Para un niño que ha perdido a su madre y toda la rabia y el dolor que nadie era capaz de hablar de mí, el fútbol era un deporte muy terapéutico. Muy.
Jon Hamm
Es solo en nuestras decisiones que somos importantes.
Creo que no puedo entrar en mis pensamientos profundos acerca golpear. Es como hablar de religión.
Desde aquel día, cuando tenía 11 años, y no se le permitió en una foto porque no llevaba una falda de tenis, yo sabía que quería cambiar el deporte.
He descubierto que todo el mal humano viene de esto, el hombre es incapaz de quedarse quieto en una habitación.