que deliberadamente se reprime ant...

Leer, leer, leer todo, clásicos, desconocidos, buenos, malos, ver cómo escriben, leer y absorberlo. Luego escriba. Si es bueno lo conservas, sino lo tiras por la ventana.
Una de las cosas más tristes es que lo único que un hombre puede hacer durante ocho horas, día tras día, es trabajar. No se puede comer ocho horas, ni beber ocho horas diarias, ni hacer el amor oc...

El sexo y la muerte: la puerta de delante y la puerta de atrás del mundo.

Para ser grande hace falta un 99 por 100 de talento, un 99 por 100 de disciplina y un 99 por 100 de trabajo.

Si me dan a elegir entre la tristeza y la soledad, me quedo con la tristeza.

Hombre pobre, humanidad pobre.

La vida es un camino sin retorno

Un escritor es intrínsicamente incapaz de decir la verdad; por eso llamamos ficción a lo que escribe.

Un artista es una criatura impulsada por demonios.
Es la función de todo comandante aquella de hacerse odiar por sus soldados, para que cuando acometan una orden en batalla la ejecuten con todo ese odio que reservan para ti, el odio extremo que les l...

Este es un país libre. La gente tiene derecho a enviarme cartas, y tengo derecho a no leerlas.
No es que pueda vivir, es que quiero. Es que yo quiero. La vieja carne al fin, por vieja que sea. Porque si la memoria existiera fuera de la carne no sería memoria porque no sabría de qué se acuerd...

Quizás tuvieron razón en colocar el amor en los libros... Quizás no podía existir en ningún otro lugar.

Se diría que el hombre puede soportarlo todo. Incluso lo que no ha hecho. Incluso la idea de que no puede soportar más.

En mi opinión, los hechos no tienen nada que ver con La Verdad.

No fue hasta el Premio Nobel cuando realmente me tuvieron en cuenta. No podían entender mis libros, pero pudieron entender los 30.000 dólares