"Ruego, pues, que el rey mi señor oiga ahora las palabras de su siervo. Si el SEÃOR te incita contra mÃ, huela él el olor del sacrificio; mas si fueren hijos de hombres, malditos sean ellos en presencia del SEÃOR, que me han echado hoy para que no me junte en la heredad del SEÃOR, diciendo: Ve y sirve a dioses ajenos. "
1 Samuel 26:19