Hank Stram: Al matricularse mi camino por ...

Para que puedas dormir bien por las noches, la estética, la calidad, tiene que ser llevadas hasta el final.

Nunca tengas miedo de confiar en un futuro desconocido a un Dios conocido.

La escena del beso se intentó tres veces. La primera fue en un lugar peculiar de la fortaleza en la planta baja. Me sentí obligado a mí, y yo sabía de inmediato que, a pesar de lo que otros decía...

¡Qué extraño es este miedo a la muerte! Nosotros nunca tenemos miedo a una puesta de sol.