Mi ex marido y yo nos enamoramos a primera vista. Quizá debería haberle echado otro vistazo.
El matrimonio es como las libretas de ahorro: de tanto meter y sacar se pierde el interés.
Si los seres humanos tuviésemos dos cerebros, seguro que haríamos el doble de tonterías.
Masturbarse es hacer el amor con la persona que más quieres.
Los mosquitos mueren entre aplausos.
Eres un pesimista, ves siempre el vaso medio vacío. Yo lo veo medio lleno, pero de veneno.
¿De dónde venimos? ¿Adónde vamos? ¿Hay posibilidad de tarifa de grupo?
No es que tenga miedo a morir, solo quiero no estar allí cuando ocurra.
Hay quienes estropean relojes para matar el tiempo.
Es curioso que se le denomine sexo oral a la práctica sexual en la que menos se puede hablar.
Hasta un reloj descompuesto da dos veces por día la hora justa
La vida está dividida entre lo horrible y lo miserable. (Annie Hall, 1978).
Echo de menos la época donde el aire era limpio y el sexo sucio.
Podría darle razones para matar a cien personas cada día, pero somos adultos, dejamos que lo hagan los abogados por nosotros.
No sirvo para la vida, solo valgo para el arte y para divertir a la gente.
No quiero alcanzar la inmortalidad a través de mi trabajo. Quiero alcanzarlo con no morir.
Ser bisexual duplica las oportunidades de conseguir una cita el sábado por la noche.
Hay estudiantes que les apena ir al hipódromo y ver que hasta los caballos logran terminar su carrera.
No conozco la fórmula del éxito, pero la fórmula del fracaso es querer contentar a todo el mundo.
Tuve una terrible educación. Asistí a una escuela para maestros con trastornos emocionales.